WANTED
El sol se estaba empezando a esconder, bajaba lentamente, pronto atardecería y ChanYeol no lo notaba; una suave corriente de viento frío empezó a correr y ChanYeol tampoco lo notaba. Su cabello negro se movía lentamente mientras sus pies se mandaban solos y caminaban sin rumbo. Su corazón estaba destrozado ¿alguien podía ser tan cruel? Entregó todo su ser a esa persona y ella lo único que hizo fue tirar todo ese amor a la basura sin importarle que lo dañaría de una manera que ChanYeol nunca había imaginado.
Sandara era una mujer hermosa, desde el primer momento en que el alto la vio quedó deslumbrado. Los meses pasaron y ChanYeol creía que no tendría oportunidad con la bella chica, creyó que solo se conformaría con mirarla en la cafetería de la universidad, pero descartó la idea cuando en una fiesta se conocieron y extrañamente Sandara se mostró muy interesada. Claro que poco después la amistad se convirtió en algo más, ChanYeol lo llamaba “amor”, pensó que la muchacha sentía lo mismo… que tonto fue. El pequeño cuerpo de la mujer se amoldaba muy bien al de Park, el dulce calor que emanaba cuando la abrazaba ahora le hacía falta. ¿Qué hizo mal? Toda la caminata si rumbo estuvo llena de preguntas, pero esa era la principal. ¿Tan mal novio había sido? ¿Qué hizo para que su Sandara lo engañara?
Había llegado al departamento de su novia para darle una sorpresa, llevaba un ramo de flores, ya que ese día cumplían un año y ocho meses de relación. En su mente tenía planeado la cita perfecta, se divertirían ese día como nunca… pero todo se volvió confuso cuando al entrar al apartamento encontró a SU Sandara con su “amigo” Donghae en el sofá de la sala comiéndose la boca y semidesnudos.
El ramo de flores cayó al suelo, mientras los ojos empezaban a picarle, pero no salió ninguna lágrima. Había algo que ChanYeol había jurado y era jamás llorar por amor. Había visto sufrir a su madre por eso y no estaba dispuesto a sufrir lo mismo. Salió del lugar muy rápido, no supo qué estaba haciendo, sus pies se movían solos, ni siquiera dio la vuelta para ver la reacción de los otros dos.
Seguía el camino que poco a poco se formaba, notó que el piso se hacía de diferente textura. Miró hacia abajo y notó arena, entonces se dio cuenta: había llegado a una playa.
Por ser tarde, casi era de noche e invierno, no había personas. Caminó un poco más con dirección a mar y cayó. Sentado se puso a mirar el horizonte, no le importó que sus ropa y zapatillas se mancharan de arena. Solo necesitaba pensar, lo cual fue interrumpido cuando la vibración de su celular lo sacó de su ensoñación.
17 llamadas perdidas
¿Habían llamado? ¿Tan ido en su mundo estaba que no se dio cuenta?
8 mensajes de texto
De: Dara
16:12
Chan lo siento, no es lo que parece
De: Dara <3
16:15
Yeol contéstame por favor, necesito explicarte lo que pasó. Lo siento
De: Dara <3
16:25
Chan, por favor contéstame. No me dejes. Te amo.
¡¿Te amo?! ChanYeol apretó el celular con furia y lo lanzó al mar. ¿Cómo se atrevía a decirle que lo amaba? Él SI la amaba, él daba todo por ella, él…jamás la habría engañado.
No supo cuánto tiempo estuvo en ese lugar. El color naranja del atardecer se notaba muy claro. El clima sin duda era más frío, pero ChanYeol no quería moverse de allí, no quería llegar a su departamento y ver cosas que le recordaran a ella.
De pronto escuchó un ruido, parecía que no era el único que estaba en la playa en invierno, el ruido empezó a tomar forma, era una melodía, alguien estaba cantando mientras caminaba y se acercaba más hacia donde el alto se encontraba.
Era All of me de John Legend, no había duda, era una de las canciones favoritas de ChanYeol. La voz se escuchaba cada vez más cerca, y se escuchaba más claro. Era suave y hermosa, sin duda era de un chico, no era tan grave como la de Yeol, pero era… tranquilizante.
