Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

"El dolor del olvido." por Syo Kurusu Love Love kokoro

[Reviews - 58]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Holi, sé que me demoré mucho en actualizar y enserio lo lamento, lo que pasó es que tuve un bloqueo y no venía nada a mi mente, pero después de tanto tiempo, aquí está. Gracias por leer y gracias por sus comentarios.

"Fernia Saga", gracias por tu comentario, me alegra mucho que te este gustando la historia, yo creía que se volvía aburrida, pero enserio, muchas gracias, Fer-chan.

Bueno, ya no los molesto más, espero que disfruten de este capítulo, que es un poco más largo que los anteriores (perdón si es muy largo, creo que me explayé n///n ).

Yokozawa POV.               

Hoy parecía ser un día cualquiera en la oficina, todos trabajaban de manera tranquila, casi no había cosas por hacer, así que cuando terminé mi trabajo me fui al doctor, debido a que en todo el día me había sentido realmente mal. Cuando llegué al doctor, me atendió un buen amigo de hace tiempo.

 -Hola, Yokozawa.

Sí, era él. Iriya, ese joven alto, de ojos cafés y cabello rubio.

-Hola, Iriya. Tiempo sin verte.

-Lo mismo digo, ¿qué tienes? Es muy raro que te enfermes.

-Lo sé, es solo que esta mañana me desperté y me sentía muy mal. Anoche me dio fiebre y también unas nauseas horribles, casi no he podido comer nada en todo el día, porque lo que como lo vomito, lo único que he podido comer es una manzana, acompañada de un poco de leche.

-Yokozawa, ¿solo eso es lo que tienes o…?

-No, también me he estado mareando mucho y creo que aún tengo algo de temperatura.

Él se quedó callado un rato, mirándome de manera extrañada y finalmente habló.

-Yokozawa, por favor, siéntate ahí, te examinaré de inmediato.                       

-Está bien, gracias.

Me senté donde Iriya me dijo y después él me comenzó a examinar, cuando terminó de revisarme, me miró entusiasmado.

-Esto realmente no me lo esperaba, Yokozawa.

-¿Qué?

-Yokozawa, antes de decirte, tengo que hacerte unos estudios, ven.

Me tomó de la mano y me jaló. Me hicieron los estudios y después de un buen rato volví con él. Cuando lo vi, me sentía un poco ansioso, esto debía ser muy grave para que me tuvieran que hacer estudios.

-¿Es muy malo?

No podía ocultar mi ansiedad y mi nerviosismo, cosa que Iriya notó.

-Bueno, depende de cómo lo veas.

-¿De cómo lo vea?

-Sí, para muchos es algo único y tú eres un afortunado.

-¿De qué hablas? Dime de una vez, realmente no te entiendo.

Él soltó un gran suspiro y me explicó mi situación.

-¿E-Eso quiere decir que yo…?

-Sí, Yokozawa. Tú estás embarazado, pero debes de tener mucho cuidado.

-¿Por qué?

-El embarazo en los hombres es muy poco común y con el tipo de trabajo que tienes y el ritmo de vida que llevas, el embarazo puede ser una carga.

-Estaré bien, no hay nada de qué preocuparse.

-Yokozawa, escúchame bien.

Solté un suspiro cansado y me acomodé, luego le hice una seña con la mano, para que prosiguiera.

-Yokozawa. Los mareos y la fiebre son por estrés, exceso de trabajo y falta de sueño, debes de tener más cuidado. Sin mencionar, que tienes un poco de desnutrición y eso no es bueno para tu salud, ni para la del bebé.

-Está bien, intentaré llevar un ritmo más calmado.

-Necesito que estés viniendo una vez a la semana.

-¿Por qué?

-Necesito ver que realmente estés comiendo como es debido y que tus niveles de estrés bajen, porque de lo contrario podrías enfermar de gravedad.

-Bueno, vendré la próxima semana, gracias por todo.

Después de salir del doctor, me dirigí a mi apartamento, tomé las medicinas, me di una ducha, comí adecuadamente y me fui a dormir temprano, pero por eso de las doce de la noche, mi teléfono sonó y contesté adormilado.

-¿Bueno?

-*Yokozawa, ¿cómo estás? Escuché que habías ido al doctor.*

-¿Kirishima? Estoy bien, nada de qué preocuparse.

-*Hiyo se quedará hoy con mi mamá, voy para allá.*

-¿Eh? No es necesario que vengas, yo…

Cuando estaba por reclamar, él colgó la llamada y ya no pude decir nada, porque no respondía las llamadas.

-Tsk, ese maldito, apagó el teléfono.

Preferí no darle importancia al asunto y me quede dormido, pero me desperté un poco después, al sentir que alguien se sentó a mi lado.

-Perdón, te desperté.

-Descuida, no es nada.

-¿Aún te sientes muy mal?

-No, ya me siento un poco mejor.

-Menos mal. Duerme, yo me quedaré a tu lado.

