El día estaba gris y sin nubes, dirigí mi mirada hacia el cielo y pude apreciar como poco a poco adquiría un color negro sin vida y como pequeñas gotas de lluvia amenazaban con caer del cielo, suspire mientras cerraba los ojos, hasta en eso Seung tenía razón… llovería.
Me quedé quieto, sereno, dejando que las primeras gotas de lluvia empaparan mi rostro, la tranquilidad que siento en este momento me hizo comprender algo, debía dejar ir mis sentimientos para verlo feliz, aunque eso significara que mi corazón se rompiera en mil pedazos…
No sé cuánto tiempo pase así, dejando que la lluvia refrescara mi alma, sintiendo como esas finísimas gotas borraban todos mis problemas, y tampoco lo hubiera sabido si no hubiera sido por el sonido de mi celular que me saco de mi ensoñación y con resignación lo conteste sin verificar quien era la persona que me llamaba.
—¿Bueno?— pronuncie con la voz un poco ronca por la reciente exposición a la lluvia.
—¿Ji?— sentí mi cuerpo temblar al escuchar su voz, lentamente despegue el celular de mi oreja tan solo para ver lo que ya era obvio, el nombre Seung Hyun rezaba en la pantalla.
—¿Si?— trate de que mi voz saliera tranquila pero lo único que logre fue que me escuchara nervioso.
—¿Dónde estás? —escuche su voz preocupada, o quizás era yo el que deseaba que al menos le importara un poco— el clima está muy feo, deberías estar en casa, he estado muy preocupado por ti, no sé por qué te estas comportando así, pero podemos solucionarlo mi amor yo…
—Eso no te importa Seung.
—Ji Yong—escuche comosuspiró—claro que me importa, hoy es nuestro aniversario cariño.
—¡Cállate!— dije interrumpiéndolo— TU y YO ya no somos nada, ¡ENTIENDE QUE LO NUESTRO TERMINO!—grite furioso—¡YO NO DEBERIA IMPORTANTE! Soy un asco de persona—susurre.
Escuche un gran suspiro por su parte, me mordí el labio nervioso, diablos lo conozco muy bien, de seguro ahorita debe estar molesto.
—¿Qué podemos hacer?— pronuncio despacio— créeme que me he dicho muchas veces que tu NO deberías importarme, he hecho hasta lo imposible para olvidarte, pero no importa cuántos pactos haga, tampoco ayuda fingir que no siento nada por ti, porque al fin de cuentas ¡me importas mucho! ¡TE AMO JODER!
—Cállate… No… no te creo.
—Ji… por favor, regresa conmigo— un suspiro involuntario salió de mis labios, me lo imaginaba, imaginaba a Seung Hyun con esos ojos que me hacían delirar y sus labios…
—Estoy bien, no te necesito—mentí. Lo único que necesitaba para ser feliz, era a él, a mi tonto SeungHyun.
—Podemos… podemos volver a intentarlo Yongie. Yo… ya te perdone… Realmente te necesito a mi lado.
—No Seung, ¡NO LO HARE! —grité—¿Qué tan tonto puedes ser? ¿Eres imbécil? Entiéndelo, YA NO TE AMO—solloce.
—Ji Yong—dijo interrumpiéndome— yo, al principio creí que solo era una nueva fase, que se te pasaría, pero… ya pasaron 2 meses. Te amo, y sé que me sigues amando. Solo necesito que me perdones por lo que sea que te hayas enojado. Regresa a mí, por favor…
Corte la llamada, y al segundo de hacerlo me arrepentí, pero sinceramente, no deseo escucharlo, ahora todo cambio.
—Yo no puedo amarte Seung Hyun…