Steve llegó hasta su sencillo departamento todavía sintiendo un agitado latir en su corazón… a primera vista todo parecía tranquilo, las luces estaban apagadas, todo a oscuras excepto por la pequeña vela aromática que siempre ardía cuando uno de los dos faltaba en el hogar… ocupados en riesgosas empresas, a pesar de sus poderes de supersoldados, ni Rogers ni Barnes se sentían tranquilos hasta que los dos estaban nuevamente reunidos. Por eso tomaron la costumbre de encender una vela y dejarla en la mesita de centro, el que llegaba primero la encendía, el que llegaba después la tomaba y entraba en la recámara con ella… soplaba para apagarla y decía:
-“Hey, amor… ya estoy en casa...”
El auto estaba en su lugar, bien estacionado… todo en orden, la vela encendida… pero ninguna voz respondió a la frase de Steve cuando entró a la recámara y sopló la débil llama con perfume de maderas. Bucky estaba ahí. Lo vió acostado en su cama, en la cama de los dos, tapado hasta la cabeza y sin moverse un centímetro... aunque después de insistir un par de veces más… el castaño respondió:
-Duérmete... mañana será un día ocupado, los nuevos Vengadores te esperan para que evalúes sus logros.
-Bucky… hablemos...
-No hay nada que hablar- respondió James, levantándose sobre su brazo para mirar de frente a Steve
-Debo explicar lo que sucedió… en serio, jamás fue mi intención que esto sucediera...
-Yo siempre te pedí que te quedaras con tu esposo ¿No es verdad? Te supliqué que no te divorciaras… que yo entendería. Incluso acepté la posibilidad de ser tu amante si alguna vez deseabas estar conmigo a escondidas, si alguna vez reñías con Tony… yo te estaría esperando de día o de noche… pero cuando nos acostamos la primera vez, supe que te quería solo para mí… que no podría compartirte con nadie más, con nadie… estuve celoso hasta de tu hijo. Y cuando abandonaste todo por mí, ciertamente me creí con la partida ganada… y fui feliz…
-Bucky escúchame… lo que sucedió fue...
-Lo que mis ojos vieron no necesita explicación… Steve, mi viejo amigo, mi antiguo camarada… mi amor… Si tu corazón ha tenido una duda sobre lo nuestro entonces yo te libero de mí. No me expliques nada, no te justifiques… no te obligues a mentir… para mí eres el único gran Capitán América, y él siempre dice la verdad y actúa con honor, con sinceridad y valor… yo me quedo aquí porque este lugar lo compramos entre los dos y si te quedas, te quedas conmigo y solo conmigo, pero si te vas… entonces procura serle fiel a Tony y no me vuelvas a buscar ¿Lo entendiste?
-No sé que hacer...
-Solo sigue a tu corazón.
Steve asintió, intentando acercarse al otro y abrazarlo. Pero Bucky lo detuvo con firmeza... entonces el rubio supo que de verdad estaba en una encrucijada y que por el bien de aquellos dos hombres que no se merecían sus dudas, tenía que aclarar los sentimientos hacia cada uno de ellos.
-Tienes razón... dormiré en el sofá y hablaremos por la mañana...
Rogers salió y Bucky ya no agregó ni una sola palabra… lo escuchó ir y venir un poco por el departamento, incluso le pareció percibir el aorma de café recién preparado. Luego, tras varios minutos de silencio… se escuchó con toda claridad como la puerta se abría nuevamente…
Steve había vuelto a salir.
***
Tercer día… Thor estaba más desanimado que nunca… En vez de estar desbordando felicidad al escuchar la confesión de los sentimientos de Loki, sentía que lo estaba perdiendo. Que su amado hermano, amante y esposo se alejaba cada vez más de su corazón… Loki se comportó frío y distante durante la última mañana de festejos, por la tarde, abrirían el balcón principal para que el pueblo de Asgard saludara a la familia real… los dos estarían juntos por protocolo, fingiendo llevarse bien y por la noche, volverían a comparecer ante Padre de Todo para darle a Odín una respuesta a sus preguntas del primer día.
Las horas pues… estaban contadas para los intentos del rubio.
-Mira, papá… hay algo en la puerta de la habitación...- Raynor corrió para levantar un ramo de rosas con un hermoso tono rojo, tan fuerte que parecían hechas de seda negra- ¿Son un regalo? ¿Son flores que te envía Padre Thor?
