Capitulo 3
La noche era esplendida, el cielo nocturno se encontraba decorado por infinitas estrellas y el unico sonido que podia escucharse era el canto de unos grillos, pero el espectaculo nocturno se veia interrumpido por la iluminacion que a lo lejos se veia dentro de una pequeña casa. Vegeta, como siempre, estaba en la cocina preparando la cena sumamente concentrado en su labor, ha estado alli desde hace bastante rato debido a que, como ahora tendria que alimentar a un Saiyajin mas, tendria que hacer comida suficiente para los tres. Shiel, ya terminado de bañarse, estaba en el sillon de la sala mirando una caricatura en la television, tratando de desifrar el sentido de lo que pasaba por la pantalla, y Goku...bueno, creo que era el cuarto chasqueo de lengua que hacia en la noche, por dos razones, la primera era porque aquel Saiyajin que tanto le desagradaba estaba viendo un tonto programa para niños, sin poder ver el canal que él tanto queria ver, y la segunda y muy importante era porque estaba mojando el sillon con las gotas de agua que salian de las puntas de su cabello, ya le habia recliminado sobre eso pero, como siempre, Vegeta le regañaba diciendole que no lo molestara, lo que hizo que Goku volviera a callarse a regañadientes.
-Vegeta, no entiendo este programa. -dijo Shiel lo suficientemente alto como para que Vegeta dejara de hacer su labor por un momento para prestarle atencion. -¿Porque la carne y el jamon lloran por el pollo en lugar de comerselo?
-No tengo idea, Shiel. -respondio amablemente volviendo a hacer la cena. Goku rodo sus ojos ante tal pregunta estupida, apoyando su menton sobre la palma de su mano, mirando fijamente la espalda de su pareja al no tener namas mas entretenido que hacer y, como arte de magia, el enojo de Goku desaparecio. Esa esbelta espalda que detras de esa remera escondia marcas de mordidas y chupones por toda la misma que él mismo habia depositado orgullosamente. Poco a poco sus ojos iban descendiendo hacia sus posaderas, esas duras y redondas nalgas que tanto le gustaba tocar a la hora del sexo, estrujarlas entre sus manos mientras le hacia un delicioso oral mientras sus dedos se deslizaban hacia su interior facilmente, se relamio sus labios al estar un buen rato observandolas y al dejar que ese tipo de pensamientos vagaran por su mente, se veian suculentas con esos pantalones apretados que él utilizaba para entrenar y...podia jurar que ahora estaban mas grandes que de costumbre, y ese delantal no ayudaba mucho con su auto-control.
Se maldijo mentalmente, acaba de tener una ereccion y de alguna manera tenia que resolverlo. Desvio su mirada de ese trasero por un segundo para depositarla en Shiel, estaba bastante concentrado mirando un canal diferente de television, algo parecido a un documental de la vida marina y sonrio, no podia desaprovechar una oportunidad como esa. Siguilosamente se levanto de la silla sin arrastrarla demaciado hacia atras, camino lentamente hacia la cocina, cosa que el Saiyajin de cabello largo no escuchara sus pasos, y una vez en la cocina abrazo fuertmente a Vegeta por atras, haciendo que este pegara un salto por el susto.
-¡Kakaroto, ¿que...-fue silenciado por el dedo indice de Goku.
-Shhh, no hagas tanto escandalo, despues de todo tu tienes la culpa.
-¡¿De que hablas, insecto?! -Goku no respondio. Sonrio de medio lado antes de apoyar su entre-pierna dura entre las nalgas de Vegeta, haciendo que el Principe se sonrojara furiosamente.
-¿Ahora entiendes? -dijo en tono seductor, lamiendole el lobulo de la oreja mientras sus manos se colaban por debajo del delantal y, por ende, de su remera, capturando ambos pezones con sus dedos pulgar e indice.
-Ahh, detente Kakaroto, Shiel...aahh, Shiel esta en la sala. -decia entre gemidos, tratando de acallarlos mordiendo su delantal, sus pezones siendo estrujados y la entre-pierna de Goku frotandose en su trasero groseramente eran sensaciones dificiles de soportar.
