LuHan estaba debatiéndose la cosa más complicada del mundo...¿qué sabor de helado escogería?
Llevaba aproximadamente diez minutos tratando de encontrar uno de su agrado pero simplemente el de chocolate era el de mejor opción, pero ese de vainilla también se veía muy bien. Al final se dio cuenta que llevaba suficiente dinero como para pedir las dos bolas de helado juntas.
YiFan sonrió. Su hermano menor tardaba siempre siglos en escoger un puto sabor de helado lo cual era simplemente irrelevante para un joven de 18 años el cual tenía una cita con su nueva conquista. La estudiante de intercambio. Im Yonn Ah. Yonna. En pocas palabras. Había llegado a China hace tan sólo un par de semanas. Y pues Kris ya le había puesto el ojo en sima desde entonces.
Pero por culpa de su querido hermano, su madre lo había obligado a ir a comprar un helado. Y el tiempo que llevaba a LuHan comer el puñetero helado era un proceso muchísimo más largo que el de escogerlo.
Debería mandarle un mensaje a Yonna de que llegaría tarde.
-Kris...puedo regresar a casa sólo...aparte se ve que ya estas desesperado por ir a hacer tu trabajo.- Kris quiso reírse de la inocencia con la que decía LuHan aquellas palabras. Si tan sólo supiera que haría más que un trabajo con Yonna. Y que seguramente su madre lo castraría por dejar sólo a su inocente, despistado, olvidadizo y sobre todo, el complejo afeminado de su hermano. No llegaba vivo a casa.
-No te preocupes Luhannie. No es tan complicado mi trabajo.- LuHan sonrió.
Pasaría más tiempo con su hermano mayor y podría comer su helado más tranquilo.
Al llegar a casa, ambos hermanos se dieron cuenta de que, después de años, la casa que se encontraba de lado de la suya por fin está siendo ocupada. Un muchacho de casi la misma altura de su hermano se encontraba bajando un par de cajas de un pequeño carro el cual estaba atiborrado con una infinidad de cosas, como vajillas, cobertores y demás cosas. YiFan lo estudio y le dio el visto bueno a su nuevo vecino, pero aquella semana necesitaba pasar sus noches entre dos cálidos pechos que lo abrazaran. Mientas que LuHan se preguntó si aquella persona podría llegar a alegrar un poco sus días tan aburridos de cuando su hermano no se aparecía y TaeIl, su otro hermano mayor se pasaba las tardes junto con su novio Oh SeHun.
"Ese carro parece chatarra!" LuHan odiaba los carros, pero en ese en partícula era mucho más odioso que el carro que siempre presumía de hermano. El cual con una simple lavada podía parecer de ultimo modelo que muchos de su universidad envidiaban. YiFan observó que su pequeño hermano podía entrar solo a casa y el adelantar su pequeño pendiente. Kris simplemente susurro un hasta luego y tomo su amado auto para ir a recoger a su cita. Pero el mayor de los hermanos no recordaba un pequeño detalle. LuHan no llevaba llaves. Lo había dejado enfrente de la casa. Su madre llegaba dentro de, aproximadamente cinco horas. Y pues...el seguramente regresaría hasta el siguiente día. Y. Su madre lo castraría.
LuHan suspiro. Su hermano era un completo desastre, pero realmente no le importaba. Hacia un calor de los mil demonios y estaba completamente seguro, de que sí entraba se convertiría en vapor por tanto calor.
Aparte estaba comiendo su helado, el cual seguramente se derretiría pronto. Su playera rosa, la cual parecía vestido; ya que llegaba hasta la parte de los muslos como si sólo llevase una camiseta y estuviese desnudó de abajo. Un lindo y cómodo short color azul, una linda diadema con un pequeño moño rosa y unas zapatillas rosa pastel. Adornaban el pequeño cuerpo del infante.
El sudor de LuHan junto con la temperatura provocaba que su linda playera se pegase a su pequeño torso. El helado se estaba derritiendo y caían pequeñas gotas en su playera, tomó asiento en el portal de su casa y ahora las gotas estaban resbalando por su mano y caían en sus muslos.
Y ChanYeol simplemente no podía respirar. El había llegado a su nuevo hogar en un país, el cual aun no dominaba la lengua y que seguramente hablaba como un niño de diez años. Su mamá había tenido la magnifica idea de hacer que se mudara para "Cambiar los aires." Ya que después de estar en una relación de casi dos años con su ex novia Joy. Ella lo había terminado engañando con un tal Kim JoonMyun. Que se vallan los dos mucho a la mierda.
Tenía enfrente de el la imagen más pornográficamente existente. Aquel niño estaba comiendo un helado como sí se tratase de el mejor manjar descubierto por el hombre. Cada gota que se caía en su mano, este la lamia, sacando así su pequeña y rosadita lengua. Eso lo éxito un poco. Pasando su pequeña lengua desde la base del helado hasta la punta. Eso debería considerarse un pecado. El sudor de la frente de ChanYeol descendía poco a poco por el rostro de su nueva fantasía sexual.
