Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Amigas...Rivales...¿Cuando De Mi Te Enamoraste?... por Karmen Historia

[Reviews - 100]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola mis amadas y adoradas personitas hermosas del universo!! ^o^


Por mil problemas con mi tablet y mi vida privada es que actualizo recien ahora, espero puedan disculpar la larga espera y sin mas que decirles...


Que disfruten la lectura!!!


:D

Alondra…

Dulce, amargo…

Un bipolar beso robado

Algo jamás experimentado

Lleno de sentimientos encontrados

 

Nunca me imaginé hacer esto

Ni siquiera lo pensé en el momento

Lo único que con claridad recuerdo

Es mi repentino deseo

De arrebatarle el aliento a besos

 

Al verla directamente a los ojos

Recorrer con mi vista su bello rostro

Sentí deseos de besar sus labios rojos

Y olvidándome de todo

Me lancé a cumplir ese deseo tan loco

 

Si las palabras de Annie me habían dejado confusa

Ahora yo sola aumente mis dudas

 

¿Por qué mi corazón late así?

Como si de mi pecho quisiera salir

Mis pensamientos son mil

Y nada claro puedo distinguir

 

Aunque he besado a muchas chicas

Ninguna se compara con Carolina

Ella siempre es distinta

El sabor de sus labios es una droga magnifica

 

¿Pero qué demonios estoy pensando?

Supongo que mi cerebro ha sido afectado

Esto es más que extraño

No sé si lo he arruinado

O descubrí algo

Que por mucho tiempo llevé guardado…

 

Ahora ¿Qué hago?

¿Qué son estos sentimientos extraños?

Odio sentir que nos separamos

Miles de recuerdos van regresando

Mi corazón late desenfrenado

La confusión me está matando…

 

No era un beso apasionado, rudo o desesperado. Era todo lo contrario.

El movimiento de sus labios era lento, suave, tierno. Suaves caricias, como tiernos roces al pétalo de una rosa.

Para ambas la sensación era nueva.

Alondra había besado a muchas otras chicas, pero al besar a Carolina sentía algo extraño, pero agradable. Se sentía feliz, liviana, olvidándose del mundo que las rodeaba y cualquier preocupación que tuviera. Solo se concentraba en alargar el beso lo más que pudiera.

Carolina correspondía tímidamente. No sabría describir exactamente cómo se sentía. Al principio su única reacción fue ironizar en su mente aquella situación, que su rival le robara su primer beso si debía ser irónico.

En ese momento lo único en lo que ambas pensaban era en seguir alargando el beso lo más posible. Lo que sentían era extraño, pero tan agradable, tan distinto a todo lo que pudieran sentir antes…

Y aunque ninguna de ellas lo sospechara en ese momento, aquel beso marcaba un drástico cambio en sí mismas.

 

Los ojos verdes de Annie se mantenían exageradamente abiertos a causa de la sorpresa que le dio ver el instante en el que Alondra se acercó a Carolina y la besó.

Hacia escasos minutos que acababa de decirle a Alondra que está enamorada de Carolina ¡Y sin responderle se va y ahora la encuentra besando a su pelirroja!

La cara de Annie se estaba poniendo roja de la furia, y sin pensar mucho en lo que hacía, se acercó a ellas.

...

Alondra no supo en que momento entró Annie a la biblioteca, pero lo sintió en cuanto la de ojos verdes la tomó fuertemente por el cuello y la obligó a darse la vuelta para a continuación darle un puñetazo en el rostro y estrellarla en uno de los libreros, tirando varios libros a su paso.

Carolina observó aquella acción asustada. Nunca había visto a Annie comportarse así.

La de ojos verdes, mientras tanto, veía como Alondra trataba de levantarse con dificultad, realmente la había estrellado con mucha fuerza.

- ¡Te acabo de decir que estoy enamorada de Carolina y lo primero que haces es venir y robarle un beso!, ¡Si antes solo lo sospechaba, ahora estoy más que segura!, ¡Tú también estas enamorada de ella! – Le gritó furiosa mientras volvía a tomarla del cuello de su blusa escolar y la levantaba solo para volver a estamparla contra una de las mesas.