-Creo que sí…- murmuró Loki, tomando la carta que estaba entre las rosas, reconociendo la caligrafía contundente del primogénito de Odín- Ve a darte un baño, querido… que debemos presentarnos muy elegantes esta tarde con tu abuelo.
El niño obedeció de inmediato y acompañado de sus niñeras, entró al cuarto de aseo, mientras que Loki se sentó en el alféizar de su ventana para leer:
-“Mi amado Loki”- comenzaba así la carta, algo trillado, pensó el pelinegro, pero esperaba se pusiera mejor su contenido o al menos, que Thor tuviera muy buenas razones para haberla enviado- “No encuentro las palabras adecuadas para explicar mi comportamiento de los últimos meses… me siento terriblemente avergonzado por todo el daño que te he provocado y solo he deseado que pueda encontrar la manera de solucionarlo… me doy cuenta que jamás he dejado de amarte, que te necesito desesperadamente… que nunca debí atreverme a romper contigo, ni arriesgarme a perder lo que más venero que es tu presencia y la de mi hijo… por favor, dame la oportunidad de probarte mi devoción, solo eso anhelo… tuyo por todo lo eterno… Thor Odinson”
Loki no sintió una especial emoción en el contenido de la carta… pensó que estaba vacía de pasión, que algo le faltaba para provocar a su corazón y pensó que quizá, finalmente… el rubio estaba perdiendo el trono que tenía en su amor. Alzó los ojos al cielo… necesitaba saber que clase de respuesta daría a Odín y ahora también, necesitaba saber que clase de respuesta le daría a Thor… pensó en el rubio y pensó en Stephen… los hombres de su vida… no quería colocarlos en una balanza en ese momento, pero quizá solo era cuestión de tiempo hacerlo y cortar de tajo una de las dos relaciones… las lágrimas llegaron fácilmente…
-No puedo elegir… uno de ellos es el padre de mi hijo… y tengo miedo de averiguar cual de los dos... Y cuando lo sepa, cuando tenga la certeza de quien es, tampoco puedo quedarme a su lado por ese solo motivo… ¡Soy un necio! Yo solo me he tejido esta trampa… -se recriminó a sí mismo- No puedo, no soy capaz de quedarme al lado de uno o de otro por el solo hecho de que tuvo la puntería de impregnarme y tampoco puedo elegir por amor porque no tengo la certeza de que me acepte en este estado… ¡Cielos dorados de Asgard! ¡Mi pobre y confundido corazón!
Soltó la carta al viento, mirando hacia el horizonte… ni siquiera se dio cuenta como la hoja de papel, con la declaración de los sentimientos de Thor ondeaba como una mariposa perdida en las ráfagas de un huracán, ni tampoco observó la figura ágil que la atrapó al vuelo, resguardándose de ser vista para leer indiscretamente.
-Angela… no deberías inmiscuirte en la vida de tus hermanos… al menos no en esa forma...
-Mi querida Sera- respondió la hermana de Thor- Hay algo que nunca ha terminado de convencerme en Loki… y te aseguro que lo voy a averiguar, por lo pronto… aquí tengo la prueba de que su matrimonio es prácticamente imposible de rescatar. Tengo que averiguar si todo lo que me han dicho de él y sus malas artes es verdadero.
-¿Y eso cómo lo has de lograr? Thor parece muy enamorado de Loki… lo veo decidido a reconciliarse con él… y además tienen un hijo pequeño, que sin duda, goza de todos los afectos del Rey Odín.
-Hey… Sera, mi amor… recuerda también que hemos conocido a la nueva Thor*, que hemos luchado al lado de ella y que posee la fuerza y las convicciones necesarias para ser digna, para ser la Diosa del Trueno. Encuentro a esa mujer mejor preparada para ser la compañera de mi terco hermano, muy pocos creen en ella, especialmente en este lugar… pero yo la apoyo.
-Tú la apoyas porque no puedes congeniar con Loki... ¿No es así?
-Dímelo tu, querida mía… tú que fuiste guardián de los deseos ocultos en Haven, en el reino de los Ángeles, dime que hay en el Dios de las mentiras que causa mi repulsión, que no me convence, que me hace desconfiar…
Sera movió graciosamente la cabeza. No existía capricho que no cumpliese a su amada y extendió la mano para que la carta le fuera entregada. Angela miró entonces, con gesto extasiado, como su novia se ponía en una especie de trance… necesario para convocar su don de visualizar eventos del futuro.
