Lazos a través del tiempo…
Porque nunca has tenido aquello que has querido, porque siempre has tenido que luchar por que los demás te reconocieran, que cuando el amor llego a ti, correspondiéndote, te sentiste inseguro. Pero aun así, siempre te esforzaste, llenándote con pensamientos sobre que la vida por fin te estaba recompensando todo aquello que te había quitado, que por fin serias feliz… cuan equivocado estabas…
Aquella tarde, cuando volvías del colegio; con una expresión radiante, dirigiéndote a la casa del que era tu pareja, tenías tantas ganas de contarle lo recién descubierto, sabias que lo harías feliz, él te había comentado lo feliz que le haría…. Y tú quisiste complacerlo… pero…
Cuando tocaste el timbre y no fue el que abrió sino una joven del mismo colegio, aquella chica que conocías bien al ser tan popular, la viste recorrerte con la mirada… sin expresión alguna…. Preguntaste por él, y ella simplemente te dejo pasar, entraste dirigiéndote a la sala, y lo viste ahí, tumbado con el brazo sobre sus ojos… solo con los pantalones puestos y, notaste, una prominente erección… él pensó que eras ella, porque te pregunto por qué tardaste tanto, y que quien había sido el que había tocado. Ella detrás de ti, solo pronuncio su nombre de manera seria, lo que sirvió para que el quitara su brazo y volteara a verla…. Pero sus ojos se encontraron con los tuyos, haciendo que se levantara de golpe, con una expresión de sorpresa, tu no hiciste movimiento alguno… el debió haber recordado que estaba medio desnudo porque busco su playera con la mirada, viste su mirada llena de frustración… sabias que estaba pensado que decir, y a pesar de todo lo comprendiste, por fin te habías movido y te acercaste a la mesa de centro… él se había puesto rígido… y ella misteriosamente había desaparecido… el hizo el intento de hablar pero, no pronuncio nada.
Abriste tu mochila, y empezaste a sacar los apuntes, aquellos habías tomado para él, cuando escuchaste que no iría porque se sentía enfermo… los dejaste sobre la mesa con sumo cuidado, tomaste una de tus libretas y en una hoja apuntaste los deberes que debía entregar para mañana, no dijiste nada, pero sabias que él te estaba mirando fijamente… tu cuerpo estaba temblando y retenías, como otras muchas veces lo habías hecho, aquellas lagrimas que amenazaban con salir de tus ojos… dejaste la nota y volviste a meter tu cuaderno en la mochila, topándote con el sobre que Tsunade te había dado, y pensar que habías venido a darle una buena noticia…
Cerraste la mochila, y te levantaste sin decir nada más, te dirigías hacia la puerta y lo sentiste retenerte, tu cuerpo tembló más fuerte, ya no tenías fuerzas…. Y te obligo a voltear… azul y negro se encontraron, el no dijo nada… suponías que aquello se debía a la posible mirada de dolor que tenías en el rostro… soltó su agarre lentamente…. Sin embargo sus dedos quedaron unidos unos segundos más… bajaste tu mirada a sus manos, y exhalaste… volviste a mirarlo a los ojos y sin decir nada le dijiste adiós… nuevamente emprendiste tu camino hacia la puerta, una puerta que no volverías a cruzar…. No supiste que fue lo que paso después de eso….
Llegaste a tu casa y continuaste con tu vida como si nada hubiese pasado, al fin ya estabas acostumbrado no es así? Los días del colegio fueron rutinarios, y nuevamente estuviste solo. Te concentraste en los estudios… y te alejaste de él…. Dos meses y terminarías aquella etapa de tu vida… y tú ya tenías una nueva meta….
Fueron dos meses que te esforzaste al máximo, y con el paso de estos la graduación llego, y esa fue la última vez que lo viste, y como le primer día, el vestía elegantemente, y tenia un aire de superioridad… detallaste su rostro, su boca, sus ojos, no querías olvidar nada, querías grabarlo en tu memoria y corazón… la ceremonia llego a su fin y a la salida pudiste nuevamente verlo, sus padres y hermano estaban con él, y a su lado aquella chica… siempre supiste que su hermano era muy inteligente, porque cuando te percataste te estaba mirando, te sonrió, tú le devolviste la sonrisa y con una pequeña reverencia, te encaminaste a la salida… exactamente rumbo a la estación de tren, para llevarte a aquel nuevo lugar donde te esperaría una nueva etapa… una que sabias sería difícil… pero que no te importaba…
No importaba porque, al final… no volverías a estar solo… dentro de poco, tendrías a alguien a quien entregar todo tu amor, y que sabias, te amaría incondicionalmente… porque lucharías por y para el… no importaba lo que pasara, siempre estarías para el… para el pequeño fruto de tu amor… y aunque él nunca lo supiera… habría lazos que los atarían a través del tiempo… lazos con forma humana… y que él se encargaría de proteger…
6 años después….
Corrías, debías correr…. El venía siguiéndote… lo escuchabas llamarte… y tú solo reías…. Te detuviste y diste media vuelta para abrir lo abrazos y estrecharlo entre ellos…. Él sonrió… reía a carcajadas mientras te decía tramposo… era feliz… por fin lo eras…. Él te abrazo y beso en la mejilla, mientras te decía lo mucho que te quería, lo dejaste en el suelo y él te dijo que quería irse… tomaste su pequeña manita, y comenzaron a caminar, era hora de volver a su hogar, aquel que habías formado para el…. Para aquel al que tú llamabas hijo y el que te decía… Papá… lo miraste y sonreíste, y fijaste tu vista al frente, como siempre lo habías hecho, porque aún quedaba mucho tiempo y camino que recorrer… pero por fin… ya no lo recorrerías solo… ya no estarías solo.