- ¡Annie cálmate por favor! – Pidió Alondra sintiendo el dolor en su espalda intensificarse.

- ¡Calmarme mis ovarios!, ¡Ahora entiendo muchas cosas!, como el por qué rompiste tu amistad con Carolina y comenzaste a molestarla, a siempre retarla en cualquier cosa, a hacerle la vida imposible. Tengo razón después de todo ¿no?, como no sabías decirle que la amas decidiste alejarte, pero para seguir cerca de algún modo comenzaste esa ridícula rivalidad, igual que un niño pequeño.  Hace solo unos minutos que te dije que yo la amo ¡¡Y no tuviste los malditos ovarios de decirme que sientes lo mismo por ella!! –

Alondra sentía ardor en su rostro, el primer golpe de Annie le había hecho una pequeña abertura en la mejilla. Y se preparaba para sentir otra vez su puño otra vez, pero una voz detuvo a la de ojos verdes.

- ¡Annie detente!, ¡Suelta a Alondra ahora mismo! - Ordenó gritando Carolina al tiempo que se acercaba y alejaba a ambas chicas, poniéndose en medio de ellas.

Annie se sorprendió mucho por eso, pero al ver la seriedad en el rostro de la pelirroja comprendió que no le convenía hacer nada.

Alondra también estaba sorprendida, pero más que nada, preocupada de que la de ojos verdes fuera a reaccionar mal con la pelirroja.

Carolina, tras escuchar todo lo que Annie le había gritado a la pelinegra se había quedado pasmada y muy confusa, pero no podía permanecer inmóvil y dejar que la de ojos verdes siguiera lastimando a Alondra.

Miró a ambas chicas con seriedad.

En ese momento, la campanilla sonó, anunciando el fin del receso.

-Annie, vete a clase y trata de calmarte. Hablaremos después, cuando ya estés con la cabeza fría y puedas explicarme bien muchas cosas. - Le dijo a la de cabello chocolate, quien sabía perfectamente que no le convenía contradecirla. A regañadientes, y a sabiendas de lo que cumplir con lo que le ordenó la pelirroja provocaría, salió de la biblioteca con la ira destilando por sus ojos.

Solo unos pocos minutos después de dejar solas a Alondra y Carolina en la biblioteca, Annie ingresó a su salón de clases con un notorio gesto de enfado en el rostro. Todos sus compañeros se percataron de ello, pero no le dijeron nada, era normal verla molesta de vez en cuando. La única que reaccionó sonriendo de oreja a oreja fue Kate.

La rubia también se percató de que ni la pelirroja ni la pelinegra habían entrado, así que supuso que ambas estaban juntas.

Aquel pensamiento solo la hizo sonreír más.

Enfermería.

Una vez que la de ojos verdes se había ido, Carolina giró a ver de frente a la de ojos celestes y, en completo silencio, la tomó de la mano y la llevó hasta la enfermería del colegio donde, no sabía si por fortuna o mala suerte, no se encontraba nadie más. La pelirroja solo suspiró y se concentró en buscar lo necesario para atender a Alondra y cuando lo encontró se acercó a curar su mejilla.

Pasaron unos tensos minutos en completo silencio. Realmente ninguna sabía que decir o hacer.

Carolina…

Ese beso…

Revivió en mi viejos recuerdos

De lo que fueron días hermosos

Que lastimosamente tuvieron un final horroroso

 

No sé cómo definir

Todo lo que en ese momento sentí

Sin darse cuenta volvió a abrir

Una vieja herida que me hace sufrir

 

Sus ojos celestes tan profundos

Que en algún momento fueron parte de mi mundo

Hoy parecen un recuerdo mudo

 

¿Acaso busca lastimarme más de lo que ya lo ha hecho?

¿Por qué robarme mi primer beso?

No la entiendo

¿Qué busca con todo esto?

