(Narra Tetsu)
Había tenido una semana maravillosa, los chicos no se separaban de mí y de mi hermana. Ella y Kagami llevaban una gran relación, se notaba que se amaban mucho, qué decir de Takao y Midorima, así como de Himuro y Murasakibara. A Akashi lo veía más sereno desde la vez que Aomine anunció nuestro compromiso, por ende, el pelirrojo no le quedó más que conciliarse con una amistad, aunque no lo crean, a mí también me dolía.
No había conversado con Daimine desde la vez que hablamos sobre nuestras nuevas parejas, admito que lo extrañaba, pero no tanto.
Mi padre salía con Alexandra casi todos los días y bueno, mi hermano digamos que se enamoró de Hikari, la hermana menor de Murasakibara; que en mi parecer no se parecía en nada a su hermano más que el cabello lila.
*Recuerdo*
Estábamos en la habitación de Kagami, jugando como siempre mientras Murasakibara y Himuro se encontraban platicando con la hermana del alto por skype.
- ¿La quieren conocer? –preguntó el azabache. Riko y yo nos acercamos a la camarita.
- ¡Hola! –nos saludó una alégre chica de cabello como su hermano y ojos plata.
- Hola –saludamos mi hermana y yo.
- Atsu-chin y Tatsu-chin me han platicado de ustedes, dicen que son muy agradables.- habló la chica con gran emoción y la misma muletilla de su hermano. ¿En verdad es su hermana? Creo que ella heredó toda la energía y Murasakibara no.
- No mientas, dinos que nos odian y se las verán con nosotros –le dijo Riko. Ella rió y cuando lo hizo nosotros inmediatamente sonreímos.
- En serio, dicen que son geniales, también me platicaron que Mine-chin está enamorado de ti – me señaló. Yo al instante me sonrojé y desvié la mirada- Tú eres Tetsu-chin, ¿cierto? –preguntó.
- Sí, yo soy el culpable de que Aomine-kun delire.
- Jajaja ¡Que lindos! Me da gusto, ya le hacía falta al bobo.
- A mí también –admití sonrojado.
- Entonces, tú eres Riko-chin, la novia de Bakagami –indicó la chica. Mi hermana sonrió.
- Así es…
- Qué bonita historia, conocer a alguien en un elevador y no poder quitarle los ojos de encima desde entonces…
- Admito que desde ese día, no pude ver hacia otro lado que no fueran esas raras cejas.- bromeó mi hermana la cual hizo estallar en carcajadas a la chica y a los presentes.
- ¡Sí! Son muy raras–dijo la chica.
- Murasakibara-kun comentó que cantabas. Que tenías una voz asombrosa…
- Dile que no diga mentiras –dijo Hikari.
-Pero si yo no miento Kari-chin.- se defendió el titán mientras comía una paleta
-Además por eso tus padres te mandaron a América.- instó Himuro.
- ¿Nos cantarías algo, por favor? –pedí. Ella se sonrojó pero comenzó a cantar Creep de Radiohead versión jazz; tenía una voz hermosa, delicada, y lo que más me encantaba era el sentimiento que le impregnaba.
- ¿Qué artista ven? Me gusta su voz –dijo Kouki, acercándose para ver. Hikari al instante calló.
- Oh, lo siento. No sabía que era una conversación –se disculpó mi hermano apenado.
- No importa –le dije yo- Ella es Hikari, la hermana de Murasakibara-kun.
- Hola –saludó la chica con una gran sonrisa.
- Hola, yo soy Kouki, hermano de estos.- nos tomó por los hombros
- Es un placer –saludó sonrojada. Miré a mi hermana y ella también notaba que entre estos dos había una conexión importante.
- El placer es todo mío. Debo decirte que tienes una gran voz… me has sorprendido con ella.
- He… -ella se sonrojó a más no poder y se rió un poco nerviosa- gracias –mordió sus labios y desvió la mirada. Himuro se llevó a enpujones al titán mientras mi hermana y yo nos paramos de allí disimuladamente y él se sentó frente a la computadora.
Kouki se quedó platicando con ella por dos horas seguidas sin interrupción de nadie, estaba riendo de una forma misteriosa que yo nunca había visto, también se escuchaban las carcajadas de Hikari. Atsushi miraba a mi hermano y sonreía para luego seguir comiendo su paleta.
- Al parecer se agradan –le dije al titán.
- Neeh…eso creo
-Me alegra que Hikari-chan hable con alguien como tu hermano.-agregó Himuro
- También a mí – dije sonriendo.
