Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Como te odio. por Yelmar Doker

[Reviews - 36]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Aquí les traigo el segundo capítulo de esta historia, espero les guste gracias por sus ccomentarios. 

Alzo una mano para rascarse la nunca; la otra sostenía un libro grueso de tapas azules, que un compañero de éste llego a prestarle con la condición de devolverselo pronto. Su silla se mecia en un ritmo lento, de atras hacia adelante. Con ayuda de un pie, acuñada en un extremo de la mesa, para que la silla no se cayera hacia atras, veía de vez en cuanto por la ventana de amplios ventanales. El sol se erguia en lo alto del cielo, con diminutos rayos de sol que de vez en cuando iluminaba las hojas blancas del libro prestado.

 

De pronto se imaginó a si mismo en alguna de esas nubes que a penas se movian por el viento, disfrutando de la brisa de esa mañana estupenda. Su boca se ensancho en una sonrisa boba, llena de ilusion, a causa de la imagen que se hubo formado en su mente.

 

Sasuke.

 

Como todos los dias, cada vez que no estaba ocupado haciendo cualquier cosa para distraerse: ir a la escuela, las practicas de karate, o a visitar a su padre en el hospital, la imagen del moreno se figuraba ante sus ojos azules. Como una silueta transparente que se plasma en cualquier lugar, como una obra de arte en un museo de expocision de arte, los ojos negros se negaban a desparecer de su cabeza. Volviendo a sonreirle como hace a penas dos dias, en los que no había dejado de pensar de el, de madarle un mensaje para recordarle la salida para el dia Sábado. Tenia muchos deseos de que el tiempo pasara de una vez por todas, como un relámpago, para verlo nuevamente.

 

Desde aquel dia, en que se dieron la oportunidad de conocerse, no había dejado de pensar en él. Algo extraño, pero después del beso que ambos se dieron, tenia un insana necesidad de ver a Sasuke. Quería hablar con él, pasar el rato juntos, disfrutar de los días, para conocerse mejor. Pero, siempre habían obstáculos, que de tenían sus intensiones con el moreno.

 

No quería ser demasiado, impaciente. Sasuke y él, apenas se estaban conociendo en ese sentido. Y presionar al moreno podía ahuyentarlo, en vez que acercarlo como realmente quería. Ademas, tenia en mente de que Sasuke era mas reservado, mas serio y con mas diplomacia. Hasta para insultarlo se las ingeniaba para seguir manteniendo ese porte. Llego a llamarlo usuratoncachi, sin siquiera saber que significado tenía. Otra de sus palabras favoritas era: Dobe. Así que, harto de oirle decir aquello, se invento su propio apelativo. Teme bastardo. Casi siempre estaban peleando, discutiendo o fulminadose con la mirada. Peleando por cualquier tontería. Ya sea por tener la razón, o estar en desacuerdo con algo. Había una infinidad de cosas que no le agradaba del moreno. Su alto ego, por ejemplo. Sasuke no era presumido, pero si un poco arrogante cuando trataba con las personas. En una ocasion, si mal no recordaba, y estaba seguro que no, lo pillo a el con una chica que se le estaba declarando. A penas llego a escuchar cuando el Uchiha dijo un rotundo: NO.

 

Estuvo a punto de salir a defender a la chica, ya que esta se veía dolida y triste por el rechazo. Pero no fue necesario, ya que la chica había empezado a correr desconsolada y llorando a mares hacia otra dirección. Y se enfado mas al notar que a ese imbécil no le afectaba en lo mas minimo la huida de esa chica. Prefirio mantener la calma y no meterse en sus asuntos.

 

Desde aquella vez, tuvo que hacer un esfuerzo sobrehumano para no romperle la cara por ser un desgraciado sin el menor remordimiento. Pero cuando la misma escena se volvió a repetir, esta vez fue una chica rellenita la que se había confesado, no se contuvo de salir y gritar a loa cuatro vientos que era: ¡un desgraciado poco hombre sin sentimientos! ¡Un capullo malnacido con cara de Teme!

 

Todo aquello ante la mirada de varios estudiantes que se detuvieron al oir lo que el Doncel le estaba diciendo al Uchiha. Todo mundo conocía a Sasuke. Y estos sabian que habia sido un error de parte del rubio meterse con el Uchiha. Todo mundo sabia que Sasuke era alguien muy vengativo y frio.

