1.- Conociendo a la tía Ji Yong.
—Tío, tío, tío…mira.
—Pero si Yeon Jun es tan veloz. —Animaba el mayor al pequeño niño que corría de un lado a otro con un automóvil de juguete en las manos, el mismo que su tío le había regalado esa tarde.
Seung Hyun mantuvo su vista sobre su pequeño sobrino, quien seguía jugando, luciendo tan brillante y joven. Estaba agradecido de poder verle, aunque tuviera que cancelar su cita con Ji Yong, quien seguramente estaría enojado toda la semana.
Era un sábado por la tarde y Seung Hyun había sido visitado por su hermana y madre de improvisto, dejándole a su pequeño sobrino a cargo unas cuantas horas mientras iban de compras. El Choi menor aceptó sin pensarlo, a decir verdad no tenía muchos ánimos de ir a una de esas enormes fiestas a las que le llevaba Ji Yong últimamente.
Kwon había tomado la noticia de buena manera, raro en Kwon, por lo que Seung Hyun se sentía culpable por no querer salir con él.
—El tío Seung Hyun hará una pequeña llamada. —Anunció, recibiendo un simple asentimiento con la cabeza del infante, mientras se alejaba de la sala y así poder escuchar mejor.
— ¿Si? —Ji Yong parecía saber que era él.
—Hola, ¿Estás en la fiesta?
—No, aún es temprano para eso.
Hubo un lapso de silencio, Ji Yong sonaba molesto, sin embargo Seung Hyun sabía que no recibiría ninguna clase de reclamo.
— ¿Estás molesto? —Se escuchó un largo suspiro del otro lado de la línea.
—No estoy molesto, hyung. ¿Ocurre algo? —Sonaba como si realmente quisiera terminar la llamada.
—No, sólo me preguntaba…—Sus palabras se quedaron a la mitad tras escuchar los sonoros pasos de su sobrino corriendo hacía él.
—Tío, tío ¿Con quién hablas? —Seung Hyun comenzó a reir.
—Con mi novia. —Respondió divertido, asegurándose de que el hombre al teléfono escuchara claramente.
— ¿Qué estás diciéndole a ese niño, Seung Hyun? —El tono anteriormente frío fue sustituido por uno un poco más amigable.
—Sólo la verdad. —Volvió a reír, mientras se agachaba para tomar en brazos al travieso niño. —Yeon Jun y yo queremos saber si quieres venir a jugar con nosotros.
— ¿Qué?
— ¿Quieres conocer a tu tía, Yeon?
— ¡Siiii! —La joven voz se volvió más entusiasta.
— ¿Qué dices?
Ji Yong guardó silencio, no estaba seguro de si el mayor estaba hablando en serio. Su familia era un aspecto de su vida que prefería mantener en privado, incluso de él. Y estaban bien así.
—No lo sé, Seung Hyun…Hye Youn podría enojarse…
— ¿De qué hablas? Ella no se molestará, además ni siquiera está aquí. —Contradijo un poco alarmado. —Pero si no puedes…lo entiendo.
—Está bien…iré. —Ni siquiera supo porque aceptó, quizás era debido a ese aire de decepción en la voz de Seung Hyun.
—Te esperaremos aquí. — La llamada fue finalizada entonces. —Vamos, preparemos algo rico para tu tía.
El menor al ser bajado sólo se aferró a la mano de su tío mirándole con curiosidad. No recordaba haber escuchado que su tío tuviera una novia, sólo sabía que esa novia aparecería en ese momento.
Tío y sobrino estuvieron un rato en la cocina, sirviendo diferentes sabores de gaseosa, y llenando tazones con dulces que Yeon Jun llevaban después a la mesa de la sala. Seung Hyun definitivamente estaba pasando un buen rato. Convivir con un ser tan pequeño e inocente era como un regalo para él, podía actuar tan tonto como quisiera sin sentirse estúpido.
Repentinamente el timbre de la casa sonó, deteniendo lo que hacían ambos.
— ¡La tía ha llegado! —Dijo emocionado el menor, tapando su boca después con sus pequeñas manos, corriendo a sentarse en uno de los grandes sillones.
Seung Hyun sólo sonrió, le daba gusto ver que el menor quería conocer a Ji Yong, aunque ahora no estaba tan seguro de que haber dicho que Ji Yong era su novia estaba bien, Yeon era aún muy pequeño para entender las cosas de adultos.