 

Quizá quiera lastimarme

Como si no lo hubiese hecho antes…

 

¿Cómo debería sentirme?

¿Enfadada o emocionada?

No tengo claro nada

Solo quiero calma

Las gotas saladas

Ya me empañan

Y me gustaría quitarlas

Mas esto me tiene atrapada…

- ¿Ya estas mejor? -

La pregunta vino de una aún preocupada Carolina, quien ya había terminado de curar a Alondra, y esta le sonrió un poco.

-Mejor, gracias Lina-

Tal vez sin darse cuenta, Alondra acababa de llamar a la pelirroja de la forma pasada y cariñosa en que también la llaman sus hermanitas menores.

Y aquello no fue del agrado de la de ojos amatista.

- ¿Lina?, Hace solo una hora era “Álvarez”, ¿Acaso los golpes de Annie te dañaron la cabeza Morales? - Le preguntó con un notorio sarcasmo.

Alondra tragó grueso al darse cuenta de cómo la había llamado. Y de lo que había hecho.

-Hace poco más de dos años, tú me confesaste que estabas enamorada de nuestra amiga Annie, y aunque yo sentía lo mismo preferí no decírtelo porque pensé que eso podría provocar una pelea innecesaria entre tú y yo. Y vaya que tenía razón. Lo supe en cuanto te enteraste por chismes y fuiste a reclamarme por haberte “mentido”, “traicionado”, etc. Traté de hacerte entrar en razón, de explicarte mis razones, pero tú nunca quisiste escucharme. ¡Pasé meses intentando hablar contigo, pero siempre me evadías, eras cortante conmigo, cruel, llegaste a lastimarme mucho con tus palabras… hasta que decidí hacerte caso y odiarte…entonces tu comenzaste esta estúpida rivalidad y ahora sin más vienes y me besas…!, ¡¿Qué diablos te pasa Alondra?!, ¡¿De verdad eres tan egoísta para no darte cuenta de que me lastimaste mucho y con ese beso solo lograste hacerlo aún más?! – Le gritó con furia y… ¿Dolor?, la mirada de Carolina estaba cargada de tristeza, su rostro tenía un gesto mezcla de coraje y melancolía. Si, le dolía.

Alondra se sintió la peor de las personas en ese momento. Realmente nunca se había parado a pensar en lo mucho que debió sufrir Carolina por su actitud infantil.

-Carolina yo… No sé qué decirte… supongo que un lo siento no basta para disculparme por tanto tiempo que te he hecho difícil estar bien- fue lo único que pudo decir en ese momento la de ojos celestes.

-No, no lo es. ¿Te haces una mínima idea de cómo me sentí la primera vez que me llamaste por mi apellido?, yo sabía mejor que nadie que eso lo haces cuando odias a la persona. Parte de mi mundo se derrumbó…y pese a todos mis esfuerzos no logré que entendieras que prefería no luchar por Annie con tal de conservar tu amistad. Para mí nadie era más importante que tu…dolió darme cuenta de que yo en cambio no signifique mucho para ti. - Tras esas palabras, la primera lágrima cayó de los ojos amatista de Carolina. -Y hoy como si nada vienes y me propones hacernos aliadas, unas horas después me citas en la biblioteca ¡Y me besas con total descaro!, ¿Por qué lo hiciste?, ¡¡¿Por qué?!!- Le gritó furiosa y secándose los ojos con la manga de su saco.

Alondra respiró profundo en un vano intento de calmar sus nervios. Sentía unas intensas ganas de llorar por las palabras de la pelirroja. Todo era verdad y eso le dolía terriblemente. Pero eso era apenas el comienzo del camino a reconocer sus errores y sus sentimientos.

