Lunes 15 de Abril de 2002
Sabaku No Gaara miraba intrigado a Naruto, éste también le miraba de la misma forma detrás de sus lentes de sol, Gaara un hermoso pelirrojo de ojos verde marino y de tez pálida, estaba cansado, de hecho tenía resaca, ni siquiera había dormido para tener reseca.
La música del extraño celular de Naruto seguía sonando fuerte, “They Say” de Scar On Broadway, una canción que recién el 2008 vería la luz, aún no podía creer, a pesar de ya llevaba cuatro meses, maravilloso por lo demás al lado de Naruto, su hermano.
-Basta de mirarme así Gaa-chan- Recrimino el rubio.
-Claro que te miraré así, ayer cuando te emborraste no dejabas de pedirme perdón, te dije que no quiero saber sobre mi futuro ni sobre lo que paso con la persona que amaba, pero seguro que no te amaba a ti- Dijo en tono burlón.
-Basta Gaara, te dije que tu y yo nos amamos demasiado, somos la persona del otro, si mato a alguien tu eres a quien llamaría para deshacerme del cuerpo y viceversa, pero también seguro que no quieres saber quién será el amor de tu vida-
-Te digo que no, Naru, quiero que se de solo, después cuando me vez con el corazón roto ahí dime ese idiota no es el amor de tu vida si no que es este otro, quien seguramente con la suerte que me cargo estará casado con otro- Dijo con amargura haciendo reir a Naruto.
-Lo dudo en cuando él te conozca perderá la cabeza por ti, sabes él es medio ra…-
-Callete Naruto- Grito Gaara lanzándole agua.
Aún podía recordar como su vida comenzó a cambiar, como siempre había salido huyendo de su casa, su padre nuevamente lo golpeó, cuando tuvo la oportunidad de escapar lo hizo, y estúpidamente como siempre lo hacía, fue a un cajero automático a ver cuánto saldo tenía, su sorpresa fue mayúscula, al ver que tenía una grosera cantidad de dinero, que ni por si acaso podía llegar soñar con tener, como era temprano, si porque su padre llegaba de madrugada a la casa cada día a golpearlo y luego iba a tomar desayuno, como si nada, por lo cual Gaara, fue a su banco, para decir que era un error, él era muchas cosas menos un ladrón.
Mas en el banco le dijeron que ese dinero había sido depositado para él, no lo podía creer, al preguntar quién fue el destinatario, solo le dieron un nombre Namikaze Naruto.
Buscó por muchas partes, hasta que descubrió que el fiscal nacional era Minato Namikaze, no habían muchos en país, así que debían ser familia, le costó un poco hasta que pudo contactarse con el hombre vía correo electrónico, su respuesta fue un escueto mensaje donde aparecía un correo de Naruto.
Contactó entonces a Naruto, y este le respondió
“Porque eres mi persona”
Seguido de otro correo
“Ven a ver a tu papaíto piernas largas, en el café maid secret love mesa siete, adjunto el mapa como llegar”
Gaara demasiado curioso tuvo que rendirse ante todas las razones que le gritaban que no lo hiciese, la curiosidad pudo más, al llegar buscó la mesa y le vio un hermoso rubio de intenso ojos azules quien le sonreía nervioso.
Se saludaron y Naruto tomó sus manos y se largo a contar la historia más fantástica que hubiese escuchado en la vida, pero terminó creyéndole cuando le dijo cosas sobre él mismo que nunca le dijo a nadie y si ese rubio con cara de bobo se lo decía entonces era seguro que había encontrado a su persona en la vida
Llevaba dos meses en América, de alguna manera tanto él como Naruto habían logrado emanciparse, tanto por el dinero y sus pruebas psicológicas, pero lo más divertidos es que ambos habían nombrado a Kakashi como su tutor en caso de cualquier problema.