-Lo único que veo, querida Ángela… es que la casa de Odín crece… los sucesores que se agregan a su sangre, se disputan el trono que en este momento se encuentra a la deriva... Pero de todos esos nuevos príncipes… hay uno que por linaje los deja a todos debajo de su derecho...
-¿Eso miras en el futuro? Estás perdiendo tu don, amor mío… Raynor es el más lógico para suceder a mi hermano como heredero, su linaje y su condición de Primer Príncipe de la Sangre lo colocan en un lugar indiscutible… no entiendo por qué habrá disputas...
-Es confuso, cariño… es muy confuso todavía... sangre nueva es lo que veo. Un niño que es designado por Odín... el Padre de Todo lo enaltece, lo corona... Lo eleva más arriba que el propio Thor. Veo que esa criatura tiene un gigantesco futuro, porque en su testa recae la dinastía de la casa real de Asgard. Y veo también el inicio de nuevos problemas… guerras… envidias… ¡Oh, Dioses! Yo no veo ahí a Raynor ¿Qué tal si se tratara de otro niño?
Angela se quedó pensativa, tomó de nuevo la carta que Loki arrojó al viento y con un ademán mágico comenzó a incinerarla... clavando sus ojos en las llamas, deseando que se le revelaran más detalles de los que Sera ya había advertido.
-Entonces no necesariamente es Loki quien traerá nuevamente la discordia ¿No es eso? ¿Puede ser el bebé que ya viene en camino o puede ser uno que no ha sido creado todavía?
Sera se abrazó de su novia, calmando su nerviosismo… Angela estaba algo pálida, y sus manos temblaban… ciertos malestares regresaron para hacerla sentirse mareada.
-Amor mío quizá es tiempo de contarle a tu padre nuestro secreto...
-¡No, Sera! ¡No! ¿No entiendes que Odín nos ataría todavía más si se entera que su capricho de verme esperar un hijo es una realidad? Muy pronto no podré ocultarlo… y necesito saber cual es mi posición en esta familia, qué piensan de mí realmente mi padre, mis hermanos y el Jötunn… desconfío de ellos, pero en especial de Loki… si es cierto lo que Thor* me ha contado, no puedo permitirle seguir cerca de nosotras. Si es nuestro bebé el que pone en riesgo la herencia del suyo… entonces es mejor buscar la mejor forma de alejarlo para siempre de Asgard, de Thor y de los Diez reinos…
-La mujer que ahora posee el martillo jamás ha ocultado su intención de procrear y disputar con Loki la herencia de tu hermano... ¿No crees que ya son demasiados candidatos en potencia para ganar el trono? Si con eso no te convences que puede haber problemas…
-Ella es digna… soy su amiga... Thor* jamás cometería una acción tan baja, yo creo que su honestidad.
-Thor* te ha convencido de su bondad, pero también ha dejado en claro su ambición… Raynor tendrá competencia en los afectos y en los legados del hijo de Odín si logra darle hijos... Recuerda, querida Angela que juramos que nuestro hijo o hija no entraría en esas disputas, que lo mantendríamos lejos de la sucesión, que no permitiríamos que fuese involucrado… pero también recuerda que ahora Odín nos llama a su lado y si aceptamos su soberanía... aceptaremos el destino que quiera darle a nuestro bebé...
-¡Oh, Sera! ¡No me arrepiento de este hijo que espero, pero creo que lo traemos al mundo en tiempos complicados! ¡Tenemos que ser fuertes y pensar muy bien las cosas! ¡Tenemos que saber cada detalle de la vida de Balder, de Thor y de Loki para defenderlo!
-Lo haremos… no dudes que lo haremos...
***
-¡Por todo lo eterno!- suspiró el rubio, ofreciendo su brazo con gesto de galantería para que el recién llegado entrase- Pareces una visión celestial
-Pensé que tendríamos ese acto oficial en el balcón antes de esta reunión… ya me había vestido... ¿Estoy fuera del protocolo?
