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23 Years of You por Fuerza Friki

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UN MES ATRÁS

-¡Minho! - La alarma de incendios sonó agudamente mientras trastes golpeaban en la cocina.

-¿Qué pasó? - Minho entró mientras Minami corría de un lado al otro intentando apagar la cena. -¿Otra vez? No debes distraerte mientras estás cocinando Minami.

-Lo sé, pero estaba editando el video de la boda de los Park y se me fue el tiempo.

-Muevete, yo cocinaré. - Minho debía cuidar de Minami que ahora trabajaba mucho más, desde que su padre se había llevado a Minho ya no le pagó y decidió abrir su propio negocio. Y vivió por primera vez como una mujer independiente, aunque desde que Minho volvió a casa era mucho más dependiente de él y Minho de 23 años debía hacer todo su trabajo en el escándalo. Eran como compañeros de apartamento, lo que hacía que su relación fuera mejor de lo que había sido.

-Gracias Minho-ssi.

-A veces creo que lo haces adrede. Ni Cinnamon puede comer esto, no deberías desperdiciar la comida.

-Ya consideraste ser mi modelo.

-Ni lo sueñes.

-¿Por qué? - Minami se quejó haciendo un puchero, había intentado que su hijo fuese modelo desde hacía unos meses que había terminado sus estudios, pero al final ambos estaban en la misma línea de trabajo y Minho se volvería un productor de programas deseando ser director algún día.

-No estudié como loco para terminar viendome bonito.

-¿Tampoco quiere ser actor?

-Eso se acerca más, pero prefiero ser yo quien cuente la historia y no un personaje en ella.

-Mi hijo es muy sabio.

-Mi madre es muy torpe.- Le sirvió la comida.

-Voy a ir con Joonjae y Takuya - Minho se puso su chaqueta.

-Ve con cuidado.

-Toma Cinnamon - Puso algo de comida para el perro algo viejo y cansado y le acarició la cabeza. Salió de la casa y se subió a su auto, tendría que ir por Joonjae ya que este rara vez salía de su casa,estaba a un paso de ser un completo hikikomori. Llegó hasta el departamento del muchacho tocó el timbre exterior.

-Ya baja - le dijo, Joonjae era un campeón de videojuegos, estaba en el circuito profesional además desarrollaba sus propios juegos.

-¿Y si mejor nos quedamos?

-Ya no empieces, Takuya va a tocar.

-Solo iré porque es importante para él.

-Gracias chico raro. - Joonjae era renuente a ir dónde Takuya porque sentía que era completamente ignorado. -Ya era hora. - Joonjae suspiró no deseando haber bajado.

-¿Ahora a qué bar de mala muerte vamos?

-No queda lejos de aquí. -Los chicos se subieron al auto y condujeron unas pocas calles hasta un callejón donde una banda sacaba instrumentos de una camioneta.

-¡Chicos! - Takuya saltó frente al auto.

-Aquí estamos para ayudar - Minho salió del auto y luego Joonjae que veía en su celular.

-Nana necesita ayuda para meter su batería. - Takuya señaló a la chica con las baquetas bajo el tirante de su blusa.

-Sería perfecto, estos inútiles no hacen nada.

-No exageres - el chico sentado detrás de la camioneta dijo mientras alineaba líneas de polvo blanco.

-Vamos chicos- Takuya lo señaló y se acercó a aspirar una línea.

-¿Ustedes no le entran? - El bajista preguntó y los chicos negaron.

-Joonjae lo dejó porque es campeón en el circuito de gamers y Minho es deportista, así que ni fuma. -Takuya dijo antes de que los chicos hablaran y Joonjae sacó un cigarrillo para fumarlo, todos sabían que en la universidad había estado siempre con un poco de marihuana para lidiar con algunas cosas pero a veces los torneos requerían exámenes antidoping así que lo había dejado por eso.

-Dame uno de esos - Nana se acercó a agarrar uno.

-Llevaré la batería.-Minho dijo y comenzó a cargar cosas. -Así puedo comenzar a beber.- Entró con ayuda de otro chico y armó la batería mirando el bar. Se dirigió a la barra y pidió una cerveza mientras los chicos de la banda probaban el sonido.
-¡Ya era hora Taeyeon! - Minho miró como una chica de cabello amarillo llegaba con chaleco de cuero negro y una falda de lentejuelas hasta detrás de la barra.
-Estaba en mi otro empleo.- Minho le veía fijamente, definitivamente era la viva imagen de Taeyeon, labios carnosos, ojos rasgados y piel pálida. Solo que su cabello era de color diferente, pero era como se veía Taeyeon en las fotos de su madre.

La chica se puso un pequeño delantal negro y dejó su mochila detrás de la barra, ahí fue cuando notó que el muchacho la veía. -Taemin - dijo en silencio solo moviendo sus labios y el miedo se notó en los ojos de la chica que sostenía una charola. Minho se quedó quieto al ver que negaba y tras unas cuantas canciones de la banda un pequeño papel doblado llegó junto a su cerveza.