Entonces lo vio.
Un muchacho bajito de cabello negro caminaba en la arena mirando el mar, cantaba mientras sonreía tímidamente, no notó la presencia de ChanYeol, ya que estaba más entusiasmado en mirar el atardecer. ChanYeol quedó en shock por un momento cuando justo la silueta del desconocido se formó frente al sol que se escondía, fue una vista digna de ver. El viento llegó al rostro del chico bajito y movió sus cabellos azabaches de una manera mágica que por un momento Yeol dejó de respirar. Nunca había visto a un muchacho tan hermoso, la única vez que sintió algo parecido fue cuando vio Sandara.
Allí acabó la magia, recordó a su ex. ¿En qué momento la había olvidado? No importaba. Nuevamente vino la depresión y esta vez olvidó al muchacho que pasó frente a él, el cual poco después había desaparecido junto con la melodiosa voz que cautivó a ChanYeol.
…
SeHun trataba de animar a su amigo. Park no había ido a la universidad por tres días y SeHun no lo podía permitir.
— ¡Despierta ChanYeol! —gritaba el de cabello platinado.
—No quiero—respondía el contrario, mientras se agarraba con esmero de las cobijas.
—Chan, tienes que salir de esa cama, —SeHun se sentó al borde de la cama para mirar a su amigo, —Tienes que superarlo, ve afuera y demuéstrale a la zorra de Sandara que puedes vivir sin ella.
— ¡Es que no puedo vivir sin ella! —hacía berrinche el pelinegro.
— ¡Pero ella no lo sabe! Solo…solo finge, —Oh SeHun se acostó un poco para mirar mejor a ChanYeol, —Ahora duele ¿verdad?, —Yeol asintió, —Pero vas a ver que lo vas a superar, encontrarás a alguien mejor y se lo restregarás en la cara pero por ahora no dejes que te vea así… realmente apestas—como siempre el menor arruinando los momentos emotivos.
El lado bueno es que logró animar a su amigo y consiguió que vaya a la universidad. Aunque ChanYeol evitaba a toda costa a la responsable de su corazón roto.
…
De alguna manera lo que sucedió en la playa tenía a ChanYeol muy inquieto, esa sensación que recorrió su cuerpo al ver al desconocido lo tenía en duda. Nunca pensó que le llamaría la atención un chico, de hecho jamás pensó en enamorarse, él solo quería ser músico y que su único amor fuera la música; sin embargo, sucedió… se había enamorado, de la persona incorrecta.
Llegó a la playa, casi a la misma hora que lo había hecho la primera vez y se sentó con las piernas estiradas disfrutando del amanecer. El sol se escondía y esa brisa de invierno llegó a su rostro, cerró los ojos y apoyó sus manos en la arena inclinándose un poco hacia atrás. Realmente era muy relajante estar ahí, se podía pensar con calma, incluso leer un libro sería ideal, eso era genial, lo anotó mentalmente para la próxima vez que viniera.
ChanYeol abrió los ojos lentamente y lo vio, era el mismo chico de la vez pasada, caminando y cantando esta vez In my place de Coldplay, uno de los grupos favoritos del alto. Algo se movió en el cuerpo más grande, esa voz lo hacía perderse completamente, la respiración se le cortaba por un momento mientras veía el mismo panorama de la primera vez, la silueta del bajito bajo el atardecer y este seguía sin notarlo.
Entonces lo supo… eso era algo que ChanYeol quería ver todos los días.
Todos los días sin falta iba a la playa a la misma hora para ver a ese muchacho que ni siquiera sabía su nombre. Ahora llevaba un libro para leer mientras esperaba al chico de voz melodiosa. Se hizo una rutina, había terminado ya tres libros: La carretera, La Ladrona de libros y Orgullo y prejuicio. Ahora leía Eragon, un libro que SeHun le había insistido en leer pues era uno de sus favoritos, claro que su amigo empezó a sospechar de las salidas del más alto, este solo le decía que salía a leer y relajarse. Y SeHun fingió creerle, pero no dijo nada ya que ChanYeol no se veía mal por lo sucedido con Dara.
