–Haz como quieras.
Cuando Jimin lo escuchó su corazón se destrozó completamente. Sabía que sería así pero no sabía que dolería tanto. Al escuchar sus palabras tan indiferentes simplemente lo habían aniquilado totalmente. Yoongi se levantó de su lugar y se dirigió a la puerta.
–Nos vemos Park Jimin –Dijo antes de retirarse del lugar.
Jimin observó como el chico que tanto le gustaba se iba del lugar y él no podía hacer nada. Pero también sabía que si lo detenía su orgullo es el que escaparía primero. Comenzó a llorar descontroladamente, le faltaba la respiración y daba grandes bocanadas de aire. Yoongi no era la persona destinada para él, y por supuesto que él no insistiría más.
Esa noche no pudo dormir. Ni las noches consiguientes pudo hacerlo. Ahora ambos se trataban como desconocidos y no había posible reconciliación. Jongin se quedaba con el en las tardes para perfeccionar sus presentación, se había esforzado mucho por la letra y Jimin no defraudaría al chico aún si no encontraba ganas de hacer algo.
–¿No se han acercado mucho Hoseok hyung y tú? –Le preguntó el castaño al otro castaño.
–Algo así –Respondió Taehyung ante la pregunta del mayor.
La cafetería se encontraba llena de trainees, algunos compraban cosas del lugar mientras otros estaban comiendo tranquilamente. Jimin había mejorado su humor últimamente gracias a la ayuda de sus amigos. También se habían dado cuenta que Taehyung había mejorado mucho su relación con Hoseok. Y Jungkook últimamente salía con Namjoon y Jin a comer en las tardes mientras que los fines de semana se encontraba con Yoongi para afinar detalles de su presentación.
–Y yo que pensé que al final te quedarías con Jungkook –Sugirió el mayor de todos.
Taehyung abrió sus ojos como plato al escuchar al rubio pronunciar aquellas palabras, miró discretamente al menor para observar su reacción y dijo.
–Jungkook no es mi tipo. Creo que Hoseok-hyung se acerca más a mi tipo –Dijo casi en broma, casi serio.
Jungkook no lo miro en ningún momento. Simplemente oyó aquellas palabras pero lo hacía sentir incomodo escucharlas.
–¿Soy tu tipo? –Preguntó Hoseok quien se había unido a la conversación repentinamente.
Taehyung se sobresaltó al escuchar la voz cerca de su oído. Hoseok había puesto sus manos en los hombros del menor mientras sonreía abiertamente.
–Mejor los dejamos solos –Sugirió Jimin mientras miraba a Jongin y a Jungkook con además de retirarse. Los chicos los siguieron pues ya habían terminado de comer hacía un rato salieron de la cafetería para deambular por los pasillos.
Aunque Jungkook antes de irse, volteó a ver como Taehyung sonreía mientras platicaba con Hoseok. ¿Cómo habían llegado a esa situación?
–Apuesto que él es quien te gusta –Se escuchó la voz de Jin.
Jungkook se sorprendió al escuchar aquella voz y notó como sus otros dos amigos ya lo habían dejado completamente solo. Como siempre Jin estaba acompañado de Namjoon.
–No puedo negarlo. Creo que él me gusta. Pero no tengo el valor de decírselo –Contestó Jungkook apenado.
–Hoseok está a punto de robártelo. No te la pienses mucho y díselo –Sugirió Jin.
–Apuesto que Hoseok también siente algo por ese chico –Namjoon dijo mientras lo escaneaba con la mirada aquella escena.
–Tengo miedo –Respondió el menor.
Jungkook tenía miedo de confesarle a Taehyung que también le gustaba. Y más porque se había tardado demasiado en contestar a su confesión. De seguro Taehyung ya lo había olvidado y tampoco quería interrumpir la felicidad que estaba a punto de obtener. No quería obligarlo a quedarse a su lado simplemente porque antes había gustado de él. Eso definitivamente no era una opción.
–¿Jungkook sigue mirando hacia acá? –Preguntó Taehyung.
–Así es. Me da la impresión de que le gustas –Argumentó el mayor.
