Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Feliz cumpleaños, Bokuto-san. por No4h

[Reviews - 5]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

¡Holaaaaaaaaaaa! Os regreso a molestar <3. 

Heuheuhehuehue, vengo con algo suculentamente romántico uvu 

No podia dejar escapar esta oportunidad, aqui ya casi son las 12 am D; 

Este fic va con mucho amor para mi baby Bokuto, el baby de Fukurodani. 

Espero y os guste, como en el anterior one.shot, puse unas canciones asi que si gustan pueden escucharlas. 

A leer :3 

La indiferencia de Akaashi lo estaba comenzando a sacar de quicio pues esta vez era distinto. Quizás el menor siempre lucia así, indiferente, pero Bokuto estaba acostumbrado, ya llevaban ocho meses saliendo.

 

 

No solo se había acostumbrado a eso (aunque mucho antes de salir juntos ya lo había hecho), el encontrarlo camino a la escuela, tomar el mismo tren, salir cada fin de semana, comer juntos, ir a partidos de otras escuelas juntos. Casi habían hecho de todo, menos el...¿cómo le había dicho Kuroo?

 

— Tener sexo, sexo Bokuto, sexo. En otras palabras, hacer el amor.— parecía una especie de regaño por el capitán de Nekoma.

 

— ¡¿EHHH?! ¡P-Pero qué tal si él no está listo! ¿Y si no lo hago bien? Oye, oye ¿cómo tienen sexo dos hombres? — se llevó una mano a la barbilla pensativo y después golpeó su cabeza en la mesa.

 

Ambos estaban en casa del felino, al salir de clases quedaron de acuerdo en verse. A Bokuto no le costó el inventarle algo a su novio, este no se molestó, de hecho hasta le dijo que tenía cosas que hacer. El búho se sentía mal, sentía que lo estaba perdiendo conforme los días pasaban.

 

Kuroo golpeó ambas manos en la mesa, y le dio un zape al de orbes dorados.

 

— ¡Cómo que no sabes! Si serás idiota... — el azabache se llevó una mano a la sien fingiendo decepción.

 

— Tú me pegaste lo idiota.

 

— O quizás tú me lo pegaste a mí.

 

— ¡¿TÚ CREES?! — el capitán de Fukurodani alzó ambas cejas impresionado.

 

— Ya olvida eso. Hay que enfocarse en el problema, bien, quizás Akaashi esta así porque bueno..son ocho meses y aparte ustedes ya llevan dos años conociéndose, ya sabes es..hora. Mira, Kenma y yo ya lo hemos hecho varias veces, en su casa o en la mía, en los vestidores, en la cocina.. — de golpe, Bokuto lo interrumpió.

 

— ¿Cocina? — enarcó una ceja, observando donde se encontraban y en efecto, ambos estaban en la cocina.

 

Su rostro se puso pálido, Kuroo esbozó una sonrisa maliciosa y le guiñó un ojo. Sentía su cuerpo llenarse de escalofríos.

 

— Bro, solo dime que debo de hacer. — aún seguía pálido.

 

— Pues escucha atentamente lo que diré a continuación. — sentenció su amigo.

 

Asintió decidido. Lo que escucharon los oídos de Bokuto a continuación fue algo que jamás podría olvidar. Se tapaba el rostro avergonzado, ¿cómo lograba Kuroo decir ese tipo de cosas sin pena alguna? Y olviden eso, ¿el hacerlo con Kenma? No quería ni imaginarlo, sentía que se iba a desmayar.

 

Salió del hogar, despidiéndose agradeció y a la vez se encontraba aturdido. Al llegar a casa sus padres y hermanas estaban a punto de cenar. No dudó ni un segundo en unirse a la cena, para su familia le resultó extraño que este permaneciera en silencio, parecía tener la cabeza en las nubes. Y es que él aún seguía pensando en su problema con Akaashi y la charla que tuvo con Kuroo.

 

— Cariño, tú compañero de equipo Akaashi-kun vino a dejarme esto. — su madre rompió el silencio y se puso de pie para entregarle una caja blanca decorada con un moño dorado.

 

Tomó la caja en manos y la observó por un momento, después dirigió su atención a la mayor.

 

— ¿Puedo...? — preguntó curioso.