-No sé bien por qué lo hice… Antes de que sonará la campana, Annie se acercó a hablar conmigo, me confesó que está enamorada de ti…y no reaccioné como se esperaría… no sentí nada más que confusión… cuando me contó sobre sus celos por mi actitud hacia ti me confundí aún más… ella siempre ha creído que yo… bueno, que quiero estar contigo de otra forma… Annie cree que yo también estoy enamorada de ti… Salí del salón sin responderle, solo quería aclarar mis ideas, pero mis pasos me llevaron a la biblioteca…y al verte ahí, tan hermosa como siempre, con ese gesto serio y tranquilo… de repente me invadió el deseo de besarte… de robarte tu primer beso… Si, lo noté, y no te haces una idea del maravilloso sentimiento que experimente en ese momento… no sabría explicarlo, solo sé que fue algo completamente diferente a todo lo que he sentido antes…- Las palabras de Alondra estaban cargadas de sinceridad. Y la pelirroja lo notó.

Sus recuerdos iban y venían sin control.

Carolina recordó a la pequeña Alondra que conoció cuando tenían solo 7 años. Parecía mentira que hubiese cambiado tanto y a la vez tan poco.

- ¿Sabes?, si esto hubiese pasado hace tres años… todo sería distinto… Si hace tres años me hubieses robado mi primer beso…quizá me habría sentido la chica más feliz del mundo… Antes de enamorarme de Annie… Estaba enamorada… de ti…- La de ojos amatista confesó eso con tristeza y melancolía.

Alondra se sintió invadida por algo más que el asombro…

¿Carolina había estado enamorada de ella cuando aún eran mejores amigas?

Eso no se lo esperaba. Nunca habría podido imaginarse algo así ni en el más loco y fantasioso de sus sueños.

Carolina siguió hablando. Sentía que por primera vez podía desahogar todos los sentimientos que había guardado por tanto tiempo… Era su turno de ser escuchada.

-Cuando nos conocimos siendo solo unas niñas pequeñas soñadoras y llenas de fantasías, nunca pensé que me llegaría a enamorar de ti. Cuando lo acepté, el miedo me paralizó, no quería perder nuestra amistad, así que me obligué a dejar esos sentimientos de lado. Fue cuando Annie captó mi atención de otra forma. Llore mucho cuando me confiaste que te habías enamorado de ella. Y no te dije que yo sentía lo mismo porque pensé que te enojarías conmigo y no quería que peleáramos.  Y cuando te enteraste lo primero que hiciste fue reclamarme injustamente, e incluso fuiste tú quien rompió nuestra amistad de años por una simple chica… Yo lo menos que quería era perderte Alondra… pero tras meses intentando, alcancé mi limite y me di cuenta de que yo nunca debí significar mucho para ti si me dejabas olvidada tan fácilmente… Yo te quería…y tú te encargarse de destrozarme…-

-Carolina… Yo… - Fue un vano intento de Alondra por decir algo. Las palabras de la pelirroja, más que impactada, la dejaron dolida. Le dolía por fin notar el dolor de la de ojos amatista después de tanto tiempo.

-No digas nada, no tienes por qué responder... además eso ya pasó… El pasado al pasado…- añadió por ultimo en un leve susurró Carolina.

Carolina nuevamente se secó los ojos con la manga de su saco y se disponía a salir de ahí, momento en el que Alondra la tomó del brazo y la obligó a darse la vuelta.

-Lina…No comprendo bien qué es lo que siento, pero ahora, no seré la misma idiota que haz conocido…Enmendare mis errores y no volveré a hacerte sufrir…- Los ojos celestes de Alondra estaban cargados de arrepentimiento, y después de esas palabras, se atrevió nuevamente a acercarse más a Carolina y robarle un beso.

Solo que esta vez obtuvo una respuesta distinta.

La pelirroja se separó rápidamente para después propinarle una bofetada en la mejilla “sana”

-¡¡No vuelvas a besarme!!, ¡Que sea la última vez que te atreves a robarme un beso Alondra Morales! - Y una vez terminó de gritarle aquello a la pelinegra Carolina salió furiosa de ese lugar, dejando a la de ojos celestes con una extraña mezcla de sentimientos y mil cosas en la mente.

“¿Qué me está pasando?” se preguntó mentalmente al tiempo que cerraba los ojos y se dejaba caer en una de las camillas de la enfermería.

