Días grises
Voy caminando por el jardín de mi casa, sintiendo la humedad del césped en mis pies desnudos. Observo sentado desde la sombra del árbol de cerezo, mi mirada se queda fija al recordarte, sentado frente a mí, en tu antigua mecedora leyendo como siempre, uno de tus libros extensos que nadie más quiere.
No puedo explicarme como es que esto paso, realmente, quisiera no tener memoria, haber perdido mis recuerdos, pero, no es así, los tengo y por una razón que aun no comprendo. Se me ha hecho eterno, el tiempo pasa más lento de lo normal, o tal vez sea que estoy en un estado no muy bueno.
Entre mis recuerdos, me llega esa frase, tal vez, las últimas palabras que me dijiste:
-“Me sentí bien en esta reunión, ¿crees que podamos hacer otra en nuestra casa la próxima semana?”- te conteste- “Es buena idea”…
Una luz cegadora se encuentra con nuestro auto y solo recuerdo tu sonrisa....
Después de eso, desperté en una habitación color verde claro, ¿Qué me paso?, pronto llego alguien a mi auxilio, alguien a quien conocía, mi primo, Sehun. Él dijo:
-“Tengo algo que, tal vez, no debería decirte, pero es mejor lo sepas ahora, antes de cualquier cosa, Baekhyun, el esta… -parecía no muy dispuesto a hablar, como si quisiera mejor no hacerlo, y en mi caso así lo hubiera preferido- hyung murio…”
Hubiera querido no escuchar, no lograba asimilar lo que me dijo.
Era demasiado, no pude soportarlo. ¿Porque? ¿Porque a mi? ¿Por qué a ti? ¡¿A nosotros?! No, un nosotros ya no existía, tú, te habías ido, tal vez fue lo mejor, quise acompañarte, estar contigo hasta el final, aunque el final fuera lo peor. No quería estar aquí, pero, comprendí que tal vez, las cosas no estén en nuestro control y solo tal vez, estés mejor sin mí. No puedo decir lo mismo de mí, yo te necesito, te quiero aquí conmigo, pero, debo superarlo, quizás lo logre, tal vez no, olvidarme de ti es algo que no puedo hacer, no se trata de olvidar, sino de comprender, entender que en esta vida nada es para siempre. Aunque yo lo quiera así, te aseguro, no soy el único que te quiere de regreso, pero comprendo, entenderemos, que esto no es un adiós, será un hasta luego. Algún día estaré contigo, tarde o tempano, juntos de nuevo y para siempre.
Cada tarde, desde aquel accidente, contemplo el horizonte, aquella franja de colores que iluminaban tu rostro, ese sonrojo que aparecía en tus mejillas de manera artificial desde el atardecer hasta que la luna se posiciona frente a mí. Realmente no siento el tiempo pasar, ni el frio, mucho menos el calor...
Chanyeol paso temporadas enteras así, desde que el cerezo daba sus frutos, hasta que los aires del frio invierno lo dejaban desnudo. La soledad lo consumía lentamente, a veces imaginaba un final diferente;" Quizás si no hubiéramos ido, si no hubiera contestado el teléfono, si no hubiésemos regresado...", Pero la realidad siempre lo golpea, Baekhyun ya no está, Baekhyun se ha ido, su sonrisa coqueta y sus ojos han dejado de verlo, su melodiosa voz cantándole al oído ya no está, ya no lo puede escuchar, y las fotografías lo hacen llorar.
Es un día de invierno cuando toma su lugar frente al árbol de cerezo, sentado en su mecedora como siempre, cuando siente algo diferente, un ligero cansancio de apodero de él, cerrando los ojos, encontró la paz, la tranquilidad, que tanto buscaba. La muerte silenciosa, lo reuniría al fin con su amado.