Esta es la quinta vez en menos de una semana que Jong In sale corriendo al baño y esto, mas haya de extrañarle a su joven novia… le preocupa. Cubre su cuerpo desnudo con una de las sabanas y baja de la cama dirigiendo su andar justo al baño de la habitación que pertenece al joven de piel canela y labios sensuales-.
Ella le escucha tener arcadas, vomitarse y quejarse, en el acto la excitación se esfuma de su humanidad y termina emitiendo un suspiro antes de tocar la puerta con sus nudillos un par de veces.
— Amor… ¿Estas bien? — Pregunta Krystal y a cambio escucha el grifo abrirse, el agua correr y luego cerrando de nuevo. Segundos después el chico abre la puerta mirando a su novia con total desgano, el moreno se soba el estómago y ella se acerca a este tomándole del rostro, sin embargo, él en seguida la hizo soltarle para pasar de ella y buscar en alguna parte del piso su ropa interior— Hey… — La muchacha lo ve comenzar a vestirse y se acerca hasta donde está, busca sus prendas e inicia por colocarse las bragas y el sostén, un suspiro expresando su frustración sale de sus labios, ya demasiado era que su novio saliera corriendo a vomitar al baño a media sesión de sexo para que encima se diera el lujo de ignorarla como si ella fuera mínimamente responsable de los malestares que el de piel morena parecía tener. — ¿No dirás nada? — Ella insiste mientras sube sus ajustados jeans y a cambio su novio solo se sienta en la orilla de la cama terminando por dejarse caer hacia atrás hasta quedar recostado sobre la cama, ojos fijos en el blanco techo y aquel mareo tan persistente que pocas ganas tiene de responder.
— Lo siento…— Dice en un susurro llevando ambas manos a cubrir su rostro. —Estos días no me he sentido bien… — Susurra y se permite cerrar los ojos, la cosa era que, bueno ¿Y si tenía una enfermedad terminal y esos eran solo los primeros síntomas? Gimoteo aun con el rostro cubierto y solo suspiro. — Perdóname… sé que te deje a me….
— No importa, olvídalo. — Le interrumpió ella abruptamente, más el ceño fruncido indicaba que haberle dejado a medio acto sexual si importaba y mucho. La chica termino de vestirse y opto tomar su mochila y la coloco a sus espaldas mirando al otro.
Jong In elevo la mirada y suspiro. — ¿Te vas? Podemos… — Inicio a hablar—
— No, Kai, no podemos. — Más ella de nuevo le interrumpió. — Debo hacer deberes… y tú quizá debas ir al médico, hablemos pronto. —Aquellas palabras y lo siguiente que hizo fue salir de la habitación del moreno. Pasos se escucharon por el pasillo, las escaleras y tras ello vino un portazo que reflejaba la frustración y molestia de la muchacha y él solo suspiro a la par de cubrir su cuerpo con una de las sabanas, se recostó en posición fetal y dedico los siguientes minutos a tratar de adivinar que enfermedad mortal era la que le aquejaba y de paso le impedía tener un correcto desempeño sexual.
El timbre de su casa sonó y él decidió fingir que no escuchaba, cerró los ojos y se dispuso a dormir, si Krystal se había enfadado él también podía hacerlo ¿No?
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Byun BaekHyun nunca se ha considerado un chico especial o diferente al resto, sin embargo y muy a su pesar pues no es algo que disfrute en sobre manera, él destaca; sea por su indiscutible belleza física o por su talento natural en lo que a la música se refiere, además es dueño de una personalidad que agrada y cautiva a todo aquel que tiene la suerte de cruzarse en su camino, convirtiéndole así en uno de los chicos mas codiciados en toda la preparatoria.
Aunque todo ello de nada le ayuda cuando de estar enamorado se trata.
Park ChanYeol, tipo alto, delgado, y según Kyung Soo, extremadamente torpe e idiota había sido el afortunado (o no) de captar la atención de Byun en una tarde cualquiera de enero mientras él tomaba una malteada y ChanYeol atendía la mesa de aun lado. De ello ya habían pasado dos semanas y esta era la sexta vez que el chico de parida piel y baja estatura acudía a aquel sitio solo para tener el placer de cruzarse con el muchacho de orejas grandes y sonrisa alocada.
