Minato se encontraba más que incomodo, pero ahí estaba tratando de sobrellevar la situación de la mejor manera, a pesar de que sentía vergüenza y nerviosismo.
Se encontraba sentado sobre una camilla ginecológica especial para donceles, con las piernas abiertas, ante la atenta mirada del esposo de su padrino, Orochimaru, quien además estaba de malas pulgas por el secreto que Minato guardó durante mucho tiempo, si de por sí solo Orochimaru molesto ya era una gran cosa con la cual lidiar peor se ponía la pista cuando en la habitación se encontraba un furioso Madara y una iracunda Tsunade.
Sentía como movía algunos instrumentos en la parte más intima de ser, sentía dolor pero trataba de no quejarse y así no llamar la atención para que no se indignaran más. Orochimaru un importa médico en el aérea de la Tocología, quizás el mejor del país, hasta del continente, y era quizás una de las personas más intimidante que en su vida Minato había conocido, con esos profundos y sagaces ojos melados casi amarillos, de piel pálida, cabello negro y largo, él era un Bivacel, y como pocos había encontrado el amor en alguien tan disparatado adicto a los pechos grandes como Jiraiya su viejo y pervertido padrino, junto con su madre Tsunade, se conocían de toda la vida, y cuando ésta rompió el corazón de Jiraiya encontró consuelo en Orochimaru. Quien le confesó una vez a Minato que siempre amo la estupidez de Jiraiya su vivacidad y locura.
Su padrino amaba con locura a Orochimaru, mucha gente sobre todo de la alta clase social miraba de malos ojos que el Heredero Myobokuzan se casara con un Bivacel quien no podría darle descendencia, pero a pesar de las malas palabras Orochimaru no se dio por vencido, y a la edad de 40 años logro su cometido tener un hijo con el hombre que amaba ante la sorpresa de muchos Mitsuki que en la actualidad contaba con 13 años y era el mayor orgullo de la pareja, y el Namikaze se encontraba seguro que eran capaces de matar por su hijo.
-Mocoso debiste haber abierto la boca hace muchos años atrás- Orochimaru estaba hecho una furia.
-No podía-Susurró el rubio- tenía miedo de que él me encontrara y me hiciera algo aún peor- explicó los tres presentes se miraban serio.
-Sabes que te hubiéramos protegido eres nuestro hijo mayor estúpido- Recriminó el Bivacel golpeando suavemente un muslo interior del rubio. Tsunade bufar, pero este solo se giró para mirarlo cabreado, la mujer abrió la boca para decir algo mordaz pero Minato habló nuevamente.
-Solo tenía terror- Dijo Sincero mirando hacia el techo blanco de la consulta.
-Ya no debes tenerlo más- Madara se acercó a él y tomó su mano -Orochimaru sacará esa maldita cosa, luego nos casaremos y adoptaremos juntos a Naruto y tú a Sai, seremos una familia unida todos nos protegeremos entre sí y ese hombre no se acercará nunca más a ti, te lo juro-Besó los labios de su rubia tentación brevemente para luego mirar al galeno- Cómo ve esto-Pregunto serio.
-Bueno las tomografías muestran que el sistema se encuentra en su lugar por lo que retirarlo será sencillo pero no por ello riesgoso, está rodeado de pequeños vasos sanguíneos y músculos delicados-Orochimaru nuevamente miró la parte baja de Minato, y una ola de furia lo volvió a inundar, odiaba a muchos varones pero nunca pensó odiar a tantos como a Kurama Uzumaki.