Ahora disfrutaba de los últimos días en las vegas antes de volver a Japón a clases en un nuevo colegio, a Gaara no le emocionaba y sabía que a Naruto tampoco sobre todo porque tenía que ir solo de fachas al colegio, ya que estaba dando exámenes libres en la universidad y a eso habían ido a América, a dar un examen de maestría en medicina que le exigieron para ejercer, y también debía al menos ir medio día a clases al colegio solo para que sus padres estuviesen tranquilos aunque les aseguraron muchos expertos en la materia que la mente de Naruto era la mente de un genio que no necesita ir a ese tipo de clases porque él ya lo sabía todo pero aún así para la emancipación lo solicitaron.
-Nunca más pido servicio a la habitación mocosos borracho- Dijo molesto Kakashi entrando a la piscina, donde estaban los otros dos, Naruto sobre una cama flotante con lentes sol puestos.
-No puedes negar que también disfrutaste de los chupitos de tequila- Dijo perezosamente el rubio, ya tenía su cabello rubio natural crecido.
-No lo niego pero parece que Gaara invoco al exorcista en el cuarto de baño-
-Te juro que nunca más beberé en la vida, aún no entiendo como mi padre podía vivir de esta manera los trescientos sesentaicinco días del año, siento que moriré en cualquier momento-Dijo en tono dramático.
-Lo peor es que en seis horas más debemos tomar un vuelo- Kakashi no estaba en mejores condiciones.
-Tengo ganas de perder ese vuelo, pero si lo hago mis padres me mataran, sobre todo mamá- Aun Naruto le costaba procesar que su madre estuviese viva, recordó cuando la vio en el hospital al otro día de su despertar, se abalanzo sobre ella llorando como un niño pequeño pidiéndole perdón por todo, Kushina le abrazo y le hizo cariño en su cabeza calva, mientras le decía que no había nada que perdonar que todo estaba bien, ahora que él estaba ahí.
Naruto tenía claro que al volver, lo primero que haría sería tomar a su madre y hacerle exámenes exhaustivos para quitar de su cuerpo ese tumor que la llevo a la muerte junto a Danzo.
-Qué harás al final con Iruka, tienes que ir a buscarle antes que Mizuki- Gaara ya sabía toda la historia.
-Crees que querrá volver con alguien que le engañó- dijo con amargura Kakashi
-Lo hizo una vez, porque no ahora, tienes que ir a buscarle y comenzar diciendo soy un idiota, perdóname no puedo concebir mi vida sin ti- Contestó Naruto.
-Sabías palabra de un idiota- Mascullo Gaara- Hablando de eso, has hablado con los hermanitos Uchiha- Como mejor amigo exigió saber toda la verdad del pasado de Naruto, solo obviando que había pasado con él y quien fuese la pareja de él en esa otra realidad.
-No, no he hablado con ellos, pero supongo que los veré- Se dejo caer del colchón inflable al agua, pensó en Sasuke e Itachi como estaban ambos preocupado de él, lo azorado pero arrepentido que estaba Sasuke de lo sucedido en la fiesta, Naruto los tranquilizo diciendo que todo estaba bien, no podía decirle que no, esa noche luego de toda esa adrenalina, pensó en frío a pesar de todo, pensó en todo lo que llevo al día de su muerte, cómo había perdido a su familia, a sus hermanos, a Minato, las cosas con él serían complicadas sentía aversión por el hombre, pero tenía que colocar un punto y coma porque ese Minato no era el Minato de su otra realidad, no era ese hombre que nunca le importo nada más que su propia estabilidad, no, el de la realidad que ahora vivía, era un hombre que tomo malas decisiones por amor pero que se preocupaba por él e incluso por su madre.
Por lo tanto esta era esa segunda oportunidad que tanto había pedido en su otra vida y tenía que agradecerle por lo tanto tenía que hacer las cosas diferentes, no podía permitirse ser el mismo cabron hijo de putas que destruyó todo a su paso, y menos ahora que podía estar bien todos.
