Aquella batalla entre tu y yo en el valle del fin, tenia siempre presente que seria el posible desenlace de nuestras vidas, sentía que mi mundo de alguna manera acabaría en ese ultimo ataque. A final de cuentas, fuimos gravemente heridos y con una cicatriz marcados de por vida. Tirados en el piso en medio de ese gran desastre, te mire por un instante, es increíble, pero parese ser que te vi derramar lágrimas, te levantastes con dificultad apoyado con tu único brazo y solo ese esfuerzo basto para sentarte en el piso dándome la espalda, yo también hice lo mismo extrañado por tu comportamiento, así que te tome del hombro para voltearte a mi y que me dieras una explicación al respecto , sin embargo, con ese brazo rodeaste mi cuello y me estrujaste hacia tu cuerpo herido y cansado. Estaba sorprendido, pero entendía perfectamente nuestra posición, imite tu anterior afecto y unos instantes mas me dijiste esas palabras de las que posiblemente tanto espere escuchar en mi vida... ¡Te Quiero! ¿Que se supone que debía hacer al escuchar dichas palabras? solo nos quedamos abrazados en medio de nuestra ultima batalla como rivales... batalla, pelea... Es así como los hombres se entienden mas allá que simples palabras, lo somos después de todo.
Ahora lo tenemos todo, lo tengo todo junto a ti, incluso si no lo tuvieramos con respecto a lo material... pobreza, riqueza... yo ya lo tengo todo estando tu a mi lado. Siendo hokage y tu mi acompañante… ¡Asi es!, volviste a konoha, tu hogar, el lugar donde volveríamos a formar nuevas vidas, el sitio que tanto tu y yo nos esforzamos en proteger, una casa en la que ambos compartimos e intimamente nos entregamos en cuerpo y alma, son esas noches que me haces sentir tan unido a ti, me haces sentirme único con cada caricia que tus manos recorren centímetro a centímetro por mi cuerpo, haciendome gritar como loco tu nombre cada que tocabas mi punto y embestidas como ya solías conocer, años y años de hacerlo ... noches románticos y unos hasta salvajes... ¡Vaya! me sonrojo con tan solo recordarlo.
Sabes que el trabajo nos agota, por lo que generalmente lo recompezamos al darnos un tiempo libre donde podemos divertirnos, tomar sake en algún bar de la aldea y reírnos como tontos al rememorizar nuestros años de juventud si es que lo podemos llamar así. Al ya salir de ese lugar con nuestro juicio escaso y tan altas horas de la noche, borrachos por el alto contenido de alcohol es como conocí tu faceta infantil, siendo el ser mas serio del mundo, la bebida paso ha hacerte la persona mas divertida y molesta, tropezando y caminado mareados mientras reíamos por razones desconocidas, eso hace el alcohol, en algunos hasta los pone tristes y deprimidos; pero bebes por razones personales, nosotros lo haciamos para desestrezarnos del trabajo, pasar el rato juntos. Lo que hace especial esos momentos, es que solo a mi me permites verte de ese modo, apoyados entre el hombro del otro, reír y reír tambaleados mientras que según tu me insultas con tu ya acostumbrado "Usuratonkashi" por algún motivo que yo no entendía, es así como empezábamos con nuestra riña de siempre golpeandote en el rostro que supongo yo, no alcanzaba a darte, siempre fuiste ágil aun estando en aquel estado y como ya lo sabias eso siempre me ponía furioso... ebrio y molesto, ¿cres que era la mejor combinación en mi persona? por supuesto que lo sabias... las carcajadas que soltabas hacían que inflara las mejillas, arrugara la frente y te apuntara con algún comentarios típico mio, entre forzejeos es como caiamos al piso en alguna calle de la aldea y de noche sin nadie a nuestro alrededor, posicinandome encima de ti, mirándonos fijamente y concluir con una frase que solo en este estado podría soltarlo... Bien dicen que los borrachos siempre dicen la verdad -Sasuke ¿Me seguirás amando cuando ya no sea joven y hermoso?-. Pasaste ha alzar una ceja extraño por mi pregunta y acabaste atrayendome a ti cara a cara diciendo tu usual "Dobe" y sellar con un beso largo sin importar quien nos viera.
