Era un hermoso día de verano cuando lo conocí. Todo era hermoso si se trataba de él. Incluso el más doloroso de los escenarios brillaba si se trataba de Do Kyungsoo.
Do Kyungsoo.
Su nombre suena tan bien saliendo de mis labios.
Ese día yo estaba llorando, humillado, triste, abandonado.
Mis padres habían descubierto que era gay.
Y de una manera desafortunada para mí ya que me encontraba besándome con mi ex-novio -a quién ni quería tanto- cuando ellos me vieron y ese mismo día descubrí que eran homofóbicos.
Fue horrible. Hubieron gritos, golpes hacia mi cuerpo, insultos y finalmente una expulsión desde mi propia casa.
"Hijos de puta"
"Malditos, me han traicionado"
La desesperación me dominaba ¿Qué iba a hacer ahora? No tenía nada, estaba solo.
Y de pronto la muerte no pareció tan mala idea.
Me levanté de las escaleras decidido a tirarme a las vías del tren, dispuesto a dejar de vivir, a dejarme llevar por aquella única solución.
Algunos podrán decir que fui un cobarde pero sólo los que estén en la misma situación podrán llamarme de esa manera. En ese momento yo estaba desesperado, lo había perdido todo sólo por sentirme atraído hacia alguien de mi mismo sexo.
Yo necesitaba una luz, un ángel que quitara de mi aquellas ganas de acabar con todo.
Y me encontró.
No pude ni dar un paso cuando sentí que tocaban mi hombro suavemente. Volteé y vi a la persona más hermosa que mis ojos han tenido el placer y pecado de mirar. Era demasiado para cualquiera. Aquel ángel me tendía unos pañuelos desechables que tomé por inercia.
-Espero que tu día mejore- Me dijo con su voz angelical.
Yo sonreí, a pesar de estar humillado y roto, con las lágrimas bajando por mis mejillas.
Probablemente fue la sonrisa más triste.
Y lo dejé ir, mirando como aquel ángel se alejaba de mí. Miré los pañuelos por un momento, como dudando que hacer con ellos. Unos segundos después me decidí por limpiarme el rostro con uno de ellos.
Sólo uno.
Fui a la casa de Taemin, mi amigo del alma, mi otra mitad, ya que sólo ahí sería bienvenido. Por suerte Taemin estaba en casa junto a su familia quienes me recibieron preocupados por mi aspecto. Les expliqué la situación sin llorar, de alguna manera mis pensamientos llegaban siempre al mismo lugar: el ángel del metro.
Me quedé por unos días con Taemin y entre esos días fue que le conté a mi amigo sobre aquel ángel. Observando los pañuelos que me había dado, me di cuenta que había un nombre en ellos. Rápidamente fui al computador de mi amigo y tecleé aquel nombre en el buscador. Fue largo, pero logré dar con él.
Do Kyungsoo.
Entonces me di cuenta de que mi corazón se aceleró, que mis mejillas se sonrojaron, mi respiración se agitó y de pronto estaba sonriendo.
Admiré la foto que me mostraba la pantalla por unos minutos hasta que fui interrumpido por Taemin quién me preguntaba por él.
-Se llama Do Kyungsoo, y me he enamorado de él- Dije sin dejar de mirar la pantalla.
-¿Desde cuando lo conoces?-
-No lo conozco, sólo sé su nombre- Dije sincero. Miré a mi amigo -Cuando me echaron de la casa él me dio unos pañuelos en el metro y se fue, pero por alguna razón no dejo de pensar en él-
Taemin sonrió -Al parecer a alguien le pegó duro el amor-
Unos días después me mudé definitivamente con mi tía quién después de haberse enterado de la situación fue a las casa de mis padres y se llevó todas mis pertenencias. Ella vivía sola en un departamento y trabajaba la mayor parte del día, por lo que pasaba mucho tiempo solo bailando o frente al computador y suspirando en lo que restó de vacaciones de verano.
Antes amaba bailar tanto como necesitaba respirar, pero encontré a Do Kyungsoo, quién me parece más importante que el aire.