Decidió no pensar más y fue a abrirle a su novio, que aunque este tenía la llave para entrar sabía que no lo haría por su cuenta estando su sobrino ahí.
—Hola, hyung. —Le saludó formalmente, haciendo incluso la reverencia. Seung Hyun no pudo evitar reír, pero al divisar el pequeño cuerpo de Yeon Jun espiándolos a escondidas lo entendió.
El menor al ser descubierto corrió de nuevo al sofá, mientras Ji Yong cerraba la puerta tras él.
—Hola, Ji Yong. —Saludó y, después de asegurarse que el menor no estuviera cerca, escabulló sus manos por la cintura del menor, acercándolo a él y así juntar sus labios de manera inocente.
Al separarse, las mejillas de Ji Yong estaban notoriamente rojas y sus manos temblaban ahora.
—He traído un pastel. —Murmuró, entregándole al mayor una caja con el postre dentro.
—Gracias, Yeon Jun estará feliz. —Le sonrió, mientras le indicaba que le siguiera.
Cuando ambos adultos se adentraron en la enorme estancia pudieron ver al pequeño niño aún sentado, manteniendo sus brazos cruzados, observándoles en silencio.
—Él es mi novia, Yeon, saluda. —Tras decir aquello recibió un codazo por parte del menor. Pensaba que aquello era muy irresponsable por parte de Seung Hyun, sólo conseguiría confundir al pequeño niño.
—Hola Yeon Jun, soy Kwon Ji Yong. —Dijo, sentándose a un lado del menor, quien le observaba ahora con el ceño fruncido muy atentamente, parecía estar confundido.
—Vamos, Yeon, saluda. —Le indicó Seung, comenzando a ponerse nervioso, al parecer no había sido una buena idea.
Yeon Jun repentinamente bajó del sofá y corrió a encender la televisión, ambos adultos le observaron en silencio sin saber qué hacer, el pequeño parecía buscar algo, desesperadamente cambiado de canal una y otra vez, hasta que se detuvo.
En la pantalla había un drama, donde se veía a una de las actrices vestida de dulce colegiala, el menor miraba la pantalla y después a Ji Yong, aún muy concentrado.
— ¿Yeon Jun? —Le llamó Seung Hyun, acercándose al menor.
—Tío…—El pequeño le hizo una seña para que se agachara y acercara su rostro, cosa que el mayor hizo. —Tú novia es muy fea. —Murmuró haciendo un puchero.
Ji Yong pudo escucharlo claramente por lo que abrió la boca con sorpresa, mientras escuchaba a Seung Hyun reír con fuerza. Kwon estaba acostumbrado a ser insultado de muchas maneras, pero no a ser llamado “feo” Vamos, era Kwon Ji Yong ¡Él no era feo!
—Yeon…Mi novia es sensible…no puedes llamarle así. —Seung Hyun más allá de hablar en serio estaba prácticamente burlándose del líder.
El pequeño niño escuchó en silencio y apagó el televisor. Su madre siempre decía que los dramas mentían mucho, así que podían mentir respecto a que tan bonitas eran las niñas grandes.
Pronto toda aquella situación pasó y el infante volvió a concentrarse en sus trenes a control remoto.
—Tu sobrino parece pasar mucho tiempo aquí, hay un montón de juguetes. —Comentó Ji Yong, mientras recibía la gaseosa.
Le era casi imposible ocultar lo incómodo que se sentía. Llevaba un par de años saliendo con Seung Hyun de manera oficial, sólo para sus amigos claro está, y eran escasas las veces que había visitado a su hyung en su enorme casa, pues sabía que para Seung Hyun ese lugar era su zona de confort, una en la que no quería entrar.
Seung Hyun entonces sonrió de manera traviesa, como siempre lo hacía antes de decir algo estúpido.
—Todos esos juguetes son míos, a excepción de ese automóvil de ahí, se lo he obsequiado.
El mayor parecía muy orgulloso de todas las palabras que salían de su boca, sacando una sonrisa de aquellos esponjosos labios rojos.
Ambos adultos estaban sentados en uno de los sillones, tan cerca que cualquier persona podría saber que estaban a punto de hacer. Los ojos de Seung Hyun iban de los labios de Ji Yong a sus ojos, intercalándose cada vez con más insistencia. Estar en su propia casa de esa manera tan íntima era diferente. Se sentía bien.
Todo iba de maravilla, hasta que la atenta mirada de Yeon Jun les obligó a comportarse. Se separaron rápidamente, no querían traumar al pequeño niño de esa manera.