-Yo aún no puedo creer toda esta mierda lo sabes Naruto verdad- Deidara apareció con un kimono y un vaso de soda y limón la mano-Aún así sé que es verdad-
Naruto miró a su hermano mayor y le sonrió este le respondió de la misma forma, tanto Yahiko como Deidara, sabían la verdad de Naruto junto a Kakashi y Gaara, fue así porque sus hermanos escucharon su conversación con Kakashi y exigieron saber que mierda pasaba, así que le rubio no tuvo más remedio que contar su verdad, ante la incredulidad de sus hermanos, pero al final al igual que Kakashi le creyeron y se gano un coscorrón de ambos por llevar las cosas así de mal en la otra vida.
-Yahiko aún regresa- Consultó Gaara saliendo del agua- Creo que comenzaré arreglar mis cosas necesito un baño-
-No, dijo que iba a comprar algo para nuestros padres y sus amigos-Comento Deidara, colocando los pies en el agua.
-Compraste todo lo que necesitabas – Consulto Naruto saliendo del agua también sentándose al lado de su hermano.
-Si ya compré un millón de materiales que en Japón no puedo encontrar, tendré que pagar sobre cargo por el peso- vio como Naruto le quitaba peso a sus palabras, gracias a su hermano eran todos millonarios-Aún no puedo creer que ganaras la lotería tantas veces seguidas y acá ganaras tantas veces en los casinos, lo peor nadie puede demostrar que es trampa cuando de hecho lo es-apunto con su dedo acusador enterrándolo suavemente en la mejilla de su hermano menor.
-Oye, no me culpes por mi memoria fotográfica y mi ci de 235 es algo nato, además no es trampa, es oportunismo, ahora tenemos dinero para la eternidad todos, y algo que aprendí en el pasado futuro como sea, es que el dinero quieras o no hermanito te da poder- Beso la mejilla de su hermano para después levantarse e ir a su habitación de hotel, habían comprado todo un hotel para ellos, era uno pequeño pero eso no dejaba de ser un 5 estrellas, y ahora estaba cerrado para todo público, hasta ese día, Naruto había decidido renovar la apariencia del hotel y ya tenía varias ideas para ello, había contratado a una excelente constructora y una empresa de diseño de interiores para que hicieron la labor de colocar al hotel en lo alto de las vegas.
-Creo que Naruto tiene miedo de volver a Japón- confesó Deidara a Kakashi.
-Lo debe tener, pero ya no puede hacerse el loco, tiene que volver si quiere ejercer como doctor, y todo lo demás que tiene en mente, además llevamos semanas acá en América, y es hora de regresar-Kakashi observo el cielo y como un avión interrumpía en él.
-También lo creo, todos con la información que tenemos ahora somos diferente, ya sabes, yo tengo que alejarme del alcohol y drogas y Yahiko necesita tratar esa depresión que tenía oculta de todos, así como tu tienes que ir por el amor de tu vida y Gaara buscar a sus hermanos, Naruto tiene que ir hacer frente a todos sus demonios incluidos nosotros, nuestros padres y los hermanos Uchiha-
-Dices hacerle frente a Sasuke verdad-
-Claro que hablo de Sasuke, Naruto lo ama y todos acá lo sabemos, el tema es que no puede lidiar con el hecho de que Itachi lo quería a él, no quiere comentar los mismo errores del pasado-Dijo afligido.
-Y tu sufres porque Itachi ame a tu hermano y no a ti- Susurro el mayor.
-Sabes que no puedo hacer nada sobre eso, no es culpa de Naruto que Itachi le quiera, como es culpa de él amar a Sasuke ni su culpa que yo ame a Itachi, es la vida, es solo que está lo suficientemente aterrado con todo su pasado como para tomar decisiones, además Sasuke y él no se llevan muy bien-Sonrió recordando cómo habían discutido antes de venir a América.