Su miembro se endureció en segundos y se imagino miles de escenas con aquel niño abierto de piernas sólo y exclusivamente para el, mientras gritaba con su voz aguda su nombre. Su garganta estaba seca y realmente necesitaba de un buen polvo para no tratar de violar al niño que se encontraba a escasos metros de el. Pero la carne es débil y la falta de sexo podía más con el.
-Hola...soy Park ChanYeol.- Su voz sonó más grave de lo que esperaba. Y LuHan sintió como un escalofrío paso por toda su columna vertebral. Al girar este su cabeza noto como unos profundos ojos café oscuro lo veían intensamente y paso saliva inconscientemente. Apretó un poco su helado, logrando que el cono se rompiera y todo lo que quedaba de su helado cayera en sus muslos, soltó un gemido por la sorpresa y su cara se coloreo un poco. Aquello le pareció tierno y a la vez un poco excitante al mayor de los dos.
-Hola...Lu...LuHan.-LuHan se resigno a bajar un poco la cabeza y contestar apenado. Su vecino era un tanto atractivo. Y más cuando estaba tan cerca de el. El corazón de LuHan estaba palpitando como loco y ya no sentía sus piernas por el frío en ellas.
-¿No quieres pasar a mi casa a cambiarte?- En cualquier otra situación LuHan simplemente se hubiese negado, aunque estuviera muy aburrido. Pero no quería enfermarse por el frío en sus piernas porque eso de tomar jarabes e inyecciones no era su plan para las vacaciones de verano. Así que sólo asintió con la cabeza y siguió a su vecino hasta la entrada de la casa. El corazón de LuHan se estaba acelerando, sentía como una oleada de adrenalina se apoderaba de el.
ChanYeol se estaba tensando un poco, tener a semejante niño inocente no era bueno para su cerebro con mil y un ideas para hacer a aquel infante gritar su nombre y rasgando su piel con marcas rojas y moradas. Incluso ya le costaba caminar por su miembro notoriamente exitado.
-Puedes tomar una ducha, el baño se encuentra arriba. En un rato te dejo ropa limpia.- LuHan no quería bañarse pero el dulce del helado seguía pegado a sus muslos y no quería parecer un pingüino al caminar. Solo murmuró un acentimiento y subió con un poco de pereza las escaleras.
ChanYeol no podía creer que estuviera apunto de profanar al pobre muchacho. Era un enfermo por querer hacerle eso a un menor. Se sentía la peor mierda del mundo. Fue hasta la cocina y se refresco un poco el rostro con el agua de la llave. Necesitaba enfriarse para pensar con claridad.
Subió hasta su cuarto y todo estaba lleno de cajas, algunas abiertas mientras que la mayoría solo colocadas en desorden. ChanYeol siempre había pensado que lo que primero tenía que ordenar al llegar a una casa era el baño y la habitación. Ya lo demás siempre podía esperar. Así que fue a una de las cajas con la enorme etiqueta de Ropa en ella. Y solo pudo encontrar las molestas camisas que usaba para el trabajo. Suspiro, seguramente su demás ropa estaba hasta abajo en otra caja. Mientras que su ropa interior estaba ya puesta en un cajón de su ropero. No tenía ni siquiera un short para su vecino.
Se resignó a caminar hasta su baño y al abrir con un poco de miedo la puerta se encontró con una imagen que seguramente jamás se quitaría de su cabeza. LuHan estaba parado en la regadera lavando su pelo con esmero mientras las gotas caían con parsimonia y el olor a durazno bloqueo el sentido del olfato al alto. Aquel muchacho era todo un ángel. Estaba completamente desnudo ante el. Paso saliva. No podía hacerle nada. Pero ¡joder! Su miembro estaba doliendo infiernos en su interior y sus manos picaban por pasarlas en cada milímetro de ese cuerpo del pecado. No había cortinas en su baño ya que no las creyó necesarias y mierda que agradece no haberlas puesto.
LuHan giro su rostro y se sonrojo al ver a su vecino recorriendo su cuerpo como SeHun veía a TaeIl, eso le daba asco pero el ver que alguien lo veía de esa manera en cierto modo lo emociono y sintió como toda la sangre se dirigía hacía su miembro. Eso ya no era nuevo para el menor. Había tenido un sin fin de erecciones cada ves que escuchaba a TaeIl gemir en el cuarto de a lado y el comenzaba a restregar su pequeño miembro contra su cama para quitar ese molesto dolor de este.
Su vecino simplemente dejo la ropa y LuHan hizo un puchero involuntario. Quería más de esa intensa mirada. Y sin siquiera pensarlo mucho, cerro las llaves del baño y salió de este con las gotas escurriendo por todo su cuerpo. Abrió la puerta despacio y se encontró con ChanYeol recostado en su cama con su brazo tapando los ojos.
