Cuando el profesor Kim entra en el aula de clases esa mañana parece ofuscado, tiene los ojos cansado y la piel seca bajo esos viejos lentes de pasta azul oscuro. Escribe en la pizarra con marcador acrílico rojo brillante su nombre como si no le conociéramos (nos ha dado la clase de biología por tres años).
“Kim Jongdae”
Procura pasar desapercibido, deja sus libros sobre el escritorio y arrastra la silla con tanta pereza que el rugido contra el suelo nos hace chillar en desesperación.
– Bien, –dice– hoy hablaremos de sexo. ¿Alguna pregunta?
Kris el chico de intercambio con aura fría levanta la mano primero y pregunta–: Profesor es malo meter tu polla en una vagina cuando la tipa esta menstruando. –eso nos ha desencajado a todos y el profesor ríe con tanta fuerza que parece forzado.
– No, pero si es bastante antihigiénico. Te recomiendo usar condón si no quieres agarrar una infección Kris.
– Vaya idiota –se burla Chanyeol desde un extremo y Kris le echa una de esas miradas asesinas y el chico se encoge.
Yo trato de pasar desapercibido en mi asiento hundiendo mi cabeza entre los extremos de mi chaqueta. No sé por qué el profesor Kim ha optado por hablar acerca de este tema pero todos parecen muy interesados e inexplicablemente muchas historias comienzan a surgir. Por ejemplo, Sulli revela que hace tres días tuvo el peor sexo de su vida con un tipo que ni siquiera conocía. Baekhyun confeso haber follado con su mejor amigo en una residencia cerca de Garasugil y no fue un secreto para nadie atisbar que había sido Chanyeol esa persona y este pareció avergonzado. Jongin dijo que conoció a un chico en un bar que le fue presa fácil y así consecutivamente cada uno de los alumnos iba revelando sus experiencias sexuales abiertamente mientras el profesor les daba una serie de consejos.
¿Está de más decir que yo era el único virgen en esa sala? La mirada del profesor, tan apagada como en un principio pero con un ligero brillo en sus ojos de camello, se posaron sobre mí tan vivazmente que todo el mundo pareció notarlo.
– Tú no has dicho nada aun Minseok-ssi, ¿Por qué?
Trate de actuar lo más maduro que me fue posible y dije tan vívidamente lo que pensaba de aquella charla que todo el mundo pareció disgustado:
– Pues no creo que sea de su incumbencia saber acerca de mi vida privada profesor, si tengo sexo o no fuera del horario de clases o durante no tendría por qué contarlo. En realidad nadie tendría porque contarlo. Honestamente no me interesan las aventuras sexuales de ninguno de mis compañeros y amigos por más cercanos que seamos, creo que eso es cuestión de cada quien.
El profesor no pareció ofendido en absoluto, asintió ligeramente y con la mirada en algún punto del suelo atisbe a notar una sonrisa ligera en su rostro. Pero nada puede ser felicidad para siempre ¿cierto? Tiene que haber un metiche.
Chanyeol soltó una carcajada y en medio de sus risotadas dijo–: Es virgen ¡Por Dios! Es virgen.
Aquello pareció ser el notición del año pues todos hicieron comentarios ajenos y podía sentir sus burlas por todo el pasillo mientras caminaba cada maldito día. Una tarde, durante la clase de deporte, cuando ataba las agujetas de mis zapatillas una sombra se posiciono sobre mi cuerpo agachado en el pasto del campus. Tuve que alzar mi mano sobre mis ojos para apartar el brillante sol que ese día hacia acompañado de un calor insoportable que estaba a punto de derretirme allí mismo.
El rostro del profesor Kim era un espasmo de alegría y la ligereza de su sonrisa en esos curvilíneos labios me lo decían tan abiertamente que no tuve más opción que corresponderle.
– ¿Que lo trae por aquí profesor? –pregunte poniéndome de pie una vez terminada mi inclinación de cabeza.
Me miro con esos ojos suyos tan llamativos y suaves color chocolate, parecían querer decirme algo que no supe descifrar y reste importancia. El profesor Kim puso su mano sobre mi hombro, estaba sereno y tranquilo, incluso su semblante había mejorado mucho desde la última vez. Ahora su piel estaba luminosa y expendía suavidad a simple vista, era como si finalmente había alcanzado sus horas de sueño correctas y ya no importaba nada más. Como si la juventud volviera a su rostro.
– Me he estado preguntando si acaso te preocupa esos comentarios Minseok-ssi.
Cubrí mi boca para que no viera mi sonrisa y negué–: Estoy bien profesor, no tiene de que preocuparse.
– Te importa si te acompaño esta tarde a tu casa, quisiera hablar contigo acerca de algo.
En este punto me pregunte si hacia lo correcto como profesor al referirse a un alumno de esa manera y asumí que probablemente era común entre los profesores tratar de congeniar con aquellos que aparentemente era inadaptados. Como yo. Asentí y él cortésmente aseguro esperar por mí en el estacionamiento una vez culminada todas mis clases.
Tengo 18 años se supone que debería estar experimentando todo tipo de hazañas juveniles, como las drogas, el alcohol, las fiestas y el sexo abierto con todo el mundo. En su lugar, vivo en un pequeño piso en el centro de la cuidad con un gato y un montón de libros que hablan del arte y como alcanzar los sueños.
