Después de aquellos incidentes las cosas en los siguientes 6 días en realidad fueron en apariencia normales a simple vista, pero en el interior una serie de emociones avanzaba a enormes zancadas y poco a poco más cosas se iban asomando en eso a lo que Gaara y Lee llamaban “profunda amistad”.
Lee no quería comprender por qué cada día se le volvía más una necesidad el conversar con Gaara cada anochecer, en realidad él no tenía que escuchar demasiado de ese joven, solo escuchar su respiración, verlo allí tranquilo...incluso estaba reconociendo en el rostro del pelirrojo que, al contrario de lo que muchos pensaban, este hacía muchos gestos diferentes al escuchar y hablar, solo que habría que ser cuidadoso para notarlo y ademas intentar tener el corazón frío para no ser completamente absorbido por esa mirada jade en la que él se perdía cada vez más al punto de soñarla casi diario.
Por otro lado Gaara nunca había sentido tantos deseos de ser más conversador para así conocer un poco más del moreno, en verdad que deseaba estar más cerca de él pero, de repente las palabras no le salían o no eran demasiado claras, eso no era nada bueno considerando la casi nula habilidad de Lee para entender indirectas.
Pero como siempre en la vida, tienen que aparecer por una u otra circunstancia personas capaces de darnos un empujoncito.
Gaara se encontraba como de costumbre haciendo su trabajo, con más rapidez que nunca, era tal su ansiedad de quemar el tiempo hasta el atardecer que la mayoría de las veces terminaba teniendo tiempo de sobra aun terminando todas sus actividades diarias, entonces una llamada a la puerta lo interrumpió.
-Pase.- dijo Gaara.
- Gracias, Lord Kazekage, solo vengo a entregar los reportes de guardia.- pasó Shikamaru.
- Oh sí, muchas gracias, puedes dejarlo en el escritorio.
- Y...una situación más.- dijo el moreno recordando de último momento.
-¿Sí?
- Hace unos días...- dudó antes de proseguir.- ..me llegó el informe de que uno de los shinobis a mi cargo tuvo una pelea con un chunnin de su aldea, los datos no son claros pero de cualquier modo un suceso de esta índole esta prohibido, y quería saber si quiere que venga el responsable a disculparse o deba recibir alguna censu...
- ¡Cielos no!- respondió vigorosamente Gaara levantándose de su lugar- ¡Él ...él es el que merece recibir una disculpa! ¡Rock es un ninja ejemplar y dichos actos que mencionas fueron consecuencia de la indisciplina de algunos shinobis de Tsuna! ¡Yo ...yo!...Rock Lee jamás podría...
Gaara no estaba seguro de los motivos o de cómo había terminado alzando tanto la voz y Shikamaru no sabía que debía sorprenderle más en esos momentos pues, siendo un genio muy observador notó por lo menos 3 cosas que no eran nada comunes por no decir extrañas, una, la agitación tna repentina de Gaara, dos, las frases del Kazekage en las que no solo ponía en un pedestal al cejudo, sino que lo llamaba con total naturalidad por su nombre, y tres, que un enorme sonrojo brillaba en la cara del pelirrojo.
Shikamaru no era Doctor corazón pero tenía antecedentes de esas últimas semanas que empezaban a encajar como un pequeño rompecabezas, los cambios de actitud de Lee y su ausencia unas horas después de haber terminado sus turnos, su falta de atención en la conversación de los compañeros en los almuerzos, su repentinos sonrojos sin motivo aparente; ahora... veía también algunas cosas en el Kazekage desde un punto de vista objetivo y la verdad es que esos últimos días se le notaba menos sereno, y como remate Temari le había comentado unas cuantas cosas que estaban pasado con su hermanito y que la tenían curiosa...¡¡ahora todo tenía sentido!!
Shikamaru fue volviendo su mirada a su estado natural despreocupado después de haberla tenido completamente abierta mientras su cabeza había hecho todas esas conjeturas.
El moreno sonrió de lado.
-Lo lamento Lord Kazekage, no era mi intención disgustar-le...me tiene muy a gusto saber que nuestro shinobi le sea de utilidad, yo mismo puedo afirmar que suele ser muy disciplinado y excesivamente activo, pero eso mismo lo hace de mente que tiende a divagar o tiene conclusiones aceleradas por lo que si deseara tener un acercamiento más eficiente debería ser claro y muy directo, él no se lo tomará a mal, esa es su costumbre con sus mas allegados...con permiso- dijo de forma casual mientras se retiraba cauteloso intentando no reír, la verdad es que le parecía extraño lo que estaba sucediendo pero, pensándolo por otro lado ¿Qué mejor modo de ganarse a su futuro cuñado de dándole una ayudadita en eso del amor? Si corría con suerte tendría una aprobación más rápida si el que lo tenía que juzgar estaba enamorado hehehe. Sí, Shika es todo un genio.
A buen entendedor pocas palabras, Gaara estaba decidido.
...
- Lee, ¿alguna vez has estado comprometido?- dijo tal cual Gaara a Lee.
-¡¿Ahc...yo...eh?... es algo repentino...y bueno, no, se esta comprometido cuando se tiene pareja o algo así pero yo...yo nunca he tenido ..y pues ...¿Por que una pregunta así?
- Ya veo.- dijo visiblemente satisfecho y permaneció en silencio, con lo mucho que Lee odiaba los silencios.
- y...¿Y tú?- dijo el moreno.
- No, yo tampoco.
-Ah...ya veo.- ¡¡que demonios!! ¿Rock se quedó sin palabras?