-¿A quien le importa?, esta viendo la television. -decia abandonando la oreja de su pareja, brindandole atencion al cuello mientras sus dedos ahora pasaban a su abdomen marcado y plano, acariciandolo con la yema de sus dedos hasta que una de sus manos llego a la entre-pierna semierecta de Vegeta, masajeandolo por ensima de los pantalones mientras que con la otra mano restante era posaba sobre su cintura.
-Ahh, Kakaroto espera, las...las cebollas se...aahh quemaran. -gemia mordiendose el labio inferior, disfrutando de las sensaciones que su pareja le brindaba.
-Dejate llevar y basta de poner excusas, porque se que te calienta hacerlo cuando hay alguien mas en la casa. -colo repentinamente toda su mano dentro del pantalon, tomando el miembro de Vegeta y comenzar a bombearlo de arriba hacia abajo, acariciando la punta con su pulgar. -¿Sientes la adrenalina de poder ser descubierto?
-Esto es...una locura...ahhh, aahh, mmhmh, ¡ngh!...-mordia aun mas fuerte su labio hasta el momento en hacer sangrar.
-Ya no puedo esperar. -dijo en un gemido ronco, abandonando la cintura de su pareja para llevarla a su pantalon y bajarlo levemente junto con la ropa interior, dejando libre asi su miembro totalmente erecto, luego bajando el pantalon de Vegeta hasta dejar todo su trasero al aire. -Inclinate un poco hacia adelante, Vegeta. -el Principe obecedio sin rechistar, con algo de miedo al ver que Goku no moestraba intenciones de prepararlo primero. -Eso es. -de un movimiento rapido, Goku penetro agresivamente la entrada de Vegeta, sintiendo como su miembro era devorado y exquisitamente apretado por las paredes internas de su Principe.
-¡Ahh! -un gemido un poco subido de tono salio de sus labios, pero luego tuvo que taparse la boca con ambas manos, rogando que Shiel no lo haya escuchado. -¡Mmm! ¡Ngh!.-Goku comenzo a moverse freneticamente en su interior, sin prestar atencion a los insultos en voz baja de Vegeta,embistiendo y profanando ese agujero que lo volvia loco, no importaba cuantas veces al dia lo hicieran, Vegeta seguia siendo igual de suave y estrecho como la primera vez.
-Vegeta...Vegeta. -gemia en voz baja el nombre de su pareja, arremetiendo contra su trasero como si no hubiera un mañana, tomandolo del cabello y estrellando su mejilla contra la mesada de la cocina, le encantaba someterlo, dominarlo, demostrarle quien mandaba a la hora de hacer el amor. -Ahhh...mi Principe.
-Dame...dame mas fuerte. -gemia en voz bajita, volteando su rostro que aun estaba estampado en la mesada para mirarle fijamente a los ojos. Lagrimas salian de sus ojos por la excitacion y el placer, y un hilo de saliva escapaba de sus labios, mojando la mesada.
-Como ordenes. -y obedeciendo, Goku siguio embistiendolo con mas rudeza esta vez.
-Ya no...puedo mas, ¡ngh! -dijo enterrando sus uñas en la mesada, muy cerca del orgasmo, Goku tampoco podia mas, su miembro se sentia hinchado, asi que siguio arremetiendo contra este, las gotas de sudor resbalaban desde su frente hasta la punta de su menton, su boca estaba seca por los gemidos y jadeos que el Son lanzaba al aire.
-Oigan, algo se esta quemando. -dijo Shiel desde el sillon, concentrado en el programa de television sin voltear a ver lo que el par de pervertidos Saiyajines hacian en la cocina a sus espaldas. Vegeta y Goku terminaron corriendose unos segundos antes de que Shiel abriera la boca, provocando que Vegeta terminara manchando todo elsuelo y parte de la mesada y, siguiendo la indicacion de Shiel, vio que las cebollas ardian en llamas, asi que rapidamente se separo de Goku, tomando la sarten entre sus manos y llevandola directamente al agua fria. Goku aun estaba algo embobado por los espasmos de placer que sintio ante el orgasmo, por lo que aun no tenia los pies sobre la tierra.
-Maldicion. -dijo Vegeta antes de darle una bofetada a Goku y luego acercarse a su oido para susurrarle algo. -¡Te dije que las cebollas iban a quemarse!