— Es tan… guapo. — Menciono Baek y su acompañante solo rodo los ojos dando una mordida a la hamburguesa con doble carne que había ordenado. BaekHyun suspira ante un torpe ChanYeol que a nada estuvo de derramar la soda sobre una preciosa chica.
— Debes estar de broma…Uno esperaría a que aspires a más que un torpe camarero, BaekHyun. — Le menciona Soo, tras sus palabras centro su atención en aquel chico que tanto miraba su amigo, solo negó, le fastidiaba un poco todo ello, después de todo había salido con Baek para pasar un buen rato y no para que este pasara la tarde babeando la mesa por un tipo, que a ultimas, no tenía una pizca de gracia. — Deberíamos irnos ya… Tengo que hacer algunas tareas. — Sugirió Kyung Soo y Baek asintió pese a que no se molestó en escuchar lo que el otro había dicho. El mayor de ambos opto por elevar su mano para poder llamar al mesero y así solicitar la cuenta.
ChanYeol se acercó a su mesa y BaekHyun le dedico la más boba de las sonrisas.
— ¿En qué puedo ayudarte? — Pregunta a Kyung Soo y sin embargo de reojo observa a un Baek que la mirada de encima no le quitaba.
— Solo la cuenta, por favor y…— Soo sonríe con malicia y es en ese momento que la atención de su amigo recae en él. Baek entrecierra los ojos y a cambio el otro amplia la sonrisa.
— ¿Y? — Alienta el camarero a continuar.
— Esto para llevar, por favor. - Señala Kyung Soo y acerca su plato con la hamburguesa a medio comer hacia donde está el mesero. Baek respira aliviado y niega con la cabeza ante su tonto pensamiento de que su amigo intentaría alguna idiotez con tal de verle avergonzado— Y…— Agrega el mayor y es entonces que su sonrisa se amplia y sus ojos van del alto chico a su ahora angustiado amigo quien solo niega con la cabeza una, dos… varias veces.
— ¿Y? — añade el chico de grandes orejas a la par de tomar el plato de Kyung Soo, es entonces que Baek baja la mirada y se concentra en sorber toda la malteada de su baso de una sola vez.
— Y… tú número de teléfono para mi amigo…— El mayor de los dos hablaba y a Baek en ese momento deseo la tierra lo tragara y de favor le escupiera, de preferencia, en México. Sus mejillas se tornaron carmín y la mirada centro en la mesa color amarillo en la que hasta ahora habían permanecido, debajo de la misma jugaba con evidente nerviosismo con sus dedos ¿ChanYeol?, bueno, el parecía no entender a que se refería el chico. — Es que le gustas… Si acaso él te parece bonito le gustaría salir contigo un día, es tímido para decirlo y la verdad yo ya me cansé de venir a comer aquí cada vez solo porque te quiere ver, así que, por favor… ¿Le darías tu numero?
Kyung Soo termino de hablar y ChanYeol solo asintió antes de retirarse de la mesa a toda velocidad, Baek por su parte lo vio irse y no le culpo, en realidad Kyung Soo muchas veces le daba miedo hasta a él.
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El timbre de la casa de los Kim sonó por sexta vez cuando Jong In, más por fastidio que otra cosa, bajo a atender a su llamado, se colocó una camisa cualquiera; en sandalias y bóxer bajo las escaleras y tras pocos pasos más abrió la puerta principal de la casa que pertenecía a sus padres.
Y a quien tenía frente a él definitivamente no lo espero.
— Parece que has visto un muerto. — Le bromeo un sonriente SeHun, que al ver que no era invitado a pasar tomo iniciativa y se coló dentro de la casa del moreno pasando a un costado de este, por su parte Kai solo frunció el ceño y decidió no decir nada al respecto optando por cerrar la puerta detrás de él. Se apoyó de espaldas a la misma y solo miro fijamente a SeHun que con la vista exploraba la casa entera como si esa fuera la primera vez que estuviera ahí, cosa que no, si Kai no mal recordaba, esa, era la tercera vez que le visitaba.