- Aunque creo que alguien se pondrá celoso.- insinuó el azabache mirando directo al pelilila que volteaba su rostro ocultando su leve sonrojo.
*Fin del recuerdo*
Hoy era domingo, se suponía que el próximo sábado estaríamos ya en América. El tiempo se me había pasado en un parpadeo. Mi hermana estaba muy contenta con Kagami, pues el le había comentado que también se mudaría a América porque su familia radica allí.Yo por mi parte estaba preocupado, si bien los chicos eran japoneses, al arrivar pasaría una semana más y se regresarían para el inicio de la Universidad, incluyendo Aomine.
Los chicos tendrían un gran partido en la cancha principal, nosotros estábamos en las primeras filas mientras ellos calentaban
- ¿Qué tal jugamos? –preguntó Aomine haciendo rodar el balón en su dedo. Me le acerqué y le di un beso en la mejilla.
- Fabulosamente, no puedo creer que sean tan invensibles
- Sabía que nos amarías.
- Debo decir que sí, pero más a ti.- lo abrazé por la cintura.
- Eso me encanta –dijo y me dio un beso en los labios.
- Hola –dijo un chico casi de mi tamaño, cabello castaño claro y de ojos chocolate, tenía una sonrisa tímida y parecía estar nervioso.
- Hola –saludamos ambos.
- Perdón la interrupción…
- No te preocupes –le dije amable- ¿qué necesitas?
- Es que… yo soy admirador del equipo y… quisiera una foto con… él –dijo apuntando a Aomine.- siempre me ha encantado su modo de juego, pero mi novio no me dejaba acercarme a pedirle un autógrafo y ahorita me le escapé solo para verte –le dijo al moreno haciendo que este se crea diva.
- Adelante, ¿tienes una cámara? –le pregunté y el pelicastaño sacó su digital del bolsillo. La tomé y se colocó a su lado, empezó a sollozar.
- Oe ¿Qué pasa? No llores –decía Aomine sin saber que hacer.
- Perdón, es que es la emoción –dijo ahora riendo el admirador de mi hombre.
- ¿Cómo te llamas? –preguntó el moreno.
- Ogiwara Shigehiro, crecí en Japón pero soy de América –dijo ella sonriente.
(Conversación en inglés) (N/A: supuestamente todos los diálogos anteriores son en japonés xD y este es en inglés)
- Entonces, hablas inglés –le dije en ese idioma. Él me miró sorprendido y sonrió.
- ¿Tú también? –preguntó, me agradaba su acento.
- Sí, estudié el idioma pero admito que aún me faltan muchas palabras por conocer.
- Es normal –dijo él más calmado, Aomine nos miraba con total confusión- el Inglés es un idioma sencillo, sin muchas derivaciones, no como el japonés, me confunde los kanjis
- Muy cierto –dije sonriendo- ¿Así que admiras a Aomine? –él se rió nervioso.
- Sí, lo siento si te hizo sentir incómodo –se disculpó. Yo le sonreí.
- No te preocupes.
- ¿Supongo que son novios? –dijo él confundido.
- Sí, es mi novio.
- Lo que daría por salir con alguien como él –instó mirándolo.
Aomine solo sonreía pero no decía nada- Por cierto, hace poco vi a Momoi Satsuki rondando por aquí, ¿no hubo problemas contigo?
- Supongo que por ser una figura pública se sabe de las relaciones que tienen –dije más para mí que para el pelicastaño.- lo único que puedo decir es que… ahora Aomine-kun está en buenas manos, yo me encargaré de no lastimarlo, de quererlo y amarlo como se debe… - el chico sonrió y los ojos se iluminaron.
- Eso espero, no quisiera odiar a un chico que ahora se me hace muy agradable.
- Gracias –dije sonriente.
- ¿Me puedo tomar una foto contigo? –preguntó.
- Claro –dije y me acerqué a él, le di la cámara al moreno y él nos tomó una a ambos.
- Gracias, de verdad espero que sean muy felices juntos.
- Gracias –le dije yo- por cierto Ogiwara-kun, no dejes que un chico te corte las ilusiones, él no manda sobre ti, tú puedes amar al equipo y amar a Aomine-kun tanto como yo.
- Eres genial –me dijo y me abrazó.
- Gracias – Ogiwara le dio un último abrazo a Aomine y se fue. Hizo una parada más con mi hermana y con Kagami, se tomó unas cuantas fotos más con el resto del equipo y luego se sentó entre las graderías.
(De vuelta al japonés xD)
- Oe Tetsu ¿Qué tanto hablaban? –preguntó Aomine confundido.
