El Reflejo Oscuro de Loki por Adri6

El Libro de las Sombras de pronto se abrió y recorriendo hoja por hoja a gran velocidad, se detuvo en la siguiente escritura:

“Quizás todos y cada uno de nuestros sueños que murieron en manos de quienes los obstaculizaron, contaminaron nuestras esperanzas… y por eso, solo tal vez… alberguemos sin darnos cuenta… más oscuridad que luz en nuestro interior.

Debo confesarte que nunca fui real… tan solo soy un vestigio de mi en el mundo… lo que ves, es solo un fantasma que se asemeja en todo a mí, pero en esencia no es más que la proyección de mis deseos… lo que anhele y jamás pude hacer lograr… con dolor debo confesarte que este final esta sellado en mis suplicas más oscuras”





Desde el báculo se proyectaba un destello constante que iluminaba el lugar en donde los últimas almas luchaban por sus destinos, pero que en cierta forma, ya no tenían nada por que luchar. El silencio que invadía el mundo era brutal, no solo las personas habían desaparecido sino que también los animales y la vegetación, lo que alguna vez fue un bello paisaje ahora estaba completamente desolado.

“… No me has contestado… ¿qué harás?... ¿tendrás la suficiente valentía para enfrentar tu castigo o trataras de salvarte?”

“Yo soy el creador de todo… no puedes hablarme de esa forma… ¡no te lo permito!” –grito molesto ya que su orgullo de ser divino estaba herido y quebrajado de la forma más profunda y significativa. Con decisión trato de ponerse de pie y enfrentar la situación, pero frente a eso, tenía dos problemas, el primero era que el cuerpo apenas se lo permitía y el segundo era que su vieja alma, estaba rodeaba y abatida por el miedo.

“¿Creador?” –Pregunto Loki mientras observaba el esfuerzo que hacia Odín por tratar de erguir su cuerpo-- “no deberías usar aquella palabra para definirte a ti mismo… porque si lo haces, debes asumir la responsabilidad de todo… lo bueno y sobre todo… lo malo”

“Lo que hice fue por un propósito… tenía que hacerlo… y no me arrepiento” –cuando por fin pudo apoyar el peso de su cuerpo sobre sus piernas, de pronto escucho que su esposa le pregunto: “¿Qué hiciste?” Aquello le obligo mirarla de forma nerviosa, impaciente y tal vez… con vergüenza.

Frigga dio unos pasos pequeños pero que pronto se transformaron en una carrera por acercarse a ellos, su corazón le pedía y exigía saber la verdad, sea lo que sea que haya pasado no podía ser tan malo, aun tenía esperanzas en eso. Fue así que continúo corriendo pero se vio enfrentada a una barrera que le impedía estar con su esposo o con su “hijo”.

“Por favor… Odín… ¡¿qué hiciste?!... ¡dímelo!...” –Los ojos de la diosa se humedecieron lo bastante para no poder impedir sus lagrimas se deslizaran por sus mejillas de forma abismante— “…lo único que quiero… lo único que te pido… es que me digas que no tienes nada que ver con todo esto… por favor… dímelo” –suplico mientras se arrodillaba de forma inconsciente. Su largo cabello se ondulaba desordenado a su alrededor de su vestido que nunca se había ensuciado tanto en su vida. Sin evitarlo, poco a poco, su voz se fue apagando hasta transformarse solo en un susurro interno al tiempo que trataba de revivir el pasado con el fin de ver lo que evidentemente no vio.

“… Veo que no tienes intenciones de arrepentirte por tus acciones… pero desde mi punto de vista… no es ningún problema, porque tendré que arrancarte aquellas palabras de alguna forma u otra y eso es lo mas divertido de todo… quiero averiguar cuánto tiempo demoras en decirlas… cuanto te llevara entender que la oscuridad que habita en mi será lo que reine por siempre” –sonrió fríamente

“¡No te daré el gusto de verme suplicar!” –respondió de forma orgullosa mientras ignoraba lo que le sucedía a su esposa. En ese momento lo único en lo que Odín pensaba era como evitar su castigo y no mostrarse como el responsable de todo, tenía que salir de esto con la frente en alto.

Loki observo aquella actitud y no le sorprendió en lo absoluto, pero aun así, sin querer la sonrisa que adornaba su rostro desapareció en un instante al verse a sí mismo, privado de lo único que quería.

“Como quieras” –susurro para después en un idioma desconocido incluso para Odín, conjurar un hechizo el cual tenía como única finalidad la creación del decimo mundo. El suelo comenzó a temblar de forma imperceptible hasta llegar a un punto en el cual, apenas permitía que todos se mantuvieran en pie.

Aquel movimiento telúrico despertó a Tony, quien la armadura todavía le vestía pero estaba bastante dañada, no estaba del todo funcional por lo que JARVIS solo se mantenía operativo gracias a una reserva de energía.