“Te veo en el callejón en cinco minutos”

Minho terminó su cerveza y se dirigió al lugar diciendo que iría al baño. Cuando salió se recargó en la pared y revisó su celular. Cuando Taemin salió por la puerta trasera le miró fijamente.

-No diré nada - Minho dijo antes de girarse.

-Espera - Taemin sostuvo su brazo antes de que se marchara. -Cinnamon.

-Está bien, algo viejo y consentido pero bien.

-¿Y tu mamá?

-Minami está bien, mucha gente cree que es mi amante porque vivimos juntos. - Taemin sonrió. -Volveré adentro. - Taemin afirmó y se quedó recargado en el muro. Minho estaba por entrar pero se detuvo en la puerta. - No está bien. - Le miró y cerró los puños con enojo, Taemin estaba asombrado de que se girara -¿No podías ser más considerado? Mi madre se ha vuelto loca intentando saber dónde estabas, tú perro estuvo deprimido y tú ni siquiera pudiste llamar, no es como si nos hubiésemos mudado ¡Eres un hijo del carajo, egoísta, estoy hasta la madre de escuchar a la gente preocuparse por tí y que a tí te valga verga!

-¿Me vale verga? No me vengas con tus pinches quejas, si no me importaran no me hubiese marchado ¿Crees que estaría bien que me quedara siendo una carga para todos? No iba estar con los brazos cruzados y aguantando todas las locuras de mi tío no quería ser una carga para Minami.

-Siempre eres una carga, engreído.

-¿Engreido? Lo dice el niño que creó problemas a todos.

-Yo ya no soy un niño y no tiene nada de malo pedir ayuda a gritos.

-Tampoco soy un niño idiota y me gusta hacer las cosas por mi mismo. - Taemin lanzó un puñetazo.

-Ahora si te rompo toda la madre - Minho intentó atacarlo pero fue detenido.

-Detente Minho - Joonjae lo sostenía con dificultad de los hombros.

-Ya aguanté demasiado de este bastardo.

-Que yo sepa el bastardo es otro. - Taemin fue detenido de la cintura -¡Suéltame!

-Tae, recuerda que eres una dama - Takuya dijo mirando alrededor, por suerte nadie más estaba en el callejón. Taemin se calmó y Takuya lo soltó.

-Espera a que me quite esto y te moleré a golpes.

-Estoy esperando que te lo quites para ser yo quien te patee hasta los huesos. -Taemin volvió al bar y los chicos se quedaron viendo a Minho.

-Vaya reencuentro.-Takuya rió y miró a Joonjae que miró al piso.

-¿Lo sabías? - Preguntó molesto.

-No lo sabía, pero creo que me dí cuenta tan rápido como nuestro deportista.

-Vuelve a tocar, llevaré a Minho a casa.

-Gracias Joonjae.

-No quiero ir a casa, le voy a enseñar una lección.

-Será otro día -Takuya entró de nuevo.

-No te gustaría perder tu trabajo por un escándalo, ¿verdad? Lo mismo es para tu primo.

-No es mi primo.

-No, ahora es tu prima. - Joonjae rió metiendo a Minho al auto y comenzó a conducir en dirección a su casa.

 

Taemin estaba furioso, sentía que la sangre le hervía, le costó tanto sonreír a los clientes de esa noche y seguía mirando a ratos a Takuya con el temor de ser descubierto. Había notado solo a Minho pero no se había dado cuenta que estaban los otros dos ahí. Aunque debió pensarlo, los tres chiflados siempre estaban juntos y se había quedado con el más demente de todos.

Al final de la noche Taemin cogió sus cosas y estaba por salir alejándose de la banda que estaba desmantelando los equipos e instrumentos, salió por la puerta de enfrente no deseando toparse con el líder del trío infernal pero para su sorpresa el chico lo esperaba en la puerta.

-¿Qué quieres?

-Si dejaste a tu novio, ¿por qué no saliste conmigo?

-No estoy para tus bromas - le extendió un cigarro y Taemin lo tomó para ponerselo en la boca.

-¿Por qué de chica? - Preguntó pasando un encendedor y el mesero prendió fuego para tomar una gran bocanada. Se sentía bien, le hacía falta relajarse.

-Ganan más propina.

-¿Solo por la propina?

-También puedo trabajar en más lados.

-¿Mesera del bar de strippers? - Taemin afirmó soltando una bocanada de humo. -Chico listo, ¿intentaste en un bar gay?

-Si, no me fue tan bien. Gracias por el cigarrillo. -El menor tomó su mochila de nuevo y la puso en sus hombros.

-Dame tu télefono.

-¿Qué?

-¿No quieres moler al futbolista a golpes?

-Eso sí, - Takuya agarró el teléfono y abrió la cámara para tomar una foto a su pantalla con los datos de Minho.

-Listo, ahora puedes llamarlo para el duelo. Nos vemos chica bonita. - Takuya se despidió y se fue en dirección al callejón.

-Idiota.

-También te extrañé - gritó desapareciendo en la esquina.

Taemin fumó camino a casa, desechó la colilla e intentó mascar chicle para que no se notara en su aliento. Si su compañero de cuarto lo olía estaba muerto.