Kirishima se acostó a mi lado y me abrazó, entonces ambos caímos dormidos y al día siguiente nos dirigímos a la editorial.

Yo aún no me sentía muy bien, tenía un poco de temperatura aún y mis ojos estaban llorosos, sin mencionar que estuvo un poco pesado el trabajo y por tal motivo, Kirishima y yo, no pudimos encontrarnos, y al día siguiente parecía que iba a ser lo mismo, hasta que Kirishima me llamó, para que lo fuese a ver.

-¿Qué necesitas, Kirishima?

-¡Ah!, Yokozawa. Ya es algo tarde y tengo que recoger a Hiyo de la escuela, ¿podrías ir por ella en mi lugar?

Cuando Kirishima me volteó a ver, puso una expresión de sorpresa y preocupación, posiblemente porque aún me veía un poco enfermo, pero la enfermedad no se iba del todo, aún seguía igual que ayer, un poco de temperatura y los ojos llorosos.

-Dame tu credencial, no quiero que ocurra lo de la última vez y no me dejen llevármela.

-Quiero que llegando a la casa te duermas un rato y comas.

-¿Qué?

-Te ves enfermo, llegando a la casa te revisaré, no quiero que te pongas peor.

-Y-Ya cállate y dame la credencial.

-Sí, espera.

Busque entre mis cosas y le di mi credencial.

-Hiyo se irá a casa de una amiga a dormir, paran por ella a las 8:00 (p.m.)

-Está bien, le prepararé lo que necesite. Cuando llegues tengo que decirte algo importante.

-Gracias, Yokozawa. Cuando llegue hablamos.

Me fui rápidamente y recogí a Hiyo, cuando llegamos a cas, alisté sus cosas y después la fueron a recoger.

-Gracias, Oniichan.

-Ve con cuidado, Hiyo. ¿Quieres que vayamos por ti?

-Ah, gracias, pero no es necesario. Mi abuela me irá a recoger.

-De acuerdo, ten cuidado.

Luego de que Hiyo se fuera, preparé un café y me recosté un rato en el sofá, tapado con una cobija, esperando a que Kirishima llegase.

-Ya llegue, ¿estás despierto?

-Sí, estoy en la sala.

Kirishima me vio un poco molesto, al darse cuenta que no me había ido a dormir.

-Te dije que te fueses a dormir.

-Ya lo sé, pero tenía que esperar a que llegaras.

Kirishima soltó un suspiro y caminó hacia donde yo estaba, para después tocar mi frente.

-Te dije que te fueses a dormir.

-Ya lo sé, pero tenía que esperar a que llegaras.

Deje salir un suspiro, me acerqué a él y toqué su frente.

-Yokozawa, tienes un poco de temperatura.

-No es nada, ya tomé medicina.

-Entonces duerme un rato, yo prepararé la cena y después te hablo.

-¿Tú qué…?

-Confía en mí, prepararé gachas de arroz.

-De acuerdo.

Me fui a la cama y para sorpresa mía, me quedé dormido inmediatamente, hasta que Kirishima me habló para comer, durante la comida me preguntó respecto a que era lo que tenía y porque me sentía mal, pero nunca le dije que estaba embarazado, solo le dije que era por falta de sueño y estrés.

Luego de cenar, Kirishima me mandó a dormir y él lavó los platos. Luego de que me quedase dormido, sentí que Kirishima se recostó a mi lado y entre sueños sentí que acariciaba mis cabellos, esto era algo realmente grato, sin embargo, aún había algo que me preocupaba… Y era el cómo decirle a Kirishima de mi embarazo.

Cuando desperté, me encontraba solo en la cama, así que me levanté para buscar a Kirishima, quien estaba parado en la sala como si estuviese en shock y cuando reaccionó, se aferró a mí, soltando unas cuantas lágrimas.

-Yokozawa, tengo que decirte algo muy importante.

-Está bien, ¿de qué se trata?

Kirishima me llevó a la mesa, tomé asiento y luego me explicó que su madre le había dicho que le quitaría a Hiyo, si él seguí viéndose conmigo, ya que al parecer su madre nos vio abrazados mientras yo dormía.

-Yokozawa, realmente lo siento, pero no puedo perder a Hiyo.

-Yo…

Luego de escuchar todo eso, entendí que ya no me vería más con Kirishima, sin embargo, no pude hallar el momento para decirle de mi embarazo, bajé la mirada y mi voz se empezó a quebrar.

-Entiendo, no te molestaré de ahora en adelante. Será mejor que me vaya, perdón.

Siendo sincero, yo no quería sufrir más, pero lo quisiese aceptar o no, está era la última vez que vería a Kirishima y eso realmente me dolía, pero yo no quería que él me viese triste, por lo cual me levanté rápidamente, para huir porque ya estaba a punto de llorar, pero Kirishima me detuvo.

-Yokozawa, espera.

-¡Suéltame, Kirishima! ¡No me busques más!

Salí corriendo y sin decirle que esperaba un hijo suyo, me alejé tan rápido me lo permitieron mis piernas, pero al llegar a mi casa, me encontré con Masamune.