Un cinturón de castidad quirúrgico para donceles, era una pequeña malla rodeada de alambre de acero quirúrgico con la cual se rodeaba el ano, que si bien dejaba depositar la materia fecal, pero tampoco podía dilatarse demasiado porque sino la circunferencia de los aceros se estiraba más de la cuenta y producía dolor, el doncel que lo poseyera debía ser extremadamente prolijo en la limpieza íntima porque cualquier cosa podría causarle una infección, además tenía un saco también hecho de una malla resistente al paso del tiempo que envolvía ambos testículos impidiendo que crecieran, y luego estaba la prótesis para el pene que lo cubría impidiendo que este se irguiera, tenía una orificio por donde salía la orina, y luego tenía una serie de anillos que iban a lo largo del pene y el último pasaba por debajo los testículos, todo se liberaba con tan solo una pequeña llave que obviamente tenía Kurama, todo un modelito para ensillar a los donceles creados por el difunto doctor llamado Danzo Shimura, un asqueroso hombre que nunca debió tener licencia médica, y que para colmos de males fue el suegro de Madara.
Estaba preocupado 19 años con ese cabestrillo, debería presentar más problemas del que veía, por lo que una pregunta no dejaba de rondarle en la cabeza.
-Minato sé sincero con nosotros, Kurama te encontró verdad- Inquirió, y la pregunta que tanto temía el rubio llegó, apretó la mano de Madara.
-Minato dinos es así-Insistió Madara viendo la verdad en esos ojos azules.
-Hijo solo respóndenos- Rogó Tsunade.
- me encontró cuando estaba en la universidad, trate de escapar pero él me amenazó dijo que iba a tomar a Deidara y le iba a hacer todo lo que a mí me hacía solo porque se parecía a mí-No quería volver a llorar ya lo había hecho el día anterior- Yo no quería que él me tocara, pero no quería que Deidara sufriera, y también necesitaba que él me liberara de mi tortura aún si caía en otra, yo no quería- su voz se quebró, sintió como Madara lo cobijaba en su pecho.
-Voy a secar a ese hijo de puta en la cárcel-Susurró Madara, dejando sorprendido a los demás- Me encantaría matarlo pero si lo hago él que irá a la cárcel seré yo y no te dejaré solo, vamos a seguir con nuestro plan, te sacaras esa cosa y luego nos casaremos y solucionaremos todo en el camino juntos- Juró a su amado.
-Quieres que llame a la policía-Inquirió Orochimaru.
-Sí, quiero que lo hagas, tendrá que verlo otro médico-
-No te preocupes tengo mis contactos, deja que me encargue de esto, programaré la cirugía para hoy mismo, me niego a dejarte más tiempo con esa horrible cosa un día más, Tsunade ubícalo en alguna habitación lo ingresaré, búscame un pabellón y un grupo sumamente confiable y discreto, si puedes dile a Hatake que me acompañé- Sin más salió de la habitación.
Tsunade salió encontrándose con su familia, ella les comentó todo sin dejar nada afuera, Deidara nunca pensó que Kurama lo usaría para chantajear a Minato, se sintió miserable, la verdad estaba así del día anterior, cuando hizo explotar a Minato, por un lado se sentía como una vil cuchara pero por otro si no fuera por él, Minato cuánto tiempo más hubiese ocultado la situación, su hermano Yahiko y sus padres aún estaban furiosos con él sobre todo por golpear al mayor de los Namikaze.
Observó a Madara salir de la consulta, una sola mirada del Uchiha le advirtió que no abriera la boca o si no lo mataba. Minato salió tras él les dirigió una mirada rápida antes de ir junto a ellos.
-Minato…yo-Comenzó Deidara- Solo quería decir lo siento, en verdad huuum- estaba incomodo él no era una persona que pidiera disculpa, siempre él debía tener la razón, jamás se equivocaba y si lo hacía culpaba a otro, así que pedirle disculpo a su hermano mayor era un gran paso.
-Lo sé, no te preocupes, por otro lado si no fuera por todo lo que dijiste yo no hubiera explotado- Ahí estaba las palabras que Deidara sabía que Minato diría.
Luego de eso siguieron conversando.
Uchiha Itachi, hermano mayor de Sasuke e hijo de Fugaku entró en la clínica siguiendo a su primo Sai quien no paraba de parlotear sobre su “nuevo hermano” había hablado tanto de él que el bicho de la curiosidad le pico, y ahí se encontraba para conocer a la persona que había de alguna manera llegado al corazón de Sai y hacerlo un poco más sociable.