- Pero, algún día estarás comprometido ¿No?, digo, está en tus planes ¿Verdad?- cuestionó luego de un rato Gaara
- Esa es la idea, pe-peero bueno...e-es más un deseo de encontrar a alguien especial y no solo emparejarme por que sea uno de mis retos hehehe, digo, sino encuentro a dicho ser especial, o lo encuentro pero no me corresponde pues entonces optaré mejor por no hacerlo...no me gustaría estar con quien sea solo por que me va bien con los planes.- se encojía abrazando sus rodillas mientras sentado a su lado Gaara lo miraba fijo.
- ¿Y cómo sabrás quién es?- el corazón de el ojos Jade empezó a agitarse.
- Siendo honesto creí saberlo pero ahora mismo yo...estoy algo ...tal vez muy confundido.
Gran mentira, si alguien tenía una increíble inteligencia emocional ese era Lee, desde siempre había entendido su sentir sin demasiadas complicaciones, pero es que no se sentía cómodo con la idea de sentir que le gustaba un chico, más que el problema de su genero es que en el fondo sabía que era demasiado probable que le rechazará de golpe y peor aún que se alejara de él.
¿Cuánto llevaba de saber esto Lee?, quizá desde el momento en el que se descubrió soñando con Gaara pidiéndole que se quedará en Tsuna (sueño en el que un amistoso abrazo casi se convertía en beso) o cuando cuando vió un foto suya pegada en una tienda de articulos de recuerdo y su cuerpo se manejo por si solo pues sin notarlo ya tenía la dichosa foto en su cartera, ¡Era el colmo! Como sí ser él mismo y sus cejotas no fuera bastante extrañas, ahora resultaba que era capaz de enamorarse de un hombre y más importante de “ese hombre” quien lo odió, quien lo hirió, quien lo salvó y quien ahora le brindaba una estrecha amistad ¡¡El mismisimo Kazekage!!, era un hecho, a su corazón le importaba un bledo lo que opinaba la sociedad.
“pensamientos, traviesos pensamientos”
Entonces a Lee una idea le vino a la mente, el era noble y bonachon pero... su corazón bondadoso podía sufrir una seria transformación cuando se le metía una obsesión apasionada, era como abrir las ocho puertas de golpe y transformarlo en un poderoso virus del mal.
-Gaara.- pronunció con la mirada hacia abajo y tratando de ocultar una sorisa no tan inocente como la que acostumbraba tener.- Dime tú ¿Sabes una de las formas de saber si alguien es especial para ti?
- ¿hn?- el pelirrojo había entendido la pregunta, pero estaba asimilando de donde había salido esa voz un tanto ronca y un tanto...¿Seductora?- No...no lo sé.- admitió.
- ¿Te gustaría saber?
- Pues...creo que sí.- Gaara se preguntaba si Lee se sentía bien
- Ve..veras.- empezó a quebrarse-le la voz por la ansiedad al pelinegro mientras se sentaba para ver de frente al pelirrojo..- todo en nosotros es energía el chakra, la respiración, la circulación de nuestra sangre y el... calor, las emociones flotan en toda esta energía y se puede compartir a veces por contacto , Gaara levanta tu mano izquierda.- este obedientemente la puso la palma extendida de su mano a la altura de sus hombros y el moreno la tomó con su mano derecha- ¿Ves? Con este contacto yo podría transferir chakra, calor y si estrechara mas tu mano- lo hizo haciendo que Gaara se sonrojara.- podrías...sentir mi circulación estos es... un simple contacto que puede acercarnos mucho ¿No te parece?
- Sí...pero eso ...¿En como puede eso hacerte saber si alguien es especial?- decía realmente interesado Gaara por qué su cuerpo empezaba a sentirse tan extrañamente inquieto y electrizado.
- Es ... lo que provoca en ti Gaara pero, tienes razón, es difícil saber algo aspi solo con eso...- Gaara sentía que su palpitaciones se aceleraban como locas, sí, era cierto, probablemente esto debía ser algo de lo que decía en ese momento Rock.- Pero hay algo más certero.- dijo aún más ronco el moreno.
- ¿Ce-certero?
- Sí
- ¿Quieres saber que?
-h...hn- Gaara entonces vio como el Lee soltaba su mano izquierda y entonces con ambas manos Lee sostenía el rostro por ambos lados, Lee hace una eternidad y media que ya no podía luchar con su necio muy necio y deseoso corazón y, viendo esos ojos jade poco a poco fue acercando su rostro a Gaara hasta encontrarse a solo un milímetro de sus labios practicamente podía probar el aliente de el pelirrojo que se encontraba inmóvil frente a él, pero entonces su yo “noble” hizo su última esperanzada entrada manteniéndolo estático en ese postura.
“¡Lee! ¡LEE! ¡¿Que demonios estas haciendo?! ¡¡De esta hay dos salidas o deja de ser tu amigo o te descuartiza en el acto con su arena!!, detente, DETENTE!!”
Aún con eso... todo fue en balde, solo un milímetro solo eso, sin previo aviso sus labios rozaron los del el pelirrojo, tan solo un pequeño contacto y notó que eran tan cálidos y suaves eran...una delicia, rápidamente se inclinó aun más hacia adelante probándolos con anhelo, pero...¡¡¿Que le estaba haciendo a Gaara?!!
Se separo de golpe sintiéndose más mal que bien por esa decisión, Gaara estaba con los ojos bien abiertos y casi por inercia este se tocó su labio inferior aún humedecido con uno de sus dedos.
“¡¡lo sabía!! ¡debí alejarme desde el principió! ¡Debe pensar que soy repugnante!!” se dijo a sí mismo el moreno.
- Perdóname, ¡Perdóname, por favor!- se retiró sin más de ese lugar.
Gaara sentía que toda la sangre se le juntaba en el rostro ...¿¿Qué era exactamente lo que estaba pasando??