Se subió en su regazo dejando que sus piernas rodearan la cadera de este y comenzó a moverse un poco, con su trasero sobro el miembro su vecino. Había visto un sin fin de veces a TaeIl hacer eso con su novio y aunque nunca llego a ver más, tenía una idea. Su vecino se sorprendió de tener a LuHan encima de el y por un momento temió por si lo rechazaba, pero en vez de eso poso sus manos en su trasero y comenzó a masajear, haciendo que LuHan soltará unos suspiros y a moverse con más intensidad. Coloco sus manos en los hombros de su vecino e inclino su cuerpo para estar más cerca de este. ChanYeol se desabrocho el botón del pantalón y LuHan se levanto para sacárselo por completo, deleitándose así con la vista de un miembro enorme, el cual se escondía en los negros bóxers, los cuales ya estaban húmedos por el pre semen. El menor se relamió los labios y ChanYeol se quito la playera que traía aventando la a un lado de la cama, LuHan se percató del movimiento y su miembro se levanto un poco más al ver con detenimiento el pecho de su vecino.
LuHan retiro los bóxers del mayor hasta la altura de las rodillas y se imagino su helado que había tirado y comenzó a lamer el miembro ajeno logrando escuchar un par de gruñidos de fondo. ChanYeol tomo los dorados cabellos del niño y simplemente movió su cadera para poder profanar más su garganta. Estaba muy exitado viendo a LuHan tragar su miembro en posición de cuatro con el trasero en popa. LuHan pasaba su lengua en la glande y mordía un poco la carne. ChanYeol lo separo de su miembro cuando sintió que estaba apunto de terminar y se incorporó un poco, tomando el rostro de LuHan entre sus manos y plantando un beso en esos labios color rojo intenso. LuHan apenas y podía responder al beso, ya que era su primer beso pero rodeo con sus brazos el cuello de su mayor y dejo que este llevara el control de todo. ChanYeol se sintió poderoso al ver el comportamiento tan sumiso del niño y de nuevo jugo con el bien formado trasero de el.
Lo fue recostando poco a poco y separo los muslos de este para así poder quedar frente al capullo virgen del menor. Este se sonrojo y ChanYeol comenzó a repartir besos en su cuello, dejándolo rojo y lleno de chupetones. Al tener sus piernas separadas hizo que lo rodearan para así juntar mas sus cuerpos mientras que el alto fingía embestidas, rozando su pene en el ano del contrario logrando que LuHan soltara gemidos en su oreja. Bajo su boca hasta los pezones rosados de este y tomo uno en su boca mientras que el otro lo tomaba con su mano. Los movimientos de caderas de ambos aumentaron y LuHan presionaba el cuerpo del alto contra el suyo mientras su manos jalaban con desespero el cabello del contratrio. Se sentía tan bien tener un cuerpo tan grande encima del suyo y se sentía completo al ver los intensos ojos de ChanYeol en su cuerpo.
ChanYeol se separó de su cuerpo y se maldijo por no tener lubricante. Tendría que usar su lengua.
Descendió dejando más chupetones a lo largo del pequeño cuerpo y deleitándose con la cadera. Las manos de LuHan cayeron en sus pezones y los comenzó a tocar mientras gemía una y otra vez el nombre de ChanYeol. El nombrado mordió sus muslos dejando sus dientes marcados y poso su mirada en el rostro de LuHan, era una obra de arte. Bajo su cabeza y metió su lengua con parsimonia separando las paredes anales y preparándolas para su miembro. LuHan soltó un grito de puro placer y puso una mano en su miembro para sentir más placer.
ChanYeol considero que ya era suficiente y metió lentamente su miembro en aquellas paredes que lo recibieron. Puso los muslos del menor en sus hombros y LuHan grito por el dolor que le provocó la entrada de ChanYeol. El mayor se quedo quieto repartiendo besos en el rostro y boca del otro y LuHan comenzó a mover su cadera contra el otro cuerpo. ChanYeol tomo el control y sus estocadas iban cada vez más en aumento mientras sus manos tocaban los muslos contrarios y sus cuerpos hacían ruido al chocar. LuHan gritaba y ChanYeol gruñía.
ChanYeol metió su lengua en la boca de LuHan y este se corrió al sentir el miembro del contrario tocar su próstata. Las paredes del menor rodearon el pene de ChanYeol y le éxito de sobre manera ver el rostro de placer de LuHan a causa de el, y termino de correrse en el. Marcándolo como suyo y robándole su primera vez.
ChanYeol se sorprendió por que acaba de hacer. LuHan en cambio le regalo una sonrisa.
-Quiero repetir...- y metió su lengua en la oreja del mayor.
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Al día siguiente LuHan llego corriendo a tocar la puerta de su vecino sosteniendo una bolsa negra. Traía un vestido color blanco el cual le llegaba a las rodillas y tenía un poco de labial en los labios. Una diadema detenía su cabello y un suéter color rosa pastel cubría sus brazos.
ChanYeol abrió la puerta y el infante se avalando para robarle un beso. El alto rápidamente rodeó el cuerpo contrario posando sus grandes manos en el trasero del bajo y logrando que LuHan soltara un suspiro. Ambos se separaron. Y LuHan puso la bolsa negra entre ellos.
-Encontré esto en el cuarto de mi hermano TaeIl...y me gustaría probarlo contigo.- ChanYeol saco un vibrado de la bolsa y asintió. Claro que probarían eso y mucho más cosas.
Fin