 

Su madre asintió y se hizo un lado para cederle espacio.

Enseguida subió a su habitación y desenvolvió la caja. Dejando a la vista una tarjeta y una carta. La letra obviamente era de su novio. La abrió con cuidado, confundido queria saber que pasaba.

 

"Bokuto-san, esta tarjeta le permitirá el acceso. Por favor vaya a la dirección que está escrita detrás de la hoja, mañana, antes del atardecer. Pero antes de eso, pase un buen cumpleaños con su familia y seres queridos. "

 

Revisó la dirección, conocía ese lugar pero ¿por qué ir a ese lugar? Un momento, ¿mañana era su..? Se acercó a su calendario, fijándose la fecha que era mañana.

 

 

"Domingo 20 de septiembre."

 

En letras de colores estaba escrito: "It's my birthday ~"

 

Así que eso era. Estaba tan preocupado por la situación actual que había olvidado su propio cumpleaños. Dejó la carta en su mesa de noche y decidió arreglarse para una buena ducha y después dormir, mañana sería un día interesante.

 

Sus padres lo despertaron entrando a su habitación cantando y con un pastel en manos. Al bajar toda su familia estaba ahí, sus tíos y primos, inclusive sus abuelos estaban presentes. Había una mesa llena de regalos, vaya que esta era una buena manera de empezar el día.

 

La comida fue divertida, risas y aplausos con su familia. Abrir los regalos fue divertido pero a pesar de todo eso aún no podía evitar el pensar en Akaashi y el querer verlo ya. Faltaba una hora para el atardecer, le explico a su mamá que saldría y ella no se negó pues ya había pasado suficiente tiempo con ellos pero eso no significaba que la fiesta se acabaría.

 

Se cambió de ropa, vestía casualmente pues el lugar requería ese tipo de vestimenta. Salió del hogar despidiéndose de cada uno de los presentes y emprendió camino a su destino. Ir en taxi sería más rápido, así que no había mucha prisa.

 

Al llegar al lugar, que por cierto era un hotel. Entró nervioso, la recepcionista le observó como si de un ladrón se tratara por lo que el mayor sacó la tarjeta, y ella únicamente asintió. Al subir al piso que también estaba escrito en la carta, el 13 piso, buscó el número de la habitación ‘’505’’. Pasó la tarjeta y tímido entró, se escuchaba una canción y se fijó en todo el lugar para ver de dónde provenía la música, encontró unas bocinas y en la pantalla estaba lo siguiente.

 

‘’ Track 17. Arctic Monkeys – 505. ’’

 

‘’In my imagination you’re waiting lying on your side, with your hands between your thighs.’’

 

Todo se veía tan ordenado, habían unas cuantas velas. El olor a vainilla le llamó la atención, y lo dirigió hasta una puerta, escuchaba el sonido de gotas cayendo. Temeroso y con cuidado abrió la puerta.

 

Y lo vio.

 

Estaba en la bañera, viéndole, con esos ojos serenos y una sonrisa suave.

 

Notó como sus mejillas se ruborizaban levemente, y aun así se mostraba como siempre, tranquilo.

 

Espuma adornaba la bañera, también recorría partes de su cuerpo, su piel pálida al desnudo.

 

— Feliz cumpleaños, Bokuto-san. — su sonrisa aún seguía intacta.

 

Amaba la sonrisa de Keiji, la amaba, eran pocas las ocasiones en las que esta salía a la luz.

 

No podía emitir palabra alguna, se veía precioso, hermoso, sensual, era demasiado para sus ojos, demasiado bello.

 

Y es que Akaashi esperaba esa reacción por lo que sacó una de sus manos y le indico que se acercara. El capitán estaba confundido, nervioso, ¿qué hacer? ¿qué? Su momento había llegado, solo serían ellos dos, entregándose por completo.

 

Como niño pequeño, se acercó a pasitos, de repente el menor movió su dedo índice de un lado a otro y negó con la cabeza. ¿Quería que se acercara sí o no?

 

— ¿Qué pasa..? — preguntó el más alto.

 

— Creo que no sería adecuado que usted entrara con la ropa. — respondió suavemente el contrario, usando un tono de voz que Bokuto jamás había escuchado salir de esos labios.

 

Endemoniadamente sensual.

