Jiyong podía sentir la suave respiración de Seunghyun sobre su cabello, aun con los ojos cerrados. La textura de su piel sobre la palma de su mano era cálida, al igual que la reparación suave.
Todo se sentía cálido, dulce.
Seunghyun se movió un poco apoyando su cabeza sobre el cojín. Jiyong lo observo esta vez, verificando que todo lo que había pasado era real. Tan real como la belleza de Seunghyun.
“Te desperté.”
“No.”
Seunghyun abrió los ojos, enfocándose en Jiyong, con su bonito rostro a unos centímetros del suyo.
“¿Esto es real?”
“Tú que crees.”
Ambos se observaron sin decir nada, aun cubiertos con la manta que Jiyong había traído la noche anterior.
Esta vez fue el turno de Seunghyun para tocar a Jiyong, con el cabello alborotado, y la parte superior de su cuerpo al descubierto. Su piel era mucho más suave de lo que había imaginado y el color lechoso contrastaba muy bien con su cabello oscuro.
“¿Un sueño?”
Jiyong se sentía algo triste por su respuesta, cuando finalmente habian estado juntos Seunghyun no lo creía. Como si el simple hecho de estar con Jiyong era algo que nunca debería haber pasado.
Jiyong se movió para acomodarse encima de Seunghyun de la misma forma en la que horas antes había estado. Acercándose lentamente para besarlo. Seunghyun no se resistió, el simplemente cedió ante Jiyong.
“¿Y ahora?”
“Te amo.”
“Yo también te amo.” Fue la respuesta de Jiyong con los ojos húmedos.
Seunghyun alcanzo algunas gotas saladas, eliminándolas con las yemas de sus dedos.
“Vamos a comenzar nuestros propios recuerdos.”
Jiyong movió la cabeza afirmativamente, enterrándose en el cuello de Seunghyun.
“Sin pasado, sin mentiras, todo desde cero.”
La voz de Seunghyun era suave y precisa. Como si quisiera que Jiyong grabara las palabras en su memoria.
Jiyong separo unos centímetros para ver a Seunghyun, “Es una promesa.”
“Es una promesa.” Le aseguro.
Estar juntos y comenzar de nuevo era suficiente para saber que estaban bien, que estaban completos y que el pasado no volvería a interferir en sus vidas.
“No pasado, no mentiras, desde cero.” Seunghyun y Jiyong lo habian prometido.
Jiyong, Seunghyun y Mino pasaron el resto del día juntos. Realizando actividades domésticas propias de una pareja y un niño pequeño. Ahora todo se sentirá diferente, como si las dudas hubieran desaparecido de su corazón, como si el peso del pasado se hubiera evaporado.
“Es tu teléfono.” Jiyong lo saco de sus pensamientos. En efecto el celular de Seunghyun era el que estaba haciendo ruido.
No le era difícil reconocer el número de la llamada.
“¡Tu, hijo de puta, te a través a llamarme!” Seunghyun quería sonar molesto pero no lo estaba en absoluto.
“Esperaba una Feliz Navidad o algo por el estilo.” La risa de Daesung significaba que no estaba molesto.
“Te dije claramente que tuvieras cuidado con el obsequio que enviaras a casa. Que hubiera pasado si Mino lo encontraba.”
“Relájate Seunghyun, en el caso de que el pequeño se hubiera topado con el obsequio, bien podrías explicarle.”
La risa de Seunghyun era puro sarcasmo, “Si claro, que sería bueno decirle, Oh sí, es lubricante y sirve para estar con tu padre. No seas ridículo. Hay cosas que un niño de su edad no entendería.”
“Siempre estás de mal humor. Te vendría bien que Jiyong te ayudara a calmarte.”
Seunghyun se alejó del salón para conversar mejor. “Bueno, mi relación no solo se basa en el sexo si a eso te refieres. De todas formas no tengo porque darte explicaciones.”
“Hombre en serio, relájate. No te llame para discutir, quería saber cómo están tú y Jiyong.”
“Fue eso o querías saber si tu obsequio fue estrenado.”
“¿Entonces si lo utilizaron?” La voz de Daesung era mucho más melosa de lo usual.
Seunghyun tomo un largo suspiro.
“¿Eso fue un sí?. Seunghyun respóndeme, no te quedes callado.”
“Si.”
“¡Ohhhh mierda!, me estás hablando en serio no bromees conmigo Seunghyun.”
Daesung escucho la risa suave de su amigo en respuesta.
