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Habitación 318 por InuKidGakupo

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Notas del fanfic:

Disclaimer: Dragon Ball, sus secuelas y sus personajes no me pertenecen, son obra de Akira Toriyama y la Toei.

Notas del capitulo:

Este fic será profundo, más allá de lo que uno puede esperar de personajes “fríos” como estos, la verdad es que me he pensado bastante la idea y estoy segura que Bardock y Tooma son capaces de producir muchas cosas! Agradezco a Diosadelamuerte por su aportación de ideas y paciencia! Ojalá les guste!

~Parte 1~

Descubrimiento: Lo que existe al otro lado

 

Prólogo

El ejército llenaba sus filas de nuevos miembros, todos esos pequeños niños que eran enlistados desde temprana edad para fortalecerlos y hacerlos grandes guerreros, máquinas de matar con precisión y excelencia. Los niños eran sometidos a entrenamientos que marcaban quién servía y quién no, y si para ello debían morir, lo hacían, preferían que así fuera a seguir viviendo como un soldado inútil y al crecer ser sólo un desperdicio de guerrero.

Ese día, en el centro de la plaza de entrenamiento se llevaba a cabo una batalla, una que se suponía en un principio era un duelo amistoso entre dos discípulos al azar, pero siempre terminaba siendo una verdadera batalla a muerte. El adulto encargado de turno simplemente miraba con absoluta indiferencia como los infantes se destrozaban a golpes el cuerpo, sencillamente, así era como debía ser, así que no le preocupaba en lo absoluto que ambos estuviesen sangrando y sus extremidades lucieran demasiado maltratadas.

Tooma, uno de los niños, oscilando entre los ocho años, tenía un brazo lastimado, pero seguía en combate sin chistar, mirando con temor oculto los movimientos de su contrincante con su único ojo bueno. Bardock, el segundo niño de cinco años, muy diferente a su adversario, se permitía mofarse, burlándose de su estado y cruzando los brazos mientras merodeaba a su rival, riéndose y rodeándolo, como si fuera una bestia lista para atacar a su presa. – ¡Acaba con él! – gritaban sus compañeros de entrenamiento, animando, pero no hacía falta que se lo dijeran, lo haría sin lugar a dudas.

Se lanzó en contra de Tooma, dispuesto a realizar otra serie de ataques poderosos y terminar de una vez con esas patrañas, sin embargo, ni una de sus manos dio en el lugar. Bardock cayó al suelo casi convulsionando, arañando la tierra y topando la cabeza duramente contra el suelo, ahogando un grito de dolor que por orgullo simplemente no pudo soltar. Una nueva serie de gritos proveniente del público se hizo presente, acompañada de risas divertidas y burlonas.

Bardock, completamente sorprendido, giró su cabeza con dificultad, tratando de saber qué era lo que había sucedido. Tooma, de pie tras él, le sostenía la cola con fuerza, halando en su dirección, tratando de mantenerse en pie a pesar de todas sus heridas. Bardock maldijo, sintiendo su descuido y reprochándose su velocidad, ese espacio en el que dejó libre su extremidad y durante su salto resultó ser blanco fácil. Frunció, tratando de zafarse de aquel agarre, produciéndose únicamente más dolor.

Fue imposible resistir un grito tras esa acción, temblando nuevamente contra el suelo y sintiéndose desfallecer por el dolor. Tooma, sin soltar la peluda extremidad, ofertó un par de patadas en el abdomen de Bardock, quien, sin lograr poner la más mínima resistencia, pronto resultó afectado en la misma proporción que el otro, moviendo el resultado en la batalla, en unos segundos, pasó a ser quien estaba perdiendo.  

–Que patético…– comentó el instructor, andando un paso al frente y cruzándose de brazos mientras apreciaba con desprecio el cuerpo del menor tendido en el suelo. –Por confiado ha perdido de esa manera… pfff, no cabe duda que eres un clase baja… – comentó con ofensa hacia los de aquella categoría. –Perder por descuidar tu cola – Bardock gruñó con la energía que le quedaba en el cuerpo, bajando la mirada hacía el suelo, prácticamente clavando las narices entre el polvo del lugar. –Acaba con él – indicó, retirándose de la arena con aburrimiento, como si ya conociera el destino de la situación y la idea no le pareciera importante de contemplar.

Tooma, escuchando los ánimos de todos sus compañeros, extendió una mano al frente, comenzando a crear una bola de energía que con seguridad daría fin a esa pelea. El otro, tendido a sus pies, apretó los dientes, esperando el tiro de gracia para dejar de sentir vergüenza y decepción de sí mismo, más allá de lo patético que ya se sentía, de lo débil e irrelevante que había resultado ser. Sin embargo, su cola fue liberada y la bulla de todos los presentes se silenció, reemplazada por murmullos de incredulidad, incluso insultos que empezaron a brotar de entre las bocas, insultos que Bardock no entendió el por qué en lo absoluto.  A los pocos segundos, todos los presentes se callaron y se marcharon decepcionados, dejando a los dos contrincantes solos en ese lugar.

