Cuando estaba a punto de levantarse para retirarse, Hee le agarró de la muñeca y le dijo –Espera, lo de la erección es mi culpa, sé que es dolorosa así que déjame remediarlo –Un chispazo de confusión y euforia atravesó el cuerpo escultural de Siwon –Hee, gracias; pero como tú dijiste no es correcto, además esto cambiaría muchas cosas entre nosotros. –Solo haz como si estuviese tratando de reparar el daño que te hice, tú no tienes la culpa de nada—dijo Hee.
Siwon lo miró poco convencido, en realidad esa era su estratagema, desde hace unas horas que lo había planeado, eyacularía en Hee; nada lo evitaría, la seguridad por su egolatría, estaba funcionando.
Hee solo sonrió, lo cogió del miembro y abrió sus pantalones; le arranchó la correa y le bajo los pantalones.
Pronto sucedió lo que debía suceder, sintió el calor de Siwon expandiéndose por su garganta, supo que era umami para su paladar, eso hizo que lo deseara mucho más así que succionó con más fuerza. Siwon estaba en el NIRVANA, realmente era bueno…muy bueno.
Estuvieron por un buen rato así, hasta que Siwon decidió complacer a Hee, no era justo que fuera el único en disfrutar, aunque para Hee no fuera así.
De pronto se vieron complaciéndose el uno al otro, besándose con deseo como si cada momento del acto sexual fuera el último y el más preciado, y entonces Siwon decidió que era hora de penetrarlo, las cosas ya habían pasado a un nuevo nivel de excitación y Hee también lo sabía.
Hee hubiera abierto sus piernas con facilidad y lo hubiera dejado entrar, pero por alguna razón aún intentaba contenerse, sus bajos impulsos le pedían que se dejara penetrar, pero él, él no estaba seguro; nada, nada seguro.
--¡Siwon, espera!—dijo Hee algo agitado. Siwon se quedó lelo, y ahora que pasaba?, ¿Por qué ahora?, ¿Qué había echo mal?. –Siwon, nunca antes hice esto con un hombre, yo nunca… lo sabes, te lo dije no soy homosexual, pero tú; tú tienes un no sé qué, que yo no sé, que me pone como nunca pensé; hay Siwon mi cuerpo y mi mente no se ponen de acuerdo, quizá no debamos…—Después de decir esto Hee se mordió el labio tan sensualmente que Siwon lo besó con más fuerza, y para que dejara de hablar tanto e interrumpir aquel arte que se estaba gestando lo penetró con sus dedos, asegurando así el área, relajando así su entrada, lo pegó a su cuerpo y lo besó, le besó en el cuello y en todas las partes de color lechoso que encontró, hasta dar con sus pezones que devoró insaciablemente e hizo gemir a Hee. Suplicante Hee le pidió que lo penetrara, pero Siwon pensaba hacerlo sufrir un poco más.—Así será más placentero pensó.
Siwon masturbó a Hee, hasta que sintió su esencia en sus dedos y los chupó, eso para Hee fue demasiado excitante y por ello se corrió hasta dejar las sábanas húmedas. Siwon supo en aquel momento que lo que había sido solo deseo, se convertía en algo más intenso y potencialmente letal para alguno de los dos; sabía que nada volvería a ser igual. Sin embargo ya era muy tarde para evitarlo.
Heechul lo besó y le mordió en cuello, luego colocó el miembro de Siwon en su entrada y lo incitó a penetrarlo. Siwon dejó salir su lado salvaje e indómito, y lo penetró con intensidad y rapidez hasta hacer gritar a Hee de placer.
Se suponía que Siwon solo estaba teniendo sexo; nada más, se suponía que no debería sentir una conexión especial por su Hyung, pero cada vez que lo penetraba él también sentía demasiado placer y algo que hacía acelerar su corazón más que cuando solo se aceleraba por excitación.
El sexo fue bueno y largo, terminando con un orgasmo simultáneo. Siwon eyaculó en el interior de Hee como había planeado horas atrás, pero de alguna forma…aunque suene muy, muy extraño; sintió que dejó algo más valioso que solo semen en el interior de su Hyung, que ahora dormía acurrucado a su pecho, sonriendo con una expresión de paz en su rostro.
Siwon a pesar de nunca pasar las noches con sus amantes, no pudo resistirse y abrazando a Hee se sumió en el profundo sueño de Morfeo.
Continuará…