Yahiko llego una hora más tarde cargado de regalos y algunas guitarras y bajos para su banda, Naruto le dijo tenía que dejar de ser el vocalista y solo ser el guitarrista, que Konan una de sus mejores amigas junto a Nagato fuesen los vocalista, una vez que los escucho cantando en casa cuando le dieron el alta, su hermano le hizo caso, y además de eso Naruto le recomendó buscar a un tal Sasori primo de Gaara quien componía música genial, porque la verdad a ellos se les daba fatal y también le recomendó un amigo de Itachi llamado Kizame para que hiciera de baterista y así Nagato solo se preocupara de cantar, Konan siguió con el teclado, solo les faltaba el bajista pero ya tenía alguien en la mira para ese puesto.
-Hey como te fue- Naruto le saludo.
-Excelente encontré todo lo que necesitaba y más, además le compré a mamá unas especias nuevas, y unos libros de algunos chef que nos pidió-saludo a su hermano despeinándole el cabello- Me iré a dar una ducha.
-Quieres que te ayude a empacar –
-Gracias Naru sería espectacular-
Naruto sonrió recordando como ambos se habían embarcado en el viaje que solo era para él y Kakashi y de alguna manera Gaara, Yahiko y Deidara se colaron al viaje, incluso semanas antes su madre había hecho una escala en su viaje para verles, Naruto sabía que el sueño de su madre era conocer el gran bazar de Turquía y que su padre jamás la invito viajar a pesar de contar con los medios para hacerlo, así que ella grito de alegría cuando vio el regalo de sus hijos, porque Naruto dijo que había sido de los tres. Ella los paso a ver, hizo una stop de 3 días en América, sus hijos rieron a más no poder cuando arrastro a los cinco con ella para ir a Disney Orlando el primer día que llegaron, oso colocar orejitas de Mickey Mouse en todos y luego los llevo a cenar al restaurante Be Our Guest de la Bella y la Bestia, después de dos de recorrer Disney lo que más pudieron porque era enorme y tenía muchas atracciones luego fueron a universal, Naruto chasqueó la lengua al saber que todavía el parque temático de Harry Potter no existía, aún así lo disfrutó, luego su madre oso arrastrarlos a todos de shopping, su primera parada fue Sephora, compró maquillaje como para 100 años, utilizo los brazos de todos para hacer swatches de todos los productos en la tienda, algunos labiales no salían de la piel de ellos.
Luego de estos tres días con el huracán Kushina se dispusieron a descansar por tres días más, y seguir con su itinerario de conocer Estados Unidos, algunas partes de México y Canadá, luego de hacerlo volvieron a USA para establerse las últimas semanas en las vegas, pero debían volver porque las clases iban a comenzar, y Naruto se había saltado por completo el primer semestre de clases, Deidara y Yahiko al igual que Gaara se habían saltado las clases, y Kakashi la residencia, pero luego de lo que había pasado con Danzo y Naruto, Harashima le ordeno pegarse como lapa a Naruto mientras estaba en América, cuando le dijo que era un viaje de casi tres meses el director le dijo que no había problema siempre y cuando estudiara junto al rubio, y así lo hizo, todos los días se dedicaban algunas horas a estudiar y los otros tres la ayudaban en sus estudios.
Tomaron el avión con dirección a Japón, todos cayeron rendidos en los brazos de Morfeo con solo sentarse en el avión después de un poco más de siete horas de vuelos y un jet lag de aquellos llegaron todos como zombis a las cinco de la mañana a Tokio, como lo suponían tanto Minato como Kushina que hacia algunas semanas había vuelto de su viaje a Turquía para instalarse un departamento casi mansión donde viviría junto a Naruto y Gaara y seguramente donde Yahiko y Deidara irían a quedarse porque estaba cerca de la escuela de Naruto y Deidara que cursaba el ultimo año y la universidad T donde iba Yahiko y también Naruto a dar clases, con solo recordarlo le daba risa además Kakashi había comprado el departamento de al lado.
Naruto corrió abrazar a su mamá, para él era un milagro tenerla a su lado y ahora tanto ella como él eran otros los golpes y el odio no estaban presente en Kushina ni en Naruto, solo amor del bueno entre ellos, luego de saludarla con efusividad fue a saludar a su padre, le costaba un monton relacionarse con él aún sentía que una parte de él siempre lo odiaría pero este hombre frente a él mostro amor y preocupación por él desde que despertó por lo mismo le costaba en demasía tratarlo.
