Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Dark shadows por DarkGothic

[Reviews - 12]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola, espero les esté gustando el nuevo fic, aquí dejo el siguiente capi, y gracias a quienes leen y a quienes comentan, me hacen muy feliz =)

Ya habían pasado algunas semanas desde que había escapado de aquella casa y se encontraba en la búsqueda de ese sujeto. En ese periodo de tiempo, algunos rastros de sus memorias habían aparecido en un orden aleatorio, la mayoría no lograda darle un sentido, pero poco a poco comenzó a recordar algunas cosas más, pocas pero significativas.

Durante el trayecto había tenido que recurrir al robo para poder sobrevivir, incluso tuvo que robar algo de ropa. Estaba ahora cubierto con una capa con capucha y había llegado a un nuevo lugar, esperando encontrar a su objetivo. Por fortuna no tuvo que esperar mucho, tal parecía que al fin había dado con el lugar correcto.

A unos metros adelante, entre la gente que caminaba despreocupada, se encontraba de pie y conversando con alguien, aquel chico de cabello color chicle. Estaba ansioso por acercarse, pero bien sabía que eso sería una estupidez y más sabiendo que en el pasado fueron feroces enemigos. Lo mejor y más seguro para él, sería seguirlo de cerca hasta encontrarlo solo para poder hablar con él en privado, claro, luego de asegurarse de que no le atacase.

Natsu terminó su conversación y procedió a caminar a su próximo destino. Luego de unos pasos el pelirosa comenzó a darse cuenta de que lo seguían, así que caminó más aprisa hasta llegar a un callejón donde esperó a que su perseguidor le diera alcance. Una vez que notó su llegada, de golpe se dio la vuelta para encararlo.

-¿Quién eres y por qué me estás siguiendo?

Zancrow se había detenido en cuanto Natsu se giró a verlo y luego de su pregunta, lentamente se retiró la capucha que cubría su rostro. Al reconocerlo, Natsu inmediatamente procedió a atacarle.

-¿Tú? ¿Cómo demonios llegaste aquí?

Al ver las intenciones, el rubio se retiró de inmediato y colocó sus brazos enfrente mientras trataba de calmar al otro.

-¡Espera! No vengo a pelear.

Natsu se detuvo mientras le miraba con sospecha. Zancrow al notar esto, trató de aprovechar y explicarse antes que el otro perdiera la paciencia y decidiera golpearlo.

-Escucha, yo…

-¿Qué es lo que quieres?

-No vine a pelear, ya te lo dije. Necesito tu ayuda.

Incrédulo, el pelirosa le miró desafiante.

-¿Qué te hace pensar que te ayudaré?

El ojirojo suspiró fastidiado. Miró a Natsu mientras intentaba hacerle entender que de verdad no quería una pelea.

-Escucha, sé que somos enemigos, pero de verdad no busca pelear contigo. Además, la última pelea que tuvimos tu ya me habías derrotado… no tiene caso pelear más.

Natsu enarcó una ceja, intrigado. Notando aquello, el rubio procedió a hablar de nuevo.

-Necesito tu ayuda, por favor.

-¿Ayudarte? ¿Por qué habría de hacerlo?

-Por favor. No sabía a quien más recurrir. Mi antiguo gremio… a ellos no puedo recurrir además… tú fuiste el único que llegó a mi mente.

-¿Qué es lo que quieres?

Fue directo al grano. Zancrow sabía que debía decirle de una vez antes de que de verdad perdiera la paciencia.

-Necesito que me ayudas a saber lo que ocurrió conmigo luego de nuestra pelea.

-¿Eh?

En ese punto, el pelichicle estaba confundido y miró sorprendido a su enemigo.

-¿Y cómo quieres que yo lo sepa? Yo no te conozco y nunca más supe de ti luego de eso.

-¿Qué? Pero… al menos algo debes saber sobre mí…

-Nada, solo lo que conocí de ti en esa pelea, es todo.

Zancrow se sintió enfadado, pero más que nada, decepcionado.

-No puede ser… eso quiere decir que hice todo este viaje… ¿por nada?

Estuvo a punto de decir algo más, pero entonces comenzó a sentirse bastante mal, un escalofrío le recorrió el cuerpo además de un mareo y dolor de cabeza. Al notar aquello, Natsu se preocupó.

-Oye… ¿Estás bien?

Respirando pausadamente, el rubio trató de restarle importancia a lo que había ocurrido.

-Sí, estoy bien. No es nada de importancia, suele suceder a veces.

Pero el pelirosa no estaba muy convencido.

-¿Seguro? No te ves realmente bien.

Zancrow se sintió enfadado. Ese sujeto no sirvió para nada y el que le viera así le hacía sentir todavía más enfadado.