“Estoy feliz por ti hombre, quiero decir por ustedes. Pero como paso, ¿fue ayer por la noche o más tarde?, ¿en dónde?, ¿el pequeño estaba despierto o dormido?.” Seunghyun alejo el celular lejos para no escuchar la infinidad de preguntas de su amigo. No iba a responderle nada.
“Bien, ya sé que no me dirás nada. De todas formas ya perdone a Jiyong.”
“Dae-”
“Eres como mi hermano. No fue tan fácil pasar de largo todo lo que Jiyong te hizo. Pero no soy quien para juzgarlo. Estoy bien si tú lo estas.”
“Daesung.”
“Mierda no sé porque me pongo sentimental, es tu culpa. Ya debo irme, tengo una cita con Sandara. Dale mis saludos a Jiyong y al pequeño también.”
“Claro. Saluda a Sandara de mi parte.”
“Lo hare. Adiós.”
“Adiós.”
Cuando acabaron de cenar, Jiyong llevo a Mino a cepillarse los dientes y con ayuda de Seunghyun llevo al pequeño a la cama. Rápidamente se quedó dormido.
Jiyong y Seunghyun también experimentaban los estragos de trasnochar aunque por causas diferentes a las de Mino. Cerraron la puerta de la habitación e hicieron lo mismo con la suya, sentándose en la cama, uno al lado del otro. A penas habian tenido tiempo para hablar de lo de anoche. Ahora, solos otros vez, se sentían tímidos, incluso después de haber pasado la noche juntos.
“¿Qui-eres un vaso con agua?” Jiyong pregunto.
“No. Quiero decir, estoy bien, gracias.”
Seunghyun observo a Jiyong para ver que sus palabras no fueran interpretadas de la forma equivocada, pero Jiyong estaba bien. Su rostro era suave y lindo, con algo de rubor. Muy diferente al Jiyong de la noche anterior.
Seunghyun no espero mucho tiempo para cambiarse de ropa, algo más cómodo. Su pijama estaba bien. Jiyong ya lo había visto desnudo más de una vez, así que el simplemente retiro la camisa y dejo al descubierto su espalda.
“Oh.” Jiyong parecía extrañamente sorprendido mientras miraba a Seunghyun.
“¿Qué está mal?”
Jiyong señalo hacia su cuello y parte de su espalda, incluso sus dedos tocaron específicamente las partes donde las marcas eran más notorias.
Seunghyun solo sonrió cariñosamente.
“Lo siento, yo n-no…” Jiyong se mordió los labios y se inclinó sobre la cama, cubriéndose el rostro con los brazos. Él estaba avergonzando.
Seunghyun se inclinó al costado de Jiyong, apoyando su cabeza en un brazo. “Estoy bien, de verdad.”
“Yo…”
Seunghyun aparto los brazos de Jiyong para ver su rostro completamente enrojecido.
“Yo te deje hacerlo.”
Jiyong lo observo en silencio, aun avergonzado.
“No sabía que te gustaban estas cosas, pero está bien para mí.”
“Es la primera vez que hago esto, nunca lo había hecho antes.”
Esta vez fue el turno de Seunghyun para mirar a Jiyong.
“¿Te duele?”
Seunghyun negó con la cabeza y beso a Jiyong.
“¿Mejor?”
“Si.”
Había pasado quizás media hora desde que ambos se habian metido debajo de las sabanas para dormir. Seunghyun lo hizo inmediatamente, Jiyong por su lado, estaba despierto, apoyado sobre la almohada, observando la suave respiración de Seunghyun.
Una de las marcas, era visible sobre su cuello. Tenía un color rojo oscuro. Jiyong se encendió con la sola idea de marcar a Seunghyun. No es que haya mentido. En verdad era la primera vez que hacia esto. Incluso nunca había pasado con Soohyuk, ni una sola vez a diferencia de Seunghyun. Jiyong no quería compararlos. Soohyuk era parte de su pasado y Seunghyun su presente. Pero era inevitable pensar en lo diferentes que eran. Incluso cuando amaban.
Jiyong se acercó apoyando su cabeza en el pecho de Seunghyun, quería dejar de pensar. Pero cuando más lo intentaba más recordaba la noche anterior.
Flashback
“Por-favor.” Era una súplica, Jiyong era consciente de eso. Así que se subió hasta el regazo de Seunghyun con la respuesta implícita de hacer el amor.
Jiyong lo empujo con suavidad sobre el respaldo del mueble, quedando a su merced.
