Llegó la noche. Me fui al estúpido sotano/jaula que el estúpido de Levi me había asignado. Como puede ser tan odioso. Como pude caer en su trampa, quería besarle. Me tapé la cara solo de pensar el ridículo que había hecho.
Ahora se pensará que le gusto, pero es que ni yo sé porqué reaccioné así. Me tumbé en la cama cansado, y puse mis manos en mi nuca. Miré, por una de las ventanas contemplando dos estrellas brillantes, eran las únicas que habitaban en el cielo esa noche. Sumergido en mis pensamientos caí de lleno en los brazos de morfeo.
-¡EEEEEEEEEERRRREEEEN!- me despertó una chillona voz mientras unas manos se agarraban a mis brazos para agitarme. Hanji. Realmente me molesta mucho que me despierten así, por tanto grité
-¿¡QUEEEEEEEEEEEEEEEEEEE!?- mientras apartaba sus manos de mis brazos. Miré a la ventana, era muy pronto, aún de noche, ¿que querría a estas horas?
-¡QUÉ NO GRITES! ¿¡ NO VES QUE VAS A DESPERTAR A TODOS!?
-¡PERO SI ESTAS GRIT...-
-Vaya par de idiotas.- interrumpió una voz conocida. Ambos volteamos la cabeza para ver de quién se trataba y... era Levi. Pude notar como mi cara empezó a arder cuando le ví ahí, de brazos cruzados, apoyando su peso en unos de sus brazos en el marco de la puerta y sus piernas cruzadas, y como no, con su profunda mirada. Estaba tan se... no...no puedo pensar eso, el es mi enemigo.
-Hanji, realmente eres muy patosa, tan solo te ordené que le dijeras su castigo al moco...- le interrumpí y fruncí el ceño enfadado.
-¿Qué? ¿Cómo que castigo?- pregunté.
-¿Creias que no te librarias? Te recuerdo que casi te transformas en titán sin mi permiso.- respondió con su inexpresión.
-¡TÚ LO QUE ERES ES UN CABRÓN!- le grtité mientras fui con intención de golpearle, histérico ya que me hizo recordar su trampa pero Hanji me sujetó para que no pudiera ir por el. Hice intentos para que me soltará y grite pero Levi vino y me dió un fuerte cabezazo que al parecer a el no le dolió ni lo más mínimo. Solté un quejido y ahora quién me sujetaba para no perder el equilibrio era Levi, me tiraba del pelo, sin duda, su altura no le impedía nada. Me ruboricé cuando la mirada de aquel enano se plasmó en la mia, quede inmovilizado.
-Escuchame bien mocoso. Tu castigo es este y lo vas a realizar, me da igual si quieres o no. Primero vas a limpiar todas las cuadras y harás los cuidados de los caballos. Después irás al campo de entrenamiento y te darás quinientas vueltas. Tienes tres horas para hacer todo esto, tienes hasta las nueve, si tardas aunque sea un minuto más el castigo aumentará.- me espetó esto tan serio como siempre y me soltó haciendo que me contoneara al volver a perder el equilibrio.
-Vamos Eren.- dijo Hanji mientras salia de la habitación y yo fui atras de ella. A medida que ibamos andando el estrecho pasillo fui oyendo las pisadas de Levi detras de mi. De pronto sentí como una mano empezó a acariciar mi nuca, bajando rápidamente a mi espalda hasta llegar a mi trasero, y comenzaba a tocarlo. Impactado giré mi cabeza y no había nadie, solo un Levi caminando al sentido contrario al mio.
Maldito, había sido el.
Tratando de ignorar lo que acababa de pasar, salí y me dirigí hacia las cuadras a cumplir mi castigo, Hanji me vigilaba. Tardé dos horas en limpiar y cumplir los quehaceres para los caballos. ¿Cómo iba ahora a dar 500 vueltas en una hora? Corrí lo más rápido que pude, poco a poco me iba cansando, pero cuando llegué a las 500 vueltas ya eran las 12. Levi volvería a castigarme, puso ese tiempo por qué sabía que era imposible hacer todo eso en tres horas. Maldito...
-Losiento Eren, no lo hiciste a tiempo. En verdad el lo hizo a propósito para volver a castigarte jijiji. No se que os traéis entre manos.- dijo Hanji mientras empezó a reirse como loca.
-P...pe...- tibuteé, agotado, un intento de decir "pero" fallido. Estaba demasiado cansado.
-Tssss.- chistó Hanji. -Ve a descansar anda, suficiente por hoy.-
Lentamente con la cabeza gacha y los brazos colgando andé hacia dentro. Estaba muy agotado. Decidí darme una ducha. Llegué con parsimonia hasta uno de los baños y entré cerrando la puerta con llave detras de mí. Oí agua caer al suelo, y cuando me giré a ver la ducha me quedé pasmado.
La esbelta figura desnuda del capitán Levi se encontraba de espaldas mienras el agua tenía el gusto de recorrer su cuerpo. Tenía una preciosa espalda tonificada, y por no hablar de su culo... Dios... Tenía ante mi dos carnosas nalgas, obviamente también tonificadas, que no pude evitar posar mi mirada en ellas. El capitán volteó su cabeza, ya que sin querer hice ruido. Al verme volvió a girar rápidamente su cabeza, como si estuviera avergonzado de que le estuviera observando. Me sonrojé.
