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Black Ángel Raven (traducción) por Mariela

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LLAMADO 11. INFIERNO


Takano se quitó la armadura. La guerra sólo duró siete horas, a tiempo, cada noche parecían ser menos Demonios, Takano esperaba que se mantuviera de esta manera. Pero lo que le preocupaba era el hecho de que no sólo Ritsu  estaba ausente de la guerra, sino también korero y los otros altos demonios. ¿Acaso tramaban algo?


Los tres líderes fueron llamados de nuevo por el consejo. Sabiendo de lo que se trataba se dirigían hacia Marukawa.


-¿Qué tienen que informar sobre el Cuervo Negro?- comenzó Usagi-san. Todos se sentaron en sus asientos habituales.


Las alas de los miembros del Consejo, como siempre estaban ocultas. Sus alas eran diferentes de las alas blancasde cualquier otro angel. Las alas de Usagi-san eran de plata con lo que parecía ser diamantes brillantes en su interior, las de  Isaka-san eran de un hermoso color púrpura con reflejos negros, y las de Yokozawa eran de una luz auzl con copos de nieve cayendo a su alrededor. Representaba su condición de miembro del Consejo.


-El Cuervo Negro no estaba presente en la guerra ni su líder Korero.- respondió Takano.


Usagi-san se inclinó hacia adelante en su silla.


-¿Crees que planean algo?


-Esa hipótesis  ha cruzado nuestra mente señor- Dijo Kirishima.


Todo el mundo se quedó en silencio.


-Voy a tener que inpeccionar el campo de batalla-se ofreció Yokozawa. Usagi-san asintió.


-Asegúrese de que cada detalle se descubra, quiero que cada rincón oscuro quede expuesto a la luz.-Yokozawa asintió.


-Ahora, he oído que usted trajo en un demonio al Cielo Takano. ¿Quieres explicarnos porque?-Usagi-san agudos sus ojos que se posaron en el hombre en cuestión.


-Lo encontré golpeado cerca de la muerte en los cerezos en flor. Él ha estado de visita en ese lugar desde hace años y no hace ningún daño.


-Takano no podemos permitir que un demonio se quede aquí. Estamos en guerra. Es preciso que lo lleve al campo de batalla donde sus hermanos lo llevarán de vuelta.


Takano se tensó.


-¿Lo envieran de nuevo con los mismos moustros que le hicieron eso?


-Takano el no puede cambiar su forma,recupérelo y lleveselo;. No puedo correr el riesgo de que pudiera ser parte de un plan más grande.


-Señor, por favor reconsidere, casi se muere cuando lo encontramos y si él era un espía no se habría arriesgado a que sus alas se rasgaran


Usagi-san sacudió la cabeza.


-Ya está hecho;. No voy a correr el riesgo de que lastime a todos los angeles, quiero que se haya ido esta misma noche.


Antes de que nadie se pudiera mover de su asiento, Takano tomó una decisión drástica.


- Él es mi compañero.


Todo el mundo se quedó helado. Yukina y Kirishima intercambiaron una mirada pero no dijeron nada.


Isaka-san miró a  Takano divertído. Interesante.


-Muy bien, entonces.- anunció Isaka-san-No se puede cambiar eso Usagi-san, necesitamos a Takano y si los demonios descubren eso, estoy seguro que lastimaran al chico


Usagi-san asintió.


-Bien. Él puede quedarse, pero usted debe mantener un ojo sobre él hasta que la guerra haya terminado. Vamos a hablar de su compañero entonces. Nos despedimos- dicho esto, el consejo se fue.


-¿Qué demonios Takano? ¿Conoces la profundidad del problema en que te  estás metiendo?- le gritó Kirishima


-Era la única manera


-Takano, ni siquiera es tu compañero, él podría ser un espía de lo que sabemos, ¿Por qué arriesgarlo todo por un demonio que solo conoces un poco?


Takano frunció el ceño. Él no lo sabía. Sólo sabía que no podía dar a su Ángel de nuevo a esos demonios; él sabía que no dudarían en matarlo sólo por deporte. ¿Pero nunca verlo de nuevo? Le dolía el pecho dolorosamente ante la idea.


-Amor viviente es difícil, ¿no?- Yukina se rió de él.


-No me digas.- dijo Takano sarcásticamente.


 Nunca en su vida había había tomado una decisión tan grande por un simple sentimiento. Ese no era él. Se aseguró de razonar todo antes de hacer un movimiento.