“¿Qué paso?” –pregunto al ver a Steve a su lado con cara de “hemos perdido”

“De seguro nada bueno…” –levanto la mirada y a lo lejos diviso a Loki, Odín y Frigga

“Es el fin del mundo” –se quejo mientras se abría la máscara del traje para ver con sus propios ojos que estaba ocurriendo.

“Tony… moriremos” –dijo con pesar mientras le abrazaba con angustia— “…perdóname pero si nos ataca, usare mi vida para proteger la tuya… no me importa que te enfadas conmigo pero no puedo permitir que te haga daño en mi presencia”

Al escuchar eso, tuvo la intención de apartarlo de su lado pero ya no tenía sentido hacerlo, que su pareja le dijera eso le tranquilizaba en lo más profundo de su revoltoso corazón, a pesar de todas las estupideces que había hecho en toda su vida… habia logrado que alguien le amara de verdad.

“Gracias” –susurro y también le abrazo con devoción— “… lo único que lamento es no poder hacer lo mismo por ti… perdóname pero… creo que…”

“No te preocupes” –susurro de forma cariñosa— “…no te preocupes” –volvió a repetir mientras pensaba que hacer en una situación semejante.



Thor abrió los ojos y su primera reacción fue llamar a Mjolnir, empuñándolo con furia tuvo la fuerza de voluntad para ponerse de pie y enfrentar las cosas tal cual eran. Sus amigos ya daban por perdido todo pero él no, lucharía para salvar lo poco que aun quedaba. Agitando su martillo, logro elevarse rápidamente para dejarse caer por sobre Loki. La barrera que protegía al hechicero crujió al recibir el gran impacto desmesurado y violento, pero aun así, resistió el ataque. Loki sonrió y sin dejar de susurrar el hechizo, le dedico una profunda mirada al dios del trueno, quien a estas alturas no significaba nada, absolutamente nada.

“¡Detente!” –grito mientras también reunía todo el poder proveniente de los cielos— “O no me dejaras más opción que…” –completar aquella frase con una palabra tan destructiva le provoco un dolor en su corazón, aquel sentimiento le hizo derramar lagrimas pero que aun así, aquella sensación no le impidió lanzar un ataque en el cual contenía todo su poder. Los Rayos chocaron contra la barrera que de forma admirable se mantenía invicta.

Loki le ordeno mentalmente a la Gema que absorbiera aquella energía, y esta así lo hizo. Todos y cada unos de los rayos eran arrastrados hacia el agujero negro, por lo que de esa forma, desmentía el dicho que la luz siempre vence a la oscuridad. En ese instante, de forma definitiva todos los astros de cada mundo ya no existían, por lo que la temperatura decencia considerablemente. Poco a poco, los millones de cuerpos sin vida comenzaron a cubrirse con una fina capa de hielo para después, quedar enterrados en el olvido de aquel invernal elemento. Incluso en Midgard ya era evidente aquel suceso.

Mientras Thor respiraba agitadamente producto de su cansancio físico, noto que de su boca se desprendía un vaho, por un segundo le pareció que era extraño pero de pronto se percato que el ambiente había cambiado y más aun al ver a su Madre abrazarse a sí misma tratando de protegerse de la inclemencia del tiempo, le provoco una gran impotencia porque desde ahora en mas, ya no podía hacer nada.

“Bienvenidos a mi mundo” –Loki abrió los brazos de par en par mientras se reía nuevamente— “no solo sentirán en carne propia el frio, el silencio y la oscuridad sino que también… quedaran atrapados por siempre en el” --Aquella brisa tan fresca le recordaba sus peores tiempos pero lo bueno de todo, era que hoy por fin aquellos recuerdos se transmutaban en algo mejor… en justicia.

“¡Por favor!” –Grito Frigga de forma desesperada— “¡basta!”

“… eso mismas palabras use para suplicar pero no obtuve ni la mas mínima demostración de piedad…” –Bajo el rostro y observando fijamente a Odín, de pronto le dejo fuera de la barrera por lo que Padre de todo quedo expuesto a la inclemencia más brutal de todas, sintió como la sangre que cubría su piel se congelaba en tan solo segundos, además de que su cuerpo se vasocontrajo lo suficiente para recordarle de forma horrible que se merecía todo eso y tal vez mas.



La fina capa de escarcha se volvía a cada momento más espesa, por lo que Steve tomo en brazos a su pareja y resolvió protegerlo del frio, ya que no quería que la armadura comenzara a enfriarse y en vez de ser una ayuda, fuese un motor para que el frio fuera aun más peligroso de lo que por sí ya era.

“Estas deben ser las vacaciones de invierno” –bromeo Tony mientras sonreía como siempre, de forma burlesca pero también de forma coqueta.