-Ya te dije que no es nada, además, no te importa.

Dijo agresivo. Trató de alejarse, pero su andar era despacio y tambaleante. Natsu de verdad estaba preocupado por ese sujeto. Bien que en el pasado fueron enemigos, pero ahora ese sujeto había llegado pidiendo su ayuda, por lo poco que le conoció estaba seguro que no era de esos sujetos que pidieran ayuda, siendo demasiado orgullosos para aceptarlo.

Zancrow se dio la vuelta para marcharse cuando su cuerpo le falló enormemente y sus pies chocaron entre sí, provocando que cayera, siendo sostenido hábilmente por el pelirosa que de verdad comenzaba a preocuparse aún más por el otro. Zancrow se liberó del agarre de su salvador y trató de alejarse nuevamente.

-No me toques.

Dijo enfadado, Natsu notó como se iba alejando y su preocupación sacó lo mejor de él.

-Oye, espera… de verdad no te ves muy bien, si quieres yo puedo…

-¡Te dije que no es nada! Déjame en paz y ocúpate de tus propios asuntos.

Natsu resopló y ya no lo siguió más. Pudo ver como se fue alejando hasta perderse entre la gente. Bien, entonces le dejaría marcharse y si se estrellaba en el suelo luego, no sería su culpa. Reanudó su camino al gremio, que era donde se dirigía inicialmente.

Cuando finalmente llegó a su destino, Natsu se dispuso a hablar con sus amigos. Sin embargo, en otro lugar, Zancrow seguía caminando tambaleante por lo que parecía un mercado. Estaba tan distraído por el malestar que terminó chocando con alguien con el brazo. No se giró a disculparse, pero si escuchó al otro decir algo. Trató de seguir caminando, pero entonces, pudo sentir como aquel individuo pareció moverse en su dirección y pronto lo sintió frente a él, levanto la vista cansado y confundido, así quedó por varios segundos en los que entonces, supo que no había sido buena idea venir a aquel lugar.

-¿Ah?

Su voz salió muy queda y cansada.

En el gremio, la plática y el bullicio quedó en silencio cuando se escuchó un estruendo provenir de la entrada, que era provocado por las puertas al abrirse de golpe. Todos miraron aquella dirección en busca de respuesta a la razón de aquel escándalo, y claro que no solo al ver al responsable quedaron mudos, sino también lo siguiente que presenciaron.

-Ahora vas a hablar.

Era Gilgast, y con él, Natsu notó con creciente preocupación que estaba Zancrow siendo sostenido con un agarre de fierro por el brazo por el pelirrojo malhumorado. Al parecer lo había traído por alguna razón, quizás, para un interrogatorio y siendo que el gremio estaba lleno de varios magos y solo estaba él solo sin el suyo, sería presa fácil.

-Ya dije que no vine a pelear, además, ya me retiraba.

-No me engañas con eso, además, ¿Qué me dice que no irás a informar a tus amigos sobre nosotros?

-Ya se lo dije…

Aquel malestar de nuevo pareció invadirlo. Natsu miró como el otro volvía a tambalearse. Sabiendo que sus amigos seguro no le dejarían tranquilo hasta asegurarse que no era una amenaza, era probable que el rubio iba a terminar desplomándose antes de lograr convencerles que no venía a causar problemas, por lo que fue en su rescate.

-No te preocupes, dice la verdad.

El pelirrojo le miró dudoso e intrigado. Natsu se acercó al rubio que al menos había liberado su brazo de esa descomunal mano. Sus piernas finalmente cedieron y estuvo por caer al suelo pero Natsu se apresuró. El otro logró tomar fuerzas para volver a soltarse.

-Déjame…

Trató de marcharse pero la mano de Natsu sostuvo su muñeca. No tenía ya fuerza para soltarse, sin embargo, la voz del dragón resonó con sorpresa.

-Estas frío.

El otro le miró a penas por el rabillo del ojo.

-Tiemblas y pareces estar sudando.

Se sentía fastidiado y de verdad que no le importó de dónde, pero trató de soltarse, solo para terminar tropezando con sus pies nuevamente y cayendo justo a los brazos de su enemigo, que le sostuvo mientras que Zancrow ya no podía más y terminó sosteniéndose de los hombres del otro y con su cabeza apoyada al pecho, sus piernas las sentía como gelatina y respiraba con dificultad.

Todos miraban sorprendidos e incrédulos la escena. Sin embargo, a Natsu eso le tenía sin cuidado.

-Wendy, por favor, cúralo.

Si su enemigo estaba mal, sin duda que su pequeña amiga podría ayudarle. La chica corrió sin dudarlo a lo que su amiga Charla le miró sorprendida.

-¿En serio piensas ayudarlo?