“J-iyong…” Se sentía demasiado caliente, como si fuera a explotar.
Seunghyun cerró los ojos, sintiendo los labios de Jiyong por todas partes, su boca, sus mejillas, su mandíbula, su nuez de adán, su cuello.
“Seunghyun. Mírame por-favor.”
Seunghyun le devolvió la mirada, conteniendo la respiración. Jiyong era mucho más hermoso de lo que alguna vez había imaginado.
“Te amo.” Lo dijo lo suficientemente suave lo suficientemente lento para que Seunghyun atrapara las palabras y las grabara.
Seunghyun por su parte parecía demasiado aturdido, demasiado inmerso en sus pensamientos, como si luchara internamente. Seunghyun debería haber sabido que Jiyong no se daría por vencido. Conocía esta parte de él. La seguridad con la que tomaba una decisión, su resistencia.
Jiyong era más expresivo, más directo. Porque las palabras a veces no eran suficientes, no tanto como las acciones.
“Te deseo tanto, no tienes idea.” Jiyong estaba excitado y Seunghyun no hacía más que jadear, dejando que explorara su boca en un beso profundo. Su tacto estaba en todas partes, en su barbilla, en su cuello, en sus brazos, en sus muslos. Seunghyun sin embargo seguía sin moverse, sin tocarlo, con las manos pegada a cada lado, como si pesaran.
Jiyong quería cambiar eso, por lo que comenzó a moverse suavemente sobre él, buscando más fricción, buscado más contacto, buscando una reacción de Seunghyun.
“Tócame, por fa-vor.” Jiyong había susurrado antes de morder la oreja del mayor. Seunghyun había levantando su caderas ligeramente, pegando sus manos en la cintura de Jiyong.
“Vamos Seunghyun. Tómame.” Lo insto.
Jiyong se regocijaba porque Seunghyun por fin respondió, sosteniendo con suavidad su cintura. Dejando que Jiyong lo desvistiera. Quitando el suéter y dejando su piel expuesta. Jiyong no perdió el tiempo y comenzó a repartir besos por toda la extensión de piel que gustosamente tomaba entre sus labios.
La lengua Jiyong sabía perfectamente donde funcionar y que zona tocar.
“Es-pera.” Seunghyun trato de regular su respiración para hablar. Jiyong se detuvo por un momento no muy a gusto para ver a Seunghyun.
“¿Qué sucede?”
“Estas seguro.”
“¿Qué?” Jiyong parecía no entender el punto de Seunghyun.
“Quiero que estés seguro de esto.”
“Seunghyun…”
“No quiero que te arrepientas después.”
Jiyong lo observo en silencio pensando en lo que Seunghyun estaba tratando de decirle.
“¿Porque me arrepentiría?”
Seunghyun se apartó de Jiyong un momento para reorganizar sus ideas.
“¿Qué estas tratando de decir?” Jiyong parecía incómodo.
“No puedes olvidar a Taehyun, ¿es eso?”
“¿Qué tiene que ver Taehyun en esto?”
“No puedes quitarlo de tu cabeza. Debe ser muy bueno en la cama.”
“Jiyong.” Seunghyun levanto la voz.
“Me importa una mierda, sabes.” Jiyong comenzó a moverse hacia la puerta pero Seunghyun lo evito.
“¿A dónde crees vas?”
“¡Suéltame!”
“Tranquilízate. No grites.”
“Eres un estúpido. Te odio.” Jiyong comenzó a llorar.
“Nunca me acosté con Taehyun.”
“¡Mientes!.”
“¡No!, no estoy mintiendo.”
“Entonces porque me alejas de ti. No soy lo suficientemente bueno.”
“Eres lo suficientemente bueno. Pero no sé si yo lo soy para ti.”
Jiyong estaba confundido, abrió la boca para decir algo pero nada salió. Seunghyun se apartó de su lado caminando hasta el otro extremo del salón.
“Recuerdas el día que escuchaste mi confesión en casa de tus padres. Recuerdas lo que me dijiste:
“¡MIDE TUS PALABRAS SEUNGHYUN, NO ESTÁS HABLANDO CON EL HIJO DE UN EMPLEADO, NO ME TRATES COMO UN DON NADIE!.”
Recuerdas lo que me dijiste cuando me citaste en el café:
“Alégrate, vas a tenerme Seunghyun, serás mi esposo, mas nunca tendrás mi corazón porque eso ya le pertenece alguien y eso no cambiara aunque pase el tiempo. Nunca lo olvides.”