 

Así que no era tan tímido del todo, ¿eh? Vaya, parece que la gente tiene razón cuando dice que los más callados son..’’tremendos.’’ Se comenzó a quitar la prenda hasta quedar completamente desnudo y es que el azabache no le apartó la vista en ningún momento, ¿Por qué? Porque amaba el cuerpo de su novio, amaba el esfuerzo de todos los ejercicios que hacían a diario.

 

Se metió a la bañera, suspiró para quitarse la pena. El agua estaba cálida, de repente Akaashi se acercó quedando encima de él y lo llenó de besos, comenzando por los labios y después bajando por el cuello. El búho se dejaba llenar de mimos, pues era su cumpleaños ¿no?

 

No podía aguantar más, su cuerpo a gritos le pedía que tenía que hacerlo suyo y no precisamente en el baño. Le pidió al menor salir, obviamente este no se negó ambos salieron y se pasaron al menos una toalla para no mojar la cama. Cuando se sintieron listos nuevamente, lo tomó por la cintura y lo cargó, el setter rodeó las caderas del ace con sus piernas y puso sus manos alrededor del cuello ajeno.

 

Con delicadeza dejó caer el cuerpo de su amado, como si de un cristal se tratara. El movimiento de sus cuerpos juntándose y entrando más en calor, iba al ritmo de la música que ahora sonaba.

 

*Oh Wonder – Body Gold (Louis The Child Remix)*

 

‘’Let it go, paint my body gold, take our bodies higher and higher and higher.’’

 

Los gemidos de Akaashi fueron lo mejor que sus oídos habían escuchado. El sonido de voz llamándole una y otra vez, con suavidad.

 

‘’Ah Bokuto-san, Bokuto.... Kōtarō …’’ le costaba el hablar, estaba debatiéndose entre el placer y su deseo de hacerle saber que ambos estaban juntos en esto.

 

No sabe con exactitud cuántas veces hicieron el amor durante todo ese tiempo, notó como el sol se ocultaba, como las luces de Tokyo se escabullían por las persianas, pero fue entonces cuando tuvieron que parar. La manera energética de Bokuto, le beneficio muy bien esta vez.

 

Al despertar lo primero que vio fue una mata de cabellos oscuros, unos suaves brazos rodeándole el pecho, quedó en silencio admirando como este dormía. Precioso. Más que nunca, más que antes, sin duda, precioso.

 

''Así que por esto actuaste de esa manera, simplemente te amo más.''  pensó el de orbes dorados. 

 

El sol se hizo presente en la habitación, ¿qué le dirían sus padres? Dudaba mucho el que ellos le regañaran, después de todo fue su cumpleaños número dieciocho, estaba próximo a ser todo un universitario.

 

— Buenos días. — sintió como Keiji se movía para verle, y le dedicó una sonrisa.

 

— Me diste el mejor regalo de cumpleaños, Akaashi ~ — le besó la frente muchas veces y el contrario solo dejó escapar una pequeña y apenas audible risa.

 

— Usted me dio la mejor noche de mi vida, Bokuto-san-

 

— No digas eso, aún pueden haber más noches..y quien sabe, una de esas puede superar esta. 

 

— No lo creo.

 

— Pues tendremos que averiguarlo con el tiempo, ¿no es así?

 

Keiji se limitó a asentir y buscó la diestra de su novio para entrelazarla con la suya. Y poder adorar ese momento tan íntimo que ambos jamás olvidarían, pasaran semanas, meses o años.

 

‘'Si hablamos de compañías, quiero estar contigo y con nadie más.

Si hablamos de pertenencias, quiero ser tuyo y de nadie más. 

Si hablamos de sentimientos, te los entrego a ti, a nadie más.’’

 

Con cariño, Akaashi Keiji. Feliz cumpleaños, mí capitán.

Notas finales:

YAAAAAAAAAAAY <3.

 

Espero que os haya gustado, en serio u3u 

¿Que opinan de las canciones?

En lo personal, ''Body gold'' me gustó mucho para ese momento, la original no es tan sensual como el remix, jojo ~

¿De que pareja quieren que sea el siguiente one-shot? 

Haganmelo saber en los reviews, bonita noche. 

 

Besos y abrazos, espero que hayan celebrado el cumpleaños de búho uwu <3. 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).