-¡Ya vine! - Dijo entrando al apartamento que compartía con un chico bastante peculiar.

-¡Rasgaste las medias! - Corrió a hincarse a frente a él mirando el jalón en la media, -te dije pusieras barniz transparente luego luego, ahora toda está marcada.

-Es dificil ponerse medias en el baño de McDonalds.

-Claro, cómo tu no pagas por estas cosas no las cuidad.

-Ya no voy a discutir - se dejó caer en el sillón.

-¿Qué pasó?-Le miró fijamente mientras Taemin se quitaba la peluca rubia que le daba comezón.

-Solo me encontré con alguien de mi pasado.

-¿Ex-novio? - Negó -¿Familiar?

-No, en realidad, pero éramos algo parecido.

-Algo parecido a tu familia - levantó sus piernas y se sentó poniendo las piernas del menor sobre él. -Eso es bueno.

-No lo es, esta persona nunca quiso ser relacionada conmigo y yo no quería ser relacionada con él, solo discutíamos y peleabamos Key.

-Así que tienes un hermano por ahí. -El chico que se hacía llamar Key era un diseñador que había contratado a Taemin como modelo unos años atrás y al enterarse que no tenía dónde vivir le había dejado quedarse con él por mitad de la renta y las utilidades, por supuesto.

-¿Un hermano?

-Sí, lo que describiste es un fastidioso hermano mayor.

-Bueno ese desgraciado vino a volver mi noche una mierda.

-¡Taemin!

-Perdón, pero me dijo engreído, egoísta y que me valía…  -Taemin guardó silencio, en verdad no había sido tan malo.

-Te han dicho peor, ¿no?

-No me hagas pensar, ya no quiero pensar - cubrió su rostro con la almohada.

-No seas egoísta y dile que estás bien y que aunque parezca que estás desesperado porque te vistes de mujer por ahí, te va mucho mejor de lo que cualquiera esperaría y trabajas duro por tu sueño.
-Eres el peor Kibum.

-Key - empujó sus piernas y se puso de pie - no creas que no te cobraré este par de medias, la modelo viene mañana y debo comprarlas.

-Agrégalo a mi cuenta - Taemin se levantó también y se dirigió a su cuarto. Sabía que Key tenía razón, tal vez era hora de dar señales de vida, habían pasado seis años y no había podido ver a nadie.

 

TRES SEMANAS ATRÁS

-Bueno - Minho contestó algo curioso ante el número desconocido. Se había encontrado con un conocido de la universidad a tomar café y la llamada lo había tomado desprevenido. Era raro que se juntara con más personas que no fueran Takuya  y Joonjae.

-Hola, soy yo.

-No me interesa. - Al reconocer la voz de Taemin, vio al chico de cabello decolorado y pensó que era irónico.

-Si cuelgas te corto el brazo.

-No puedes.

-Solo quiero disculparme, siempre haces todo más difícil.

-No quiero tus disculpas, si debes disculparte con alguien es mi madre, y te prohibo que la veas.

-Odioso.

-Ya voy a colgar mocoso, borra mi teléfono, no quiero saber de tí. -Minho terminó la llamada y observó al chico que le había pedido ayuda a hacer un video para el internet de su nueva canción.

-¿Quién era? -El chico más bajo preguntó mientras bebía un poco de café.
-Tu odioso ex-novio.

-¿Wook?

-No.

-¿Ren?

-No - Minho negó con la cabeza sabiendo que él chico era un caso perdido, desde que le había conocido mejor en la universidad sabía que tenía un desfile interminable de chicos y chicas.

-¿Qué otro novio mío cono… - el cerebro del chico de cabello blanco comenzó a trabajar. -¿Taemin?

-El mismo diablo, Jonghyun, vivito y coleando - Minho bebió lo que quedaba de su café y se puso de pie.

-¿Cómo está? ¿Dónde lo encontraste?

-No me interesan esas cosas.

-¿En serio? Estoy seguro de que me empezaste a hablar porque lo estabas buscando.

-No es así, no saques conclusiones - Minho salió de la cafetería seguido por el chico un poco más bajo intentando preguntar más sobre el tema, pero sin obtener respuestas.

 

Cuando la llamada se cortó, Taemin estaba más que enojado. Ahora sí había empezado la guerra, nunca más tendría consideración por Minho -¿Mocoso egoísta? Te enseñaré lo que es un mocoso egoísta, aguante todas tus cosas inmaduras, pero me contuve por lástima, ahora sí verás como te comportaste. - Key solo levantaba la mirada de su revista de vez en cuando sonriendo al escuchar al chico que solo vivía para trabajar, quejarse de otra cosa, lo que le hacía falta definitivamente era un hermano o familiar raro. De esos que siempre fastidian pero nunca te dejan, pueden ser sanguijuelas pero con que esten ahí basta.



EL DÍA DE HOY

Todos estos sucesos llevaron al punto que nadie esperaba, todo el pasado persiguió a esos dos hasta que se encontraron de esta manera, la manera menos deseada y con más rencor que nunca.

-Minho, no creerás quién vino de visita.


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