Fue en ese momento que me viste convertirme en hokage, allí en la cima de esa torre, escuchando mi nombramiento junto a mi y poniendo una leve sonrisa en tu rostro fino, viéndome como saludaba a todo habitante de konoha... lo sabias... mi sueño cumplido por fin realizado junto a la persona que siempre he amado. Nuestro trabajo apenas empezaba, aquellos días que se proponían en atacar nuestro hogar la debíamos protejer... ¿Que acaso ellos no conocían el equipo invensible que hacíamos tu y yo?... Era posible que ya sabían quienes eramos y aun así se proponían a enfrentarse a nosotros. En algunos casos las batallas eran duras y pesadas, no obstante, tus ataques sorprendían. A pesar de ser los ninjas mas fuertes de este mundo, tu siempre subías al escenario y lograbas lucirte frente a mi a tu manera, cada jutsu que ejecutabas eran con las intenciones de salvarme de, a lo mejor, un descuido o distraccion de mi parte, en esos momentos eran los buenos pretextos para impresionarme. No negare que esas luchas me encantaban porque así pude conocer una otra nueva faceta tuya, tan energética, tan sublime, tan placentera... Me volvías loco el verte asi!
Ahora con el paso de los años hemos envejesido... ¿Se le podía llamar a los 30 de esa manera? Para mi ha pasado bastante, pero no se le puede negar una de las etapas de la vida. Siempre que recuerdo esos años de juventud me llega hasta el punto de deprimirme por querer revivirlas... No precisamente los años en las que tu y yo no lograbamos entendernos porque quisieramos, sino despues de los 18 en la que apenas comenzabamos a ser ninjas superiores, misiones anbus brutales y extraodinarias y salidas como pareja oficial, esa ves que te me declaraste y yo aceptando tu propuesta... A veces me preguntó si tu seguirás junto a mi cuando ya no soporte mi alma desgastada, cuando de verdad pierda mi escensia energética y mi increíble apariencia... ¿Me seguirás amando cuando ya no sea joven y hermoso? esbozo una sonrisa en mi rostro y respondo por mi solo, tal vez hasta mintiendome "Yo se que lo harás, se que lo harás".
Entre mis pensamientos, tengo presente una petición al ser que creo este mundo:
"Se que sonara egoísta, pero dios, cuando concluya mi misión en este mundo, quiero que el me acompañe a comenzar con nuestra nueva vida en el otro mundo, o si a el le llegase a pasar, dejame irme con el. Sabes dios el amor que nos tenemos uno al otro y de ningún modo dejaremos que la muerte sea otro obstáculo mas para amarnos eternamente, por favor dios, dime si podrás hacerlo...
Esa gracias, ese espíritu, ese cuerpo, ese rostro que para el mundo lo muestra serio, solo ante mi lo presenta de distintas formas... alegre, soñador, triste, furioso, apacionado, romántico... Solo y solo a mi me permite verlo, me hace desearlo mas y mas. El es mi hombre, el me hace sentirme unico, seguro, confiado, a no temerle a los riesgos, el es solo mio y estare a su lado como también su hombre que soy"
Así que sasuke ¿Me seguirás amando cuando pierda mi juventud y mi apariencia del que tanto te enamoraste?...
Una vez mas volteas a verme, creo que notas algo de desanimos en mi luego de contarte mi relato breve, caminas directo hacia mi persona, tomas mi mentón y la alzas para mirarte e inmediatamente respondes a la interrogante de mi vida...
-Usuratonkachi, no me enamore de ti solo porque seas joven y hermoso, estoy contigo por tu increíble y tonta pero maravillosa personalidad, estoy contigo porque tu fuiste la unica persona que supo comprenderme y salvarme cuando poco a poco me hundía en la oscuridad cegado por venganzas y odios, estoy contigo porque nadie mas quiso acercarme a mi en esos momentos de angustia y locura. Solo tu me haces sentir único, me haces sentir el hombre mas afortunado del mundo. ¿Dime que tiene de especial el ser joven y hermoso cuando se tiene un corazón bondadoso? Es una etapa que pasa el ser humano en su ciclo de vida, sin embargo, yo mas que nada, si deseas saberlo, quiero envejeser a tu lado, tomados de la mano recordando esas estupidaz actitudes que teníamos en nuestros años joven, carcajear una y otra vez, asi esperando nuestra dulce agonía... morir juntos. Solo si lo pienso de esa manera, no le temo a la muerte, porque sé que estaremos unidos cuando eso pase. Y allí estaremos, en esa bella y maldita vida eterna donde mutuamente nos amaremos hasta que posiblemente llegue el fin de los tiempos, porque la muerte ni nada mas es otra excusa para dejar de amarnos. ¿Joven y hermoso? Si, Lo eres, siempre lo seras ante mis ojos. Te amo, pase lo que pase siempre te amare.
Asi con lágrimas en los ojos, acercas tus dedos a mis mejillas para apartar las gotas derramadas y plantas un beso apacional y duradero en medio de este cuarto oscuro de nuestra casa, únicamente iluminado por la luz de la luna nueva
Gracias Sasuke...
En definitiva, quiero que este hombre nunca se aparte de mi lado.