Sin embargo el pequeño seguía mirándoles, pensaba que sus tíos lucían diferentes a las parejas de los dramas, incluso eran diferentes a sus padres y no entendía por qué.
Los mayores se dieron cuenta de esto por lo que rápidamente intentaron desviar la atención de Yeon.
—Veamos una película. Elige la que desees, Yeon. —Sonrió a su sobrino, poniendo en la pantalla la larga lista de filmes infantiles.
Finalmente el menor terminó emocionado por ver esas películas llenas de colores, era tan pequeño que el distraerle era tremendamente fácil.
…
Los parpados de Ji Yong pesaban demasiado, no podría seguir viendo más la serie animada, estaba muy aburrido y el cómodo sofá no le ayudaba mucho. Se estiró un poco y se acomodó de manera correcta, percatándose que su hyung estaba por completo dormido, aun teniendo a Yeon Jun sentado en sus piernas, quien miraba entusiasmado el televisor, riendo a carcajadas de ves en cuando.
No pudo suprimir una pequeña sonrisa, no era cercano a muchos pequeños, por lo que era reconfortante estar cerca de uno, se sentía tranquilo, el ver como alguien puede ser tan feliz de manera tan simple. Yeon Jun le miró repentinamente y más allá de mirarle raro como el resto de la tarde, le sonrió, regresando la mirada al televisor. Ji Yong sintió derretirse de ternura, ahora realmente deseaba que sus amigos cercanos tuvieran un hijo o que Haru no estuviera tan grande.
La habitación estaba oscura, pues ya era tarde y por las ventanas no entraba la luz suficiente, así que Ji Yong se puso de pie para buscar el interruptor. Encendió la luz y miró a Seung Hyun comenzar a despertar.
—Ji Yong…—Murmuró, tallando sus ojos, intentando adaptarlos a la claridad.
—Hyung. —Sonrió. —Es tarde…quizá debería marcharme ya. —Dijo, mirando su reloj.
—Cierto, tú fiesta. —Murmuró somnoliento, dejando las palabras al aire.
Ji Yong desvió la mirada, no era precisamente tarde para ir a su reunión, inclusive ya no tenía ganas de ir, sin embargo no quería ser sorprendido por Hye Youn conociendo a su hijo de manera clandestina. Lo sentía incorrecto.
Pero fue tarde.
El timbre de la casa sonó, y su corazón se aceleró al escuchar la puerta ser abierta.
— ¡Mamá! —Gritó Yeon, bajando de las piernas de su tío y corriendo a la entrada.
La expresión de Ji Yong era terror puro, mirando en todas las direcciones, pensaba seriamente en ocultarse o saltar por la ventana.
—Tranquilo. —Seung Hyun ya estaba a su lado, sujetándole de los hombros con amabilidad. —Ellas te quieren más de lo que piensas.
Pero en la mente de Ji Yong sólo resonó “Ellas”
Entre sonidos de bolsas, tacones y los pasos ruidosos del pequeño Yeon, aparecieron dos mujeres sonrientes. Hye Youn y su madre. Las piernas de Ji Yong temblaron en serio, preguntándose si era tarde para salir por la ventana, pero Seung Hyun sólo le sujetó con más fuerza.
— ¡Oh, Ji Yong! —Los dulces ojos de madre de los Choi le sonrieron con amabilidad, acercándose a él para saludarlo.
—Buenas noches, señora Choi. —Reverenció, sujetando la delicada mano. —Buenas noches, Hye Youn. —Dijo, sintiéndose sumamente apenado cuando la joven apareció frente a él.
—Es bueno verte por aquí, Ji Yong. —Le hizo saber, cargando en brazos a su pequeño hijo. —Ahora cuéntame que estuvieron haciendo toda la tarde. —Le dijo al infante.
—Jugamos. —Afirmó, asintiendo una y otra vez, a la par con Seung Hyun.
—No vieron demasiado la televisión ¿Cierto?
—No, mamá. —Negó, siendo imitado con gracia por su tío.
Las mujeres comenzaron a reír, mientras dejaban las bolsas de sus compras cerca del sofá.
—Hemos traído la cena, vamos a comer juntos. —Dijo la señora Choi, guiando a los presentes hacia el comedor.
—Mamá no ha querido cocinar para nosotros, es tan mala. —Se quejó Hye Youn, siguiendo a su madre.
Ji Yong fue arrastrado por Seung Hyun hacia el comedor, obligándole a sentarse a su lado.
