CAPITULO 10 BUENAS NOCHES ONODERA
-Alguien por favor!-Takano, Yukina, y Kirishima saltaron al ori aquella voz. -Por favor, alguien
-Suena como Ann-Chan.-Todos corrieron en esa dirección, presa del pánico, preguntándose por qué el Hospital estaba tan desierto. Se sorprendieron al ver a Ann-Chan en sus rodillas tratando de levantar a Onodera.
Ann-Chan los vio.
-Por favor, ayúdame! Está perdiendo mucha sangre.-Takano se fue rápidamente y cargo a su ángel. El piso fue pintado con la sangre de Onodera
Se dirigieron de vuelta a la habitación para ver un Nowaki aturdido y un cabreado Hiroki.
-Ese hijo de puta!- Hiroki corrió Takano. Tanto Kirishima y Yukina agarraron rápidamente sus brazos antes de que Hiroki pudiera alcanzarlo.
-wow! Dejalo Hiroki!- bramó Kirishima
-El daño a mi compañero!- Hiroki enseñó los dientes. Takano entrecerró los ojos y usó su cuerpo para proteger a Onodera.
-Hiroki, fue un accidente.- Nowaki trató de calmarlo- le sorprendió.
-Eso no importa, nadie perjudica lo que es mío!
Nowaki camino hacia el y abrazo a Hiroki por su espalda. Kirishima y Yukina soltaron sus brazos y retrocedieron. Nowaki besó su cuello, sonriendo.
-Hiroki, ¿por qué no siempre actúas de esta manera?-pregunto. Hiroki se sacudió.
Lo siguiente que le dijo, provoco que Hiroki le diera un golpe en la cara
-¡Idiota!
Nowaki sonrió. Él lo detuvo antes de que Hiroki pudiera escpar.
-Estoy bien sólo me tomó por sorpresa, te lo prometo.-Hiroki refunfuñó, relajandoe un poco.
-Nowaki, necesito tu ayuda.- dijo Takano impaciente. Nowaki asintió.
-De ninguna manera, Nowaki no…- Npero su amante le susurró algo al oído que hizo que el hombre se ruboriza. Hiroki frunció el ceño y salió del hospital.
-Acuestalo en la cama por favor. Ann-Chan, ayúdame-.Ann-Chan asintió.Nowaki empujó a los otros fuera para que pudieran examinar a Onodera.
-Dios mío, usted no estaba bromeando. Está bastante roto.- Dijo Kirishima. Takano asintió con gravedad.
-Pueden ustedes decrime ¿Quién es el?- Preguntó Yukina.
Kirishima explicó cómo Takano se ha reunido con su Ángel Negro. Takano luego explicó lo que sucedió cuando su ángel de repente apareció ante él, desgarrado y roto.
-¿Fue herido en la guerra?- se preguntó.Kirishima
-No sé, Nowaki dijo que fue atacado por un grupo. Los pedazos de su armadura negra estaban todavía en él. -Takano estaba frustradopor no saber nada de lo que había sucedido-Pero yo no creo que hayan sido ángeles, parecía que su armadura se arañó por fuera
-Los demonios son conocidos por ser agresivos, incluso con los de su propia especie. Me pregunto que les hizo para haberlos enfurecido tanto
-Él tiene un aspecto débil, ¿tal vez porque era una presa fácil?- se preguntó Yukina
Kirishima negó con la cabeza.
-¿Qué les parece si espermos a que el chico despierte? Es mejor que adivinar- Todos asintieron.
Entonces Takano recordó lo que la castaña le había dicho
-Ann-Chan le conoce por cierto, al parecer, cuando estaba viva, ella y Onodera iban a casarse.
-¿Onodera?-Preguntó Kirishima.
Takano asintió
-Ese es su nombre.
-¿Sabes cómo murió, entonces?
Takano negó con la cabeza.
-Ann-Chan dijo que cuando ambos tenían trece años hubo una invasión a su sustento. Ella estaba en su habitación cuando la mataron, no sabe lo que pasó con Onodera
-Vamosa averiguarlo mas tarde entonces, lo que me preocupa ahora son sus alas. Dios mío ¿Cómo sobrevivió a eso?-las propias alas de Kirishima revolotearon.
-Él es obstinado- dijo Takano en voz baja. Yukina y Kirishima acordaron.
Ann-Chan salió en ese momento.
-Necesito su ayuda.- Ellos asintieron y entraron en la sala. Tenían a Onodera atado a la cama.
-Qué estás haciendo?- preguntó Takano horrorizado.
