DISLCAIMER: Esto es un fanfic original, sabiendo esto debes respetar los derechos de autor. A leer pues ;D!!
I need to be beloved.
By: Miaru.
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La sala estaba a oscuras, el viento hacía que la cortina ondeara suavemente a su compás sin poder evitar que llegase la brisa a su cuerpo encogido. Un escalofrío le vino a la nuca al sentir una suave brisa, la piel se le puso de gallina. Levantó su rostro lo suficiente para ver la estancia, sus ojos verdes azulados se veían como dos mares derramándose, llorando la salada agua marina. Sus labios estaban rojizos de tanto morderlos y por que las lágrimas los mojaron sutilmente, el poco rimel que llevaba se había esparcido como dos caminos por sus mejillas dándole un aspecto tétrico. Tenía la mano posada en su corazón, apretando la tela de la camiseta entre sus dedos, le dolía tanto…
A cada sollozo que daba un pinchazo en el corazón sentía… No podía evitarlo, verle a él con ella… Era tan doloroso… Él le había engañado, se “amaron” durante meses y luego resultó ser todo una farsa… Aún recordaba sus labios, sus besos su piel suave erizándose, su voz melodiosa hablándole con una sonrisa pintada, los versos salir de sus labios con suavidad, esas manos tocando el piano con destreza… ¡Aún lo amaba tanto! Y él lo había engañado…
Si, un día le vino su mejor amiga, confidente, esa persona que siempre estaba dispuesta a secar sus lágrimas y hacerle sonreír, aunque con eso tuviera que perder un día entero, esa amiga que tantas veces le había advertido, aconsejado y ayudado… Seki se lo contó todo…
“Lo siento… de verdad…” … “Tu no tienes la culpa… él… Yo lo amo tanto!” … “Mira, lleva tres putos meses con esa guarra mientras se supone que sale contigo, no me jodas!!!” … “yo…” … “Gomen… Pero entiéndeme, no quiero que te dañen” … “Gracias.”
Con su mano libre dio un golpe al suelo con el puño, estaba mojado ya que sus lágrimas lo habían mojado… Dios, no recordaba haber llorado así nunca... Con el dedo índice se mojó de sus propias lágrimas y fue dibujando un nombre en el suelo con el rastro de líquido… Se puso a gatas para mirar el nombre desde arriba y las lágrimas volvieron a caer más rápidamente haciendo que el nombre se distorsionase. Había perdido cinco quilos, no tenía hambre, no dormía, no salía ni si quiera de la habitación, no hablaba con nadie que no fueran sus padres y todo para no preocuparles.
Se levantó lentamente, parecía un zombi, sus brazos caían flácidos a cada costado de su cuerpo, fue caminando hasta el baño contiguo lentamente, y abrió la puerta con pesadez. Entró paso a paso cerrando débilmente tras de sí, se miró al espejo, la imagen no podía ser peor.
Sus mejillas estaban pronunciadas hacía adentro, si antes estaba muy delgado, ahora parecía anoréxico. Bajo cada ojo tenía una marca oscura, no era rimel, eran dos buenas ojeras, su pelo ya no brillaba estaba seco y revuelto. Con quedo suspiro, se fue sacando lentamente la ropa, se volvió a mirar al espejo. Se le notaban bastante las costillas, y los huesos de la cadera, además de la clavícula y los huesos de la espalda… Hizo un gesto de asco y se metió en la bañera llena de agua caliente, le vendría bien para relajarse y poder pensar tranquilamente. Eran las doce pasadas de la noche y sus padres estaban en el piso de abajo durmiendo, no les despertaría con el agua, así que no pasaba nada si se bañaba a esa hora.
Se puso el brazo sobre los ojos y se relajo metiendo el cuerpo en el agua hasta la altura del cuello. Amaba a Kaoru, por mucho que le hubiese hecho aun le quería con locura, odiaba a aquella… Como se atrevía a besarlo, acariciarlo, abrazarlo… Él era suyo! El corazón le dio un vuelco, volvía a sentir aquel dolor puntiagudo en el pecho… Las imágenes de momento felices llegaron a su mente, dios, que bien lo había pasado con él… Se secó la lágrima que había salido de su ojo, y de pronto se acordó de Seki.
Era una chica de pelo castaño liso que le pasaba un poco de media espalda. Sus ojos eran de un color marrón oscuro aunque bello. Era de carácter fuerte, no se dejaba intimidar por nada, ni se decaía… Ayudaba a sus amigos y sus amigos la ayudaban a ella, era alocada y le gusta la marcha reírse y esas cosas. Sonrió… Solo por Seki seguía vivo, la idea del suicidio pasó por su mente muchísimas veces, y muchísimas veces lo había probado, haciéndose cortes por los brazos para calmar su dolor psicológico. Aquella chica era su pilar, si ella sonreía al verle con eso le bastaba por que le debía lágrimas y se prometió a sí mismo cuidar de ella, si alguien le hacía daño ayudarla, dejarle su hombro para que llorase en él y llorar con ella.
Salió de la tina se puso el pijama, se acostó en su cama refrescado gracias al baño y sonrió sin darse cuenta… Iba a ser libre, haría lo que quisiese, olvidaría a Kaoru y esperaría a ver si alguien volvería a abrir su corazón, algo frío al fin y al cabo, pero esperaría. Y mientras podría vivir con una sonrisa, por que tenía gente que le necesitaba y le echaba de menos…
~* Fin *~
Miaru: lo seeeee PORKERIA PURA T__T, pero para mi es muy importante, hay cosas de mi vida plasmadas ahí, y.. no sé, me ha ido bien escribirlo, me he quedado descansada y todo eso. Seki… Es mi niña, Cintia… Me ha ayudado tantas veces, pffff si leyese esto le daría un yuyu XDDDD
Jaime: espero que te haya gustado, te lo dedico por que me ha parecido bonito… T___T.
Gaby: Ya viste la historia verdad? Y puse a Kaoru XDDDDDDD jajajajaja! Si te molestó que escribiese esto me dices eh? n______n También quería decirte que... mmmm... ^//////^ Me alegra mucho averte conocido, estoy feliz por eso, además puedo hablar contigo cada día y eso ya me hace más feliz aún... no sé si te pasará lo mismo, pero...T_T Te quiero mucho! Y0Y
***Por que todo el mundo necesita un acto cariñoso alguna vez en su vida… Seamos lo fríos que seamos necesitamos que nos quieran, por que la soledad es un vacío tan insoportable que ha veces te hace cometer las locuras más dolorosas para el corazón.***
Con cariño:
~ Miaru ~