— ¿Para qué has venido? — Pregunta el moreno y SeHun solo le mira dándose incluso el lujo de escanearlo con la mirada, se acerca a él y sonríe ligeramente de lado.
— Vine a dejarte unas notas ¿Tarde ocupada con tu chica? — pregunta y eleva la ceja a la par de retirar la mochila que traía en su espalda comenzando en seguida a buscar algo dentro de ella, el moreno a cambio le mira con algo de desconfianza.
— ¿A qué te refieres? — pregunta él y SeHun sonríe mientras saca un par de libretas de su mochila. —
— Me he encontrado con ella a unas casas de aquí, dado que estas a medio vestir pues… no es difícil concluir las coas. — Responde y sin agregar más fue a sentarse al sofá, Kai le siguió mientras mordía su labio inferior. — Aunque. — Agrego y esta vez miro al otro con una sonrisa burlona. — Con la cara que llevaba da a pensar que no quedo del todo complacida (?). — SeHun sonríe dejando la libreta abierta, al notar a Kai sentado junto a él se la ofrece. Kai entre cerro los ojos y tomo de mala gana el cuaderno que le era ofrecido dedicando su atención a repasar los apuntes del chico más alto, SeHun por su lado mantuvo su vista en quien, admitía, era un niño muy atractivo. —Disculpa la mala letra…— Los ojos del alto en las piernas de Kai y este frunció el ceño, aunque quizá era porque, en efecto, la letra de SeHun era horrible.
— No recuerdo haber recibido quejas de tu parte por mi desempeño en la cama. — Suelta el de apellido Kim, ojos totalmente centrados en el contenido de la librera y SeHun no pudo evitar mirarlo con algo de sorpresa ante tales palabras, al final solo sonrió y negó con la cabeza apoyando su espalda en el respaldo del sofá.
— En efecto, no tengo quejas, escucharte gemir para mi pidiendo por más es un deleite que encantado repetiría. — Señalo y echo la cabeza hacia atrás apoyándola en el respaldo, Kai solo elevo la mirada no muy segura del que debería decir, extraño era de por si sentirse tan cómodo junto a alguien que, en sí, solo le molestaba con sus comentarios sexuales, aun recordaba el último beso que le había robado muy en contra de su voluntad, mismo que, admitía no había estado tan mal — Pero ya en serio… ¿De verdad tanto te desagradó? — Pregunto el más alto y JongIn de inmediato se tensó en su lugar, SeHun solo se incorporó parta poder ser capaz de observar de mejor manera al moreno.
— ¿Qu…que...? No es que… — Kai sintió los nervios crecer dentro de él, en su vientre bajo nació un pequeño cosquilleo y termino por simplemente bajar la mirada. ¿Hace cuánto hacía de aquello? Tres semanas. Tres semanas habían pasado de aquel encuentro sexual y las cosas entre ellos de menos se habían vuelto menos ásperas, aunque quizá si algo había mal en aquella “relación” era que Jong In poco dispuesto estaba a llevarse bien con quien pasaba los días recordándole que se había dejado follar por un completo extraño aun estando en una relación, él, reconocía había hecho mal y bastante tenía con la culpa como para que ver a diario a SeHun en compañía de sus mordaces comentarios que le hicieran sentir aun peor, en fin, de menos hoy estaban logrando sostener una charla cordial. — No fue malo… solo que ya sabes… Tengo novia y preferiría que no…
—Tranquilo, Jong In, que no sabrá nada en absoluto… aun así, respóndeme algo.
— ¿Qué? — El moreno miro con curiosidad al otro chico.
— De no tener novia… ¿Hubieras vuelto a estar conmigo? Quizá incluso llegar … ¿A algo más? — pregunto un seguro SeHun, esta vez ya se hallaba hojeando el segundo cuaderno.
