Cuando tenía 18 años me enamoré perdidamente de un hombre mucho mayor que yo. Nos casamos y nos fuimos a Londres por causa de su trabajo.Tras un par de meses su actitud conmigo cambio de forma radical. Empezó a trabajar a todas horas,incluso en casa. No me hacía caso,se cabreaba si le preguntaba que le ocurría y empezó a odiar mis pocas aficiones. Las dejé de lado, esperando que si todo aquello desaparecía él volvería a hacerme caso. No surtió efecto. Lo único que conseguí fue encerrarme en un mundo donde mi yo real ya no tenía cabida.
hasta aquel encuentro apenas podía ver la luz.
***
Paseaba sin rumbo por el parque, dando bandazos de un lado a otro. Buscaba algo en aquellos puestos que llenasen el vacío que sentía. No importaba que él volviera a cabrearse.Solo quería ser un ratito feliz.
_¡Eh! ¡Tu!
Miró a todos lados,buscando de donde procedía la voz. Dejó de buscar enseguida.Con toda la gente que allí había era demasiado pretencioso pensar que lo llamaban a él.
_¡Espera!¡Quieto!
Sintió como alguien lo tomaba del brazo. Se trataba de un joven de cabello rubio como el trigo,cuerpo bien musculado y alto,muy alto. Su atractivo rostro lo adornaban unos ojos de gato verdosos,unos carnosos labios de color fresa y una recta nariz. Parecía un modelo.
_Lo...lo siento. Debes confundirme con alguien. Yo no soy...
_No espero a nadie. Te he visto y...ehm... ¿Quieres venir a tomar algo? Necesitaba preguntarte una cosa. Por cierto,mi nombre es Dominic.
_A-Ari
***
No sabia como se había dejado convencer. Estaba tomando café con un perfecto desconocido. Bajó la vista,clavándola en su cucharilla.
_¿Qué era lo que querías?
_Preguntarte si te interesaba ser modelo.
_¿Mo-modelo?
_Sí. Cuando te vi en la calle hubo algo en tu forma de moverte que me atrajo. Quiero que poses para mi.
_¿Yo? No en...
_Prueba. Si no te gusta dime que no y ya esta. ¿Hecho?
Ari se quedó perplejo. Hacía tanto tiempo que no trataba con nadie que no sabía que decirle.
_Ah...es...es que...
_Venga,por favor.
_Bue...no
***
Vivía en un piso pequeño lleno de cuadros. Ari se sintió entusiasmado. Él amaba la pintura y la fotografía. Aunque lo había dejado todo cuando Pierre y él se habían mudado.
_Son hermosos...
_¿Decías algo?
_N-no,no importa
Se sonrojó levemente observando los cuadros. La mayoría eran de jovenes desnudos. Él no tenía un cuerpo tan precioso como ellos.
_Venga,desvístete.
Lo que se temía. Intentó escabullirse por la puerta,pero Dominic lo detuvo,interponiéndose.
_Dijiste que probarías. Venga,sácate la ropa
Negó con la cabeza de forma enérgica,sonrojándose aún más.
_Vamos,ni que fueras virgen
Lo inmovilizó sobre la cama,comenzando a sacarle capas y capas de ropa. Ari se ovilló temblando cuando él llevó las manos a su pantalón.
_De acuerdo. Por hoy me conformaré con esto. Ari puedes mirar hacia aquí?
Elevó la vista hacia él con timidez haciendo a Dominic negar con la cabeza. Aquellas gafas eran horribles y aquel flequillo tan largo tanto de lo mismo.
_¿Las necesitas?
Ni siquiera le dio tiempo a responder,se las quitó,dejándolas sobre la mesa. Lo que le parecía: cristales falsos. Luego,le apartó el cabello del rostro,mostrando los ojos de Ari, grises como el mar en día de tormenta. Le robó el corazón en aquel mismo instante con aquella mirada confusa. Se alejó,admirando su obra y comenzó a pintar.
_¿De donde eres?
_Italia
_¿Ah si? ¿De donde exactamente?
_Venecia.
_Siempre he querido ir a pintar los canales. Es un sueño que tengo.¿Qué te ha traído por aquí? ¿Eres un turista?
