En una casa de clase media, se encontraba un niño de 7 años, se llamaba Onodera Ritsu, quien sentado en una silla de madera, observaba a su madre escribir tan sutilmente en una hoja, mientras conversaba con el pequeño niño.
-Y bueno, pues entonces mañana hiremos de compras, necesito que termines tus deberes y tareas de la escuela, además que prestes más atención a las clases de tu profesor, dentro de media hora apróximadamente debe estar llegando.-
Ritsu pov:
Era otro día, y mi madre como siempre me mandaba a hacer mis deberes, y que tengo que prestar atención a las clases de mi profesor, no entiendo por que no puedo ir a una escuela normal o simplemente ir a jugar con otros niños de mi edad. Siempre estoy encerrado, y las pocas veces que le pregunto a mi madre de esto, ella solo dice
"Me siento sola cuando no estas junto a mi"
Realemente no la comprendo, hay veces que se va por una o dos semanas sin previo aviso a trabajar y no parece extrañarme en absoluto.
Cuando yo era más chico, mi padre me contaba historias fantásticas de vampiros! Realmente eran muy divertidas! Me fascinan los vampiros, aunque a la vez les temo, ya que ellos beben la sangre de la gente. Hubiera querido que esas historias nunca acabaran.
Pero, fué en una noche muy lluviosa, cuando tocaron varios hombres la puerta de mi casa, mi madre los recibió y ellos le avisaron sobre un accidente de transito, realmente aún no sé muy bien que sea un "accidente de tránsito" tan solo sé que fué por ello que mi papá murió.
Desde aquella vez mi madre se volvió muy sería y estricta conmigo, ya no es la misma, mis días son tan aburridos y me siento tan solo...pero, es en las noches donde me entretengo más, pués con una linterna y debajo de las sábanas de mi cama, leo el libro de historias fantásticas de vampiros de papá! son tan entretenidas! No tengo que preocuparme por si mamá se valla a dar cuenta, pues siempre esta en la sala de la casa, tomando uno de sus tantos vinos finos, siempre sola y con tristeza.
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Estaba jugando con dos carros cuando se me ocurrió hacerle una pregunta muy interezante a mamá, era demasiada mi curiosidad.
- Mamá, los vampiros en verdad existen?-
Ella al escuchar aquellas palabras paró de escribir y me miró seriamente.
-El mundo es demasiado grande como para que sean solo los humanos quienes lo gobiernen, los vampiros siempre han estado aquí Ritsu, gracias a ellos somos lo que ahora somos.-
Estaba tan sorprendido, pensé realmente que esas historias eran solo ficción, pero no...ellos realmente existen.
-Pero, si alguna vez te topas con uno, con mucho respeto cederás a todo lo que te pida, un vampiro es una autoridad de élite, todo lo que te pida lo debes de cumplir, y no decir ningún pero, entendido ritsu? Prométeme que si algún día llegas a conocer a uno no te resistirás, pues puede ser tu perdición...-
Mi madre se veía muy seria, no había forma de negarme.
-Lo prometo mamá..-
Al decir aquello ella se levanto de su asiento, camino hacia a mi y finalmente me abrazo, noté una sonriza en sus labios, no era una sonriza normal, ella sonreía con tristeza.
Fin de Ritsu pov.
Era otoño, y con prisa, un chico de 16 años corría por la calle con mucha desesperación!
-Es tarde! Es tarde! Es tarde!
Murmuraba para si mismo, era Onodera Ritsu, un lindo chico de cabello castaño, ojos verdes, de contextura delgada y de baja estatura. Sus facciones eran delicada y sutiles, por no decir que fuesen un tanto femeninas.
Cuando llego a la puerta de su casa, la abrió y sin hacer algún ruido entro lentamente.
-Donde haz estado Ritsu!-
Era su madre quien sentada en un sillón lo observaba con total seriedad y autoridad.
-Pues...estuve en la biblioteca, lo siento, olvidé que el profesor de historia vendría hoy a un examen, verdaderamente lo siento, se me pasó el tiempo leyendo.-
Onodera se veía muy agitado producto de haber corrido por 10 cuadras, en verdad no había la opción de tomar algún taxi, pues él vivía en una zonas muy cerrada.
-Tienes ya 16, y pronto 17! No puedo admitir más irresponsabilidad por tu parte, además, te eh dicho que no pares más de dos horas fuera de casa!-
Onodera al escuchar aquello la miró y dijo.
-Cual peligro? Vivimos en una zona donde hay robos! Y casi nunca algún accidente, la úica vez donde pude ver un caminón de bomberos por aquí cerca, fué cuando la señora piti, se quedó encerrada en su propia habitación, además ya pronto cumpliré 17, ya no soy un niño.-
Dijo con cierta molestia y enfado hacia su madre, ella lo miró sorprendida, su hijo jamás le había respondido antes sus regaños.
-Ritsu, te haz vuelto un malcriado y rebelde! Pero solo por ahora lo dejaré pasar, ya que tengo que decirte algo muy importante, vamos a mi oficina!-
Se dió media vuelta y subió las escaleras, tras de ella su hijo la seguía.