Kai tuvo que morder su labio inferir y tomarse varios segundos antes de respirar profundo y decidir responder. — Si… —Fue su sencilla respuesta, aquello salió apenas en un audible susurro y sin embargo suficiente fue para que SeHun sonriera. No era lo que esperaba, pero estaba satisfecho. — Pero tengo novia, así que agradeceré guardes el secreto y no menciones más. — Agrego el chico de piel canela, tomo un cojín que yacía en el sofá y se abrazó a este sosteniéndolo contra su abdomen, quizá y así el molesto cosquilleo que insistía en su interior decidiera al fin marcharse y dejar de poner en evidencia que la presencia del joven de blanca piel y finos labios le ponía un tanto… nervioso.
SeHun se echó a reír y simplemente negó con la cabeza. Tras ello se levantó de su sitio y camino los poco pasos que hacían para estar de pie frente al chico de piel morena, se inclinó hacia enfrente apoyando su diestra en respaldo del sillón, sonrisa arrogante fue la que regalo al moreno, quien solo se echó ligeramente hacia atrás en busca de poner distancia entre ambos.
— Sabia que te había gustado. — Expreso Hun y el moreno en automático sintió el calor subir por su cuerpo hasta acumularse en sus mejillas tornando estas de un ligero carmín, sin embargo, solo desvió la mirada y negó un par de veces dejando escapar una irónica sonrisa, la diestra llevo al pecho del alto e intento de modo gentil apartarlo.
— No estuvo mal, se hacerlo mejor pero bueno…— SeHun no se alejó, a cambio sonrió con autosuficiencia y retiro la mano que el moreno había colocado en su pecho, las sostuvo entre la propia y se aventuró a recortar distancias entre ambos rostros. Jong In por unos segundos se olvidó de respirar y SeHun deseo el privilegio de besar aquellos bonitos labios.
— No creas que estas en posición de retarme, Kai. — SeHun le había llamado por aquel apodo con el que le conocían y a él menos no le podía importar, sus ojos fueron a dar a los labios del joven frente a él y de modo inconsciente (o consciente) se inclinó hacia enfrente recortando aún más la distancia entre sus bocas que como imán se iban atrayendo una a la otra.
Y, de un momento a otro, SeHun se hallaba prácticamente entre las piernas del moreno y casi totalmente sobre este, Kai aun abrazaba su cojín y yacía prácticamente recostado en el sofá, el silencio se hizo presente y solo bastaron un par de segundos antes de que en un mudo acuerdo ambos cerraran sus ojos y se dispusieran a calamar aquellas ansias de unir sus labios en un deseado beso.
— ¿Qué carajo?
Y lo hubieran hecho si aquella femenina vos no les hubiera interrumpido, Jong In al reconocerla entro en pánico y en el acto empujo con ambas manos al otro chico, SeHun poco pudo hacer ante ello y termino cayendo de espaldas al suelo llevándose un golpe por más doloroso, el moreno acto seguido se incorporó hasta estar de pie y miro a aquella persona con pánico total pues la mirada que esta les dirigía dejaba en claro que estaba mal interpretando las cosas, bueno, las estaba a bien interpretando más ese no era el tema ¿A qué hora había entrado? Maldito SeHun que le había distraído a tal grado de ignorar lo que pasaba a su alrededor.
— No es lo que… parece. — se defendió el moreno y negó con la cabeza, de pronto sintió las náuseas venir a él en el peor de los momentos. Respiro profundo, pero de poco sirvió pues aquellas ganas de vomitar ya eran difíciles de contener, después de todo, el jamás había sido la persona más serena o relajada en el mundo… y el haber sido descubierto en aquel momento no le ayudaba en nada, más termino por vaciar su estómago sobre la costosa alfombra de sus padres y de paso un mal afortunado SeHun, la mujer presente solo los observo con la sorpresa y el debido asco que la escena debía provocar y SeHun, bueno, él solo pensaba en la mala suerte que Kim Jong In le acarreaba y que quizá haber ido a follar a casa de BaekHyun hubiera sido una mejor idea.
Continuara. (?)