-Vamos a darle el elixir, ha perdido mucha sangre y su ala está sangrando de nuevo, si no detenemos esto rápidamente podríamos perderlo- Explicó Nowaki.
Misaki entró entonces.
-¿Estara bien?- Nowaki asintió. Misaki entregó el elixir y salió de la habitación.
-Takano necesito que sostengas este brazo, Kirishima las piernas, y Yukina el otro brazo.- Los tres fueron a seguir las órdenes, sabiendo que esto iba a doler como el infierno. El elixir era sólo de emergencia, cualquiera que lo tomara se curaba completamente, pero a un precio terrible. El cuerpo experimentaba dolor extremo, se sentía como si alguien estuviera arañando su piel y desgarrando sus entrañas.
-Nowaki, ¿no hay otra manera?- Tristemente Nowaki negó con la cabeza. Este le abrió la boca a Onodera y dejo escapar una sola gota del elixir. Eso era todo lo que necesitaba.
-Ritsu
Un dolor agudo le atravesó el pecho, con el corazón apretado por un cruel puño. Él se puso rígido y lanzó un grito de dolor. Sudor perlaba su piel, mientras su sangre se espesó a cristales de hielo.setnia el dolor y el ardor palpitarle en la venas. Rugió, pensando que un demonio lo había encontrado y lo estaba torturando de nuevo. Luchó, alguien sostenía firmemente sus brazos y las piernas. ¿Por qué no perdia el control? Justo cuando lo necesitaba. No había rabia, solo dolor.
Ritsu sintió otra oleada de barrido dolor sobre él, peor que antes. Luchó duro, decidido a liberarse.
-Estoy aquí, estoy aquí.- Ann-Chan intento calmarlo mientras se convulsionaba.
-¿Ann-Chan?- pregunto con voz áspera. ¿Por qué estaba aquí? ¿Le habrán capturan también? Luchó más duro, no la toques! Él volvió a rugir.
Ann-Chan comenzó a llorar.
-Estoy aquí, no te preocupes, yo siempre estaré a tu lado yo no te dejaré; estás a salvo, cálmate Onodera, por favor.- El cuerpo de Ritsu siguió retorciéndose, su cuerpoatravesaba sus efectos curativos. Pronto se acabó y Ritsu pudo respirar de nuevo. Ellos lo soltaron y sintió a Ann-Chan reclamar su mano. -Estás a salvo, no te preocupes- Ritsu respiró profundamente, tratando de recuperar el aliento.
- Sr. Onodera, mi nombre es Dr. Nowaki; necesito inspeccionar sus heridas ¿me dejaría?
Ritsu vaciló, pero asintió con la cabeza, Ann-Chan no le soltó la mano y eso le aseguraba que el hombre no le haría daño
Nowaki miró debajo de la bata de noche y vio que los apuñalamientos se curaron completamente. Ni una sola marca se quedó atrás.
-Ahora tus ojos ...- Nowaki levantó el curita un poco. Estaba decepcionado cuando las marcas negras alrededor de los ojos todavía estaban allí, pero por suerte sanó un poco. Nowaki tocó el ala rota, contento de ver que había vuelto a crecer un poco también.
-Va a tomar un tiempo, pero sus ojos se curaran, no te preocupes por eso.- Nowaki sonrió. -Vas a estar un buen tiempo aqui. Ahora, estudié la química que encontré en ti y vi que hace que el cambio sea inútil, si no te importa ¿podrias tratar de cambiar para mi?-Ritsu se sorprendió de que no podía hacerlo. Así que fue por eso que no pude hacerlo antes... esos idiotas van a morir por esto
Nowaki noto su reaccion.
-Así que no puedes, no te preocupes el elixir que ya tomó, curo la mayor parte de la química de su sistema, pero pasara un tiempo antes de que pueda volver a cambiar-Nowaki salió dejando a los tres líderes, Ann-Chan, y Ritsu solos.
Ritsu se sentía mejor de lo que había hecho en años, los ojos aún ardían, pero al menos el dolor en su cuerpo había desaparecido. Sus alas estaban adormecidas pero sabía que su ala derecha todavía estaba rasgada
-Onodera dime lo que te pasó. ¿Cómo te convertiste en un demonio?- Ann-Chan rompió sus pensamientos. Ritsu cerró los puños, no tener que recordar
Ritsu negó con la cabeza.
-Lo siento Ann-Chan, yo no te lo puedo decir.
-¿Por qué no? ¡Es importante!
-Lo siento...
-Al menos dime,¿sobreviviste a esa invasión?