–No lo creo. Nunca respondió a mi confesión –Contestó el castaño apenado.
–No me parece que ese sea el caso –Sugirió Hoseok.
–Si así fuera, creo que ya hubiera dicho algo –Se defendió el menor.
Durante ese tiempo, Hoseok se le había declarado a Taehyung pero el chico lo había rechazado indiscutiblemente. El castaño aún seguía enamorado de Jungkook, así que le había dicho al mayor que le daría una oportunidad cuando olvidara al menor por completo. Sin embargo su plan no fluía como esperaba, el compartir las clases juntos y convivir como antes lo hacía aún más imposible. Aunque también su corazón estaba cambiando poco a poco pues ya se estaba acostumbrando a la presencia del mayor lo que hacía sentir su corazón aún más confundido acerca de lo que realmente sentía.
–Vamos Jungkook. Pasa el rato con nosotros en lo que empieza la clase. Yoongi no vino hoy porque tenía algunos asuntos con su trabajo –Le sugirió Namjoon al menor.
–Vale –Contestó Jungkook con una sonrisa sin dejar de mirar al castaño que se encontraba a escasos metros lejos de él. Los tres salieron de la cafetería dejando a Taehyung y a Hoseok completamente solos.
–¿Aún te gusta Yoongi-hyung? –Preguntó el rubio al menor.
–¿Por qué preguntas? –Contestó el chico confundido.
–Aún me gustas Jimin. Mis sentimientos no han cambiado –Contestó el mayor.
Jimin se quedo en completo silencio. No respondió nada y después saco su celular para ver la hora. La siguiente clase comenzaría dentro cinco minutos.
–Hablemos después –Sugirió Jimin mientras caminaba hacia su próximo salón de clases.
Jungkook fue al baño antes de entrar a clases. Jin y Namjoon lo acompañaron también al baño solo que ellos lo estaban esperando afuera.
–Ese chico me cae muy bien –Decía Namjoon.
–Igual a mí. Es un chico muy dulce –Sonreía Jin mientras miraba en dirección al baño.
–Espero que Yoongi arregle sus asuntos con los chicos. Quiero salir con todos juntos –Proponía Namjoon muy emocionado. Los hoyuelos que tenían se asomaban por su rostro cuando sonreía.
Jin vio como los hoyuelos de su chico se asomaban descaradamente en aquel pasillo. No había nadie así que los agarro desvergonzadamente mientras le plantaba un beso en sus labios.
–Esos hoyuelos me ponen loco –Le susurró Jin.
–Tú me pones más loco –Namjoon habló pero su voz sonaba gravemente sexy.
Namjoon esta vez tomó el mando. Agarró el rostro del mayor con sus manos y comenzó a besarlo. Jin abrió la boca para dar paso a la lengua de su hombre y este comenzó a besar sin tapujos. Es cierto, no había nadie por los pasillos. Así que estaban aprovechando el momento para besarse. El beso se sentía caliente y el ambiente era sensual. Ambos jugaban con sus lenguas mientras chocaban la una con la otra. Ambos se sentían el cielo cuando se besaban de esa manera. Disfrutaban por completo la lengua del otro. Jin podía sentir que Namjoon sonreía cuando lo besaba. Y Jin se sentía completo cuando el menor lo agarraba de aquella manera. Namjoon lo agarró de la cintura y lo apretó contra él.
De repente Jungkook salió del baño sin previo aviso. Vio que ambos se estaba disfrutando entre sí. No podía negar que se sentía incomodo porque el mayor le gusto durante un tiempo. Pero también estaba feliz porque ambos, tanto Jin como él habían encontrado alguien quien los quisiera. Jin ya tenía la persona a su lado y Jungkook aun tenía que ir por ella antes de que alguien más se lo quitara.
Estaba a punto de decirles que se detuvieran porque la gente comenzaría a llegar antes de que comenzaran las clases cuando sintió una mano cubrir sus ojos suavemente. Sintió como alguien lo giraba lentamente hacia su persona y después le destapo los ojos. Cuando abrió los ojos se dio cuenta que era Taehyung, él le sonrió mientras lo agarraba de sus hombros para distraerlo de la escena que estaba a sus espaldas.
