(Pov Shoun)
Scot parecía una fiera al parecer el encuentro con el primer ministro y con su madre no le dejo del todo bien, todo el tiempo que estuvimos juntos no dejo de acariciarme, besarme y embestirme, parecía un animal encelo, pero eso no me molesta en lo más mínimo si como recompensa obtengo a un Scot relajado y dormido junto a mi, amo a este cavernícola.
Acaricio su cabello y beso su frente con dulzura sintiendo como se mueve y noto como sus ojos se abren dejandome ver ese verde que tanto amo, fijo mi mirada en la suya y tardamos un minuto en acercarnos y besarnos.
-Lamemto el incidente de la cocina.- bajo mi mirada algo apemado.
-Descuida, ese pervertido no podra hacer nada.- le halo suavemente el cabello y de sus labios sale un quejido que sono idéntico a un gemido femenino.
-Eres una niña, no te hale con fuerza... Y el primer ministro no me preocupa, me preocupa que le diga a alguien más lo que vio.-
-Preocupemonos por eso luego, ahora solo quiero demostrarte quién es la niña aquí. - noto la picardía en sus palabras y sonrió picaramente, sus labios se posan sobre los míos y me hala por las piernas colocandolas alrededor de su cintura, coloco mis manos en su cuello mientras el se levanta y me coloca la espalda contra la pared. -Creo que ahora gemiras como una niña.- ruedo mis ojos y sonrió.
-Lo dudo.- en ese momento desaparezco dejandole en la habitación, aparezco en mi habitación y me entro al baño empezando a ducharme.
Al salir de mi habitación ya con una nueva vestimenta paso por un pasillo en el cuál se encuentra la habitación de Clara, escucho a alguien rogarle que pare a otra persona. No se si es Clara a quien le dicen que pare o si es uno de los invitados, me empieza a preocupar el hecho de que alguien puede estar siendo violado justo como me sucedio aquella vez, abro la puerta encontrandome con Clara quien se devora el pene de Marshall como si de una paleta se tratase y veo a Marshall intentando quitarsela de encima sin lograr nada.
-¿Que esta pasando aquí? Clara explicamelo ahora. - noto el temor en la mirada de Marshall, pero no es el unico sentimiento que se refleja en esa mirada, se nota odio, desesperación y unas enormes ganas de matar.
-Nada que te importe Shoun, ahora sal de mi habitación y dejame hacer lo que estaba apuntó de hacer.-
-Po...por favor Shoun no le hagas caso, ayudame no quiero serle infiel a mi Gumball.- al escuchar eso es como si en mi se abriera una puerta ya cerrada, empiezo a recordar cuanto le había rogado a esos guardias que no me violarán, lo unico que yo quería era estar sin imperfecciones para mi Scot, no estar sucio como ahora, no puedo dejar que alguien más se sienta sucio por culpa de alguien sin juicio.
-Clara, Dejalo ya. Sino lo dejas...-
-¿Que haras?- me interrumpe con un tono de desinterés.
-Sabes a la perfección que tienes prohibido el acostarte con alguien que no sea tu prometido... ¿Quieres que Scarlat sepa que estas rompiendo sus reglas?- me mira fulminantemente y sale de la habitación con una cara odió, rabia y frustración.
-¿Estas bien Marshall?- me acerco a el y le miro fijamente a los ojos.
-¿Interrumpo algo?- escucho la fría voz de Scot y me doy vuelta a mirarlo, noto que en su mirada se distinguen unos enormes deseos de golpear a alguien, me acerco a el, pero se aleja y me mira con sus ojos ahora cristalizados por unas lágrimas que se atreven a correr por sus mejillas.
-Amor, no es lo que parece. Te juro que no he hecho nada aquí. -
-No quiero que me expliques nada, ya he visto todo, con razón me dejaste solo. Clara tenía razón te estuviste divirtiendo.- se da la vuelta y camina alejandose de mí, en ese momento mi corazón es destrozado y pisoteado por la mirada de Scot, es como si una parte de mi se fuera con el.
-Lamento haber causado esto.-
-Descuida no es tu culpa, la culpable aquí es Clara y me las va a pagar. Ahora dime ¿que fue lo que te dio a beber?-
-¿Como sabes que me dio a beber algo?-
-Creeme Clara no es la unica que a usado estas estrategias, yo la use con Scot cuando vino a vivir aquí, por eso al verte todavía tirado en la cama se que no puedes mover las piernas.-
-Tengo unas ganas enormes de tener sexo... Necesito a Gumball.-
-O una siesta, ambas cosas ayudan así que si quieres te puedo llevar a mi habitación a dormir. -
-No quiero causarte más problemas.- le sonrió con generosidad.
-Descuida, resolvere todo esto y sera como si nada hubiese pasado, esta es la primera vez que Scot se pone celoso al extremo y creeme quizás te quiera golpear así que hasta que yo resuelva esto no te le acerques mucho, ni le hables del tema.-
-Claro su majestad, lo que diga, no quiero que después de esto Gumball también se enoje.- lo veo y de la nada ambos empezamos a reír.