Llegaron a la habitación de Naruto, quien se estaba riendo a carcajadas, la risa al menos era contagiosa.
Al entrar al cuarto pudo apreciar a un rubio, simplemente hermoso… Itachi tuvo que despabilar con un golpe de Sai, los grandes y añiles ojos azules de Naruto estaban sobre él, sacó su Smartphone y rápidamente le sacó una foto.
Luego escribió un texto y lo envió a su hermano menor.
-Qué fue eso Dattebayo-Preguntó parpadeando por el flash.
-Hola soy Uchiha Itachi, primo de Sai, y hermano de Sasuke, habrás escuchado de él verdad- Se acercó a la cama del rubio mientras le sonreía.
-De Sasuke sí, mi futuro esposo de mentiritas verdad-Naruto le devolvió la sonrisa observando al hombre, cabellos largos y ojos profundos todo de color ébano, grandes ojeras, y facciones firmes, alto y de cuerpo bien proporcionado, era guapo. Por su cabeza cruzo que Sasuke debería ser igual de guapo que su hermano mayor y sin saber por qué se ruborizó.
-Itachi, Naruto jura que Sasuke no le hará nada de nada- Sai dijo con burla y picardía.
- Si yo fuera mi hermano no tendría mis manos lejos de ti, lo siento pero dudo que Sasuke no quiera hacer cosas contigo- Fue sincero, vio como la sangre cubría aún más las mejillas de Naruto avergonzando con los dichos.
-Pero soy un varón-
-No lo pareces-
-Pero lo soy-
-A Sasuke le vale madre si eres varón, Bivacel o doncel, solo le interesará tu cuerpo- Sonrió con sorna el Uchiha mayor-Ya sabes como todo varón-Agregó divertido, el rubio parecía un gatito.
-Yo soy un varón y nunca he pensando así acerca de otra persona, y qué ustedes son varones también solo les interesa el cuerpo de una persona sin contar su género o su mente- Inquirió el rubito haciendo pucheros.
-Dios, para ser el único varón en esta habitación eres demasiado lindo, hasta yo que soy un Bivacel me dan ganas de arrancarte la ropa-Itachi se relamió los labios-Ñam, Ñam, Naru-chan-
-Basta estás poniendo nervioso a mi “Aniki”- Sai golpeó la cabeza de Itachi con un pequeño zape.
-Lo siento Naruto, solo son bromas, de cualquier forma realmente eres lindo, será una gusto tenerte en la familia, la refrescará, y no te preocupes Sasuke ya está amenazado de muerte por tu padre, así que tranquilo- Calmó el Uchiha- además a pesar de que mi hermano es un idiota, bien en el fondo es buena persona, cuando pequeño era la cosita más mona y tierna del mundo…bueno y luego creció- Dijo con pena Itachi.
-Bien, pero bien en el fondo Sasuke tiene algo de buena persona, pero nunca nadie la ha visto- Acotó Sai con una sonrisa que Naruto descifró que era una de burla, Sasuke realmente le causaba curiosidad, todos le decían tantas cosas de él, que no sabía de quién era en realidad, pero en ese momento otra cosa rondaba en su cabeza, y él no pudo acallar más su curiosidad.
-Perdón por lo que voy a decir – Naruto levanto las manos en señal de perdón- No puedo creer que ambos sean Bivacel, pensé que eran varones, bueno…-Miró a Sai por el rabillo del ojo, culpable e incomodo- Con Sai tenía dudas, pero contigo no, o sea de lejos tu aura parece la de un varón- Dijo mientras se teñían sus mejillas de carmín, otra vez.
-Papá ha hecho un buen trabajo forzándome a mantener la apariencia de un varón, pero en cuanto me case todos sabrán que soy un Bivacel, así que en realidad aunque parezca uno no lo soy- Explicó con una sonrisa queda, ocultando muy bien todo el dolor que esta condición le causó en el pasado.