La chica la ignoró y se acercó al otro y procedió a hacer lo pedido, sin embargo, luego de un par de minutos, se detuvo bastante angustiada.

-No puedo, algo me lo impide.

Al escuchar eso, Natsu se preocupó más, pero de inmediato pensó en alguien que tal vez le ayudaría, así que sin pudor alguno, cargó en brazos a un enojado y sorprendido rubio que le exigía bajarlo.

-¡Oye! ¿Qué crees que haces? ¡Bájame ahora mismo! ¡Te he dicho que me bajes!

Así, el Dragon´s layer procedió a ir con aquella persona. Todos los demás solo quedaron quietos viendo aquello, bastante bizarro para poder creerlo.

Natsu había conducido al convaleciente hasta Polyuska para que le ayudara. En un inicio ella se negó, pero ante la insistencia del otro, no le quedó de otra. Luego de una larga sesión para revisar a su paciente, pronto supo lo que ocurría, sorprendida en un inicio, luego recuperando su seriedad habitual. Zancrow, que se mantuvo despierto durante todo el proceso, finalmente no aguantó el deseo de interrogar a la mujer.

-¿Y bien? ¿Qué se supone que tengo?

-Bueno, felicidades, tienes dos meses.

-¿Ah? ¿Dos meses? ¿Dos meses de qué?

Estaba confundido, pero más que nada, preocupado.

-Bueno, deberías de saberlo.

Ella se giró severa, pero al ver la expresión confundida y luego preocupada, supo que algo andaba mal.

-Eso no es cierto… no puede ser verdad, es mentira… ¡USTED ESTÁ MINTIENDO! ¡No!

Comenzó a hiperventilar mientras se encogía sobre sí mismo y colocaba sus manos a los lados de su cabeza totalmente desesperado y preocupado. Pronto, su mirada pareció comprender al fin lo que pasaba y su horror y preocupación aumentó.

-Esto no puede estar pasando… es imposible… no puede ser… dos mese… dos meses… pero… yo… hace apenas ni un mes que yo desperté… ¿Cómo pueden ser dos meses? Ni siquiera recuerdo estar con nadie… no… no, no, no… ahora todo tiene sentido, ese día, los dolores… todo… es por eso, es sin duda eso… no puede ser, no es cierto… no, no…

Al notar su estado de pánico, ella trató de calmarlo.

-Tranquilízate, puedes hacerte daño y al bebé.

Sus palabras parecieron hacer algo en el rubio, ya que comenzó a relajarse un poco. La pelirosa miró a su paciente y procedió a preguntar con cautela.

-De acuerdo… cuéntame lo que recuerdas.

Así, Zancrow contó todo lo que había pasado, desde su extraño despertar hasta su peregrinaje en busca de Natsu, y su evidente falta de recuerdos los eventos más recientes antes de despertar en esa casa extraña. Para la mujer todo era evidente. Sin duda alguien debió haber violado a Zancrow cuando estaba en estado de inconsciencia, solo eso explicaba los dos meses de embarazo y la falta de recuerdos del otro.

Polyuska salió en busca de Natsu a quien le explicó lo ocurrido.

-¿Qué?

-Lo que escuchaste. Sin duda, por un tiempo él debió estar inconsciente y su secuestrador debió aprovecharse de eso para violarlo. No recuerda nada de los eventos en la isla, lo poco que recuerda es confuso, a lo que entendí, solo logró conectar los recuerdos que se ligaban a ti, por eso fue a buscarte, creyendo que tal vez tú sabías algo de su pasado olvidado en ese lugar. Es mejor que no se estrese, deberás ayudarlo a que su embarazo se lleve con cuidado y ayúdale a que no intente forzar sus memorias, eso podría causarle estrés, lo cual podría ser dañino no solo para él sino también para el bebé.

Natsu, entendiendo aquello, asintió a la mujer frente a él. Se había propuesto a cuidar de su enemigo en su momento más vulnerable y a proteger a su bebé del peligro, después de todo, la pobre criatura no tenía culpa de aquello, y por lo que entendió, el rubio pasaba por un momento donde sin duda se encontraba aterrado y confundido.

-Muy bien, lo hare.

La mujer asintió al otro. Zancrow se sostenía de las rodillas al tiempo que ocultaba su cara, se sentía aterrado, demasiado. Además que sentía una ira crecer en su interior, odiaba el hecho de que alguien se hubiese aprovechado de su inconsciencia para abusar de él, y juraba que si descubría al desgraciado, lo castraría luego de hacerle comer sus partes en pedazos mientras se desangraba lentamente.

Notas finales:

Bueno, este segundo capi las cosas se pusieron ya serias, al menos para Zancrow que ya descubrió la terrible noticia.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).