“… Si… aunque prefiero el clima tropical” –confeso mientras trataba de buscar algún lugar en el cual le sirviera de protección

“… Ya me conoces… no me doy por vencido pero… hoy… creo que es la excepción” –susurro y trato de no dejarse escuchar tan desesperado o vencido pero lo estaba. Hoy era un día en el cual su intelecto no le ayudaba de nada, por la verdad… todo había acabado para él.

“Señor… en mi análisis detecto que ocho planetas se están acercando a la Tierra” –concluyo JARVIS

“¿Y ahora qué?” –Pregunto Tony mientras su cuerpo sufría de pequeños espasmos involuntarios – “¿no le basta con esto?” –se quejo demostrando que aún conservaba su mal genio cuando las cosas le superaban



El temblor era cada vez más fuerte por lo que Thor se acerco a su Madre y le ayudo a conservar la compostura. Odín sabía perfectamente que estaba ocurriendo y en aquella sabiduría, no pudo comprender como era posible que Loki pudiera crear al decimo mundo porque aquella acción estaba fuera de la lógica para cualquier dios. Aun con su brazo izquierdo fracturado, se abrazo a sí mismo y decidió para esperar pacientemente ver con su propio ojo lo que alguna vez el había destruido.

“Señor… la velocidad de los planetas ha ido aumentando considerablemente, y eso indica que no solo se están acercando, sino que estos harán impacto en aproximadamente… 10 minutos”

“… ¿Es un mal momento… para pedirte matrimonio?” –le pregunto Steve a Tony, este ultimo sonrió al escuchar eso, era bello vivir pero también, no tenía nada de malo morir siempre y cuando, la persona que mas amamos esté sosteniendo nuestra mano cuando suceda.

“No… no es un mal momento… de hecho… ya me imagino diciendo acepto…” –sonrió mientras que cada expiración generaba un vapor cálido que se enfrentaba en desventaja con el frio— “… Steve… espero… que tampoco sea un… mal momento para decirte… que te amo… te amo mucho” –se acerco y beso los labios de su futuro esposo a modo de despedida porque sin poder evitarlo, el reactor de su pecho ya había dejado de funcionar por lo que millones de pequeños restos se incrustaron en su corazón. Con aquel gesto de despedida del millonario, JARVIS también dejo de existir y aquello fue notorio cuando los ojos brillantes de la máscara se oscurecieron lo suficiente para que, Capitán América solo sostuviera del que alguna fue un millonario arrogante que se creía mucho pero que al final… hubiera sido su esposo.

Con lágrimas en los ojos sintió que un gran nudo en su garganta que le impedía respirar, existir o mantener la cordura, todo lo que estaba ocurriendo era horrible, una pesadilla… una película de terror… no podía ser verdad. Cayó de rodillas sintiéndose derrotado y destruido tal como lo estaba todo lo demás.

“… To… ¿Tony?” –trato de hacerlo reaccionar pero ya era tarde, cuando lo entendió, el destino del mundo o de todos los mundos ya no le importo, solo sentía que su pérdida era lo único que debía preocuparle. Todo lo demás… debía enfrentarse a su propia suerte— “…todo es tu culpa” –susurro débilmente mientras sus lagrimas humedecían un rostro que contenía una adorable sonrisa— “… es tu culpa… ¡todo esto es tu culpa!” –grito un odio proveniente de lo más profundo de su ser. Dejo el cuerpo de Tony sobre la nieve y tomando su escudo, comenzó a correr directamente hacia donde estaba Loki.

Los tres dioses escucharon el ruido característico de pisadas en la nieve por lo que se voltearon a ver que ocurría y no les dejo de sorprender, ver como un ser mortal quería vengar la muerte de su pareja. Su rostro reflejaba la medida justa de amor y odio, dolor y venganza… vida y muerte.

“¡No lo hagas!” –grito Thor de forma desgarradora pero ya era tarde, Capitán América se impulso lo suficiente para que su ataque fuera poderoso. Loki le observo divertido y en susurro dijo: “Absorbe su alma” El agujero negro obedeció y en un segundo, Steve sintió como algo era extraído de su cuerpo, era una sensación muy extraña, era como si una mano tocara tu corazón y lo acariciase suevamente. Contrario a lo que todos piensan, el héroe sintió paz por de esa forma no estaría mucho tiempo apartado de Tony, en tan solo un instante aquella revelación le hizo sonreír. Conservo aquella expresión cuando su cuerpo sin vida cayó al suelo prácticamente a los pies del Reflejo Oscuro.

El viento movía cúmulos de polvo blanco que poco a poco fue depositándose tanto en Tony como en Steve, y así, que a simple vista la existencia de ambos se transformarían en una leyenda que el tiempo se encargaría de borrar y sepultar.