-Bueno y yo, a nuestro padre Naruto le vale madre que sea Bivacel, en casa mi madre era la que odiaba mi condición y no dejaba de culpar a papá, pero en realidad para él no es problema, dice que así podre elegir lo que desee, y en todo caso con mi patrimonio seguramente cualquiera quisiera casarse conmigo además, todos los Bivacel tenemos cierta tendencia, ya sea a ser varón o Doncel, la idea es encontrar en que parte de la balanza me encuentro, ver que terapia es mejor para mí- le explico su nuevo hermano.
-mmmm, nunca había pensando en eso, yo, en serio nunca me he sentido como un varón, pero tampoco me ha llegado el calor como doncel, siempre pensé que era un Bivacel, aunque me dijeran que era un varón-Susurro pensativo.
-Solo déjame hacerte un examen y lo sabremos- Dijo una voz serpenteante entrando a la habitación- Debía ver con mis propios ojos el niño Cupido que reunió a este par de idiotas, y que los puso de cabeza, y con solo verte puedo entender la razón, eres idéntico al rubio- Comentó, analizando cada parte de Naruto, uno poco más y este podría verle el alma.
-Orochimaru-San-Musitó Sai-Buenos días-
-Hola Sai, cómo van esos dibujos- Orochimaru le dedicó una pequeña mirada antes de tornar su atención a Itachi-Joven Uchiha como estás, hace mucho que no veía tu sexy cuerpo-Sonrió burlón.
Itachi al escucharlo se entremeció- Orochimaru- Saludo, no iba a mentir ese hombre siempre le ponía los pelos de punta.
- Como ya habrás escuchado mi nombre es Orochimaru soy un tocólogo y además un bioquímico muy afamado, también soy un Bivacel y pude tener un hijo, gracias a mi investigación, pero además de eso soy el mejor amigo de Tsunade, tu abuela, y esposo del padrino de Minato, Jiraiya-
-Mucho gusto Orochimaru-San, aunque sabe mi nombre me presento igual Naruto Uchiha, al parecer-Dattebayo- Dijo sonriendo ampliamente.
Orochimaru tomó la mano ofrecida por el menor, era un mocoso lindo, realmente lindo y muy parecido a Minato pero también a Kushina, era demasiado el parecido para que solo fuera coincidencia, y esa muletilla.
-Un placer, entonces dime te gustaría que te hiciera unas pruebas-
-Sí, de hecho lo agradecería mucho porque nunca he podido encajar en nada, adem…-
-Oh veo que se conocieron- Minato y Madara entraron en la habitación, cortando la conversación- Naruto que Orochimaru-San no te intimide-
-No lo hacía- Aseguró el mencionado- De hecho me estaba ofreciendo su ayuda-
-Por favor Minato-san cualquiera diría que soy una persona terrible-
-Lo eres-Dijo tajante e Namikaze junto a Itachi. Orochimaru les dedico una sonrisa con sorna.
-Lo soy solo con los idiotas cabezotas a quien le he dicho las cosas y no hacen caso, verdad- Siseo con saña haciendo que los otros dos miraran el piso.
Naruto sonrió al ver el rostro de los aludidos, la conversación se torno en dirección a la operación de Minato, no dieron muchos detalles…
La chica gemía alocadamente, gritaba por más, se sentía en el séptimo paraíso, sentía el cuerpo musculoso y febril del varón que la hacía suya en ese instante, era tan delicioso ser llenada por él. Tenía sus manos aferradas a la espalda de éste, mientras besaba el cuello níveo y pálido, su cabello negro era un gran contraste con su piel.
Llegó al más exquisito orgasmo en cosa de segundos, tuvo que esperar unos segundos para volver a normalizar su ritmo cardiaco,
-Sasuke-kun, esto estuvo in..- El sonido de un teléfono móvil la interrumpió.
Sasuke tomó su móvil, sin hacer caso a la mujer que estaba tendida en su cama, lo miró frunció el ceño Itachi le había enviado un whatsApp.
