----Kurama-----
Lo decía solo por amabilidad, y yo soy patético al llorar frente a él, pero no lo podía evitar, y claro que soy tonto, ¿quién se enamora de su explotador? Y peor aún ¿Quién tiene la puta esperanza de que ese amor sea aunque sea un poquito reciproco?, ah, suspire, luego me levante y entre a casa, la temperatura estaba bajando demasiado y mis manos y mi nariz principalmente comenzaron a congelarse.
Entre a la cocina y me serví un vaso de leche, luego me cepille los dientes y me fui a mi habitación, bueno a la habitación que compartía con mi hermano y con el mocoso, este último se estaba quedando dormido mientras Dai sacaba cobijas extra del armario.
-Creí que no volverías-me miro fijo.
-Yo también-le sonreí con cierto deje de tristeza
-Lloraste?
-No…..es el frio que me calo en los ojos….¿porque lo aria?-se notaba porque mis ojos estaban rojos, además Dai lo sabía todo sobre mi.
-Por ese estúpido, no me niegues nada-me senté en la cama.
-…….
-Te hiso algo?-negué
-Jaja te diré lo mismo que le dije a Ryo cuando salió de aquí…..lloro porque soy un tonto, pero estoy bien….ahora ve a dormir si? Mañana tienes que ir a la escuela-me dispuse a salir de la habitación.
-A dónde vas?
-A la sala, no tengo sueño como dormí toda la tarde se me ha ido.
-Ok…..solo no te quedes muy tarde
-Ok
Fui y me senté en el sofá para ver la televisión un rato, ya que enserio no me había salido para llorarle a la vida, sino porque era verdad que como dormí toda la tarde no tenía sueño y quería dejar dormir a Daigo.
Me encantaba mirar a Daigo, escucharlo, claro cuando estaba de buenas y hoy no había sido el caso por el incidente que había tenido ayer con uno de mis clientes, si no yo adoraba escuchar lo que Daigo tenía que decirme, el cómo le fue en la escuela, el que hiso en alguna hora libre con algunos amigos, cuando llega a salir con los mismos algún jueves que yo me quedo cuidando al mocoso de Sou, en fin, cualquier cosa por insignificante que fuera, verlo me hacía pensar en cuando yo también iba a la escuela y jugaba con mis compañeros, solo que a diferencia de él yo solía meterme en algunos problemas frecuentemente, pero aun asi, al ser nuestros rostros idénticos me hacía pensar que parte de mi aún era un chico de 16 años normal y no una vil ramera, jaja, sonreí al darme cuenta de que como la mayoría del tiempo que estaba libre me la pasaba fantaseando.
------Daigo-----
A la mañana cuando desperté y salí del cuarto, me encontré a Kurama envuelto en una cobija durmiendo en el sofá y el televisor encendido, ah! Me pregunto qué le habrá echo Derek para que regresara llorando, pero bueno, yo no puedo hacer nada y si Kurama quiere seguirlo a pesar de todo es su decisión.
Luego de quedarme mirándolo unos instantes reaccione y me fui a despertar a Sou, tengo que llevarlo a la escuela antes de yo irme a la mía.
-Anda Sou, levántate
-Qué hora es?-me dice tallándose los ojos
- Las 6 corazón, arréglate que tenemos que irnos-asiente con pesadez, obviamente tiene sueño pero nunca se queja por nada, es un buen niño-no hagas ruido si?, Kurama esa dormido en la sala.
-Dai?
-Si pequeño?-acaricie su cabeza
-Porque Kurama lloraba?-sonreí.
-Nos escuchaste…….creí que dormías, el solo estaba un poco triste, pero ya está bien asi que no te preocupes ok?-asintió.
-Yo sé que Kurama me odia…..pero yo lo quiero mucho Dai, me portare bien para no causarle problemas.-acaricie su cabello
-Tú no causas problemas Sou….y Kurama no te odia.
-Si lo hace-me miro con tristeza y antes de que dijera algo más se levantó y se metió al baño.
Después de que saliera lo ayude a vestirse y tras desayunar algo y dejarle algo de coer a Kurama para cuando se levantara, lo lleve a la escuela y de ahí me fui a la mía.
El día estuvo completamente normal, con la novedad de que nos avisaron que por fin tendríamos el remplazo del profesor de quimica ya que llevábamos como dos meses sin uno y era obvio que si no llegaba todos los del grupo nos iríamos a extraordinario y pues nadie quería que eso sucediera así que a pesar de que perderíamos nuestra clase libre a todos nos alegraba.
-----Kurama----
Escuche lo que conversaban el mocoso y Daigo en la mañana, me había hecho sentir un poco mal, no era tanto que lo odiara…simplemente no sé cómo tratar con los niños y su presencia me incomoda, en fin, luego de que se fueran dormí mucho más, me levante a las doce y me dirigí directamente a la cocina ya que sé que Daigo me ha dejado algo para desayunar como cada mañana, la verdad es que solo por el hambre me he levantado ya que llevaba desde el día anterior sin comer nada gracias a que estaba muy ocupado sintiéndome triste como para comer más que el vaso de leche que bebí en la noche.
Me gustaría seguir descansando, pero luego de comer observo que apenas me dará tiempo de arreglarme un poco y pasar a recoger a Sou a la escuela, por lo regular yo no lo recojo, lo hace una vecina yo solo lo hago los jueves y viernes porque los jueves descanso y por ende los viernes soy capaz de levantarme temprano, los demás días trabajo hasta las 6am y ocasionalmente me quedo a dormir en el bar, prostíbulo, como lo quieran nombrar, y hablando de ese lugar, obviamente hoy me tenía que presentar, tenía que estar ahí desde las 7pm en punto.