_Llevo cuatro años viviendo aquí.
_¿En serio?
_Sí.
_Pues tu acento sigue siendo raro.
_Nos mudamos por el trabajo de mi marido. Él es presidente de un importante banco ahora.
_Oh...
_Y bueno...supongo que eso está bien
_Supones que está bien. ¿No lo sabes con seguridad?
_Ha cambiado mucho desde que nos casamos. Antes era más cariñoso.
_¿Qué le ocurrió para que cambiara?
Ari se quedó en silencio.
_Si no quieres decirlo no tienes porqué -se apresuró a añadir Dominic
El joven se limitó a asentir con una leve sonrisa en los labios.
_¡Oye! Tío,me duele la polla. Dame algo para...
El chico que había irrumpido en el apartamento se quedó paralizado mirando a Ari. Rodeó los hombros de Dominic con el brazo, llevándolo hasta una de las esquinas del cuarto.
_Tío ¿por qué no me dijiste que tenías visita?
_Porque no la tenía planeada
_¿No me lo vas a presentar?
_¿Para que le pegues el herpes?
_No fue culpa mía,joder. Ahora tomo precauciones.
_Mira,yo no...
_En serio,no se como puedes concentrarte con ese cuerpecito de adolescente y esos...ñam. Los chicos de pezones tan claros suelen ser los mas fogosos en la cama ¿sabes?
_Por muy bajo que hables él nos escucha. Eres consciente ¿no?
_Mierd... Ya vendré luego a por las...esto...adios
Dominic dio un hondo suspiro cuando el otro salio precipitadamente por la puerta.
_Ari,disculpa. No tendrías que soportar a estos idiotas y... ¿Qué haces?
_Ah,yo...
Se puso rojo como un tomate, ocultando sus pezones con los brazos.
_¿No estarías pensando en lo de...?
Asintió levemente.
_No recuerdo si...
_¿Estás casado y no haces el amor con tu marido?
_¡Eso es muy personal!
_¿Hace cuanto que no follais?
_No... ¡no voy a contestar a eso!
_Mucho tiempo ¿eh...?
_Cállate...
Dominic se sentó a su lado.
_Lo siento,no quería ser impertinente.
_Pues lo has sido.
_Empecemos de nuevo. Me llamo Dominic,tengo venticinco años. Llevo aquí desde que terminé el instituto. El arte ha sido siempre mi pasion. Trabajo a media jornada en un restaurante de aquí al lado. No cobro mucho pero me llega para vivir y la beca me ayuda con el resto. Suelen decirme que voy siempre a mi bola y quizá tengan mucha razón.
Ari parpadeó,atónito. Él le sonrió.
_Ahora te toca a ti
_Mi nombre es Ari y tengo venticuatro años. Estoy casado con un banquero. Me gusta la fotografia y el arte. Comencé a estudiar bellas artes,pero lo dejé al mudarme. Y...
_¿Como es tu marido,Ari?
Se tumbó en la cama,colocando su brazo sobre los ojos.
_Pierre es mayor que yo. Lo conocí en una charla con el instituto.
_¿Cuantos años os lleváis?
_ Treinta
_¿En serio?
_Me pareció fascinante. Yo tenía dieciocho y me enamoré perdidamente en cuanto lo vi. Empezamos a salir y nos casamos hace tres años. El era cariñoso,siempre me ponia a mi en primer lugar. Lo amab...amo
_Estabas a punto de decirlo en pasado.
_Desde que llegamos las cosas se han torcido.
_Hay muchas formas de hacer eso en una relación. Sé de lo que hablo.
_¿Has tenido relaciones tormentosas?
_Algo así. Aunque no sé si considerar tormentosa una relación que terminó conmigo desnudo en medio de la calle y mi ropa volando por la ventana.
_¿Qué...?
_Sí. No te recomiendo salir desnudo a la calle en invierno o te arriesgarás a pillar una pulmonia
Ari se echó a reír, algo cohibido. No recordaba la última vez que se había reído así.
_Hacía mucho que no tenía una charla como esta.