“Tonto hermanito Menor, contemplad al ser que será tu esposo de “mentiritas” Dime si no es el varón más delicioso del mundo, parece un trozo del mejor kuchen de tomates…”
Una foto venía adjunta, la de un rubio de grandes y añiles ojos azules era un hermoso chico, era de su tipo, pero tenía un aire de tonto, bueno seguramente el que Itachi le sacara una foto lo había desprevenido.
Sonrió sin querer así que ese era Naruto, cuando su padre le contó la noticia no la tomó para nada bien, pero tampoco estaba en posición de decir que no, sus padres le habían dado todo y aguantado cada una de sus insolencias, y tampoco quería casarse con la loca de Karin Uzumaki.
Aún así la idea de casarse con un varón no le hacía mucha gracias, por último darle la opción de elegir uno, pero casi se cae de la cama a las tres de la mañana cuando el desubicado de Sai le llamó para contarle que su padre estaba adoptando a un chico de 19 años de nombre Naruto que supiera desde ya que ese chico era su prometido. Peor fue cuando el mismo Madara lo llamó y le contó sobre el plan, Sasuke era un irrespetuoso de los más grande pero ir contra Madara era muy malo y de poca inteligencia, no podía hacerlo, éste le dejó bien en claro que Naruto iba a ser un Uchiha y como tal se respetaba nada de malos tratos ni humillaciones porque él le iba a cortar a su amigo más preciado.
Todos pensaban que él era una bestia, cuando en realidad no lo era, también le tenían la chapa de mujeriego, don Juan, pero no era para tanto, no andaba por ahí acostándose a diestra y siniestra con todas las personas que se le cruzaban, quizás en sus tiempos de instituto, los primeros años de universidad, bueno la culpa de todo era su temporada de preparatoria donde si era un bastardo con un comportamiento de mafioso, hitman y calenturriento jovencito que cuando habían personas de su agrado y se le ofrecían el no dudaba en tomarlos, ni tonto. Pero ahora a su veinte cinco años ya se había calmado demasiado, aunque aún tenía malas pulgas y perdía la paciencia rápido.
Volviendo al tema nunca concibió porque su copia barata y Madara estaban tan babosos por un pulgoso callejero, ahora que lo veía entendía ese rubio a primera vista era una exquisitez, quizás la idea de estar casado con ese chico no era tan mala.
El sonido de otro mensaje lo volvió a la realidad.
“En serio tonto hermano menor, estás en problema, GRAVES!!!
GRAVÍSIMOS!!!
Este niño es la cosa más tierna que he tenido el agrado de conocer si no te quieres casar con él, no hay problema yo lo hago, y es en serio no tiene pinta de varón.
Cuando pueda le saco una foto de cuerpo entero, y aaah Sasuke ni se te ocurra decirles a los demás que te mando fotos de él
QUIERE QUE SEA UNA SORPRESA, PERO TU BUEN HERMANO SABE QUE LAS ODIAS”
Luego venía un pequeño video.
-Sai, deja de molestarme-Dattebayo-Dijo el rubio muy azorado por algo que le decía haciendo un puchero.
-Deja de ser tan inocente Naruto, no creas lo que papá dice, y tú padre dile la verdad- Dijo burlón Sai con una sonrisa maligna.
-Tío es verdad Sasuke simplemente se lo comerá- Itachi le puso más leña al fuego, disfrutando de ver nervioso al rubio.
-Ese Uchiha tiene la tenacidad de mil toros Naruto, lamento informarte que tus padres ya te están mintiendo, conozco a Sasuke es todo un don Juan, pero no te preocupes dicen que a pesar de ser una bestia en la cama siempre lleva a su pareja al paraíso, aprovecha de tener el placer de estar con él, aunque después te tiemblen las piernas, no puedas sentarte bien, y tengas ganas de ir a cada momento al baño, vale la pena Sasuke es delicioso- El aludido sintió escalofríos al ver como Orochimaru se relamía los labios, mendiga y asquerosa víbora pervertida.