O aquella vez cuando Mino era aún un bebe y trate de ayudarlo porque lloraba mucho.
“Entonces no vuelvas a inmiscuirte en asuntos que no son tuyos, porque este no es tu hijo.”
Seunghyun dejo de mirar a Jiyong dándole la espalda, se sentía patético y estúpido recordar el pasado, pero de que otra forma podría sentirse. Trato de no llorar sin poder evitarlo, ya que las lágrimas caían sobre su rostro, mostrando todo el dolor que había estado ocultando.
Jiyong ahora lo entendía. Seunghyun tenía miedo, había sido rechazado tantas veces que quería asegurarse de que esto fuera real, de que Jiyong tuviera la certeza de entregarse a él.
“Seunghyun…“
“Lo siento, y-yo estoy confundido.” Seunghyun volvió a sentarse, Jiyong lo observo desde la puerta por un momento y se acercó lentamente, arrodillándose a su lado. Las lágrimas estaban secándose sobre su piel, pero las de Seunghyun aún seguían brotando desde el interior de sus ojos, como si algo hubiera sido roto.
“Perdón.” Comenzó Jiyong.
“Nunca medí la magnitud de mis palabras, ni el daño que te hacía. Perdóname, perdóname por favor.” Jiyong se sentía dolorosamente triste, demasiado avergonzado por su actitud.
“Tal vez mi padre tenía razón. No soy tan bueno como creía. Soy un estúpido.”
Jiyong sollozo una vez más con el rostro cubierto. Se sintió extramente conmovió cuando la mano de Seunghyun acaricio suavemente su cabello.
“Perdón.” Dijo una vez más entre lágrimas.
“Quiero asegurarme de que seas feliz.” Hablo Seunghyun. Jiyong levanto su rostro como si lo que acababa de escuchar fuera obra de su mente. Seunghyun por el contrario le sonreía, era su forma de aceptar su perdón.
“Perdóname, yo lo siento tanto y-yo…”
Seunghyun abrazo a Jiyong. No era un simple abrazado, era más como una cura, como si ayudara a disolver el dolor.
“Te perdono.” Jiyong se separó para verlo.
“Seunghyun.” Pronuncio y volvió a sumergirse en sus brazos. Se quedaron así tanto tiempo como quisieron, no había prisa.
“¿Seunghyun?”
“Uhm”
“Te amo mucho.”
“Te amo mucho.” Repitió Seunghyun olisqueando su cabello.
Jiyong aproximo su rostro lo más cercanamente posible a Seunghyun y lo beso. Esta vez el beso era diferente, se sentía diferente.
Ambos se separaron unos centímetros uno del otro.
“¿Recuerdas lo que paso en la ducha?”
“Si.”
“Nunca me había sentido así.” Jiyong susurro.
Seunghyun toco a Jiyong, pero ya no había miedo en su tacto.
“Estaba pensando cada día, en cuando seria la próxima vez que me tocaras.” Jiyong comenzaba a respirar más rápido.
“¿Así?” Pregunto Seunghyun apretando sus caderas, enviando una descarga de placer al cuerpo de Jiyong.
“Si.” Gimió Jiyong, dejando suficiente espacio para darle acceso a su cuello. Seunghyun no lo pensó dos veces.
Jiyong había comenzando a excitarse otra vez. Recostándose sobre los cojines. Con el peso de Seunghyun sobre su cuerpo. Podía sentir su miembro y el de Seunghyun creciendo lentamente.
“Aah-hh Seunghyun.”
Seunghyun se detuvo para mirar a Jiyong, con el rostro encendido por la excitación, y los ojos brillantes.
“Por favor, por-favor…”
“Dime lo que quieres.”
“A ti, solo a ti.”
Seunghyun no perdió tiempo y tomo a Jiyong para desvestirlo. Exponiendo la suave piel blanca para deleite de sus manos y ojos. Jiyong se sentía extremadamente caliente que incluso el líquido pre seminal de su miembro estaba extendiéndose como gotas sobre los pantalones de Seunghyun.
“Muy sensible.” Dijo Seunghyun, tocando la cabeza con su dedo, por lo que Jiyong gimió sin poder evitarlo. Retorciéndose de placer.
“Mm-me, estas cas-stigando.”
“¿Tú que crees?”, Los ojos de Seunghyun eran mucho más oscuros, inyectados de malicia.