 

Éste se enfureció, tanto que agarro a Naruto de la solapa de su camisa y lo alzo unos cuanto centímetros del suelo.

 

—Repite eso.— mascullo en un susurro. Afilando su mirada para intimidar al rubio.

 

Este también tenia los ojos azules muy fijos en los de Sasuke. Tenia los dientes apretados, y las manos en las del moreno para que lo soltara. Pero era un agarre fuerte.

 

—¡Capullo sin sentimientos!—no se arrepintio de lo que dijo. Algunos jóvenes que estaban alrededor de ellos dos, trataron de que Uchiha soltara al Uzumaki, pero este no iba soltarlo hasta escuchar una disculpa que no llegaría nunca.

 

En ese momento, una chica caminaba apresurada por los pasillos con dos cajas grandes que contenían papeles para la fotocopiadora de la sección B. Al no ver completamente por la obstrucción de las cajas, tropezó con una roca justo detrás de donde estaba Sasuke. La caja le cayo en la espalda, derribando al moreno y cayendo al suelo junto al doncel. Sasuke encima de el.

 

Todos los presentes ahogaron un grito al ser espectadores de la imagen de esos dos basándose.

 

Sasuke, algo aturdido por el golpe en la espalda y los labios ajenos en los suyos, tardo un poco en darse cuenta de la situación. Cuando lo hizo, se aparto bruscamente, y se levanto como un resorte.

 

Naruto, todavía en el suelo, tenia el rostro desencajado, aturdido y ligeramente pálido:

 

Su primer beso.

 

Con el Teme.

 

Un accidente.

 

¡Oh, mierda!

 

Luego de aquella vergonzosa primera vez, tardo unos dias en ver al Uchiha a los ojos. Ambos se negaban a hablar o intercambiar miradas, ya que para Naruto, al igual que para Sasuke, el beso que se dieron fue demasiado para no querer verse por un tiempo. Cada vez que Naruto veía a Sasuke caminando por el patio o los pasillos, se daba la vuelta y echaba a correr hacia otra dirección con la expresión de un inexperto fugitivo: ¡Sálvame, Papá Pitufo! Había gritado en una ocasion.

 

Por otra parte, luego de estar evadiendo al otro, no pudieron contra el destino que de alguna manera retorcida, se empeñaba la muy bastarda, en ponerlos en el mismo equipo. Es decir, para una expocision en la feria de Ciencias. Conformaron el equipo #7: Sakura, Sasuke, y el.

 

¿¡Por que a mi!? Lloriqueo en medio de la clase, con las manos sobre el gorro que usaba para que su cabello no espantara a nadie, ya que era muy indomable y rebelde. Sufrió una especie de retortijón en el estomago cuando sus compañeros se burlaron de el por la aparentemente ridicula escena.

 

¡Pero es que tenia muy mala suerte!

 

Sakura: La chica lo odiaba desde que entro al kinder. Siempre creyó que era una chica muy linda por su aparente cara de niña buena.

 

Pero ella le tenia rencor por, según ella, pegarle chicle en su pelo. ¡Podia jurar que no fue el! Estaba tranquilo jugando con su rompecabezas cuando ella empezó a lloriquear y a inculparlo de algo que no hizo. Lo llevaron a la dirección y llamaron a su padre. Entre discusiones, acusaciones y castigos, lo suspendieron por una semana. Por fortuna, su padre si le creyó cuando le dijo que de ninguna manera le haría eso a una mujer. Ni mucho menos a una compañera suya.

 

Cuando regreso a la escuela, todos se le quedaron viendo mal. Camino cabizbajo, sin mirar a nadie y se sentó tranquilamente. Segundos después se le acerco alguien. Se trataba de Sakura y tenia el pelo recortado hasta los hombros. Ya no tenia el largo pelo rosado.

 

—¡Uzumaki, me las vas a pagar idiota!— amenazo la niña con voz chillona, y luego se fue a sentar con sus amigas que trataron de tranquilizarla.

 

Desde ese entonces, Sakura lo ah odiado sin ningún motivo. Bueno, lo del chicle no fue su culpa, hasta le parecia algo gracioso ya que el pelo de Sakura tenia el mismo color que el chicle, así que trato de no darle tanta importancia al asunto.

 

Sasuke: De el no había mucho que decir. A penas se conocían desde que inicio el curso escolar. Pero su opinión seguía siendo la misma: Lo odiaba y le gustaba, al mismo tiempo. Eran sentimientos encontrados, y que no deberia de darse el lujo de sentir. Por ello, si tenia que sentir algo por el moreno, mejor que fuera algo bueno para la salud.