 

Ya había transcurrido cerca de una hora y ya una clase había concluido cuando Carolina reapareció en su salón de clase.

Solo Kate y Annie notaron su aparición con cierta sorpresa.

Carolina únicamente se dirigió al lugar de Annie, quien ya se sentía más que nerviosa.

- ¿Ya estas más calmada? - Le preguntó la pelirroja a la de ojos verdes con un gesto aun serio.

-Sí, más calmada. Carolina…-

-Tenemos que hablar, pero no aquí Annie-

La de ojos verdes comprendió. Se limitó a asentir con la cabeza y vio como la de ojos amatista se dirigió a su respectivo asiento.

Kate observaba todo atentamente. Ya averiguaría un poco más tarde lo que había pasado, pero estaba segura de que Carolina estaría bien.

Quien estaba en un problema de sentimientos era Alondra de seguro.

Un Par de Horas Después…

Enfermería.

-Veo que una bomba estalló, pero aun no entiendo cómo ni por qué, así que me dije “Kate tienes que ir a ver a Alondra para que te explique” y aquí estoy-

La pelinegra reconoció aquella voz al instante y su mirada se mostraba fatigada cuando se topó con los ojos azules y el cabello rubio de Kate, quien con una sonrisa burlona estaba de pie en la entrada del lugar.

-Supongo que Carolina ya te dijo algo-

-Te equivocas. No he hablado con ella. La del problema eres tú por el momento-

Alondra se extrañó con ese comentario

- ¿A qué te refieres? -

-No te hagas la tonta y no me quieras ver cara de eso a mí Alondra. Noté perfectamente cómo después de que hablarás con Annie se dio una cadena de sucesos que involucran a Carolina. Annie me dijo que está enamorada de ella hace años, pero nunca ha tenido la confianza de decírselo sin temor a que la rechace, también me dijo de sus celos, así que le sugerí hablar contigo. Funcionó por lo que veo. -

Alondra no sabía que quería hacer primero, si escucharla o estrangularla. Mejor escuchar, ya después pensaría en otra cosa.

- ¿Qué quieres decir con que “funcionó”? - preguntó cautelosa observando atentamente a la rubia.

-Cuando Annie te lo dijo no reaccionaste como lo haría una verdadera persona enamorada. No sentías nada más que sorpresa y quizá confusión. Soy lo bastante perceptiva y observadora para darme cuenta de todas las emociones y expresiones humanas solo con analizarlo un poco. Y después saliste del salón, ¿Con que me encuentro después? Primero con una Annie furiosa y después con una Carolina seria, triste y en un ligero estado de shock ¿Crees que necesito más para darme cuenta de que algo paso con las tres, producto de lo que hable con Annie, y de tus sentimientos verdaderos? –

-Bueno, si ha pasado algo, y si algo no muy fácil de comprender, pero…-

-Pero nada. Por lo que veo tú y Annie, en solo unas pocas horas, le han hecho daño a Carolina. Le recordaron lo triste y eso a ella le duele, sin embargo, pienso que la más confundida debes ser tú. ¿Comienzas a descubrir sentimientos verdad? -

Alondra dio un respingo y Kate supo que estaba en lo cierto.

-No es para nada lo que te imaginas- Fue el mal intento por mentir de la pelinegra.

-Te dije que el día en que te dieras cuenta quién es tu verdadero amor te llevarías una sorpresa. -

Kate se retiró tras decir eso último.

Alondra en vez de aclarar su mente, comenzaba a asustarse.

¿Realmente quería saber que sentía?

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Continuará...

Notas finales:

Pues eso seria todo por esta ocasion.

Espereo me dejen muchos de sus hermosos reviews que siempre contesto con todo el gusto y el amor del mundo!!

Ya saben que: dudas, preguntas, amenzas, recomendaciones, criticas constructivas, etc, siempre son bienvenidas!!

Un beso y un abrazo del porte del universo!!!!

Atte: Karmen Historia ^0^/


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).