“Creo que nuestro próximo hijo va a estar orgulloso de su padre.” La sonrisa de Jiyong era brillante. Sabía que Seunghyun no se esperaba una respuesta así.
Seunghyun abrió la boca para decir algo pero nada salió. Jiyong comenzó a reírse de su reacción, por lo que aprovecho la distracción para quitarle el resto de ropa.
“¿Me pregunto cuanto tiempo tomara para que nuestro bebe este con nosotros?”.
“J-jiyong…”
Jiyong mordió su cuello, su mandíbula y otra vez su cuello. Luego se movió rápidamente tomando el miembro de Seunghyun sobre su mano y se inclinó suavemente para lamer la cabeza. Enviando una descarga eléctrica al cuerpo de Seunghyun.
“Sabe bien.” Dijo mientras metía el resto del miembro en su boca.
“¡Mi-ier-rda!”. Esta vez fue el turno de Seunghyun para gemir. Se sentía tan bien, tener a Jiyong con su boca sobre su polla.”
Jiyong seguía succionando y trozando sus dientes sobre el miembro, cada vez más grande. Mentiría si dijese que no le dolía la boca.
Seunghyun estaba demasiado cerca, no quería venirse en la boca de Jiyong, al menos no en su primera vez. Seunghyun tomo a Jiyong del cabello el cual no protesto ante el cambio, por el contrario parecía complacido de la iniciativa de Seunghyun.
“Es-stabas cerca.” El aire entraba con prisa en los pulmones de Jiyong.
“No en tu boca.” Respondió Seunghyun. Atrayéndolo hacia él y besándolo, probando su propia esencia. Jiyong se movía lo suficientemente lento contra el miembro de Seunghyun, deslizándose hacia delante y hacia atrás, sobre su entrada.
Seunghyun entendía, así que comenzó a masajear las mejillas, abriéndolas de vez en cuando para frotar la entrada de Jiyong con sus dedos.
Jiyong abrazo a Seunghyun por el cuello, lamiendo y succionando de vez en cuando la piel de esa zona.
Ni siquiera habian consumado el acto pero, el sudor y la excitación ya estaba haciendo efecto en ambos. Incluso habian olvidado que no estaban solos, había un niño con ellos, durmiendo en alguna parte de la casa.
Los dedos de Seunghyun comenzaron a trabajar en su entrada mientras que su boca hacia lo mismo con uno de los pezones de Jiyong, quien no dejaba de respirar con dificultad. Cuando estuvo listo, Seunghyun lo acomodo sobre el mueble, separando sus piernas, y entro en él, lo más delicadamente posible. El pecho de Jiyong se elevó, como si todo el aire hubiera escapado de sus pulmones, aferrándose con fuerza a la cintura de Seunghyun
“Respira.” Escucho Jiyong y obedeció. Cerrando sus ojos, dejándose llevar por la hermosa voz.
“Te amo.” Dijeron al mismo tiempo. Besándose con tanta fuerza que sus labios estaban completamente hinchados por el uso. Jiyong aprovechó el momento para tocar el trasero de Seunghyun e instarlo a que se moviera, separando más sus piernas, y envolviendo una de ellas sobre las caderas del mayor.
Seunghyun comenzó a moverse primero espaciado, y luego más rápido, tan rápido que no supo en que comento Jiyong había levantando sus piernas para tener mayor acceso. Seunghyun imaginaba que Jiyong era flexible pero no tanto como esto. Por lo que decidió cambiar de posición, dejando esta vez que Jiyong tome el control encima de él.
“Ahhhhhhh.” Gruño Jiyong con los ojos fijos en Seunghyun.
“Muéstrame cuánto me amas…” Alentó Seunghyun
Jiyong gimió ante sus palabras y luego todo se volvió borroso ante sus ojos, cayendo contra el pecho de Seunghyun quien aún seguía moviéndose debajo de el para alcanzar su orgasmo. No tardó mucho en llegar, derramándose dentro de Jiyong.
Ambos estaban exhaustos…
“¿No puedes dormir?” Seunghyun tenía abierto uno de sus ojos.
Jiyong se mordió los labios. Había estado pensando en la noche anterior mientras Seunghyun estaba durmiendo a su lado.
“No quise despertarte.”
“Está bien.” Seunghyun le sonrió acercando a Jiyong contra su cuerpo.
“Buenas noches.”
“Buenas noches.” Repitió Seunghyun besando el cabello de Jiyong.
“Demasiadas emociones.” balbuceo Jiyong, quedándose dormido.