-Estás arrebatador...- respondió Thor, barriendo de pies a cabeza el nuevo elegante traje de piel y terciopelo que Loki estaba usando… con el justo entalle en su esbelto cuerpo, con las joyas de oro en su pecho y en sus muñecas, su negro cabello trenzado, y su semblante más luminoso que nunca… dejaba caer sobre su hombro una vaporosa capa de color dorado, resaltando el conjunto de manera llamativa, por supuesto, le daba un aire tan atractivo, tan altanero y aristocrático que el corazón del pobre rubio comenzó a derretirse como mantequilla- Por favor...
Volvió a ofrecer su brazo para entrar al despacho privado de Padre de Todo y Loki prefirió llevar el asunto en paz, así que se tomó de él y juntos caminaron hasta quedar frente a Odín… se inclinaron para saludar y quedaron postrados de rodillas esperando su autorización para tomar asiento.
-Bienvenidos… hijos mío- dijo el soberano, colocando sus anchas manos sobre las testas rubia y azabache de la pareja- No se muevan… justo así es como deseo hablarles... Como cuando eran unos niños… y me tenían ese respeto casi sobrenatural, echándose a temblar y cayendo postrados con humildad apenas mi voz se hacía sentir… y yo me enorgullecía de tener vástagos tan leales y obedientes...
Loki miró de reojo a Thor y a su alrededor… no podía ver a nadie más en la habitación, además, el tono amable y las palabras casi cariñosas de Odín le estaban causando escalofríos.
-Y seguimos siendo, Padre mío…- murmuró Thor, algo desconcertado también- Sus hijos que aceptan su soberanía y poder.
-Posiblemente, como también sé que ya no me temen… y eso está bien. Seré breve y directo… dentro de unos minutos, el pueblo de Asgard espera que yo le hable, que yo anuncie noticias venturosas sobre nuestro mundo… y eso haré… gracias a lo eterno, puedo darles esas noticias de paz y prosperidad que tanto esperan… y también quiero darles la noticia de que la familia… MI familia… NUESTRA familia, se encuentra reconciliada y unida…
-Nosotros respetamos la casa de Odín- dijo Thor, haciendo que a Loki le sentara mal que hablara por los dos- Llevamos nuestras vidas lejos de Asgard, pero veneramos las leyes y las costumbres...
-Quiero que hagan algo más… quiero que vivan aquí nuevamente… en el Palacio de Bilskirnir. Voy a obsequiarles ese palacio para que fijen su residencia permanente, podrán ir y venir de acuerdo a su voluntad, pero ese será su hogar...
El Palacio de Bilskirnir era una construcción magnífica, tan amplio y lujoso como el propio palacio de Valhalla. Thor lo había remodelado años atrás, dispuesto a formar ahí una familia… pero el rechazo que entonces sufría Loki se lo impidió, también el hermoso edificio fue destruido durante el ataque de los Elfos oscuros… ignoraban que de nuevo estuviese en pié… por lo que era un obsequio extremadamente generoso por parte del Rey y el asunto eras que era casi imposible rechazar tal distinción.
-Pero yo estoy bajo exilio- dijo Loki, hablando por sí mismo y sin que le importara la opinión de Thor- Fui rechazado y enviado a Midgard sin poderes, crío a mi hijo trabajando como un simple mortal… y estoy legalmente divorciado de Thor… No encuentro sentido a esta enorme y tristemente inútil oferta...
-Todo eso lo sé…- respondió el anciano de un ojo, continuando con su tono conciliador- Y estoy dispuesto a levantar el exilio… podrás regresar a Asgard con la frente en alto, si así lo deseas… y te considero todavía mi hijo, Loki Odinson...
-Eso es muy generoso, Padre- agregó Thor, evitando una negativa contundente del pelinegro- Loki deberías pensarlo detenidamente… por el bien de Raynor en primer lugar...
-Sellas mis labios mencionando a mi hijo…- declaró Loki, mirando con reproche al rubio- Pero aún si yo accedo a vivir de nuevo en la ciudad dorada... seguimos bastante divorciados...
Odín estaba sonriendo, se mostraba complacido por tener a Loki de rodillas y aceptando mansamente su voluntad… haría todo lo posible por seguir adelante con lo que deseaba y eso incluía, reunir de nuevo a sus hijos como pareja.