Yukina se rió de Takano, pareciendo leer sus pensamientos.


-¿Dónde está tu razón ahora?


-¿Sabes lo que voy a disfrutar? Cuando usted finalmente consigue estar junto con su compañero y él lo mande al infierno por su actitud imperturbable. Me voy a reír cuando este enfurecido, tieso como un palo cada vez que camine


-De cualquier manera- interrumpió Kirishima-¿Y tú compañero real?


Takano gimió.


-He estado pensando en eso. No lo sé.


-¿Estás enamorado de tu Ángel Negro?


-No sé ...- Kirishima frunció el ceño.


-¿En serio? ¿Qué tal tu Cuervo Negro?


-¡No lo sé! Yo sólo me  acabo de dar cuenta que él es mi compañero, ¿cómo diablos voy a saber?- gruñó Takano.


¿Amaba a su Cuervo Negro? Él amaba la forma en que ha sido siempre rechazad por él y sus pequeños trucos de Ritsu de divertirsefuera del infierno. ¿Pero el amor? Y ¿qué pasa con su ángel? Tan dulce y frágil, él tampoco lo sabía.


-Usted sabe que es posible caer en el amor con otro, pero una vez que su compañero viene, bueno, vamos a decir que no va a ser fiel. El tirón es fuerte.


-¿Qué tal evitar a su compañero? De esa manera usted puede estar con Onodera y ser fieles.- Yukina sonrió al plan brillante. -Es mejor que estar con el Cuervo Negro, nadie lo aceptaría aquí.


-Yukina estamos en una guerra, el Cuervo Negro el Cuervo Negro se puede aparecer en cualquier momento- contrarresto Kirishima.


-Simplemente digo, que no se enamore del Cuervo Negro


-¿Estás estúpido o algo así?-Tanto Kirishima como Takano le gritaron.


Era casi imposible no enamorarse de su compañero. Lo habían visto millones de veces ya


-Yo slo decia,  ¿qué otras opciones tiene?


Kirishima sonrió, obviamente planeando algo que le ponía la piel de gallina a  Takano.


-No lo digas, ya terminamos.- Takano se dirigió a su casa.


 ¿Qué iba a hacer ahora? Él acaba de hacer un completo desastre de su vida. Todo estaba tan confuso en su mente, la razón ya no existía.


Takano pensó en la noche anterior cuando besó a su ángel de las buenas noche. Por un breve instante pensó, Mantener las sangrientas mentiras y mantener la belleza que se le ofreciadelante. ¿Por qué no?


Sacudió la cabeza con fuerza. La culpa lo invadia. Él no podía hacer eso. ¿Y si su ángel también tenía un compañero por ahí en alguna parte? La idea lo enfureció. Los que pasaban por ahí se sorprendieron de las características sombrías de su líder, mientras volaba a casa.


-Ritsu


Ritsu se despertó con una sacudida. Estaba jadeando, el sudor corría por su pecho y espalda en riachuelos. El más terrible sueño le había sumido. Odiaba cuando soñaba con cómo mató a tanta gente inocente, que arrancó lo cordura que le quedaba.


Ritsu miró a su alrededor, recordándole que él todavía estaba ciego. Él no estaba familiarizado con la ropa de cama suave y el olor. Ritsu se levantó y trató de encontrar la puerta. Poco a pocosintio las paredes que lo guiaban a la puerta, firmando con frustracióncada vez que tropezaba. Le llevó unos buenos tres minutos antes de que finalmente encontró la maldita cosa.


Él era obstinado; no había manera de que él llamara a  Takano por ayuda.


Lo siguiente que supo fue que  tropezó, su ala se golpeo con la mesa causando dolor extremo.


Ritsu se dobló cuando un nuevo dolor comenzó a partir de su pecho. Mierda, ¿cómo podría haber olvidado? El tirón al infierno lo estaba llamando. Ritsu maldijo. Sabía que tenía sólo unos pocos días para  ignorarlo, pero pronto sería un dolor agonizante si lo  ignoraba demasiado tiempo.


La llamada fue algo que se puso en los  demonios hace mucho tiempo. Debido a esto los demonios no podían ir largos períodos fuera del infierno. Ritsu pudo durar tres días antes de que se derrumbara. La única cura era ir al consejo del  Infierno y esperar unos minutos para que el dolor desaparezca por completo.


Ritsu empujó el dolor de espalda. No tenía más remedio que esperar a que su fuerza regresara antes de entrar en el infierno, sabiendo que cada demonio estaría fuera de la cabeza.


