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Correspondencia Ilicita por Dtzo

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Notas del fanfic:

Holi, holi.

Antes que nada una enorme disculpa por aún no actualizar Singularidades Dx tengo una crisis y pues nomas no me llegan las ideas, corrijo, si me llegan pero -m- en esto de la escritura tiendo a ser un tanto perfeccionista y ya saben lo que dicen, el peor critico es uno mismo. 

Peeero no desesperen, ya tengo la idea y la redacción está en progreso nwn

Ok 

En segundo plano: éste era uno de los fics que mencione que estaba escribiendo, ciertamente lo llevo muy avanzado y quería esperar hasta terminarlo para subirlo peeeero x3 ya no pude aguantar la emoción. 

Oh otra cosilla. Ire publicando capitulo un tanto cortos, con el fin de no atrofiarlos como en singularidades T_T 

Así que nada, les dejo el primer cap. de este proyecto. Espero sea de su agrado y les agradecere saber sus opiniones en los reviews.

Notas del capitulo:

Nada pues solo el Disclaimer 

Yu-gi-oh! y sus personajes no me pertenecen. son de papi takahashi.

POV’s Yugi

Es difícil lo admito.

La empresa para la que trabajo es de aquellas que no encontraras en un directorio de teléfono, anuncio en internet o en el periódico. Trabajamos exclusivamente con personas… digamos “especiales”:

Enfermos mentales

Depravados

Asesinos

Toda la escoria del bajo mundo. Claro que es absurdamente peligroso, estamos expuestos a cada caso; tanto como el ser asesinados y perseguidos por la policía. Por ello somos tan pocos los que estamos dispuestos a arriesgar el pellejo por un par de billetes que, cabe mencionar, es la ridícula suma de 100 grandes – en dólares - por cada entrega exitosa de alto riesgo, el precio de ahí en fuera varía según el nivel de peligro y dificultad al que nos exponemos; por supuesto que había más factores que determinaban que te dieran un extra.

Mi apartamento es como el de cualquier persona normal de Dominó, comparto condominio con un estudiante universitario con quien no suelo socializar; no tenemos ni el tiempo ni la disposición de interactuar. Por ahora mantengo un perfil bajo en cuanto a mi estilo de vida, aprendí de unos ex colegas de trabajo que, exhibirte te hace un blanco seguro, así que, la mayoría de mis ganancias las dono a los orfanatos, casas de retiro y le envió parte de ello a mi abuelito.

Las misiones nos llegaban por escrito dentro de un sobre negro a nuestros locker del centro de correos, especificando la situación, descripción de la carta o paquete y el destinatario. Últimamente he tenido suerte de no recibir uno de esos espantoso sobres, algunos encargos suelen ser  jodidamente suicidas y aterradoras que, muchas veces parecía tu anuncio fúnebre. Por el momento me alegra entregar cartas y paquetes normales a personas normales.

¿Cómo conseguí este empleo?

Bien… fue un desafortunado accidente.

*FIN POV’S YUGI*

Por las calles de Dominó, un tricolor regresaba a casa después de un largo día que parecía no acabar, había caminado sin cesar en busca de un artículo especial que en ningún local del centro de la ciudad lograba hallar. La réplica de un artilugio del antiguo Egipto. Recientemente su abuelo había regresado de su última expedición a las pirámides; había dedicado toda su vida a la arqueología, intentando recolectar de todas sus expediciones los artilugios del milenio. Con el único con el que contaba era la llave del milenio, los demás objetos; dos eran custodiado por una antigua familia de guarda tumbas, otros dos fueron saqueados y se desconocía la ubicación de los dos últimos.

Se alejó hacía los barrios bajos y fue entonces que paso:

Las calles se hallaban vacías y los postes de luz comenzaban a emitir leves destellos, el aura se volvió peligrosa, súbitamente comenzó a llover y el pequeño Yugi optó por regresar a casa antes de que fuera tarde, cuando dio media vuelta pego el grito al cielo al encontrarse con una persona herida gravemente que se arrastraba por el asfalto luchando por su vida; cargaba una pequeña mochila de piel color caqui y vestía ropas color gris mate. El asombro dejo perplejo a Yugi quien no daba crédito a la situación, tras unos segundos se acercó en auxilio del hombre. Inspeccionó sus heridas las cuales daban la impresión de que acabase de escapar de una fiera hambrienta. Sacó a prisa su celular marcando a emergencias, cuando una mano lo tomó de la muñeca deteniendo su acción. Era la mano del moribundo, pareciera que se estaba resignando a perecer en ese deplorable lugar. Sin darse cuenta en que momento sucedió, la muñeca de Yugi se vio aprisionada por un grueso grillete negro, intentó inútilmente quitárselo pero ya era tarde, estaba sellado.

Una sombra se vislumbró a la distancia e iba a paso lento hacía donde Yugi, quien intentó ayudar de nueva cuenta al hombre, siendo su ayuda rechazada tras un empujón por parte del mismo, al tiempo que le entregaba por debajo de su playera la mochila y le imploraba que huyera.

No esperó más para echar a correr al tiempo que escuchaba el rugir de un tigre tras de sí.

Corrió tanto como pudo, no supo hacía donde pero el inminente peligro lo obligó a dejar todo de lado. Llego a un callejón sin salida, “Es mi fin” pensó entrando en pánico, se recargo sobre el frío muro encarando al animal, esperando su final, el cuál no llego, pues al momento que el tigre se abalanzó sobre él, sin saber cómo y por acto de reflejo, pego un salto lo suficientemente alto como para salir del alcance del animal que no tuvo tiempo de reaccionar cuando Yugi cayó sobre su lomo tomándolo con una fuerza bestial de la nuca y recargando todo su peso en aquella mano.

Pareciera que con esto tendría una oportunidad de salir ileso, pero no contó con que el dueño de tan exótica mascota le estuviese apuntando con un arma por la espalda. Yugi no necesito voltear para ver la situación, presentía la amenaza y espero a escuchar un mínimo ruido que le indicara que su atacante detonaría el arma, él ya estaba preparado.

Todo ocurrió en cuestión de segundos.

Al detonar el arma, de un movimiento casi imperceptible, Yugi uso de escudo al animal - que lastimeramente no recibió la bala- y se lanzó en un ataque directo a su agresor. Asestó un certero golpe en el estómago dejándolo fuera de combate por unos segundos, suficientes para que el remate lo diera su preciado felino, que siguió a Yugi en un intento de desgarrarlo, su víctima término siendo su dueño.

CONTINUARA

Notas finales:

Bueno pues, espero les haya enganchado o abierto un poco la curiosidad.

nwn me lo pueden hacer saber con sus reviews

Nada pues un abrazo y un beso pequeñas pervertidas.


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