 

Dejo de mecer la silla cuando escucho que la puerta se abria. Siendo que estaba en los asientos de atras y la luz había entrado por la puerta, tardó unos segundos en ver de quien se trataba.

 

—¡Hey Naruto, ¿Que haces aquí?!— la voz entusiasta de un chico gritó. Tenia un corte raro en la cabeza, y usaba un conjunto deportivo de futbol. En sus manos llegaba un balon.—¿Ya almorzaste?

 

—¿Lee?— Debido a que no podía ver bien, a pesar de los lentes, se levantó del asiento para acercarse a su amigo. —¿Estuviste jugando?

 

Rock Lee tenia la fama de ser alguien positivo, entusiasta y enérgico para cada situación en la que se enfrentaba. Siempre podías verlo feliz y gritando: ¡La flor de la juventud! Era su lema favorito. Y su principal característica, era que tenia las cejas muy pobladas. Por eso la gente le decía: CEJOTAS. Era un apodo que se gano por algunos amigos, y no tenia ninguna intención de burla. No, nada de eso.

 

—¡Si! ¡Y ganamos Naruto!— proclamo triunfante, al tiempo que hacia una "V" con los dedos.

 

—Eso es genial. ¿Van a celebrarlo?

 

—Oye, buena idea. ¡Se los diré a los demás!— estuvo a pasos de salir por la puerta, pero luego recordó algo que lo detuvo bajo el umbral.— casi se me olvida...

 

—¿Que?

 

Lee se metio una mano en el bolsillo de su corto deportivo, y saco un papel doblado por la mitad. Miro al rubio y lo levanto al aire.

 

—¡Tenia que darte esto, Naruto! — asintió con pena. Casi se le olvidaba darle el recado. — Ten, me lo dio Uchiha.

 

—¿Sasuke?— Naruto pregunto, sintiendo una emoción desconocida en el estomago. Con una sonrisa que no quedo desapercibida por el moreno, tomo el papel en las mano y se fue a sentar otra vez en los asientos de atras.

 

Rock se quedo viendo por un momento la espalda del rubio doncel. Se pregunto si Naruto tenia algún tipo de amistad con el Uchiha. Esperaba que no. Ya que ese tipo no le caia nada bien. Salio del aula, dejando solo a Naruto.

 

Naruto espero unos segundos hasta asegurarse de estar solo. Al escuchar que Lee se fue, desdoblo la hoja de color y empezó a leer con ansias.

 

*Dobe.

 

En vista de que no nos hemos visto desde el lunes, quiero que nos veamos hoy en la salida. Cerca de los baños de la sección B, bajo las escaleras.

 

Pd: No me hagas esperar.

 

S. U.*

 

Así que el Teme quería verle. ¡Ah, pos. Bonito lugar para verse!¿Porque razón seria? Talvez quería hablarle de algo importante. Bueno, se dijo, iría a ver que quería el moreno y luego se iría a casa, ya que hoy su padre llegaría temprano a cenar, y con la visita de Gaara tenia que preparar un banquete para tres personas. Guardo la hoja en su mochila, y tomo otra vez el librito que estaba sobre su pupitre.

 

Las clases transcurrieron normales. Su antipático, e insoportable profesor había llegado tarde, otra vez. Así que, por un tiempo se entretuvo pesando en lo que quería Sasuke.

 

El timbre sono, y las pocas cosas que tenia las guardo en su mochila. Se la cargo en la espalda, y salió mas rápido que todos los demás, que nisiquiera notaron la rápida huida del rubio.

 

Naruto se apresuro a bajar por las escaleras para llegar a la sección B, en donde estaban las aulas de laboratorio. Doblo en una esquina y nuevamente bajo por unas gradas. Descendió por esta y se adentro hasta el fondo, en donde diviso la silueta de un chico, recargado en la pared, mirando a la nada.

 

—¡Hey! ¡Sasuke! —grito, en cuanto lo vio.