- Algo sobre… sus sentimientos por ti –él se sonrojó- los míos por ti –lo abracé- y me dijo que me odiará si te lastimo.
- Yo también me enojaría contigo, pero confío mucho en ti.
- Hazlo –le dije y me besó- no te lastimaré, tal vez te asuste o llegue a dar coraje pero…es algo natural en mí.
- Mientras esos bellos ojos no me hagan enojar de verdad estaré bien.
- Perfecto, yo también confío mucho en ti.
- Bueno, ya me tengo que ir. Está por comenzar el partido.
- De acuerdo, suerte y… gana con todo amor, te amo –alenté y le di un casto beso.
- Gracias Tetsu–dijo y se fue a la cancha.
Mi familia, Takao y Himuro estaban sentados justo frente a ellos, me acerqué y después de saludarlos, esperé a que comenzara el partido.
A mi lado llegó el admirador del equipo; Ogiwara me saludó y comenzó a alentar conmigo junto con las barras… El público estaba eufórico, mis amigos, mi familia también. Incluso mi padre estaba gritando junto con Alexandra.
- ¿Conoces a la señora Alexandra García? –preguntó Ogiwara.
- Sí –le dije un poco fuerte, pues los griteríos casi no me dejaban escucharlo.
- Es mi mamá –dijo, me sorprendió mucho, pues yo no sabía que tenía un hijo- mi nombre completo en inglés es Shigehiro Ogiwara García
- Yo soy hijo de Toshiro Kuroko –le dije- el novio de tu madre es mi padre.
- ¿En serio eres su hijo? –preguntó ilusionado.
- Sí –dije sonriendo. Estuvimos coreando las barras hasta que sentí que mi celular vibraba, hacía mucho que ni siquiera lo miraba para ver la hora.
“Esta noche sabrás lo que se siente sufrir por alguien más. Ten cuidado Tetsuya, yo no lo tendré” –recibí de un número desconocido.
Decidí no responderle pero admito que me había preocupado. Los chicos estaban con el marcador casi parejo, el equipo contrario en verdad muy bueno. Aomine me miraba un tanto preocupado, pero yo le sonreía para que él se relajara.
Al final del partido el público se lastimaba las manos de tanto aplaudir, todos estábamos haciendo una gran ovación a ellos pues había sido un gran juego.
El salón se comenzó a vaciar y después de unos cuantos autógrafos, los chicos estaban con nosotros.
- Eh chicos –les dije-, creo que ya lo habían visto. Él es Ogiwara Shigehiro, además de ser un gran admirador de ustedes, es el hijo de Alexandra García, la novia de mi padre.
- ¿Tiene un hijo? –preguntaron Riko y Kouki al mismo tiempo.
- Neeh…¿Qué no se los dijo? Comienzo a descubrir que mi madre me niega –dijo negando con la cabeza pero en tono de broma, todos reímos.
- Es un placer Ogiwara –saludó Midorima- creo que no necesitamos presentarnos, pues ya nos conoces.
- Cierto –dijo él.
Estuvimos platicando de Shigehiro y de nosotros para conocernos, él era un chico muy agradable, estusiasta y optimista, algo me decía que seríamos muy buenos amigos a futuro.
Luego de eso cada quien se fue con su cada cual y Akashi se ofreció a acompañar a Ogiwara a su habitación. Aomine y el resto de los chicos venían jugando, mientras nosotros sus parejas íbamos detrás
- Fue una gran noche –dije.
- Es cierto –afirmó Himuro.
- Este ha sido el mejor viaje de mi vida, hasta ahora.- agregó Riko
- La verdad sí –habló Takao- con sus detallitos, pero ha sido un viaje genial. Conocimos gente, se enamoraron los solterones y jugaron partidos. Definitivamente esto ha sido genial.
Fuimos al camarote de Midorima y Takao para beber algo en lo que conciliábamos el sueño. Cuando nos dimos cuenta de que el cansancio era demasiado, Murasakibara y Himuro ya se habían ido, Kagami y Riko estaban por irse, Akashi no había regresado desde que se fue con Ogiwara; Aomine y yo también estábamos por irnos.
-Ve al camarote –le dije a Aomine- iré por algo de ropa al mío.
- ¿No quieres que te acompañe? –preguntó.
- No, estaré bien Aomine-kun, solo iré por mi ropa, en un ratito voy.
- De acuerdo –dijo y me dio un beso en los labios.
En nuestro pasillo vi cómo él se retiraba a paso lento, luego antes de meter la llave a la cerradura de mi camarote, sentí como me daban un golpe en la cabeza y todo en el pasillo se comenzaba a oscurecer.