Me pasaba mucho tiempo frente al computador investigando sobre él, logré dar con su instituto y le pedí a mi tía que me cambiara de instituto diciendo que un cambio de aires era lo mejor para mí en esos momento. Ella aceptó y le rogué porque me cambiara al mismo instituto en el que iba Do Kyungsoo.
Lo logré finalmente.
A pesar de que mis padres lo repudiaran, yo conseguiría el corazón de Do Kyungsoo.
El verano jamás se sintió tan largo, y lo único que quería era entrar a clases, a volver a encontrarme con Do Kyungsoo.
-----------------------------------------------------------
Llegó el día.
Yo estaba demasiado nervioso, sólo quería volver a verlo. ¿Qué me has hecho, Do Kyungsoo? No puedo dejar de pensar en él.
Entré al salón que me correspondía con otros dos estudiantes e inmediatamente pude reconocerlo. Él miraba por la ventana, con aspecto aburrido y sin embargo se veía hermoso. Sonreí enormemente y me concentré en volver al mundo real en donde el profesor le pedía al estudiante a mi lado que se presentara.
Me di cuenta que a Do Kyungsoo no le importaba escuchar aquello y me pregunté el porqué preocupado de que no me escuchara hablar, o que no me reconociera. ¿Me recordaría él, como yo lo recuerdo a él?
Me tocó presentarme y ni siquiera con ello él volteó a verme, en cambio sacó un cuaderno y comenzó a dibujar.
-Mi nombre es Kim JongIn, llámenme Kai- Dije mirándolo a pesar de que el no me devolvía la mirada -Espero que nos llevemos bien-
-Joven Kim ¿Por qué eligió este instituto?- Me preguntó el profesor. Yo lo miré por un momento antes de volver a mirar a Do Kyungsoo.
-En realidad estaba buscando a alguien, y ya lo encontré- Dije sonriendo.
-Puede tomar asiento donde guste- me dijo el profesor.
Di gracias al cielo de que mi cuerpo no haya corrido hacia al lado de Do Kyungsoo. Me senté a mi lado y lo contemplé por unos segundos sin poder creer que por fin esté a mi lado, aquel ángel del metro ahora era mi compañero de clases y pronto sería mío.
No me importaba el cómo, él sería mío así como yo era completamente suyo.
-Hola- Me atreví a decir después de unos segundos con una sonrisa que no pude contener.
Él me miró y dios mío, qué mirada, qué ojos tan hermosos, que perfección hecha hombre.
Él sonrió levemente -Hola- Y juro que casi muero con su hermosa voz -¿Eres nuevo?-
Definitivamente él no estaba interesado en los nuevos estudiantes como la gente normal, y eso hiso que me gustara incluso más. -Me acabo de presentar como el nuevo estudiante del salón-
-Oh, lo siento. Es que cuando me meto en mi mundo nadie me saca de él- Dijo volviendo a su dibujo.
-Eres muy lindo... - Le dije esperando a que él dijera su nombre a pesar de que yo ya lo sabía, pero él se quedó en silencio. Al parecer no me había oído -Ahora es cuando se supone que dices tu nombre-
-¿Ah?- Dijo levantando la mirada de su dibujo -Soy Do Kyungsoo-
-Kim JongIn- Me presenté al chico que me había robado el corazón. Él asintió y volvió a su dibujo -Un placer conocerte, mi ángel- Murmuré siendo opacado por el sonido de la campana de salida de clases. El guardó su cuaderno de dibujos y se levantó dispuesto a salir por lo que lo detuve -Espera-
Me miró confundido -¿Qué?-
"Eres la persona de la que estoy enamorado"
-¿Me puedes enseñar el instituto?-
Él negó, para mi tristeza -Será mejor que se lo pidas a alguien más-
-¿Por qué?- Pregunté algo preocupado.
¿Acaso me odiaba? ¿Hice algo mal? No podía estar pasándome ésto.
-Bueno, soy del tipo de estudiantes que en la pirámide social estudiantil estoy en el grupo de los perdedores, así que si te juntas conmigo automáticamente te volverás en uno, ya sabes- Dijo como si nada -Mira, ahí están Oh Sehun y Park Chanyeol, ellos son populares, pídeselo a ellos, no me lo agradezcas-
Y se marchó como si sus pies no tocaran el suelo.