-Por eso estamos aquí... mírense a los ojos ahora- indicó el soberano, tomando las manos de los dos- Miren dentro de sus almas… encuentren su respuesta… ¿Existe amor todavía? ¿Existe la capacidad de comprender y perdonar mutuamente? ¿Pueden rescatar su matrimonio por el bien de sus almas, por el bien de sus hijos y para hacer feliz a mi viejo corazón?
Thor permanecía serio… atendiendo cuidadosamente a las increíbles instrucciones de su padre… miraba sin parpadear el rostro de su ex esposo y miraba anhelante cualquier indicio de respuesta en las esmeraldas de sus ojos… Loki se mostraba un poco inquieto, rehuyendo fijar por demasiado tiempo su vista en los zafiros brillantes del rubio. Odín unió las manos de los dos… provocando que Loki se sonrojara.
Luego dio un par de pasos atrás…
-¿Por qué, Majestad?- cuestionó el pelinegro- ¿Por qué ahora usted me trata con deferencia, por qué insiste en reunirnos cuando antes yo era solamente un monstruo, una equivocación, un enemigo…?
-Todos mis actos tienen un propósito- respondió el Rey- Y a nadie doy explicaciones.
Loki intentó retirar sus manos, pero Thor no se lo permitió… de alguna forma, sin planearlo, su propio padre le daba la última y desesperada oportunidad de saber que terrenos exactamente pisaba en el corazón del hechicero.
-Recibiste mi carta... supongo…- murmuró el mayor, ignorando la presencia del Rey- ¿Tienes una respuesta para mí? ¿Puedo aspirar a que me tengas piedad y permitas que repare mis errores?
-¡Oh, Thor es tarde para eso!- murmuró Loki, sonrojándose nuevamente y desviando su verde mirada- Hay demasiadas cosas que ahora nos separan…
-Solo sé que te amo… y que tú dijiste que me amabas… lo nuestro no se puede terminar, tenemos un amor fuerte y verdadero… ¡Loki, te lo suplico… déjame luchar por ti! Aceptemos el generoso obsequio de Padre y seamos de nuevo una pareja unida por amor…
-¿Así tan fácil? ¿Es tan simple como dices, Thor? Me parece que te olvidas que tú no eres libre… que vives en una relación diferente, que has ofrecido tu amor a otro corazón...
La mención de Thor* reventó la burbuja en la que el rubio estaba ensoñando. Por un instante la había olvidado por completo… Loki tenía parte de razón, le había ofrecido a Jane/Thor* su palabra de amarla y ser su compañero, incluso habían hablado de matrimonio en un corto plazo… ¿Qué hacer ahora?
Loki soltó sus manos aprovechando el instante de duda del otro, tenía una mueca trágica en su hermoso rostro. ¿Acaso escuchó que su amor era fuerte y verdadero? ¿Entonces por qué titubeaba ante la mención de la mujer del martillo?
-Solo dame el tiempo para arreglar esa situación…- dijo Thor al fin, intentando volver a sujetar al pelinegro.
-No hagas promesas que quizá no puedas cumplir...
La discusión no llegó a ninguna solución de momento. Odín les apresuró para salir al balcón, obteniendo su promesa de seguir aparentando que todo estaba bien… el pueblo quería verlos juntos y juntos se presentaron, Thor enlazó a Loki por la cintura con la diestra y llevó en su otro brazo a Raynor durante toda la ceremonia sin que acusara cansancio. Escucharon el discurso lleno de optimismo de Padre de Todo y sonreían y parecían la pareja más feliz de los mundos y los universos.
Hasta que disimuladamente, Loki le pidió a Thor que dejara de apretarlo tanto.
-Si puedo cumplir mi promesa- susurró en respuesta, apretándolo todavía más- Te juro ante este pueblo y ante nuestro hijo… que voy a luchar por ustedes, por recuperarlos, por tomar de nuevo las riendas de mi vida… incluso, juro que volveré a levantar el martillo y seré el mismo que una vez fui: El Dios del Trueno...
-¡Oh, cariño… como quisiera que fuese verdad!
La palabra con la que siempre lo llamaba escapó de la garganta de Loki con naturalidad… ansiaba creer, anhelaba creer… y ante el delirio del pueblo, el obsequio de Odín y su petición de recibirlo nuevamente como su hijo, minaron poco a poco la terca resistencia del menor… se sentía bien estando tan cercano a su ex esposo, le gustaba su olor, su calidez, la forma en que llevaba a Raynor con orgullo… pero ¿Era real? ¿Resistiría el supuesto arrepentimiento y amor de Thor el saberlo nuevamente gestando a un hijo que quizá no era suyo?