_No tiene por que ser la última vez
_¿Eh...?
Tomó su mano y escribió algo en la palma.
_Este es mi número. Llámame si quieres quedar alguna vez.
_Va-vale. Esta bien.
_Además,apenas he podido hacer un boceto. Sabes,Ari,deberías potenciar tus encantos. Eres verdaderamente precioso.
***
Cruzó la puerta encontrándose la estancia a oscuras. Se oía la radio al fondo,junto a la habitación. El despacho de Pierre. Sabía que no le gustaba que lo molestaran,asi que fue directo a la cocina a preparar la cena. Mientras escurría la pasta oyó la radio apagarse y pasos que se pararon frente a la puerta.
_¿Donde has estado?
_Con un amigo,tomando un café
_¿Desde cuando tienes amigos? Bah ¿que más da? Pero intenta que cuando llegue la cena esté lista. Tu sitio esta aquí y no por ahí tomando cafés.
_Sí,Pierre.
_Hoy ha sido un día de mierda. Ha venido un tipo diciendo que no podía pagar porque su madre estaba enferma y necesitaba el dinero para medicinas. Como si me lo creyera con las pintas que llevaba...
_¿Y si en realidad estaba de verdad cuidando de su madre?
_Me trae sin cuidado. Yo no compro cosas que no pueda pagar.
El hombre se sentó en el sofá,encendiendo la televisión y luego se puso a revolver en las bolsas de compras de Ari.
_¿Has vuelto a comprar libros? Para que te he comprado ese ordenador que esta muerto de risa ¿eh? Libros y más libros.. Solo ocupan espacio. Y ni siquiera son históricos o algo así. Son de novela fantástica. Como si hiciera falta que alguien te llenara la cabeza con más pajaritos de los que ya tienes.
_Si,Pierre. Lo siento. No...no compraré ninguno mas.
_Por cierto,este fin de semana no estaré en casa.
_¿Eh? ¿Po-por que no estaras?
_Cosas de trabajo,no te incumben.
_Pe-pero...
_¿La cena esta lista?
_Todavía no...
_Pues déjala. Se me ha quitado el hambre. Me voy a la cama.
***
Ari se metio en la cama mientras Pierre veia un debate en la televisión. Solo,tan solo... Lo agarró de la muñeca girándole el brazo bruscamente.
_Auh...
_¿Y este número?
_De mi amigo
_ ¿Y te apunta su numero en la palma? ¿Qué pasa? ¿No existen libretas en este mundo?
_Lo...siento. Pierre,buenas noches
Intentó besarlo,pero él le apartó la cara volviendo a clavar la mirada en el televisor. Ari se tragó las lágrimas y cerró los ojos con fuerza.
***
_Buenas tardes,Ari. Pasa
Dominic le dejó pasar al interior,apartándose a un lado. La cama estaba totalmente revuelta de una manera que a le recordó el principio de su relación con Pierre. Podría ser que él hubiera tenido compañía aquella noche. Dominic se apresuró a quitar las sábanas y a poner otras mientras Ari le miraba. No había avisado,quiza le hubiera molestado que hiciera aquello.
_Yo...Dominic lo sien...
_Shh
Lo lanzó sobre la cama tomándolo del brazo y comenzó a desvestirlo. Ari se sonrojó.
_¿Te has excitado?
_N-no,yo...
_Hace tanto tiempo que no te tocan que te pones cachondo en nada
_Cállate... N-no es cierto
Dominic bajó su boxer con delicadeza mientras Ari le empujaba,intentando apartarle.
_Quiero verte por completo.
_¡No! ¡¡Bas-basta!!
_Ala...
_¡No me mires!
Se tapó la cara con las manos. Dominic se las apartó con una mirada tierna en sus ojos de gato. Comenzó a desnudarse tambien.
_¿Qué...?
No pudo terminar la frase. Él le besó.
_Quiero hacerte el amor desde el mismo instante en el que te vi. Y ahora no dejaré que te me escapes.
***
Ari abrió los ojos,sobresaltado. ¿Qué había sido aquel sueño? Miró el reloj. Apenas eran las cinco de la mañana.
_Dios... Que temprano...