Y de repente, el primer contacto visual sucedió.
ChanYeol se había quedado dormido e iba algunos minutos tarde. Llegó justo cuando el muchacho pasaba, pero el libro se resbaló de las manos del alto, cayendo al suelo arenoso creando un ruido no muy alto, pero perceptible… hasta para el lindo desconocido que pasaba por allí.
El bajito volteó asustado por el ruido y ChanYeol por primera vez pudo verlo directamente. Tenía los ojos grandes y muy expresivos, su piel era blanca y se notaba suave, sus labios tenía una forma de corazón hermosa. Quedó deslumbrado por la vista, hasta que sintió el cuerpo pesado y muerto de nervios por la sonrisa que mostró el contrario. Dios, era hermoso. Eso debería ser ilegal, por poco y a Yeol le da un paro cardiaco.
No tardó en devolver la sonrisa muy nervioso, mientras el muchacho siguió su camino pero sin cantar, tal vez se había intimidado, pero ya nada importaba, ChanYeol no podía estar más feliz, el chico le había regalado la sonrisa más hermosa y sincera que había visto en su vida… sin darse cuenta su corazón empezaba a curarse y latir por alguien más.
Al día siguiente hizo la misma rutina, solo que estaba vez sucedió algo extraño. El lindo desconocido pasó por el mismo lugar, pero esta vez no miraba al horizonte sino a ChanYeol, quien casi suelta nuevamente el libro al ver ESA sonrisa. Se quedó embobado mirando y sonriendo al contrario hasta que este se perdió. ChanYeol movió la cabeza si dejar de sonreír dispuesto a seguir con su lectura, pero…
—Así que era eso—Una voz conocida sonó justo detrás de él, no podía ser.
— ¿Qu-Qué haces a-aquí, SeHun? —preguntó el alto parándose para mirar a su amigo.
—Me parecían sospechosas tus salidas y últimamente te mostrabas más feliz de lo normal… así que te seguí, —SeHun sonreía divertido y ChanYeol se ponía cada vez más rojo, — ¿Quién es? ¿¡eh!? … Es lindo. — ChanYeol golpeó el brazo a su amigo, sus mejillas estaban rojísimas.
—No lo sé.
— ¿Eh?
— ¡Que no lo sé! So-Solo lo he visto pasar todos los días por aquí.
—Eres un idiota, hace algo de dos meses estas con estas salidas ¡Debiste haberle hablado!
—Lo sé, pero apenas ayer notó mi presencia.
— ¿Entonces te comportabas como un acosador solo mirándolo sin que él se diera cuenta?, —el contrario asintió. — ¿No le habrás tomado fotos o algo así? —se burló.
Ambos amigos se dirigieron al departamento del mayor mientras este le contaba todo con lujo de detalles.
…
Como le había dicho SeHun, tenía que ser valiente, incluso le pidió a su amigo acompañarlo por si entraba en un ataque de pánico, así que se armó de valor, dispuesto a hablarle a su lindo desconocido… pero no pudo.
¡¿Quién era ese?! Su lindo desconocido estaba acompañado. El otro muchacho era castaño, ojos más pequeños a comparación del otro, tenía labios delgados y solo unos centímetros más alto que el desconocido de ChanYeol. Rayos, era lindo ¿Era su pareja? Todo empeoró cuando empezaron a cantar. Yeol quería arrancarse los cabellos, el castaño tenía una voz muy bonita. What if de Coldplay se escuchaba de las voces sincronizadas de ambos.
—Creo que te ganaron—Susurró SeHun algo divertido.
—Cállate, no es divertido—El alto se fue sin siquiera esperar a su amigo.
Nada mejoró cuando por tres días seguidos ChanYeol hizo su rutina a la playa y espero, lamentablemente el muchacho nunca apareció, se quedaba esperando hasta altas horas de la noche, incluso una vez SeHun tuvo que ir ya que se había quedado dormido en la playa.