-Hola papá- Al menos ahora podía decirle papá, le costo un infierno y la mitad de otro poder hacerlo.
-Hijo que bien te ves, estás muy morenos, todos los están- Dijo sonriendo y abrazando a Naruto, Minato sentía la reticencia de su hijo y a pesar de saber que era su culpa por lo que había pasado con Madara, sabía que debía ganar el amor de su hijo otra vez, aunque no tenía idea de cuanto le costaría. Naruto se dejó abrazar, siempre que su padre lo tocaba sentía la gran necesidad de lanzarlo lejos porque sentía una cantidad de sensaciones tan raras de necesidad por esa figura parterna, también furia por el pasado, pena por el ahora y mucha añoranza, pero con el cansancio del viaje y sin querer pensarlo tanto simplemente se abrazo a su padre, dándole un beso en la mejilla.
-Tu necesitas broncearte estás muy palido-Dijo luego de eso, dejo que los demás se abrazaran, Minato llevo a Kakashi, Gaara y Yahiko en su auto y el millar de paquetes, el auto de Kushina que era más grande se llevo la gran cantidad de maletas de los cincos y Deidara y Naruto.
Llegando a casa Kushina propuso un desayuno en familia, y dejo en claro que tanto Gaara, Kakashi eran de la familia y que también un incomodo Minato le afirmo que aun eran familia, así tanto Naruto como Yahiko se fueron a bañar mientras Deidara dijo que estaba tan casando que solo quería colocarse pijama, Gaara le imito y Kakashi le ayudo junto a Minato hacer el desayuno, fue un momento muy a menos entre risas, como a las 8 de la mañana Kakashi se fue a dormir a su propio hogar, Minato se fue al trabajo al igual que Kushina, y los demás se fueron a domir, Naruto se fue a dormir junto a Deidara, de alguna manera, se sentía muy conectado a él y no tenía idea de porque era, quizás porque en la vida pasada le dio parte de hígado, no lo sabía, solo que su hermano era algo esencial para que el respiraba así como lo era Gaara y Kakashi, aunque también le pasaba mucho con Yahiko, al cual también habían noches a quien molestaba para que le diera un hueco en su cama, ambos hermanos siempre estaban para Naruto.
Despertó horas más tarde, aun Deidara dormía, así que con mucho cuidado de no meter ruido se levanto y uso el baño de su madre para darse otra ducha quitarse el resto de sueño que tenía y jet lag, se dio cuenta que era el único despierto, pero escuchaba ruidos provenientes del primer piso, apartamento era tipo dúplex pero muy elegante y sofisticado, recordaba como su madre siempre veía ese complejo de departamentos cuando caminaban al modesto hogar que tenían , y como se maravillaba cada mañana que veía el canal donde mostraban las nuevas casas y departamentos que estaban listo para las ventas, por eso cuando estaba aun en la clínica leyó un diario los números de lotería recordó cada uno de los juegos de los últimos años, y comenzó a jugar todos los juegos de azar que recordaba incluso algunos extranjeros que compro por medio de un lento internet de principios del 2000, cuando se vio ganador de algunos varios fue una gran sorpresa para todos, sobre todo porque el rubio había puesto los cartones a nombres de sus hermanos, de Gaara, de Kakashi y de su mamá, incluso dejo el más pequeño al nombre de su padre, lo investigaron pero al no encontrar evidencia alguna no pudieron hacer nada, Naruto sonría para sus adentros agradeciendo tener la adicción de los juegos de azar en su vida anterior por eso recordaba todo, se sentía casi como Biff Tannen de Volver al futuro con el almanaque deportivo de todos los tiempos donde estaban los resultados de estos, y debía reconocer que la idea nació de ahí, aun así lo hacía con pausa, además invirtió varios de sus millones en acciones de todo tipo sabiendo más o menos como iría el mercado.