-Aaah, papá tú dijiste que él no me haría nada- Dijo con angustia el rubio mirando a Madara que estaba sentado a su lado junto a otro rubio que debía ser Namikaze Minato.
-Lo siento, no lo sé, pero seguramente es lo que dice Sai e Itachi, Sasuke te comerá, él es una bestia, además de ser todo un play boy ni siquiera sabrás que te ataco cuando ya esté dentro de ti- Dijo con una voz que a Sasuke le pareció que no le gustaba nada la idea de que él se involucrara con su preciado hijo adoptivo-Auch- Minato lo había golpeado en el costado.
-No-Dattebayo- Grito desesperado escondiéndose debajo de las tapas. Naruto terminó hecho bolita mientras todos reían.
Ahí finalizaba el vídeo.
Sin quererlo sonrió.
-Quién es Naruto, y qué tiene que ver contigo- Recordó ahí, que no se encontraba solo, su buen momento se arruinó.
Sasuke, borró su sonrisa y miró a su compañera de cama, una pelirrosa de grandes ojos verdes, bastante bonita, Haruno Sakura, de nacionalidad Japonesa igual que él, se habían encontrado en la universidad de Cambridge, aunque él seriamente pensaba que ella lo había seguido allá. Él fue a estudiar Leyes y se quedó en Churchill College, al mes de estar instalado una sorprendida Sakura hizo su aparición por segunda vez en el día frente a él, ahora en el College, era tan perfecto y coordinado todo que obviamente comprendió que Sakura lo tenía todo fríamente calculado.
Al principio no estaba muy contento con ella cerca de él, siempre se las ingeniaba para andar de tras de él, desde que tenía memoria, siempre junto a sus eternas amigas/enemigas Yamanaka Ino y Uzumaki Karin. Tenía que ser franco que de las tres siempre prefirió a Sakura y luego a Ino, Karin era tan bipolar que al final no sabía cómo tratarla, la cosa fue que en la preparatoria se metió con las tres ya aburrido del acoso decidió cortar por lo que él creyó sano, eso fue follar como conejo con cada una de ellas, y luego pasar de ellas.
Por supuesto la medicina solo agravo el problema, las tres se crían sus novias, y se pelearon hasta la muerte, luego Ino se enamoró de Chouji Akimichi, y Sakura conoció a un tal Kimimaru, bueno eso pasó luego que él les rompiera el corazón al comenzar a salir con un doncel ingles de intercambio, del cual ya no recodaba él nombre. Sí era un Puto, lo reconocía pero últimamente se mantenía en la vía lenta.
Por eso fue una sorpresa ver de nuevo a Sakura, y obviamente quería volver a salir con él, aunque ciertamente nunca salieron, Sasuke al final le dijo que estaba bien que podían salir luego de más de tres años de incesante acoso, eso fue cuatro meses atrás en el momento que comenzó todo el problema con Karin.
-Madara y el amor de su vida se están por casar y adoptaron a un chico llamado Naruto, y mi abuelo decidió entonces que debía cazarme con él- Respondió al tiempo que se levantaba de la cama.
-Qué- Sakura solo fue capaz de emitir eso, tenía que ser un maldita broma, ahora que al fin tenía al Uchiha en su poder, él iba a casarse con otro- Pero estás saliendo conmigo-Protesto luego de volver en sí- Desde cuándo lo sabes, demonios Sasuke por qué no les dijiste que estabas conmigo- Exigió iracunda de ira. No iba a permitir que nadie lo alejara de su amor, Sasuke era su todo, había llevado años que el Uchiha la hiciera su amante, solo había disfrutado de cuatro gloriosos meses en su compañía y quería más mucho más, dudaba que alguna vez se saciaría de él.
El varón rodó los ojos, ahí comenzaba todo el drama que después lo dejaba con un dolor de cabeza que lo hacía descender al infierno, estaba realmente cansando de Sakura, él realmente trató de que las cosas funcionaran con ella, la estimaba pero la mujer al parecer no podía o mejor dicho no quería comprender lo que él siempre le dejó muy en claro, que solo eran amigos con derechos, que no eran novios, que él no la amaba, que solo se usaban mutuamente para desfogarse y ya.