Ritsu trató de levantarse, pero sus piernas no funcionaban bien. Él no iba a pedir ayuda. El nunca lo había hecho y no lo haría ahora


-Takano


El cabello de Onodera se pegaba por todo el lugar;lo  que le hacía parecer un niño salvaje. Onodera maldijo al ganarse la risa de Takano.


Onodera se  congeló.


-Bueno, esto es vergonzoso.- sonrió Takano. Onodera frunció el ceño, tratando de levantarse. -Aquí ...- Él ayudó a Onodera sentarse en el sofá.


 Takano se agachó delante de él mirando su cabello. Era completamente desigual como si el chico cortara  su pelo con un cuchillo.


-Espera aquí, no te muevas.


-Usted no tiene que decírmelo- se quejó.


Takano se fue al baño para recuperar las tijeras. Volvió a ver Onodera tocando su ala herida.


-Su ala va a estar bien.- lo tranquilizó Takano. Se agachó delante de Onodera de nuevo y le tocó el pelo. Onodera dio una palmada en la mano.


-Su cabelloesta muy disparejo, sólo quiero cortarlo.


-No.


-Vamos no voy a matarte-Trató de bromear.


Onodera todavía se  resistía.


-No me importa cómo este, no lo toque.


-Onodera, te acordas que iba a cuidar de ti, ahora deja de ser un bebé, yo sólo voy a cortar un poco de distancia.


Onodera gruñó. Takano podía ver que estaba pensando mucho en eso.


-Vamos, si me dejas te llevaré a tu árbol por un tiempo.


Onodera firmó en la derrota.


-Está bien.


Takano alcanzó al retirar un poco la venda de sus ojos


- Vamos a pasar esto muy rápido para que pueda obtener el flequillo también.


Takano retiro cuidadosamente el curita para ver un poco de sangre en ellos. Confundido, Takano trasladó su flequillo a un lado y se congeló cuando vio las marcas negras alrededor de los ojos; parecía que se comía su carne.


-¿Te duele?- Takano tocó la mejilla suavemente


-No me toque.- Él gruñó, golpeando la mano de Takano de nuevo. -Date prisa y corta la maldita cosa ya.


Le tomó un tiempo antes de que  Takano empezara. Se hizo un silencio tenso, el mayor cortaba cada vez más el pelo de Onodera


El estaba incomodo. No estaba acostumbrado a que alguien fuera amable con el. En el infierno, esto  era desconocido para ellos ynadie se había ocupado de el desde que sus padres murieron. Ritsu se puso tenso. No pienses en eso. No quería hacerle nada a este hombre.


Takano se recostó satisfecho. Su cabello ahora llegaba a su nuca y el flequillo fue más corto para que pudiera ver más.


-¿Mejor?


Onodera asintió.


-Gra ... Gracias.-Takano sonrió. Rápidamente le revolvió el cabello antes de que  Onodera lo pudiera mandar a la basura.


Takano aplico cuidadosamente de nuevo la venda en sus ojos


-Hoy quiero mostrarte el Cielo.


-¿Por qué? No voy a estar aquí por mucho tiempo, y yo no puedo ver.


-Voy a describir lo mejor posible para ti-Takano ignoró la otra parte. Él sabía que su tiempo con su Ángel era limitado; él esperaba que pudiera cambiar la mente de su ángel. -Además Nowaki quiere verte. Así que pensé ¿por qué no dar un paseo?


Onodera no dijo nada, sin importarle en lo más mínimo.


Takano sacó  a Ritsu arriba.


-No te preocupes, me aseguraré de que lo disfrutes


-Infierno


-Mi Señor, se ha confirmado que Ritsu ha sido acojito entre los angeles


-¿En serio?- Korero sonrió. "Esoes una ventaja entonces, matando dos pájaros de un tiro


 Korero miró el castillo oscuro para ver miles de almas quemándose en el fuego azul. Él sabía que era sólo cuestión de tiempo antes de que Ritsu se viera obligado a venir al Consejo o correría el riesgo de una muerte lenta y dolorosa de la llamada. Sabía que su compañero no lo dejaría morir.


-¿Cómo está la química?


El demonio sonrió.


-Funciona, hace indefenso a cualquier Ángel. No puede cambiar o usar sus alas y al entrar en contacto con la piel quema la carne.


Korero asintió, satisfecho.


 -Perfecto.Ceran el última dia de esta guerra. El cielo será nuestro por fin-Miles de demonios se reían alegremente.


 


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