A veces cuando no tengo nada más que hacer, veo programas de televisión basura o escribo para un blog de gente tan solitaria como yo. Podría decirse un grupo de apoyo online con gente de Asia nada más. En muchas oportunidades me siento como anciano, mi madre siempre dijo que yo no era exactamente el prototipo de niño modelo, también menciono que nací en la época equivocada.
Después, esa misma tarde, me descubrí a mí mismo viendo la cara de camello del profesor Kim mientras conducía el viejo Volkswagen rojo a través de la autopista en dirección a mi casa. La radio estaba encendida a un volumen moderado lo que me pareció agradable pero el silencio en ese pequeño auto era tan perturbador que temí estar haciendo algo mal cuando ni siquiera estaba haciendo nada. Entonces, quizá si estaba haciéndolo mal porque probablemente el profesor esperaba que yo dijera algo pero no conseguí las palabras correctas para dirigirme a él y acabe por rendirme sin siquiera intentarlo.
Saque la mano por la ventanilla del auto y deje que el viento chocara contra ella cual huracán rugiente a punto de arrancar un árbol de sus simientes.
– ¿Te gusta leer? –pregunto el profesor rompiendo el silencio y me obligue a mirarle.
– Si, por supuesto. Leo toda clase de libros especialmente los de arte pero honestamente mi favorito es un libro de literatura clásica europea quizá lo habrá escuchado es muy famoso por sus obras y musicales. Bastante triste la verdad. Se llama los miserables.
Ese era yo, el chico amante a los libros consiguiendo abrirse con un profesor de biología que nos estaba enseñando acerca del sexo. El profesor Kim estaba risueño en su asiento con la vista fija en la carretera mientras le hablaba sobre la trama del libro cuando agrego:
– Lo sé, lo he leído. –se acercó un poco a mí, sin apartar la vista y bajo el tono de su voz a casi un murmullo–. Ese también es mi libro favorito.
Nos reímos en unísono, pero no fue una risa extravagante o escandalosa como esas que suelta Baekhyun y Chanyeol cada vez que hacen un chiste gracioso, fue una risa ligera para nada forzada que salía desde nuestro interior con confianza y sencillez. Aunque el profesor era un hombre adulto (no debía ser menor a 30) me sentía en confianza con él y bastante a gusto.
– Oye Minseok, ¿esa casa a la que vamos es de tu familia?
Pregunto y eso desenfoco mis pensamientos haciéndome imaginar un millón de posibles conflictos en los cuales podría estar implicado, el hecho de que un alumno viajase con su profesor a su apartamento de soltero, puesto que sus padres creyeron prudente hacerlo independiente a los 16. Trague saliva y me cuestione si era correcto decirle que vivía solo con mi gato pero me sentía en tanta confianza con él que reste importancia.
– Vivo solo –dije–, mis padres son personas extrañas lo sé.
Me reí tratando de sonar lo más despreocupado posible pero el profesor pareció más interesado en el hecho de que vivía solo que el que mis padres me abandonaran a las 16. Frunció el ceño y volvió su vista brevemente de la carretera para observarme detenidamente, tanto como le fue posible, sus ojos mostraban un brillo impulsivo que me erizo la piel y me sentí extraño, recordando parcialmente esas escenas de pornografía gay que me había dedicado a mirar durante la madrugada cuando el insomnio me abrumaba en aquel solitario piso y mi mano me liberaba de la opresión bajo mis calzoncillos.
– Vives solo… –murmuro.
Esa tarde el profesor me dejo en casa alegando que volveríamos a vernos pero antes de que se marchara quise saber acerca de aquello que quería hablar conmigo y me dijo “ahora no es el momento Minseok” y se fue. Me dije a mi mismo que era un tonto por fantasear con el profesor haciéndolo en el asiento del piloto de su auto y me libere poco más tarde bajo la ducha.
Apolo (mi gato angora) caminaba elegantemente por la sala para echarse poco después en su cama, mientras yo veía un programa de televisión americano llamado “Jersey Short” donde las chicas eran unas putas y los chicos unos perros. Cuando me aburrí me serví una taza de cereal y abrí la laptop para chequear el blog, tenía una serie de mensajes en la última publicación llamada “hoy hablaremos de sexo”. Un chico llamado CiervoBabydejo un comentario.
“Tu profesor de Biología ha perdido la cordura jajajaja.”
“Creo que quien lamia su polla lo ha botado a la mierda” KunfuPandaTao.
“Necesita que se la metan o meterlo?” NeverlandMindLay
Y así en secuencia había una serie de más comentario alocados acerca del sexo, pero hubo uno que llamo realmente mi atención entre todos ellos. Otro chico llamado DinosaurioChenChen escribió:
“En mi opinión el sexo es un tema que tiene mucha tela que cortar jajajajaja no has pensado que el profesor quiere follarte. Dijiste que eres virgen ¿no? Inténtalo con él debe ser un tipo experto en la cama no ¿crees?”
Respondí inmediatamente, BoaoziXiumin: “Buah… no creo que él quiera llevarme a la cama es un hombre muy decente jajajkdakjkdajdl gracias por tu comentario.
Pdta.: Me encantaría hacerlo con él.”
Esa noche deje una entrada llamada “Me quiero coger a mi profesor de Biología”.