-Repite esa palabra, amor de mi vida… repítela…- suplicó, olvidándose que estaban en público para acercar su frente a la frente de Loki.
-Cariño…- murmuró Loki, alzando un poco el cuello para besar a Thor en los labios.
La ovación con que ese beso fue celebrado dejó sordos al resto de la familia, Angela, Sera, Balder, Nanna y por supuesto, el noble Odín aplaudieron la caricia y esperaron lo mejor.
***
Peter llevó una bandeja con el desayuno hasta la cama de su padre... obligó al millonario a despertar y reclinarse en los almohadones para colocar la mesita de madera y sobre ella, los alimentos preparados personalmente por el joven arácnido.
-No me vas a rechazar nada ¿De acuerdo Papá Tony? Solo es un poco de jugo de naranja, pan con mermelada y dos huevos pasados por agua… es algo ligero y simple… por favor… necesitas alimentarte...
-No voy a rechazar nada que venga de tus manos, querido…- dijo Tony, bebiendo el jugo y observando lleno de amor los cuidados que su hijo le brindaba- ¡Delicioso!
Peter estaba todavía preocupado por lo sucedido… Tony tenía los párpados enrojecidos de un llanto abundante y reciente… no estaba para nada contento con el resultado de su “venganza” y se sentía fatal… estaba avergonzado, arrepentido… ver a Bucky paralizado mientras terminaba de hacer el amor con Steve no le causó placer alguno, por el contrario… Tony estaba roto… completamente quebrado anímica y físicamente.
Además… no pensó ni por un instante que Steve regresara a explicarle nada… y si regresaba, seguramente diría cosas que no quería escuchar.
-No mientas… si parece que el alimento se te atraganta en la garganta...
-No, Peter… no me subestimes ¡Soy Tony Stark! He pasado momentos más complicados en mi vida y saldré adelante… tengo mucho por vivir: Tengo un hijo que comienza a escribir su propia historia, estaré fuerte para él… para ti, Peter… para ayudarte y guiarte, para verte convertirte en lo que más quieras ser...
El muchacho se acercó y besó su mejilla… sin duda, su papá Tony era su apoyo incondicional, su fuerza y toda su inspiración…
-Solo deseo hacerte sentir orgulloso...
-¡Yo estoy orgulloso de ti! Y para demostrártelo… termino este rico desayuno y nos vamos de inmediato de vacaciones… ¿Dónde te gustaría? ¿Hawai? ¿Dubai? ¡Tú dime y nos vamos!
Comenzaron a hablar y a imaginar locuras, Peter tan solo se sentía feliz de poder alejar por unos minutos la tristeza del corazón de su padre… Wade había sido muy sabio al aconsejarle que acudiera con él y no lo dejara solo… Tony se estaba apoyando en su hijo para no derrumbarse por completo.
Por eso también, Deadpool ganaba cada día un lugar más y más profundo en el corazón del joven… quien pensó fugazmente, mientras seguía la conversación con Stark, en qué clase de obsequio podría darle para el cercano día de San Valentín… Wade no aceptaría nada costoso, así que tenía que demostrarle su agradecimiento y su amor de una manera creativa...
Jocasta anunció la llegada de un visitante y Tony autorizó su entrada… los dos habían dejado de reír y de juguetear. No hubo demasiado tiempo para retirar de su rostro los claros signos de abatimiento… así que compuso su pijama, y terminó hasta la última migaja del pan con mermelada… Tony estaba nervioso y se le notaba...
Peter esperaba en silencio.
Entonces Steve entró sin previo aviso… directo hasta la alcoba y directo hasta los brazos de Tony, quien no podía creer lo que estaba sucediendo.
-No vuelvas a dejarme ir de tus brazos…- murmuró Rogers, aplastando de un impulso al millonario, saltando sobre él y hundiendo su rostro en su cuello- ¡No te quiero perder nuevamente!
Tras el desconcierto inicial, con manos temblorosas… Stark acarició la rubia melena del capitán América, y besó con ternura su frente.
-Bienvenido a casa… rubio fortachón…
Peter se unió al abrazo… en ese instante volvían a ser una familia.