Al llegar entraron y ella se sentó en el asiento de su escritorio, y onodera se sentó frente al escritorio de ella. La mujer dió un gran suspiro y empezó a hablar.
-Tu abuelo, el papá de tu padre, trabajó muy cerca de un gobernante de gran poder, desde que lo salvó de un accidente, ambos se hicieron grandes amigos, a tal punto de compartir terrenos o encargar trabajos al otro. Tú sabes que los únicos que gobiernan aquí son los vampiros no Ritsu? Pues entonces es de más decirte que tu abuelo fué amigo de un vampiro.-
Onodera se quedó sorprendido, nunca pensó que algún familiar suyo habría hecho contacto con algún vampiro, pues estos casi nunca se los ve, ellos gobiernan y son pocas veces que alguno hace contacto con la gente común y corriente.
-Y bueno, al cabo de unos años, nació el primer nieto del gobernante,era tanta la amistad de tu abuelo con aquel hombre , que decidieron hacer un arreglo matrimonial, ambos firmaron en que el nieto o nieta de cada uno al llegar a una determinada edad, se casaran y vivieran juntos, aquel contrato que hicieron es imposible de anular debido a que solo se podría anular con la firma de alguno de ello dos, y como verás tu abuelo murió hace mucho, y aquel vampiro jamás planeo anular aquello, y firmo una segunda vez para que el nieto de tu abuelo,en otras palabras tú, fuese protegido y vigilado de cualquier peligro, educado con los mejores tutores, además que su firma hacia que ese contrato jamás fuese cancelado.-
La madre de onodera al terminar observó a su hijo, quien se quedó sin aliento, no podía creer aquella palabras que su madre había dicho, él? casarce? contrato?, no quería entenderlo, y a la vez no quería creerlo, que todo aquello fuese un sueño! una mentira! o simplemente una broma de su madre, pero él bien sabía que su madre jamás bromeaba, y en aquella situación ella no parecía estar jugando.
Pero, ahora todo encajaba, el por qué no podía ir a una escuela común y corriente, el por qué de estar siempre encerrado en casa, el por qué, tenía el mismo tutor todos los años, que por cierto, no a envejecido en absoluto, lo cual le daba señas de que fuese un vampiro. Su madre le estuvo mintiendo todo este tiempo, y el, no quería creer que fuese verdad.
-Dime, dime que la razón por la que me dices esto, no es porque mañana cumpliré 17, y tecnicamente seré un "adulto" para la sociedad, y planean casarme.-
Su madre respiro hondo y dijo.
-En dos días será su boda, mañana en la tarde te llevarán a su mansión, donde conocerás a el gobernante y su nieto,Takano, y al día siguiente te casarás, será una ceremonia pequeña, pues el gobernante Rett, tiene una agenda muy ajustada.-
Onodera se quedó paralizado ante las palabras de su madre, algo tan importante lo había ocultado tanto tiempo, no lo podía creer, su madre era una gran mentirosa, siempre lo a sido. Además, la persona con la que él se casaría, era un hombre! Esto era una locura.
-Por qué no me lo dijiste antes?! Por qué lo ocultaste!-
Su madre lo miró y dijo.
-Cuando eras un bebé aún, tu padre y yo conversamos de este tema, decidimos que no te lo diríamos hasta antes que cumplas los 17, no queríamos preocuparte.-
Onodera con enojo la miro y dijo.
-Y decirmelo dos días antes de la boda? Creen que estaré de acuerdo con todo esto? Ni lo sueñen, yo no planeo casarme! Y menos con un hombre!-
Onodera se lavantó de su asiento y se dirigió a la puerta.
-Ritsu!! A donde vas? Detente!-
Su madre con prisa fué hasta su hijo y lo abrazo.
-Es en vano que escapes, ellos si notan que te alejas de la casa, irán a buscarte, hay 10 guardaespaldas alrededor de la casa, si te vas, ellos te atraparan, y no te traerán a la casa, sino te llevarán directo a la mansión del gobernante!-
Onodera con sorpreza miró a su madre y dijo.
-Hay algo más que me escondas, madre?-
La mujer se separó de su hijo y dijo.
-Siempre busqué la forma de anular ese contrato, pues es injusto, no concideran tus sentimientos hacia la otra persona, pero, me fué imposible, disculpame Ritsu, lo lamento, parece que el gobernante ya quería ver el casamiento que decidió que apenas cumplas 17 ambos se casen, realmente perdóname Ritsu.-
Dicho aquellas palabras y salió de la oficina, dejando a Ritsu totalmente solo y lleno de preocupación, no quería casarce! Tenía solo 16 años! pronto 17 pero de todas formas!! Y lo peor, es que no sería con una mujer, sino con un hombre! Un hombre vampiro! Ritsu tenía miedo, se sentía solo en aquel momento, tantas mentiras lo rodeaban, tanta falsedad por parte de su madre, y ahora se venía un casamiento...Aquel momento no podía ser peor.