-Mamá –Llamo el rubio.
-No, tu mamá aún esta en el trabajo-La voz de Sasuke llego a sus oídos-Hola Dobe-
-Sabes bien que no soy un dobe- dijo ofuscado llegando donde estaba el Uchiha-Qué haces acá-
-Venia saludarte idiota-Dijo una vez que dejo de beber un vaso de agua-
-Hola Teme, como entraste-Saludo nervioso, le costaba estar frente a Sasuke en demasía, y sabia que él Uchiha lo sabía.
-Tía Kushina me pasó las llaves, Itachi no está aquí- Revelo al ver como Naruto miraba para otro lado- Esta en la universidad, yo ya salí de clase, te traje las notas de los últimas clases y los trabajos por hacer, además quería verte-Dijo acercándose al rubio.
-Ya hablamos de esto Sasuke-Dijo en su susurro con el Uchiha muy cerca de él.
-Así- Inquiero enarcando una ceja Sasuke, sonrió de lado de esa manera tan altanera y sabionda que Naruto odiaba por que le hacía perder la cabeza-Recuerdo claramente que tú hablaste y yo escuche, no dije nada porque no me lo permitiste dobe-Dijo roncamente mientras llevaba su mano derecha sobre el cabello del rubio- Yo te lo dije lamento mucho que mi hermano le gustes, y quizás de antes pero yo me enamoré de ti, de este Naruto que despertó locamente esa noche y se le ocurrió operar un cerdo al son de la música de metallica, te lo dije entonces antes de tu viajecito al extranjero, que no me iba a conformar con un no, me gustas y sé que tú igual, aunque lo trates de negar con tan efusividad, ahora no puedes esconderte ratoncito.
Naruto recordó como Sasuke fue cada día después de despertar del coma, a verle como ambos conversaban cada día por horas, como éste se acostaba a su lado para ver películas, hasta que le dieron el alto, el rubio trato de alejarlo pero era imposible como alejar al amor de tu vida, cómo hacerlo cuándo lo añoraba tanto, necesitaba de esa droga, aún sentía añoranza, pensar en Sasuke como habría quedado de destrozado al saber que él, Naruto, había muerto atropellado, con solo pensar en aquello lo hacía llorar, habían pasado por tanto en su otra vida, merecían ser felices, pero en el fondo sabía que Sasuke merecía ser feliz, no él, habría estado bien morir ahí era un justo castigo para alguien que destruyo tantas vidas.
Cada día se acercaron tanto que Sasuke le dijo que más que un amigo lo veía como el compañero de vida que siempre soñó tener, palabras que su propio Sasuke de su tiempo le dijo, se había puesto a llorar cuando lo escucho, cosa que Sasuke aprovechó para besarle pensando que eso iba a ser un sí, pero no, Naruto le dijo que no podía porque días antes Itachi se le había confesado y lo que menos quería era un enfrentamiento entre hermanos por él. Luego de eso Naruto le hizo el quite y se fue de viaje, pero ahora que estaba frente a él, no iba dejarle escapar.
Sin que el rubio se lo esperase, Sasuke lo beso, al principio se resistió pero luego se rindió a todas esas sensaciones que haría explotar su pecho, se abrazo a Sasuke como si no hubiese un futuro, le necesitaba tanto, necesitaba sus besos, su presencia, le amaba tanto, respondió el fogoso beso con tanta necesidad que hasta el pelinegro quedo sin aliento, se separaron solo un segundo sonriendo y volviéndose a besar, Sasuke tomo a Naruto en brazos y lo subió a la isla de la cocina para tener mayor acceso a él, no tenía idea cuánto tiempo estuvieron besándose como verdaderos locos necesitados, era como si ambos hubiesen estado en una sequia aterradora y ahora que tenía el agua frente querían empaparse hasta decir basta de ella.
