Suspiro al estar fuera de la aduana, me tocado revisión de mis maletas y me preguntaron porque he venido a este país estando embarazado, lo cual contestó que es por estudios.
Después de la tediosa entrevista y estar en busca de mi maleta de nueva cuenta, salgo de ese tedioso lugar, sonriendo al ver un cartel con mi nombre, me acerco corriendo lo más que podía evitando que resbalara o me golpeara con algo.
– ¡KEY!
– ¡TAEMIN! – Deja el cartel a la mujer que tiene a su lado y me abraza.
– Pequeño discúlpame por abandonarte con ese idiota.
Niego con la cabeza al mismo tiempo que me separa un poco.
– No es tú culpa. Tú debías seguir tus sueños, y no lo hubieras cumplido estando a mi lado cuidándome. A demás ya soy todo un hombre. – Menciono haciendo algunos gestos de niño pequeño, lo cual hacen que Key y la mujer a su lado que aun es desconocida, se rían.
– Me separe de ti hace dos años, cuando aun eras un niño.– Vuelvo a negar con la cabeza.
– Cuando te fuiste tal vez así era yo. Pero hoy puedo decir que soy más que un niño y un adolecente. – En su sonrisa noto orgullo y amabilidad, me vuelve abrazar pero esta vez nos vemos interrumpidos por la joven.
– Joven Kim, su amigo ha de estar cansado después de un viaje tan largo.
Key lleva sus manos dando un aplauso lo cual me hace dar un pequeño salto por la inesperada acción.
– Oh. Tienes razón. Por cierto baby, ella es Lee Hae Ri, mi asistente.
– Un gusto conocerlo joven Taemin, el joven Kim nunca deja de hablar de usted, –Me dedica una sonrisa las que solo tiene las madres.
Sin más salimos del aeropuerto, en camino a casa de key, le pongo al tanto de estos últimos dos años donde estuvimos separados, con atención y silencio escucha mi historia, lo cual se me hace muy raro ya que siempre tiene algo que decir o tiene a interrumpir mucho.
Sin evitar que mis lagrimas salieran le platico porque me he separado de Minho, omito que me engaño con Onew, key también lo conocía ya que los tres crecimos juntos, solo que el siempre fue por lo que quiso sin importar las consecuencias.
Algo en mi interior me decía que key ya sabia lo que yo le contaba, por la simple razón que esta muy calmado, seguimos platicando por un poco más de tiempo sin saber en que momento caí dormido.
Me despierto en una suave y esponjosa cama sin querer levantarme de ahí abro los ojos al mismo tiempo donde asimilo que estoy en otro lugar donde no es mi hogar, con cuidado me siento, justo al mismo tiempo donde escucho tocar la puerta.
– ¿Taemin estas despierto?
– Adelante key.
– ¿Te desperté? – Niego con la cabeza.
– Me desperté momentos antes de que tocaras la puerta. – Asiente mientras veo que dejas una bandeja de comida en la mesita de noche, parpadeo varias ya que no había notado que traía la bandeja.
–Tae, come un poco, te dejare esto aquí, yo estará abajo por cualquier cosa no dudes en pegar un grito.
–Claro Key. – Menciono mientras mi mano toma un panque seguido de que escucho la puerta cerrarse.
Me levante con cuidado y llevo el panque a mi boca mordiéndolo , mientras me acerco a un ventanal que hay en mi habitación, por unos segundos me pierno en la vista de la cuidad, es de noche, veo demasiados colores, los edificios tiene algo bello aunque unos fueran ya viejos, veo turistas en la calle tomando fotos a todo, lo cual hace que suelta una risa corta ya que me imagine haciendo lo mismo en uno de los siguientes días.
Aparto mi vista de la ventana por que recuerdo que debía avisarle a Jonghyun que había encontrado a Key, busco con la mirada mi bolso de mano lo encuentro en un escritorio, me acerco a el y saco mi celular, lo enciendo y miro 15 mensajes y 30 llamadas perdida, al querer desbloquear mi celular me sale la advertencia de batería baja, así que en ese instante busco mi cargador lo encuentro pero también encuentro el celular donde estaban fotos y mensajes que no había podido eliminar.
Lo saco del bolso y lo dejo en la mesa, ha estado apagado desde que Jonghyun me acogió en su casa, con algo de miedo y tristeza lo enciendo, espantándome al escuchar el celular sonar, noto que es Jong llamándome.
– ¿Bueno?
– ¡Taemin! Gracias al cielo estas vivo, pensé que algo que había pasado. Te dije que me llamaras cuando encontraras a tú amigo. No sabes que cosas me imagine
– Discúlpame, es que me dormí y hasta ahora estoy despertado. – Escucho un suspiro del otro lado de la línea, se que ya no esta preocupado por que sabe que estoy bien.
– Tae… –El tono de su voz hace que me ponga alerta
– mmm.. – Solo realizo ese sonido, esperando que solo fuera un juego o solo me molestara por no llamarle.
– Él ha estado buscándote… – Lo que me dice es como un balde de agua, sin más empiezo a reír algo nervioso e histérico.
– Deja de jugar, sabes bien que solo fui un juego para él.
– No estoy jugando, Minho vino desde la noche de su compromiso, me pregunto por ti, dije que no estabas aquí.
– Pero no le dijiste que me fui o ¿si?
– No, solo le dije que no estabas aquí, no me creyó por lo mismo entro a mi casa, por cierto golpea fuerte pero no más que yo.– Le escucho reír, lo que hace que yo también lo haga.– Después de que te buscara por toda mi casa se fue, dejando un desorden en todo el lugar.
– ¿Ha vuelto a ir?
– No
No quería seguir escuchando más de Minho, así que decido terminar la llamada mintiendo un poco, me despido de Jong. Dejo cargando el celular y miro el otro ya prendido y viendo como en la pantalla seguían apareciendo mensajes no elidíos, doy un suspiro y lo tomo en mano…