-Lo siento, es que tienes un culito muy lindo y es dificil resistirse. -dijo con una sonrisa, depositandole un beso en su mejilla. Vegeta se sonrojo, volteando nuevamente hacia la sarten ya fria.
-¡Callate, Kakaroto, vete de mi cocina!
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Descartando ese pequeño incidente con las cebollas, la cena transcurrio tranquilamente, sin pleitos ni miradas asesinas por parte de Goku hacia Shiel. Una vez terminada la cena, estaban muy cansados como para lavar los platos sucios, asi que los dejaron todo en el lava-vajillas, Vegeta se acerco al sillon en donde dormiria Shiel transformandolo en una cama comoda y extendiendole un par de sabanas y una frazada por si hacia frio, Shiel agradecio el gesto mientras se sentia en el sillon deseandole las buenas noches camino a paso tranquilo a su habitacion, cerrando la puerta detras de si.
-Lo de las cebollas fue un desastre. -comento Goku, con intenciones de hacer enfadar a Vegeta.
-¡Callate insecto, por poco quemamos la casa de no ser por tu actitud calenturienta! -dijo con una enorme vena palpitante en su frente, acercandose a su lado vacio de la cama, recostandose y colocandose de espaldas a Goku, estaba muy enojado como para hablar con él.
-Oh vamos, me vas a decir que no te gusto lo que hicimos. -dijo acercandosele desde atras, abrazandolo para atraer mas a su cuerpo, respirando intencionalmente en su nuca, sabiendo que de ese modo a Vegeta se le erizaria la piel.
-E...es obio que no me gusto. -dijo sonrojado, sintiendo un escalofrio cuando Goku le respiraba tan cerca.
-Quiero repetirlo. -dijo en su oido, acariciandolo el interior de los muslos por debajo de las sabanas.
-Kakaroto, no po...-no pudo seguir la frase porque unos tres golpes a la puerta los saco de su momento. Vegeta respiro aliviado, aunque algo molesto a la vez, de verdad deseaba una segunda ronda con su pareja, pero debido a que tenian un inquilino, tendrian que acortar su vida sexual activa por un tiempo.
-¡¿Quien es?! -pregunto Goku muy enojado, aunque ya sabia de quien se trataba y juraria matarlo por interrumpir tal momento.
-Soy yo, Kakaroto, ¿me dejan pasar? -pregunto Shiel desde el otro lado de la puerta.
-¡Si!
-¡No! -gruño enfadado cuando Shiel ya estaba dentro de la habitacion al tener la aprobacion de Vegeta. -¿Que quieres? -pregunto de mala manera.
-Este pijama del hijo hibrido de Vegeta me queda muy apretado, ¿no tendran uno mas grande que prestarme? -y era verdad, esos short que componian un largo de hasta las rodillas se veia apretado, con solo ver sus piernas moradas por la presion y la manera en como apretaban sus caderas le daban ganas de reirse a carcajadas en su cara.
-¿Tan gordo eres de caderas como para que no te entre el pijama de Trunks? -escupio con burla, Vegeta le dio un golpe en la cabeza ante tal insolencia.
-Lo siento, Shiel, pero si el pijama de Trunks no cabe en ti, dudo que los mios puedan entrarte. Pero creo que Kakaroto estara encantado de prestarte un pijama extra. -dijo con una sonrisa, mirando a Goku que estaba con el seño fruncido.
-Crees mal, porque no le voy a prestar nada. -dijo, pero Vegeta de un movimiento rapido bajo su mano hasta los testiculos de Goku, atrapandolos y estrujandolos dolorosamente haciendo que el Son se encogiera en su sitio. -¡Ahh, esta bien, esta bien, le voy a prestar uno! -suspiro aliviado cuando sus bolas se sintieron liberadas de ese fuerte agarre, Vegeta sonrio con satisfaccion viendo como su pareja se levantaba y comenzaba a urgar dentro de su armario. -Ten .-dijo lanzandole el pijama a Shiel. -Y ya largate de aqui.
-Gracias y buenas noches. -se despidio tomando el pijama, saliendo de la habitacion cerrando la puerta totalmente. Goku volvio a retomar su lugar en la cama, mirando a Vegeta que aun no borraba esa sonrisa de su rostro.
-¿Satisfecho? -pregunto con ironia.
-Demaciado.
Continuara.