Luego de recoger al mocoso regreso a casa y tras ponerlo a hacer la poca tarea que le han dejado en la escuela, me siento frente al televisor hasta que Daigo llega, tampoco es como si tuviera muchas cosas que hacer, deje de frecuentarme con mis amigos desde hace mucho por falta de tiempo, y para que nadie se enterara, después de todo lo último que quiero es que molesten a Daigo por mi culpa, prácticamente con quienes tengo contacto en los días son Daigo, Ryo maso menos y pues Sou aparte de ellos es como si ya no existiera, y por las noches pues los que trabajan conmigo aunque no son precisamente mis amigos, pero en fin no me quejo.
-Hola!-me grita Daigo parándose frente a mí, al parecer me estaba quedando dormido y no note que llego.
-Fuiste por Sou-solo asiento y apunto hacia la puerta-deberías ser más amable con el….sabes?, esta mañana…..
-Los escuche…..no es necesario que lo repitas y no lo are.
-Porque?
-No lo sé….no puedo ok?, no lo odio, pero tampoco es como para tratarlo…..pues como a ti.
-Lo sé, lo sé-se sentó a mi lado, recargue mi cabeza en su hombro-pero porque lo rechazas tanto?
-…..Quien nos dice que su padre no fue quien la mato?-me refería a mi madre, Daigo sonrío de medio lado.
-Enserio?, es por eso Kurama?, eres infantil eso es estúpido!, quien dice que no fue el nuestro? Ah?!, entonces también me odias a mí?! –Yo era muy apegado a mi madre y yo supe por boca de ella misma que el padre de ese mocoso era un cliente frecuente de ella antes de que se embarazara, y supe también de Derek que ese hombre alguna vez regreso a buscarla, asi que era una maldita gran posibilidad, mire fijamente a Daigo a los ojos y luego lo abrace con fuerza.
-No repitas eso nunca!
-Entonces deja de ser tonto-puso su mano en mi cabeza-si así fuera, él no tiene la culpa, es tu hermano.
-….Lo se….no sigas ok?.
El resto de la tarde ha pasado un poco incómodo ya que al parecer Dai se ha molestado un poco, tampoco es que no hayamos discutido de esto antes, y se que tiene razón, en todo caso no es culpa del mocoso, pero no puedo evitar sentir rabia…….extraño a mi mamá, ella era una mujer hermosa y era una buena persona ella no debió morir y mucho menos de la manera en que lo hiso, ahora mientras comemos me ha dado por llorar, pero intento aguantarlo bajo la atenta mirada de Daigo y de alguna manera logro resistirlo, aunque me gustaría que cediera de su enojo, no me gusta mostrarme débil ante el ni el mocoso, todavía soporto más que Ryo me vea llorar a que lo haga Daigo.
Bueno, la hora ha llegado así que me dirijo al bar, aún tengo que cambiarme y si no estoy listo en el momento justo Derek se molestara conmigo.
Inmediatamente cuando entro al lugar donde nos vestimos soy atacado verbalmente por otros chicos que me observan mal y empiezan a hablar entre ellos.
-Ya llego la puta favorita de Derek-ambos ríen por lo bajo, pero no les tengo miedo, al contrario, me acerco a ellos y comienzo a cambiarme.
-Pues claro le gustan los más pendejos
-Si así es porque no está contigo?-le respondo provocando su enojo, a lo que sonrío.
-Quien dice que no he estado con él?!
-Solo lo sé-lo barro con la mirada-hay de corrientes a CORRIENTES.-se acerca con intenciones de golpearme, estoy listo, pero su amigo lo detiene.
-Ja, no pensaras que alguien importante como él se enamorara de basura como tú o sí?
-Yo no pienso nada, conozco mi lugar, y se que eso es imposible así que no se encelen-me rio de ambos, se que Derek no me quiere pero por lo menos le gusto más que este par de idiotas y no voy a dejar que me humillen, o nos tratamos a la par, o los humillo yo, no hay opción-pero mientras tenga mejor culo, estoy por encima de ustedes-ahora si, ambos se lanzan sobre mí y comenzamos a pelear, hasta que el causante de la discusión aparece tras la cortina negra que nos separa del mundo de hombres que pagaran por nosotros.
-Suficiente!-nos levantamos en seco los tres mirándolo fijamente con cierto espanto, se acerca primero a mí, cierro los ojos esperando un golpe pero recibo una caricia.-me encanta que conozcas tu lugar, y ustedes perras en celo no se meta en lo que no les importa, creen ustedes que yo me atrevería siquiera a tocarlos?-los miro con desprecio, agacharon la mirada
-Eso pensé, ahora salgan!!!!!!-se fueron de inmediato-y tú también, anda, ve a trabajar-asentí, me había sonrojado, me sentía privilegiado de ser escogido por el, ya que si, obvio se metía con más putas pero igual que yo eran seleccionad@s.
Bueno y quien es Derek, si, es mi explotador, pero no es el dueño de este lugar, ni el cabecilla de toda esta mafia, no!, eso ni siquiera yo lo sé y ni estoy cera de saberlo, pero por lo que he oído y me han contado sé que el cabecilla debe ser un hombre mayor, con poder, y obviamente estos negocios no son legales si no yo un crio de 16 años no estaría prostituyéndose libremente, pero ese no es el punto, Derek como decía, es un hombre joven aproximadamente de unos 27 años y cuentan las malas lenguas que es hijo de uno de los principales hombres del mero mero, he ahí el hecho de que lo dejen dirigir este lugar siendo tan joven, en conclusión, un hombre poderoso que se va a andar fijando el en una persona tan insignificante como yo más que para sexo, hasta pensarlo suena estúpido no? Jaja.
Como sea, sin demorarme le hago caso a Derek y salgo.