–Tú no deberías ver eso –Habló el mayor –No quiero que sufras. Ya encontrarás a la persona indicada para ti –Continuó hablando.
–Ya la encontré. Solo que es muy estúpida y no se da cuenta –Le sonrió Jungkook.
Taehyung lo miró extrañado. Estaba a punto de preguntarle quien era cuando Jungkook se volteó y le hablo a los chicos que se estaban comiendo frente suyo. Estaban tan entretenidos con lo suyo que ni siquiera se habían dando cuenta que eran observados.
–Chicos, ya salí del baño. Dejen de besarse o los demás van a darse cuenta –Bromeaba el menor. A este punto la incomodidad que sentía se había esfumado.
–Lo siento –Gritó consternado el menor mientras aventaba a Jin.
–Lo siento –Decía el mayor mientras cerraba los ojos con fuerza debido a la pena que sentía.
–Lo digo por ustedes. No por mí –Rió Jungkook.
Ambos se habían despegado un tanto avergonzados y miraron a Jungkook. Se dieron cuenta que no estaba solo porque Taehyung estaba a su lado. Y Hoseok estaba a lo lejos caminando con una sonrisa de oreja a oreja mientras los miraba pícaramente. Agacharon la cabeza y Jungkook los agarró de la mano para llevarlo a su próxima clase. Todos entraron a la clase juntos.
–Hay una conversación que tenemos pendiente –Decía el rubio antes de despedirse de Jimin. Lo había acompañado a su departamento pues no quería dejar la conversación al aire.
–Lo sé. Sabía que me lo dirías –Sonrió abiertamente Jimin.
–Jimin, eres un chico fenomenal. Me gustas mucho y sabes que yo siempre te esperaré. Solo quería que lo supieras, quería decírtelo para que no se te olvidara –Le dijo Jongin.
Lo que tanto había guardado por fin podía decirlo abiertamente porque ya había pasado algo de tiempo después de lo de Yoongi.
–Lo sé. Nunca lo he olvidado –Le contestó Jimin.
–Podemos intentarlo Jongin. Estoy dispuesto a darte mi todo –Jimin lo había pensado cuidadosamente.
–Entonces, ¿Quieres ser mi novio? –Preguntó el mayor sorprendido.
–Te lo dije bobo, que estoy dispuesto a darte mi todo –Le contestó el menor como si fuese lo más obvio del mundo.
No podía estar siempre enamorado de Yoongi. Era el momento de dar el siguiente paso, y ese paso era Jongin. Cuando el rubio lo escucho se sorprendió totalmente. No esperaba escuchar esa respuesta del menor por lo que sus acciones hablaron antes que sus palabras. Acercó el rostro del castaño a sus labios y le plantó un beso al chico.
Rozaron sus labios y Jimin cerró los ojos. Jongin no sabía si ser más profundo así que solamente lo dejo ahí. Pero Jimin pensaba ir más allá de un simple beso. Esta vez lo atrajo hacia él y volvió a besarlo. Esta vez el beso era más profundo de lo que había sido el primer beso de ambos. Jongin le siguió el juego y abrió su boca para dejar entrar la boca del menor. El chico aceptó la propuesta y comenzó a jugar con la lengua del rubio. Jimin besaba muy bien, el mayor podía sentirlo. Sus labios eran carnosos y suaves. El olor que emanaba también era fascinante.
–Me tengo que ir –Se despegó el mayor del menor.
–¿Por qué? –Preguntó el castaño que estaba dispuesto a llevar más profunda su relación que solamente dejarlo con ese simple beso.
–Quiero que vayamos despacio. Eres demasiado precioso para mí –Le contestó el mayor totalmente convencido.
Esta vez le planto un beso en la comisura de sus labios. Luego en la nariz y finalizó en la frente del menor. Lo hizo dulcemente porque el chico realmente se había convertido en alguien muy importante para él. El menor asintió y ambos se despidieron.
–Jimin, ahora eres mío –Le guiñó el ojo el mayor.
El menor simplemente se sonrojó y le regreso una sonrisa. Así termino la noche.