Bardock, tras unos momentos en los que recuperó el aliento, giró hacia atrás su cabeza para poder ver lo que sucedía, mirando como Tooma le contemplaba desde arriba y no resultaba ser amenazante. – ¿Puedes levantarte? – Bardock no respondió a esa pregunta, no entendiendo si la intención de ese sujeto era continuar con la pelea, sólo se quedó inmóvil, mirándole desafiante, tampoco era como que pudiera hacer mucho más. –Vamos – le extendió la mano, y Bardock le miró en confusión, tensándose un momento, como esperando alguna clase de ataque. –No te mataré…– Tooma reafirmó su mano en aire, indicándole tomarla una vez más, tratando de no lucir tan mal como realmente se sentía.

– ¿Eres… idiota? – la voz furiosa de Bardock preguntó con dificultad, mirando con rencor y asco la mano tendida para él. – ¿Por qué… no… me matas? – Bardock se giró en el suelo, mirando hacia arriba esta vez.

–No seas tonto, toma mi mano – Tooma lució igual de impasible, acercándose al menor, insistiendo, pero este, en lugar de aceptar su ayuda, le golpeó la mano para que la alejara de él.

– ¿Qué eres? ¿Imbécil?– dejó azotar su cabeza en el suelo, sintiéndose patético en esa situación, mirando con furia la mano de aquel otro chico.  – ¿Acaso te estás burlando de mí? –  reclamó, ofendido, con el orgullo saiyajin ya instalado en él, remarcado sobre sus hombros como cualquiera sobre ese planeta.

–No me estoy burlando, pero puedo dejarte ahí, si así lo quieres – Tooma ofreció, pero no bajó su mano en lo absoluto.

– ¿Por qué me quieres ayudar? Si sigo vivo, voy a hacer el maldito hazmerreír de todo el mundo – bramó, con el dolor absoluto marcado en la voz.

– ¿Preferirías estar muerto? – Cuestionó con algo de diversión, mirando a su joven compañero en el suelo y mostrando algo similar a una sonrisa.

–No quiero deberte ningún favor.

Tooma sonrió más, dando otro corto paso en su dirección. – Ja, ja… fue una pelea justa… no te estoy haciendo ningún favor – la mirada del niño en el suelo, se suavizó un poco, dejando ver en sus ojos algo de su orgullo en la anterior batalla.

–Que pensamiento tan bobo – Bardock se incorporó un poco, recuperando la fuerza que había disminuido tras el apretón en su cola. Lo pensó unos momentos, sentado en la tierra y con hematomas latentes en todo el cuerpo, sin embargo, a pesar de la reciente humillación en batalla, sabía que no podría ponerse de pie, y deseaba salir de inmediato de ese sitio. Sin más remedio, aceptó la ayuda de Tooma, poniéndose de pie en un brusco movimiento un segundo después, suprimiendo más de un quejido que apretaban su garganta.

Comenzó a caminar, indiferente, dándole la espalda a su rival, pero este, tras dar unos pasos, cayó de rodillas contra el suelo, resintiendo las heridas de la batalla. Bardock lo contempló desde arriba de su hombro, y sintió la firme idea de marcharse de ahí y dejarlo solo. No había razones para ayudarlo. Sin embargo, sorpresivamente, lo hizo, y a pesar de que era más bajo que Tooma, logró sostenerlo y ponerlo en pie, pasándose uno de sus brazos por sobre los hombros.

Tooma miró impresionado a Bardock, sonriéndole, pero el otro miró directamente al frente, frunciendo su infantil rostro para ocultar la ligera pena que sentía – Con esto estamos a mano – informó, mirando en dirección contraria a Tooma. – Y no dudes que te mataré si tengo la oportunidad…– amenazó, aferrando más el brazo del chico a sí mismo para comenzar a caminar.

–Lo sé… no tienes que decirlo…

Aquel día, en aquella batalla donde se habían conocido, había habido algo que le impidió a Tooma matar a Bardock, y algo en Bardock le había impedido simplemente fingir no conocerlo. Ese día, después de aquella dura batalla, había nacido una amistad, y después de ese día también aquellos niños tuvieron un apego significativo. Claro, no dejaban de ser niños, y a los pocos días estaban jugando y entrenando juntos en las calles de las ciudades de Vegita, la rivalidad y desafío que representaban para el otro se convirtió en respeto, camaradería y amistad con los años. Se volvieron un inseparable e insufrible par.

Dieciséis años después, parados dentro de las filas saiyajin, tras haber hecho un trato con el emperador del universo, se formaban escuadrones de pelea en Vegita, donde innegablemente ellos dos formaban parte de uno de esos escuadrones. Y Bardock, aquel niño que no murió ese día, era nombrado el líder del nuevo equipo.

Aquel día en que el escuadrón de Bardock se formaba, en que todos los miembros eran asignados a un lugar dentro de las bases del ejército, unidos irremediablemente en un destino impuesto, sin saberlo y sin esperarlo, comenzaría una historia complicada, una historia que no se contaría, unas palabras que jamás saldrían dela un grupo de paredes, una historia que podría ser nada y todo para ellos dos.

Una historia que, incluso, iba más allá de su propio entendimiento.  

Notas finales:

Ya sé que igual y no era tan necesario meter esto, pero, después de todo es la presentación, la introducción al todo. Este fic tendrá 4 partes, cada parte con su prólogo, capítulos y epilogo, creo que la historia se mueve sobre 4 factores diferentes, pero continuos, por eso marcaré las divisiones dentro de la misma historia. En el siguiente capítulo voy más al grano, así que está bien la sequía en este prólogo. Espero traer el capítulo uno pronto, :) gracias de antemano si leyeron! Nos leemos!


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