No recuerdo nada, nada de lo que he hecho en estos últimos días. Recuerdo que Mustang me secuestro, que abusó de mi y yo me resigné a todo, porque de todas maneras, Edward no vendría a ayudarme
“Quiero cortar todo lazo que me una a ti, ya no quiero ser tu hermano. ¡Deseo que estés muerto!”.-sus palabras resonaba en mi mente, una y otra vez. Por más que intentaba quitármelo de la cabeza no lo conseguía. ¡Lo amaba aún!,. Mi corazón seguía queriéndolo, aún después de lo que me dijo. Me intento convencer de que todo ha sido un mal sueño, Ed no sabe que lo amo, no sabe lo que siento, pero eso es solo un engaño.
No sé donde estoy, solo sé que Mustang me tiene secuestrado, la luz del sol entraba por la ventana e iluminaba la habitación. Una y otra vez me siento en un rincón de la habitación. Recordando… recordando a aquel que robó mi corazón y a aquel que me lo rompió en mil pedazos. Me dolía, en verdad me dolía que él me odiara tanto. ¡Quería morir! Definitivamente no podía soportar el suplicio de que Ed me odiará.
Llorar, era todo lo que podía hacer….
-¿Aún duermes?-me dijo la voz de Roy, mientras entraba a la habitación. Negué con la cabeza
-Anímate.-me dijo en susurro acercándose a mi.-No todo es tan malo.
-Ed me odia, odia a Alphonse Elric, no me quiere ver.-dije mientras escondía mi cabeza con mis brazos
-Pero ahora estas con Roy Mustang.-dijo besando mi cuello.-Te aseguro que lo que haremos ahora te va a hacer olvidar a Acero.-sus manos me despojaban de mis ropas.
Otra vez más…, y aún así no puedo olvidarte.
Mi conciencia se hizo pedazos, ya nada valía la pena, siquiera vivir. Mamá debió sufrir igual por papá, no podía soportar la distancia. Ahora que lo pienso… me parezco mucho a ella, no puedo vivir sin mi Ed, sin sentirme protegido por él, sin su cariño, sin su sonrisa… ¿También moriré como ella? Era lo más probable.
Y en algún lugar…
-Al, hermano.
-Al
-Al.
Tres chicos buscaban a Al, Ed, Heid y Winry.
-No entiendo porqué escapó.-dijo Winry en medio de la búsqueda.
-Ed, ¿tuviste algo que ver en esto?
-Yo.-empezó a decir muy dolido.-Yo le dije que deseaba que muriera.
Winry y Heid se espantaron,
-Pero ¿Por qué?-le pregunto Winry.
-Porque él me confesó su amor.
-No tenías que…-empezó a decir Heid, pero fue interrumpido por Ed.
-Si tenía.-dijo firmemente.- ¡Tenía que dejarle claro que lo nuestro era imposible!
-Entonces tú….
-Creo que también siento algo por él.-dijo entristecido.-No, yo siento algo por él.
-Entones…-dijeron Heid y Winry.
-No hay tiempo que perder, Al podría estar en peligro
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Ed...,
Ya no puedo ver la luz, porque tú ya no estas, quiero, quiero escapar de esto, no quiero nada, solo poder vivir.
-Parece que Ed ya no encontró.-dijo Roy mirando hacia la ventana.-Pero no te preocupes.-se acercó hacia mi.-Porque no voy a dejarte ir.
Yo ya no reaccionaba, estaba en estado de schok, apenas podía escuchar lo que Roy me decía
No recuerdo más, nada más.
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-¿Dónde está Al?-interrogó Ed a Roy una vez que lo encontró.
-¿Por qué crees que yo sé donde está?-contestó sínico
-Por que me lo dice el corazón.-le contestó Ed desafiante.
-¿Lo dices por lo que pasó con nosotros esa noche?
Ed se quedó en silencio, para luego después darle un puñetazo a Roy.
-¡No dejaré que le hagas a mi hermano lo mismo que me hiciste a mi!
-Está en aquel edificio.-les indicó Roy.
-¿En qué parte?
-¿Crees que te lo voy a decir?-dijo maléficamente.-Además, si no lo encuentras pronto, la bomba que instalé explotará.-se rió.- ¡Y será el fin de Alphonse Elric!
Ed corrió hacia el edificio abandonado, dejó a Heid a cargo de Mustang y entro al edificio junto con Winry.
-¡Al! ¡Al!-llamaban los chicos sin obtener respuesta alguna.