Lo miré hasta que se perdió entre los pasillos y no tuve que ir hacia Oh Sehun y Park Chanyeol porque ellos se acercaron primero. Los miré con algo de curiosidad, preguntándome qué querían, ellos se miraron entre ellos antes de que Sehun hablara.
-Eres Kim JongIn, ¿cierto?-
-Prefiero que me digan Kai- Les dije.
-Soy Oh Sehun y él es Park Chanyeol- Presentó Sehun -Seamos amigos, te conviene, las chicas están locas por nosotros-
-Soy gay- Dije cruzando los brazos sobre mi pecho. Ellos se miraron por un momento antes de volver a posar la mirada sobre mí.
-¿Estás seguro de ser gay?- Preguntó Chanyeol.
Yo asentí -Me echaron de la casa por ello, estoy más que seguro de que soy gay-
Ellos se quedaron boquiabiertos, volvieron a mirarse y asintieron al mismo tiempo. ¿Acaso se leían la mente? Al parecer eran muy unidos.
-A uno de nuestros amigos lo golpearon hasta la muerte por ser gay- Dijo Chanyeol -Sabemos que debe ser difícil para ti. Desde ahora te ayudaremos en lo que necesites-
-¿En serio?- Pregunté a lo que ellos asintieron -Entonces necesito que me digan todo lo que saben sobre Do Kyungsoo-
Ellos fruncieron el ceño -¿Quién es él?-
-El que se sienta a mi lado, de ojos hermosos, sonrisa perfecta, piel blanca, con talento para dibujar- Dije -Ustedes llevan más tiempo aquí que yo, deberían conocerlo-
Ambos negaron.
-¿Te gusta ese tal Do Kyungsoo?- Preguntó Sehun.
Yo negué -Estoy completamente enamorado de él-
Ellos sonrieron. -Te ayudaremos amigo- Dijo Chanyeol.
Do Kyungsoo no parecía muy interesado en mí, en cambio, habían varias chicas que me miraban discretamente desde la lejanía. No me interesaban, no las necesitaba como necesitaba a mi Do Kyungsoo, era horrible sentarme a su lado y no poder acariciar su piel, besar esos labios, amarlo como me gustaría hacerlo.
Desde lo lejos, pude ver como abrazaba a un chico haciendo que mi cuerpo se tensara ¿Quién era él? ¿Por qué lo abrazaba? Él es mío, mi chico, aléjate de él. Quise levantarme pero una mano sobre mi hombro hiso que apartara mi mirada de aquella escena.
-¿El chico de ahí es Do Kyungsoo?- Preguntó Sehun. Yo sentí. -Tranquilo, son sólo amigos- Dijo Sehun -Me parece haberlos visto juntos por los pasillos algunas veces.-
Me calmé con esas palabras, quedándome con mis pensamientos.
-Realmente estás enamorado- Dijo Chanyeol.
Sonreí ante esas palabras.
----------------------------------------------------------------------
Pasaron dos semanas en las que no quise acercarme demasiado deprisa a Do Kyungsoo, quién parecía vivir en su propio mundo. Primero por miedo a que se asustara, ya que si no me controlaba podía mandar todo a la mierda. Segundo porque mis padres fueron a la casa de mi tía con un cura, me llevaron a la iglesia más cercana e intentaron exorcizarme para sacar el supuesto monstruo que habitaba en mí.
Mis padres no estaban presentes en la habitación, pero el cura y otros dos ayudantes sí. Primero me amarraron a una cama, me abrieron la camisa y dibujaron unas cosas raras en mi pecho con agua bendita. Más tarde mataron a un conejo sobre mi cuerpo, bañándome con su sangre. Luego el cura comenzó a decir unas palabras que leía de una biblia a la vez que sus ayudantes comenzaban a hacer cortes en mis brazos.
"Me arrepiento de mis pecados"
Eso fue lo que escribieron en mis brazos con aquellos cortes.
También mi quemaron los pies con aceite caliente, me quebraron los dedos de las manos y finalmente dieron vuelta mi cuerpo y comenzaron a jalar mis extremidades.