-¿Qué haces aquí esttúpido? Sal ahora mismo o sufri...- dijo con un tono algo más alterado de lo normal, pero le interumpí.
-¿O que?, capitán.- dije lentamente casi en un susurro. Mi sonrojo se fue, ya no estaba avergonzado, supe que ese era mi momento de venganza. Cogí su cinturón que estaba tirado por el suelo y con una mano empecé a girarlo. Me acerqué a el y me apoyé en una de las paredes de la ducha recargandome sobre ella y mojandome por completo.
El cinturón que estaba girando en mi mano se me calló al suelo cuando vi lo que tenía delante. Vi a Levi por completo desnudo. POR COMPLETO. Sus trabajados abdomitales y pectorales, sus rosados pezones, su bien dotada entrepierna, cielos santo, debo de estar soñando, por algo dicen que la venganza es dulce. Una erección por mi parte se avecinaba, pero joder, ¿como podía excitarme el cápitan? Quedé con la boca medio abierta mirandole de arriba a abajo, sus carrillos estaban algo sonrojados, supongo que sería por el calor del agua, auqnue el ambiente ya era caliente de por si.
Noté que se me quedó mirando y reaccioné rápidamente. Me acerqué a él hasta que quedo contra la pared y yo pegado a su desnudo cuerpo. Uní mis labios a los suyos a la vez que el agua de la ducha nos calaba hasta los huesos, se sentía bien, sus labios eran suaves y cálidos. Nos fundimos en un apasionado beso donde el comenzó a tirarme del pelo. Cuando separamos nuestras bocas para tomar aire pude oir un leve, casi inaudible gemido por su parte, y hice una gran sonrisa satisfactoria.
-¿Que fue eso, pequeño Levi?- susurré en su oido, con la voz entrecortada,recorriedo mi dedo por uno de sus pezones e imitando lo que el hizo conmigo un día. Ni yo sé de donde saqué esa valientía para hablarlo así.
-Vete.- dijo en un susurro.
-No quiero.- le respondí desafiante.
-Bien, ya no hay vuelta atras.- levantó un poco una de sus comisuras creando una leve sonrisa mientras el que acabó estando acorralado contra la pared fui yo. Me deboró el cuello mientras comenzó a desabrochar los botones de mi camisa. Yo muy nervioso, comencé a sentir una presión en el pecho y empecé a jadear, no quería que esto llegase a más, tan solo quería excitarle.
-C...capitán ¡pare! y...yo tan solo bromeaba.- Le dije ya algo asustado con algún que otro gemido saliendo inconscientemente de mi boca. Hacia esfuerzos para salvarme de su agarre pero fueron en vano. Se desizo de mi mojada camisa y poco a poco me quitó los pantalones.
-Nghh... Ah.. no... yo...- dije entre gemidos.
-Eren, eren...- susurró en mi oido y de la nada, mi ropa interior desapareció y cuando fui consciente de ello llevé mis manos hacia mi erecta entrepierna. Levi apartó mis manos y me tumbó. Puso sus rodillas a los lados de mis caderas y comenzó a besarme mientras masajeaba mi entrepierna. Yo ahogaba gemidos en su boca. Se separó de mis labios para ponerme las piernas levantadas, apoyandose en sus hombros, y la punta de su miembro masajeaba mi entrada. Miles de cosquilleos recorrieron mi cuerpo. Estaba atemorizado y excitado.
-Ahh... no... cap...-dige entre gemidos, pero antes de que pudiera decir nada mas, su erecto miembro entro por completo en mi.
-¡CABROOOON!- grité en un jadeo soltando todo el aire. Las lágrimas comenzaron a brotar de mis ojos y comencé a gritar y jadear muy alto. Mi respiración aumentó más de lo normal.
-Mmmm... música para mis oidos.- dijó entrecortado Levi entre gemidos y comenzó a darme estocadas sin piedas, muy fuerte y rápidamente. Mordí mi labio y lo acerqué a mi para arañar su espalda para expulsar el dolor de alguna manera. Sentí poco a poco como me empezó a subir la temperatura y el dolor se mezclo con el placer. Gemía fuertemente y el me besaba a la vez que aumentaba el ritmo de sus estocadas. Empezó a masturbarme y mi espalda se encorvó cuando empecé a sentir todo el placer. Iba a explotar. Mi interior se hizo automaticamente más estrecho de lo normal y Levi empezó a soltar algún audible gemido por la fricción.
-Ah... Le...Levi... t...te odio est...estúpido.- Logré decir entre demidos y llegue al orgasmo, haciendo que el semen manchara el pecho de Levi, y pude sentir un líquido caliente dentro de mi. Levi salió de golpe de mi interior y hice un alto quejido, esta literalmente reventado.
-Novato.- dijo Levi con la respiración entrecortada y su inexpresiónmientras se secaba con una toalla y apagaba el grifo, que había estado todo el rato dado, mojandonos.
-C...callaté est...estúpido.- dije jadeando. Estaba muy cansado después de todo lo que ese imbécil me habia hecho hoy pasar. Con que esa fue mi venganza... Pues no... La cosa no se quedará así.