-Sabes perfectamente que no te amo, y mi tiempo conmigo siempre tuvo fecha de caducidad, además esto es algo que mi familia decidió, lo mínimo que puedo hacer es poner de mi parte- Dijo serio, no iba a decirle que la razón detrás de eso era Karin, y tampoco que Naruto ciertamente le llamo la atención.
-Nadie te amara como yo, lo sabes…
-Sí tú y mil más. Muchas y muchos me han dicho lo mismo- Cortó a la joven mujer- Sakura te diré esto por última vez y espero que logres retenerlo en tu cabeza, estoy seguro que sí eres bastante inteligente para tu propio bien, Yo Uchiha Sasuke no te amo, no quiero pasar el resto de mi vida contigo, si bien es agradable tu compañía, y tener sexo contigo, no siento pasión ni las ganas de correr en busca de ti, no hay fuegos artificiales entre nosotros, nuestros caracteres son parecidos, somos a primera vista planos, y debajo somos tránsfuga y muy malas personas, te conozco lo suficiente para saber qué planes ya estás ideando en esa cabeza tuya-
Sakura le miró sorprendida, en efecto ella estaba maquinando ya, qué podría hacer para detener esa boda, ir en busca del maldito que le iba a quitar su boda, su vida al lado de Uchiha Sasuke. Siempre pensó que era lo bastante inteligente para ser muy sutil en cada uno de sus estratagemas a la hora de querer algo, manipulaba a las personas y situaciones de tal forma que nadie se daba cuenta que ella era la que estaba detrás, pensó que Sasuke también caía redondito en su juego.
- Me subestimaste-La mujer le miró estupefacta, parecía que el Uchiha leía su mente- No soy tonto, puedo olor a un millón de kilómetros tu esencia cuando algo increíblemente conveniente de la nada llega para favorecerte, como la vez que tu compañera de cuarto tenía drogas y que convenientemente, un guardia encontró por casualidad, cuando vino ayudarte porque alguien había entrado a robar a tu habitación, tu huella estaba presente ahí, con tu cara de buena persona, de yo no quebró un huevo, además aduladora, eres bastante cínica para engañar a todos de que eres casi la virgen maría- Dijo divertido.
La chica estaba pálida, cómo Sasuke sabía todo eso, no lo entendía trato de ser lo más inteligente posible, le pagó a unos chicos para robar primero otras habitaciones, de solo recordar que tuvo que acostarse con ambos para ayudarla a sacar a la idiota que tenía como compañera, solo para tener el cuarto para ella y así poder estar con Sasuke tranquilamente.
La risa llena de burla y malicia resonó en la habitación, Sasuke estaba realmente divertido con el aspecto de Sakura, rió aún más fuerte le divertía la situación, terminó de vestirse entre risas.
-Escucha, te diré esto una sola vez y quiero que se te quede grabado-
Sakura le miró a los ojos, por el tono de voz que empleó sabía que todo rastro de diversión se había ido, los gélidos ojos del Uchiha estaban clavados a ellos.
-Te conozco demasiado bien, así que si sé que haces algo contra mi familia, contra mía y sobre todo contra Naruto, quien no tiene culpa de absolutamente nada de esto, te mato-
La amenaza había sido pronunciada en voz baja pero tan hiriente y cruelmente verdadera que hizo llorar a Sakura.
-Desde hace cuánto conoces a ese doncel para defenderlo tanto, es que lo amas-Preguntó entre sollozos.
-No lo conozco, apenas acabo de ver su aspecto físico el día de hoy-
-Entonces porque defiendes a alguien que ni conoces- Inquirió mortificada.
Sasuke sonrió de lado muy seguro de las palabras que iba a pronunciar
-Porque él será mi esposo y como tal lo defenderé de todos…