 

Sasuke dio una respingo en su lugar. El Uchiha no habia escuchado los pasos del rubio. Estaba más ensimismado en recordar la conversación que tuvieron él y su padre. Por algun motivo, le molestaba que Fugaku, su padre siempre quisiera controlar su vida. Pero, a pesar de eso, el hombre era su padre. Le había dado ropa, comida, estudios. Y por eso, tenia que cumplir esa orden. Aunque, empezaba a sentir algo extraño en su pecho, porque no le gustaba ser utilizado de esa manera. A itachi no lo manipulaba asi, quizás fuera por el hecho de que fuera el mayor, o el genio de la familia, como constantemente solia escuchar de boca de su padre. Pero, de todas formas, esta seria la última. Contaba con el apoyo de su padre si todo salia bien, y lograba un contrato con el padre del dobe. No era tan difícil, solo tenia que fingir que le gustaba el usuratonkachi, y mas adelante, en cuanto se cerrara el trato, romperia con él. Diría algo como: "Somos muy diferentes o... "No somos compatibles... " Salgamos con alguien mas"... Cosas así, para no alargar tanto el rompimiento. Además, Naruto era un chico fuerte, lo superaria de cualquier manera.

 

—¿Teme?

 

Sasuke levanto la mirada, y la poso en el rostro del Uzumaki, quien lo veía un un deje de curiosidad.

 

—Hn, Dobe. Llegaste tarde.

 

—¡Hice hasta lo imposible por llegar antes, Teme!— se escandalizo el rubio, señalando acusatoriamente al moreno— ¿No se supone que no nos veriamos hasta el sábado?

 

Sasuke también pensaba lo mismo. Pero viendo la situación, tenia que actuar de modo inmediato. Las clases de este año finalizarian muy pronto, y antes de eso, tenia que conseguir que el Dobe se fijará en el. Así que ya había ideado un plan. El primero, llevar a Naruto a una cena romantica.

 

Suspiró antes de hablar.

 

—Eso iba a ser. Pero... antes quería preguntarte si podemos vernos hoy en la noche. Quisiera, invitarte a cenar.

 

Bien , ya lo había dicho. Ahora faltaba que el Uzumaki aceptara, y luego verse en la noche para dar pasó a su segundo plan.

 

Pero no se espero que Naruto se negara.

 

—Imposible-tebayo. Hoy no tengo tiempo.—se excuso el rubio, de la manera mas amable posible. Por dentro saltaba de alegría por ir a esa cena. Pero ya se había comprometido con su primo Gaara para preparar la cena en casa, con su padre que llegaría mas temprano hoy. Pero no tenia que decirle eso a Sasuke.

 

"¿Rechazado?" "¿El?" "¿Como era eso posible?" Si cada chica saltaria de felicidad si tuviera el privilegio de ircon él, hasta para ir a comprar pan.

 

¡Maldicion! Nunca antes en sus diecisiete años de vida, había sido rechazado. No se supone que esto seria así. El era un Uchiha, no podia asimilar que alguien como el Dobe lo hubiera...

 

—¿Y se puede saber porque?— su voz sono claramente enojada, pero el Uzumaki no se inmuto, o al contrario, no se dio cuenta que el Uchiha ahora estaba molesto.

 

—No puedo, hoy tengo un compromiso.

 

—¿Con quien?— se apresuro a preguntar el moreno. Algo en la palabra "compromiso" le daba muy mala espina.

 

—Mi primo acaba de llegar de viaje. —contesto con sensillez, y luego agregó al recordar:— Y mi padre vendrá esta noche a cenar. El esta tan ocupado en el hospital, que casi nunca tiene tiempo de estar en casa-tebayo. ¿Satisfecho?

 

"No" quiso decir Sasuke. Pero se contuvo. Le molestaba el hecho de que sus planes no salieran como ya los había planeado. Y ese cabeza hueca parecia no importarle. Tenia tantas ganas de darle un golpe para quitase un poco la molesta sensacion de no estaba haciendo las cosas bien. Puede que no este siendo muy insistente, y por esa razón Naruto rechazo su invitación. Bueno, calmate. Se obligo a tranquilizarse. Ahora sacaria su as bajo la manga. Quizás Naruto no lo supiera, pero por dentro le ardian las ganas de estrellar su puño en la cabeza rubia del Dobe.

 

Mas calmado, tomo la decisión más apropiada.

 

—¿A que hora es la cena?

 

—Oye ¿Que? Te dije que no podre ir. Tengo un compro-

 

—Ya lo se — interrumpió Sasuke. Ante la mirada confusa del rubio, no tardo en explicar:— Iré a tu casa.

 

—¿¡Que!?