…
ChanYeol estaba desesperado, no sabía por qué le frustraba tanto que el desconocido no apareciera, en realidad le molestaba más, el hecho de que ya no lo había visto desde que lo vio acompañado. ¿Se habría ido con el otro chico? ¿Y si eran novios, se casaron y se fueron de luna de miel? Bien, eso no podía ser, en su país aún no se aceptaba el matrimonio entre personas del mismo sexo, pero ¿Y si se fueron a Estados unidos?...Realmente el alto no sabía qué pensar y a SeHun esto lo estresaba mucho, pues tenía a ChanYeol perdido en sus pensamientos y no le gustaba hablar solo.
— ¡Ya! ¡Préstame atención! —Gritó
—L-lo siento, —dijo avergonzado, ChanYeol, —SeHun ¿Si no tienes la nacionalidad puedes casarte en Estados unidos? —SeHun lo miró extrañado, creyó que era broma, pero la mirada de Yeol le decía que no. No lo resistió y empezó a reír.
—No lo sé, — dijo carcajeándose, — ¿Crees que el chico de la palaya se fue para casarse?, ChanYeol ¿Has tomado algo? ¿Yixing no te dio esas cosas que vende, no? —Park golpeó levemente el hombro a su amigo.
—No, — Respondió bufando, —Yo solo… quiero verlo. — SeHun reía divertido, era obvio que ChanYeol había tenido un flechazo con el desconocido de la playa, pero era demasiado idiota para darse cuenta.
—Haz un cartel de “Se busca” tal vez lo encuentras—dijo SeHun en tono de broma, pero luego se arrepintió cuando vio los ojos brillantes de ChanYeol.
— ¡Eres un genio! —grito y salió rápido de su departamento. SeHun movió la cabeza en forma de negación y riendo…se lo había tomado enserio.
SE BUSCA
MUCHACHO BAJITO CON CABELLO NEGRO, OJOS GRANDES, LABIOS EN FORMA DE CORAZÓN, Y VOZ HERMOSA.
ACUSADO DE DESLUMBRAR BELLEZA Y LUEGO IRSE DEJANDO CORAZONES DESESPERADOS.
¡Tú, lindo desconocido! ¿Dónde estás? Te espero todos los días en la playa al atardecer con un libro en la mano. Sé que sabes quién soy. Si lees esto te esperaré en el mismo lugar para por fin hablarte.
Sí, la idea era algo tonta, y el hecho que llevara un dibujo tipo chibi del “desconocido” lo hacía aún más tonto pero ChanYeol había puesto el cartel en la playa por la mañana, mucha gente lo miró extrañada y otra con ternura. Ya habían pasado dos días y nada pasaba, el lindo desconocido no aparecía.
Hasta que justo cuando se iba a dar por vencido, una tarde esperó como siempre leyendo un nuevo libro Forbidden, realmente se estaba convirtiendo en un masoquista, le gustaba sufrir. Estaba en una parte muy triste del libro hasta que algo le hizo sombra impidiéndole leer, levantó la mirada y lo vio… era el lindo desconocido, estaba ahí algo despeinado y algo agitado, seguro había corrido.
—Eh…Hola—dijo el bajito, mientras ChanYeol procesaba la información y se paraba rápido.
— ¡Hola! —saludó de manera feliz el alto para luego hacer una inclinación y así, saludar correctamente.
— ¿E-Eres el que pu-puso el cartel? — ¡Oh Dios! ¿Podía ser más lindo? Estaba todo sonrojado.
—Sí, —ChanYeol no sabía qué hacer, la lengua se le había atascado en la boca y no decía nada, se supone que él lo había hecho ir allí. —Eh… ¿por qué viniste corriendo? —Genial, gran forma de iniciar una conversación. ChanYeol se sentía cada vez más idiota.
—Acabo de llegar de viaje y mi primo me dijo “Un chico de escalofriante sonrisa te busca”, pensé que te habías ido—dijo aún más sonrojado.
—Te habría esperado de igual manera, —soltó Park sin pensar, haciendo que ambos se avergonzaran. —So-Soy Park ChanYeol. —por fin algo inteligente. Estiró la mano, el contrario la miró, sonrió y la tomó.
—Do KyungSoo.