22-24
- No te preocupes por la boda, hyung- su voz sonaba herida, pese al monótono tono- yo mismo cancelaré la reservación que teníamos en Estados Unidos.
- Jimin- llamó el tercero en la sala, ya que el contrario solo tenía la mirada perdida sobre el anillo que el menor de los tres había dejado en la mesa de la cafetería en la cual se encontraban. El nombrado apretó los puños y se mordió los labios.
Su prometido no había negado nada sobre él y su, ahora, ex amigo.
¿Tan poca cosa era para él?
……
15-18
- Me quiero enamorar, hyung…y quiero enamorar a la persona de quien yo me enamore. Quiero crecer y vivir con alguien a mi lado; Quiero estudiar, hacer deporte; Quiero comer las cosas que me gustan- sonrió, trasladando su vista de sus manos al ventanal, mirando el patio exterior- quiero dejar crecer mi cabello y alejarme de los medicamentos, de las agujas y de esta silla de ruedas…quiero vivir…
Yoongi apretó los agarres para empujar de la silla de Jimin.
Sentía tan injusta aquella enfermedad y su tratamiento.
Jimin, con tan solo quince años, dependía de una silla de ruedas para trasladarse, porque el tratamiento contra la Leucemia Mieloide Aguda lo dejaba sin fuerzas, se supone que aún le restaban cinco meses de tratamiento, pero él ya se veía tan pálido y delgado.
Min mordió sus labios.
Llevaba más de un año conociéndolo y cuatro meses viéndolo decaer.
Y nadie, a parte de él, lo iba a visitar.
- Jiminnie.- le llamó, inconscientemente.
El menor lo miró desde su posición. Ojos cansados pero deseosos de seguir irradiando la luz cálida de su ser.
Yoongi colocó su mano sobre la rapada cabeza del menor, gesto que sabía al menor no le gustaba.
- Ya falta poco para que dejes crecer tu cabello y este se llene de piojos.- sonrió ante el pucherito del chico- y podrás contagiárselos a quien tu ames.
Jimin rio suavemente ante la inocente broma, negando con la cabeza.
¿Qué sería de él sin Min Yoongi? ¿Sin su único amigo? Park estaba seguro que, sin él, no habría sido capaz de soportar tanto. Min Yoongi era un manantial en su desierto, un paraíso en medio de su infierno personal, él era su ángel particular.
- Quizás te los contagie a ti, hyung.-
La seriedad en aquellas palabras pasmó a Yoongi, pero lo creyó broma, después de todo, Park solo pasaba tiempo con él.
- Usaré un gorro grueso de lana entonces, mocoso.-
Ambos rieron y observaron nuevamente en dirección al patio del hospital.
¿Qué sería de Park Jimin, sin Min Yoongi?
……
16-18
- ¡Hyung!- Min casi pierde el equilibrio cuando aquel chico de dieciséis años apenas cumplidos se arrojó contra él, haciéndole tambalear- ¿A dónde había ido? Hace como un año que no lo veía- le reclamaba.
Yoongi rodó los ojos, sintiendo su cuello y mentón picar. A Jimin le estaba creciendo el cabello, señal que el tratamiento había hecho efecto sobre su enfermedad. El pelinegro correspondió al abrazo del castaño joven, sintiendo la masa muscular creciente en el chico. Estaba engordando.
- Fueron solo tres semanas, mocoso, no exageres.
- ¡pero era mi cumpleaños!- acusó, mirándole dolido- prometió que vendría a verme.
- Lo siento- respondió con voz suave, acariciando el creciente cabello que hacia cosquillas contra sus palmas- es que…tuve una pequeña discusión con mi pareja actual, así que, para reconciliarnos, fuimos por unos días de viaje.
- ya veo.
Jimin se sintió inmaduro, desplazado y solo, completamente solo, también confundido; aún no se acostumbraba a la idea de que su hyung tuviese una pareja de su mismo sexo. No es que le incomodara, solo que, cuando se enteró de ello, hubo un pequeño fuego en su pecho junto a un hoyo en la boca de su estómago. Y aun se sentía de la misma forma.
- Vamos, no decaigas- le empujó levemente- sé que me perdí ese día especial, pero ya estoy aquí, podrás pasar el tiempo que quieras junto a mí y hablarme todos los días.
- Pero, hyung, los horarios de visita en esta clínica son limitados para nosotros y yo no puedo salir.
- Por eso te traje esto- Park observó expectante el movimiento del mayor, quien sacaba de su bolsillo trasero un teléfono celular nuevo.- Tienes mi numero agendado, en marcación rápida y gratis, podemos hablar todo lo que quieras.
Las lágrimas se acumularon en los ojos del menor y cayeron cuando el aparato táctil fue entregado en sus manos. Sonriendo se volvió a colgar del cuello del mayor, feliz porque, pese a que nadie parecía interesado plenamente en él, Park tenia a ese hyung que insistía en quedarse a su lado.
Park Jimin no tenía un mundo aparte de Min Yoongi
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