 

¿Sasuke Uchiha en su casa? Estaba diciendo que quería asistir a la cena... En tal caso, ¿En que estaba pensando el moreno? ¿Enserio quería conocer a su padre? ¿O a Gaara? Personalmente pensaba que el Uchiha no era tan sociable con la gente, y tenerlo en casa no le parecia buena idea. Sobretodo porque Gaara era un poco desconfiado de las personas, y casi podía asegurar que ambos chicos tenían personalidades similares. Y no se llevaría muy bien.

 

—Sasuke— empezó a responder con calma, luego un corto silencio— Habrá otras noches para salir. Se que no quieres cenar con mi familia, te conozco y sé que no te llevaría bien con mi primo. Además...

 

—Talvez no con tu primo, pero si con tu padre—"Al que realmente quiero conocer" pensó en sus adentros — Solo quiero conocerte, Naruto. Saber donde vives, platicar con tigo. ¿No se supone que eso es lo que estamos haciendo? Confía en mi, no soy mala persona como para llevarme mal con tu primo o tu padre.

 

Naruto no sabia de donde habían salido esas palabras, pero escucharlas así, de la boca de Sasuke, fue muy extraño. Bueno, que más daba, ultimamente el Teme parecia que estaba un poco mas cambiado. Ya no lo insultaba "Tanto". Ni se burlaba, y eso era una buena señal. Quizás, Sasuke también lo empezaba a considerar un amigo.

 

—Muy bien. ¡Pero comeremos Ramen, y prometeme que no hablaras mal de nadie durante la cena!

 

—Que exagerado eres Dobe...

 

—¡Y cuidadito con esa lengua! ¡Papa no sabe que tengo algo con ...tigo!— se puso nervioso por decir lo último

 

—Hn. Y tú, espero que tampoco digas nada malo de mi, usuratonkachi— miro a los ojos azules — Mejor utiliza esa boca para comer tu Ramen de quinta.

 

—¡Uy, Teme! ¡No insultes a mi cena!— advirtió, muy enojado.

 

—Si, claro. Como digas.

 

No le tomo importancia a lo que dijo el Uzumaki. En cambio camino con pasos tranquilos hasta tomar la nuca del rubio y acercar su cara mas a la suya, para poder susurrar:

 

—Te ves mas lindo cuando te enojas, Dobe.

 

Naruto, con las mejillas rojas y el pulso acelerado, tartamudeo al responder:

 

—Te-Teme, aquí no. ¿Que tal si alguien nos ve?

 

—Para lo que me importa.

 

Y luego unió los tibios labios con los suyos. Saboreo la suave piel roja, como si fuera una fresa, con los ojos cerrados en todo momento.

 

Naruto siguió los movimientos labiales con torpeza. En esos momentos solo podía dejarse llevar por la sensación de esos labios frios y ese aliento a menta que lo hacían temblar y ansiaba más. No quería parar, pero la falta de aire lo obligo a ladear la cabeza hacia abajo y romper el contacto.

 

—¿Y bien?— Sasuke veía el rostro de Naruto a escazos centímetros de distancia, con la respiración un poco agitada y los labios rojos e hinchados.

 

—A las 9. No llegues tarde, Teme.

 

Y Sasuke sonrió sutilmente. Al menos ese beso había valido la pena. Al igual que todos los donceles y mujeres que le conocieron, Naruto acabaria enamorado de el.

 

De eso estaba completamente seguro.

 

Ooo

 

Naruto llego a su casa a eso de las tres de la tarde. Su semblante era uno de puro entusiasmo. Todavía no podía creer que Sasuke iba a venir esta noche para cenar con su familia. De verdad que Sasuke parecia otra persona. Si antes no se soportaban, ni se saludaban. Y se pregunto ¿Podía ser posible que el moreno correspondiera sus sentimientos? Era factible, pero no se haría tantas ilusiones. Sasuke podía ser un chico guapo, inteligente, adinerado, pero hasta ahora Uchiha le estaba demostrando que con su carácter era dificil formar una relación. Por naturaleza, Sasuke era silencioso, solitario y puede que rencoroso. Se preguntaba como podían tener algo si ambos eran MUY diferentes. No solo en la personalidad, también en los sentimientos.