—Hyung…quizás debería irme. —Murmuró por lo bajo, aprovechando que ambas mujeres charlaban.
Seung Hyun le miró en silencio, sin saber que decir realmente, aceptar así como si nada no estaba en sus planes, pero tampoco el negarse rotundamente, era decisión de Ji Yong el quedarse o no. Y no le acusaba, era su culpa por nunca acercar a Ji Yong a su familia, podía sentir lo ajeno que Ji Yong se veía de ellos. Lo único que pudo hacer fue sujetar la suave mano de Ji Yong, deseando que se quedara.
Egoísta de su parte, desde luego.
Ji Yong bajó la mirada, correspondiendo el gesto, sin saber que hacer.
— ¿Te quedarás a cenar, cierto, Ji Yong? Ha pasado tanto tiempo desde que pude disfrutar un rato con los famosos cantantes. —Su sonrisa amable fue lo que hizo asentir a Ji Yong.
—Déjeme ayudar, por favor. —Rápidamente se puso de pie y ayudó a preparar la mesa, estaba claro que no saldría de ahí en un largo rato.
…
Seung Hyun pensaba que su comedor era exageradamente grande, sin embargo al ver a su familia reunida en ese lugar todo parecía a la medida. Su madre y hermana no paraban de hacer graciosos comentarios, mientras le platicaban a Ji Yong sobre las compras que habían hecho. Seung realmente no entendía como podían hablar tanto tiempo sobre ropa, perfumes y joyería, él solía aburrirse siempre, pero Ji Yong parecía entretenido.
La escena era tan conmovedora que no pudo evitar sacar su celular y tomar una rápida fotografía, a lo que todos los presentes refutaron.
— ¡Seung Hyun, al menos podrías avisarnos! No quiero salir fea. —Chilló su hermana
—Ya, ya…tomaré otra.
Ji Yong se puso de pie rápidamente, apartándose de la escena, atrayendo la mirada de todos.
—Yo la tomaré, será bueno que salgan todos juntos. —Dijo, tomando el celular de Seung Hyun, mientras este se colocaba a un lado de su madre.
Ji Yong se aseguró de tomar varias fotografías, para que Seung Hyun pudiera escoger, la escena era conmovedora. Cuando dejó de hacerlo, Seung Hyun volvió a su lugar y le indicó a Ji Yong que se colocará cerca de su hermana.
Ji Yong se mostró dudoso, no quería incomodar a los demás estando ahí.
—Vamos, Ji Yong, ven aquí.
Ji Yong sonrió, sentándose a un lado de la hermana de su novio, dejando que el pequeño Yeon Jun se sentara en sus piernas.
—Ahora todos sonrían, digan kimchi.
Unos rostros brillantes y sonrientes fue lo que Seung Hyun logró capturar, haciendo que su pecho se sintiera cálido.
—Es bueno tener una foto de toda mi familia junta. —Aseguró Seung Hyun, logrando que todos sonrieran conmovidos, en especial Ji Yong.
Aquellas simples palabras guardaban un enorme significado para él. Seung Hyun estaba dejándole entrar a esa parte privada de su vida.
—Ahora quiero que Yeon Jun pose con sus tíos. —Hye sacó su celular, esperando que Seung Hyun tomara en brazos al pequeño Yeon.
Ji Yong seguía al pie de la letra las exigentes demandas de la Choi, parecía tomarse muy en serio el tomar una fotografía donde apareciera su hijo, no por nada tenía su cuenta de Instagram repleta de ellas. Ambos hombres se sentaron rectos, hombro a hombro, sonriendo amablemente, mientras Yeon Jun reposaba justo en medio, sonriendo aún más.
El flash los cegó por unos instantes debido a la cercanía, obligándoles a parpadear repetidas veces, mientras el pequeño Yeon, tan acostumbrado a la luz cegadora, se escabulló de entre sus brazos, corriendo a mirar la fotografía en el celular de su madre.
— ¿Te gusta, Yeon? —Preguntó su abuela, mirando como el ceño del niño se contraía, hasta que finalmente asintió, dejó el celular sobre la mesa y regresó con su tío.
—Tío Seung Hyun…—Sus ojos le miraban con inocencia llena de seriedad. —La tía Ji Yong es muy linda. —Afirmó, sonriendo ampliamente.
Los ojos de Ji Yong se abrieron una vez más con sorpresa, mirando a los presentes, esperando su reacción. Pero a cambio sólo recibió sonoras risas por parte de todos.
Ese niño era peligroso.