-Yokozawa, ¿qué tienes? ¿Por qué estás llorando?

-Masamune, yo… Necesito hablar contigo.

Hice a Masamune pasar a mi departamento y le expliqué mi situación, desde el hecho de que yo salía con Kirishima, hasta el hecho de que yo estaba embarazado y él lo tomó de buen modo.

-Bien, entonces si las cosas están así, yo te llevaré al doctor a partir de esta semana, ¿entendido?

-Pero… ¿Qué hay de Onodera?

-No pasa nada, él lo entenderá.

-Masamune, eres un gran amigo.

Pasó el tiempo y la medicina finalmente empezaba a hacer efecto, ya me sentía mucho mejor y no había problemas, pero me sentía un poco deprimido por no poder ver a Kirishima y el estar solo en casa no me ayudaba, debido a que Sorata seguía con ellos.

Masamune estaba conmigo en casa, porque me había llevado al médico, pero en ese momento se escuchó el timbre y Masamune fue quien abrió, no demoró mucho.

-¿Quién era, Masamune
-Era Kirishima-san, pero le dije que no querías ver a nadie.

-Gracias, realmente me siento muy cansado.

Después de que comí, Masamune se fue y yo me fui a dormir. Pasaron casi ocho días y no había visto a Kirishima, hasta que ambos coincidimos en un elevador.

-Hola, Yokozawa. ¿No has estado bien de salud?

-No es nada de qué preocuparse, ya fui al doctor.

-Yokozawa, yo…

-Kirishima-san, le pido que no me trate con tanta confianza, con permiso.

Cuando la puerta del elevador se abrió, me baje rápido y traté de alejarme, pero Kirishima me detuvo.

-Yokozawa, escúchame.

-No pienso escucharlo.

Me zafé y caminé, pero choqué con Masamune.

-Yokozawa, date prisa y vámonos.

-¿Eh?

-Tenemos que llevarte al doctor, la cita es dentro de una hora, apresúrate.

-Sí, ya voy.

-Tomate las pastillas, vámonos.

Masamune me tomó de la mano y me jaló para que caminara, pero nuevamente me retuvo Kirishima, quien tenía una expresión de molestia.

-¿Qué te pasa?

Yo estaba un poco molesto, no quería que se nos hiciese tarde.

-Por favor, escúchame.

-No lo haré, déjame en paz.

-¿Qué era lo importante que me ibas a decir?

-Eso es…

Bajé la cabeza totalmente sonrojado y cayeron unas cuantas lágrimas de mis ojos. Masamune se veía preocupado, al verme en ese estado.

-Yokozawa, ¿te sientes bien?

-No es nada, Masamune. Kirishima-san, yo estoy…

Cuando estuve a punto de decirle de mi embarazo, Masamune cubrió mi boca y me susurró al oído.

-Yokozawa, date cuenta de que estamos en público, no digas nada.

Asentí a lo que me dijo Masamune y me acerqué a Kirishima.

-Lo siento, Kirishima. Si te digo “eso”, solo te causaré más molestias de las que ya causé y no quiero que eso pase, realmente lo siento, pero… A partir de este momento, preferiría que no te me acerques más, a no ser que sea por asunto de trabajo.

-Pero, Yoko…

Lo interrumpí bruscamente y grité.

-¡Alejate de mí, no quiero verte de nuevo!

Kirishima se sorprendió y me miraba de manera confusa, yo ya no quería seguir viéndole, pues estaba a punto de llorar, así que tomé la mano de Masamune y antes de que mi voz se rompiera por completo y comenzara a llorar, le pedí a Masamune que no fuésemos y él me jaló en dirección al estacionamiento, peor antes de alejarnos de Kirishima, susurré algo para que él me escuchase.

-*Perdóname, te diré cuando sea el momento.* Perdón, Kirishima. Perdón por este temblor, solo quiero que sepas que yo… Te amo, Zen.

Luego de susurrar eso, no volteé por miedo a ver la cara que tuviese Kirishima en ese momento y sin más, seguí a Masamune rumbo al auto.

-Ponte el cinturón.

-Sí.

Todo el camino estuvo callado afortunadamente y no trató de tocar el tema de Kirishima.

Solo espero que algún día me perdone, yo realmente lo amo y no deseo perderlo, no sabría que hacer sin él. Sin darme cuenta comencé a llorar y mi reacción inmediata fue agachar la cabeza, abrazarme a mí mismo y susurrar el nombre de mi amado, acompañado de un perdón.

*Perdón por este temblor, Kirishima. Todo es mi culpa. Perdón…*

Notas finales:

Gracias por leer, espero les haya gustado y me dejen un comentario, nos vemos en el siguiente capítulo, pero antes que nada, quiero que me digan de quién quieren que sea el siguiente capítulo:

-Hatori X Yoshino.

-Yukina X Kisa.

La que tenga más pedidos será la que publique primero, gracias por su apoyo. n.n

Nos vemos. Bye-Bye. n////n


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).