-Separémonos para buscarlo.-sugirió Winry
-Bien
Ed solo pensaba en el daño que le había provocado a Al, a pesar4 de lo mucho que él lo quería, no pudo evitar lastimar sus sentimientos
“Perdóname, Al”
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Ed
Estaba sentado en el piso, atado con una cuerda mirando; hacia el vació, con la cabeza agachada, en estado de schock.
-Al.-se escuchó...-creía que mi mente me estaba jugando una mala pasada, oía la voz de Ed, pero naturalmente, era solo una ilusión.
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Winry salió del edificio.
-Y Ed, ¿Dónde está?-pregunto Heid.
-Ed… Ed sigue adentro.
Les dije que no podrían hacer nada.-se rió Mustang.
-¡Dinos donde está Al!-le exigieron.
-Ed lo debe saber.-se rió maléficamente.
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-Al.-siguió gritando Ed
Ed entró a una habitación, y allí encontró a Al.
-Al.-lo abrazó fuertemente, pero se extraño al no obtener ninguna respuesta
-¿Qué te ocurre, Al?-le pregunto-¡Al!
-Ed.-pudo decir Al
-¡Que bueno que estás bien!
-Ed…-alcanzaba a decir Al aún en schok
-Al...
-¿Eres un sueño Ed?-en los ojos de Al comenzaron a brotar lágrimas
-Soy real
-Pero me dijiste que deseabas que muriera, que me odiabas.
-Era mentira.
-¿En serio?
-No te odio
-Perdóname.-se arrodillo Al.-Perdóname por decirte lo que siento
-Perdóname tú, Al.-empezó a decir Ed.-Por haberte tratado así.
Al se levanto, pero perdió el equilibrio.
-Maldición.- se quejó Ed.-El edificio va a estallar en cualquier momento y tú no puedes caminar.
-Lo siento.
-Yo te cargo hasta la salida.
Ed tomó en sus brazos hasta la salida.
-Pesas mucho, Al.-dijo Ed mientras lo cargaba.
-No lo creo. –se quejó Al.-Ed…
-¿Dime?
-Roy me dijo que te había hecho algo a ti también.
-Veras, Al…-empezó a decir.-cuando estaba en el ejercito, Roy me amenazó con decirle a todos lo que habíamos hecho con mamá.
Al se aferró al cuerpo de su hermano
-Además, cuando salí de la milicia, tuve que conseguir otro empleo, para que el juez te dejara a mi lado.
-Yo no sabía...
-Lamento haberte causado tantos problemas, porque debido al trabajo no pude estar a tu lado todo el tiempo, pero además….
-¿Además que?-pregunto Al.
-Además me servía para dejar de pensar en ti.
-Ed.
-Porque te amo
Al se sintió feliz, al extremo de pensar que era un sueño. Su amado finalmente le había correspondido, es más siempre trató de hacer lo mejor para él, por fin lo que tanto había deseado se había vuelto realidad
Los Elric lograron salir justo a tiempo antes de la explosión
-¿Pero que?- se extraño Roy viendo a los dos hermanos salir del edificio
-Es el poder del amor.-dijeron Heid y Winry a la vez
-Ustedes sabían que Ed…-se confundió Al
-Si, pero nos prohibió decírtelo.
Al se desmayo, tantas emociones en un mismo día
-Despierta, dormilón.-le susurró Ed al oído de su hermano
-Te amo Ed.-le dijo con un beso al despertar
-Yo no.
-¿Qué?
-Es mentira, te adoro, pero lo nuestro no puede ser
-A mi no me importa nada, más que tú.-empecé a decirle.-He sufrido mucho por esto y no dejaré de amarte por nada del mundo.
-¿Seguro?
-Si
2 meses después
El día estaba hermoso, y no era cualquiera. Heid y Winry al fin habían tomando la decisión de casarse, Ed y yo esperábamos desde hace tiempo a que se decidieran.
El ramo de flores de Winry, era muy codiciado por aquellas jóvenes solteras que esperaban con ansias recibirlo.
-Ed.-lo busqué por toda la fiesta.
-¡Aquí va el ramo!-escuche.
Sin saber cómo ni porque, de pronto encontré en mis brazos el ramo de flores. Winry me guiñó un ojo.
-Sonreí, y Ed estaba detrás de mí. Lo miré sonrojado, y él también se sonrojo
Algún día, nosotros también estaremos unidos para siempre.
FIN