Dolía más que el infierno, no podía moverme, mi garganta parecía estar a punto de sangrar de lo tanto que dolía. Estaba asustado, como un niño perdido. Necesitaba ese cariño que sólo una madre puede dar pero fue mi propia madre la que me envió a ese lugar.
Pero incluso en ese lugar, sólo pensaba en Do Kyungsoo.
-¡Sólo nos detendremos cuando el demonio dentro de ti salga!- Gritó el cura.
Y yo lloraba de dolor, gritaba de dolor, sólo podía sentir dolor.
Sin embargo, mi corazón estaba en paz, porque sin importar lo que doliera, mi amor por Do Kyungsoo era eterno y más fuerte que todos los demonios juntos.
Me desmayé y para cuando desperté estaba en el hospital.
Mi tía estaba a mi lado mirándome con tristeza.
-Kai, has sufrido mucho- Dijo acariciando mi rostro con ternura -Estoy orgullosa de ti, espero que tu amor pronto sea correspondido-
Taemin, Sehun y Chanyeol me vinieron a visitar al día siguiente con flores y regalos. Sehun y Chanyeol e dijeron que mi querido Kyungsoo estaba bien. Mierda, sólo quería verlo.
El doctor me contó que era inútil poner una demanda sobre la iglesia, ya que la iglesia tenía sus trucos para salirse con la suya. Así que lo único que pedí fue que mí tía fuese mi tutora hasta cumplir los dieciocho años.
Estuve casi un mes en el hospital, gracias a Sehun y Chanyeol no me atrasé con los estudios, por lo que les agradecí sinceramente con mi amistad y lealtad.
Cuando volví al instituto y lo vi tuve que irme rápidamente a los baños seguido de mis amigos. Lloré. Lloré recordando el miedo que tuve, el dolor que sufrí, aquel horrible sentimiento de traición y finalmente aquella emoción al saber que todo valió la pena porque él estaba ahí, perfecto como siempre, delicado y casi pidiendo a gritos que lo amaran como yo lo hago.
Mis amigos estuvieron consolándome hasta que me tranquilicé y pude entrar a clases. Me senté a su lado, me recosté sobre la mesa y lo miré sonriendo. Porque si no fuera por él, habría muerto en dos ocasiones. Él era mi amado y también mi salvador.
Aquel fin de semana lo encontré junto a sus amigos buscando algo en el suelo. Me senté a lo lejos mirándolo hasta darme cuenta que buscaban un trébol de cuatro hojas. Quizás mi amado Do Kyungsoo quería pedir un deseo, y yo era capaz de hacer todo por mi Do Kyungsoo. Por eso, cuando se marcharon me pasé horas buscando un trébol de cuatro hojas, hasta que encontré uno. Quise pedir que Do Kyungsoo fuera mío, pero no, lo guardé y al día siguiente llegué temprano para dejarle el trébol en su puesto. Estuve conversando con Sehun y Chanyeol mientras esperaba a que llegara.
Cuando él llegó no pude evitar seguirlo con la mirada y sonreír cuando cerró los ojos y pidió un deseo. Me acerqué a él ignorando la conversación de mis amigos logrando escuchar un "Qué tonto" saliendo de los labios de Do Kyungsoo.
-¿Qué es lo tonto?- Le pregunté sentándome a su lado, aprovechando que era mi lugar.
Que hermoso sonaba eso, que mi lugar era a su lado.
-No, nada...- Dijo -Oye... ¿Por casualidad conoces a un tal Kai?- Me preguntó.
Y quise morir de felicidad. ¡Él estaba preguntando por mí!
-Claro que lo conozco, soy yo- Dije sonriendo, demasiado feliz de que por fin estuviera en la mente de mi amado.
-Oh, ya entiendo. Kai para los amigos y Kim JongIn para los demás- Dijo asintiendo.
¿Cómo decirle que me había prometido que sólo a la persona que amara la dejaría llamarme por mi nombre?
-No, de hecho... -Comencé a decir pero el profesor entró interrumpiendo mi explicación ya que se notaba que estaba bastante molesto.
Odié al profesor por un momento, pero me dije que tenía toda la vida para amar a Do Kyungsoo, conquistarlo y hacer que me amara de vuelta.
Porque él era un rayo de luz que bajó a través de la oscuridad.