-... Sí.- Ritsu deseaba haber muerto en ese lugar-¿Dónde estoy?-pregunto cambiando rápidamente ese tema
-Oh, bien, estás en el cielo.- Ritsu se encogió. Forzó una sonrisa. -Sabía que ibas a terminar en el cielo Ann-Chan, siempre estabas ayudando a todos.- Ann-Chan sonrió a la alabanza.
-Si se me permite,-interrumpio Kirishima-¿Qué te pasó?
-Eso no es asunto tuyo.- repondio Ritsu en voz baja
Silencio tenso.
-¿Pueden ustedesdejarnos solos un tiempo?- Preguntó Takano. Todo el mundo lo miró inquisitivamente. -Sólo tengo que hablar con él, será rápido-Después de un tiempo el grupo se fue. Kirishima susurró que quería qué ellos hablaran más tarde.
Ritsu se puso tenso para una pelea. Takano sonrió.
-Mi nombre es Takano Masamune.
Ritsu ladeó la cabeza.
-¿Por qué me importa?
Takano se rió entre dientes.
–Bien, veras, mientras hablabas con Ann-Chan di órdenes de que se te diera una habitación contigua a la mía. Nosotros vamos a ser vecinos. No puedes cambiar ¿verdad? Y dudo que quieras pasar todos tus días aquí en el hospital. Así que vas a quedarte cerca de mí y yo seré tu cuidador.
Ritsu frunció el ceño.
-¿Por qué no me dejas con Ann-Chan? Yo no te conozco.
Takano sonrió.
-Por supuesto que me conoces, yo soy el tipo que te ha estado visitando en los arboles de flor de cerezo
-Ah, entonces eres mi acosador.
Takano se echó a reír.
-¿Acosador? ¿En serio? ¿Por qué no estoy ofendido por esto? ¿Por qué estoy realmente disfrutando de mí mismo?
-¿Qué dices?- Ritsu se puso serio. -No necesito una niñera. Voy a estar bien, sólo déjame con Ann-Chan.
Takano sonrió.
-Veras, Ann-Chan estará ocupada con el Hospital por el resto de la guerra, no puede cuidarte, y tampoco puedes quedarte solo, ¿Qué tal si sufres un accidente al no poder cuidarte? Vamos, no seas cobarde
Ritsu apretó sus puños, estaba molesto con ese tipo
-Pensé que eras tan inocente cuando te sentabas enlas flores de cerezos, pero es todo lo contrario.
Ritsu no estaba acostumbrado a socializar. Y este pendejorealmente conseguia alterar sus nervios. Pensando que era todo lo alto y poderoso. Ritsu nunca se echópara atrás en un desafio.
-Está bien, voy a hacer que te arrepientas de haberte cruzado en mi camino
Takano sonrió en señal de victoria, por suerte Onodera no podía verlo.
-Takano
Onodera fue dado de alta del hospital al caer la noche. Todo el mundo se fue a listar para la guerra. Ann-Chan prometió a Onodera que iba a visitarlo pronto. Onodera simplemente asintió y se dejó cambiar a su nueva habitación con Takano.
Takano ayudó a Onodera a sentarse en la cama. "
-Si necesitas algo solo grita, podré oírte al lado.
Ritsu no dijo nada.
-Quiero decir que no lo haga por si mismo, es posible que accidentalmente tropieze con algo.
-Sí, sí.- Takano vio que estaba demasiado tenso.
-Relajate ¿quieres? Vas a lastimar esas alas si tus hombros se ponen demasiado rígidos
Onodera miró hacia otro lado, sin importarle en lo más mínimo. Molesto Takano agarró sus hombros y le dio un masaje. Onodera dejó escapar un suave gemido, tanto de dolor y como de placer. Takano se sacudió ante el sonido.
Takano no sabía por qué lo hizo, tal vez fue porque se veía tan vulnerable o tal vez porque se veía tan hermoso que le dolía el corazón. Él no pudo evitarlo ni aunque su vida dependiera de ello
Él le dio un beso.
Ritsu retrocedió rápidamente
-¿Qué?- preguntó Takano inocentemente. -Fue sólo un fugaz beso en los labios.
Ritsu enseñó los dientes.
-Haz eso de nuevo y te matare
Takano se sorprendio,¿acaso vio un ligero rubor? ¿O simplemente estaba viendo cosas?
-Buenas noches Onodera, voy a mantener la clave, ¿ok?- Caminó hacia la puerta. No podía esperar llagara el mañana. Nunca supo que su pequeño ángel Negro era un demonio tan lindo