Itachi dio un portazo de aquellos haciendo que Naruto y Sasuke saltaran para ver ambos la puerta de entrada, tanto el rubio como Sasuke estaban sin polera, como había sucedido eso era un misterio.
-Perdón por interrumpirlos, sigan en lo suyo- Itachi siento como algo en su interior se hacía crack al verlos así como locos besándose sacándose las prendas de ropa estaba seguro que si no hubiera llegado lo hubieran hecho ahí mismo, nunca ni en películas porno había visto tan necesidad, está seguro que ambos no se habían dado cuenta del espectáculo que se montaban ahí ambos gimiendo de placer tanto como para despertar a un Deidara que veía azorado el episodio desde la escalera, sabía que Naruto lo veía como un amigo lo sabía, y también que Sasuke estaba loco por ese nuevo y mejorado Naruto, tanto como para enfrentarlo y decirle que iba a luchar por el amor del rubio, también supo, quizás no tenía la inteligencia que Naruto estaba demostrando ahora, pero si podía intuir y ver cosas que otros no y eso era que Naruto estaba igual de loquito por su hermano. Le dolia como un demonio que las dos personas que más amaba en la vida, se amasen más de lo que ellos podrían amarle a él, no podía ni siquiera culparlos u odiarlos por lo que hacían, siempre supo que entre ellos él sería el perdedor, pero eso no quitaba sentir esa furia y dolor de verlos ahí en pleno acto demostrando ese deseo entre ellos.
-Itachi yo- Naruto se puso rápidamente la polera y se acerco al ver al Uchiha entonces vio a Deidara, tuvo ganas de llorar ahí mismo, por eso no quería volver, no quería volver a pasar por lo mismo, no quería tener que hacer llorar a más personas por sus decisiones.
-No, nada, Naruto no digas nada, no es tu culpa ni la de Sasuke, solo me pillo desprevenido, necesito tiempo para pensar y estar solo-Miro en dirección hacia donde estaba Deidara, sonriéndole-Ahora sé lo duele amar a alguien y que no te ame-Le dijo antes de girarse y salir de ahí dejando al mayor de los rubios con la boca abierta y con las mejillas sonrojadas, estaba claro que él sabía sobre sus sentimientos.
-Naruto estás bien-Su hermano pregunto al verlo llorar, el menor negó con la cabeza, Demonios pensó el mayor, a pesar de todas las cosas, siempre supo y lo había conversado con Yahiko Naruto este nuevo Naruto, uno que estaban conociendo porque lamentablemente su otro hermanito se había ido algún lugar, era alguien que estaba tan lacerado en mente y alma, que podía sentir que cualquier cosa lo podía desmoronar, fue junto a él le abrazo-No es tu culpa, ni la de ese idiota-apuntando a Sasuke, que tampoco estaba mejor-Ninguno tienen la culpa de sus sentimientos, alguien tiene que sufrir pero ustedes par de idiotas no tienen porque a Itachi se le va tener que pasar, así como a mí se me paso al saber que él te quería a ti hermanito, no van a estar separados para no hacer daño a otros cuando estar separados les hace más daño, algunas veces está bien ser egoísta Naruto y esta es una de esas veces, mereces ser feliz y detrás de ti está tu felicidad-Le dijo besando la sien de este soltándole y caminando hacia las escaleras de nuevo, de ahí vio como Naruto abrazaba a Sasuke mientras lloraba fuertemente y Sasuke le consolaba.
Deidara quiso correr hacia Itachi pero lo mejor era que estuviese solo luego podría saber como estaba, se encontró con Yahiko en las escaleras quien también había escuchado todo.
-Crees que estaremos bien-Consulto el rubio.
-Por el bien de todos espero que sí- miró hacia el primer piso- Espero que sí, porque yo no quiero quitarme la vida ni verte perder tu vida por las drogas, lo mejor que podemos hacer es cuidar nuestras vidas la de ese idiota que tenemos de hermano menor.
Todos sabían que las cosas serían difíciles para todos, Naruto lo tenía claro, lo que nadie sabía era que tan difícil sería…