 

Dejo de pensar en ello. Por ahora se daría una ducha, y luego prepararia la cena para esta noche. Ahora que recordaba, hasta ahora no sabia cual era el platillo favorito de Sasuke. Nunca le pregunto ya que esos temas no salian a menudo. Esperaba que al menos fuera un poco más abierto con la comida, no quería que pusiera mala cara por darle un platillo que le haría vomitar o algo así. Aunque, seria gracioso, ya que nunca veía en Sasuke otra expresión que no fuera la seria. Nunca sonreia, si no era para burlarse.

 

Bien, también esperaba que la cena no fuera tan incomoda para su padre. Ni para Gaara que era su mejor amigo, a parte de primo. Bueno, no había que ser pesimista, puede que fuera una bonita experiencia. Contaba con Sasuke de cualquier modo.

 

—Naruto, ya estas aquí.

 

Dejo la mochila sobre el sofá individual, para luego voltear y poder saludar a su primo.

 

—Si, ya llegue y estoy cansado. Creo que ya me estoy volviendo viejo— bromeo el blondo, con una sonrisa de oreja a oreja. Y luego pregunto— ¿Como te fue con mi padre?

 

El joven pelirrojo también sonrió por la broma del rubio, se encamino en uno de los sofas, para dejarse caer con una gran pesadez. Soltó un largo suspiro.

 

—Regular. El lugar estaba lleno, y una mujer estaba dando a luz a su bebe en el pasillo.

 

—¿¡En serio-tebayo!? ¿Y que pasó?—pregunto Naruto con gran curiosidad. El también se dejo caer en el otro de los sillones.

 

—No fue nada agradable, a decir verdad.— empezó a relatar lo que había pasado en el hospital al cual había ido por sugerencia de su tío Minato— la mujer se estaba desangrando mucho. Un hombre la estaba cargando y una enfermera trajo la camilla para llevarla al pabellón de emergencia. Pero, la mujer ya estaba dando a luz, y la sala estaba en el segundo piso. Tuvieron que atenderla allí mismo.

 

Naruto estaba sorprendido por ese suceso. Aunque no estuvo allí pudo imaginarse la escena. Le dio pena la mujer que estuvo dando a luz.

 

—¿Y ella esta bien?—cuestiono con preocupación.

 

Gaara meneo la cabeza afirmativamente.

 

—La mujer esta bien. Tuvieron que hacerle una transfusión de Sangre y suministrarle mucho suero. —explico el pelirrojo.

 

Naruto suspiro con alivio. Pero inmediatamente cambio su cara de alivio a otra de preocupación.

 

—¿Y el bebe?

 

Gaara tardo en responder, y Naruto creyó que lo que iba a decir iba a ser algo malo. Estuvo a punto de ponerse mas triste, cuando Gaara hablo.

 

—Ella esta bien. Tiene que permanecer en la incubadora por lo menos dos semanas. Su nacimiento fue muy prematuro.

 

Y Naruto sonrió con la luz expresada en su ojos. Eso le alegraba, lo conmovia y le llenaba de mucha tranquilidad.

 

—¡Es niña! ¡Asombroso! ¿Y como se llama?

 

Al pelirrojo le salio una gota en la cabeza.

 

—Haber Naruto, no soy el padre de esa criatura para saberlo. Ni siquiera un familiar. ¿Como quieres que lo sepa?

 

—Esto... cierto. Tienes razón, es que estaba emocionado y eso— trato de explicarse el rubio con un dedo rascando su mejilla, gesto que provocó una sonrisa en el pelirrojo.

 

— Yo también me puse feliz —confeso, llamando la atención de Naruto.

 

—¿De veras-tebayo? ¡Pero espera! ¡Tu viste el parto!

 

Esta vez Gaara asintió con una sonrisa nerviosa. Gesto que pocas veces hacia, pero que era muy adorable en alguien como él.

 

—Bueno, eso se debe a que tu padre se encargo del nacimiento de ese bebe. Me pidió que lo ayudara.

 

Hasta este punto Naruto estaba muy sorprendido. Gaara era mayor que el por unos años, y ya estaba en la universidad como futuro médico. Por esa razón su padre le había aconsejado visitar el hospital para ver como se trabajaba allí todos los dias. Ahora Gaara parecia mas entusiasmado con su elección. Y no era para menos. Sabia que su primo era muy inteligente y responsable con lo que hacia. Ademas de que era una excelente persona, y no lo decía solo porque eran amigos. Gaara podía ser serio y hasta frio en ocasiones, pero cuanto se trataba de ayudar a las personas, siempre estaba dispuesto a todo.

 

— Pero tu no te preocupes. Pronto será tu turno de tener a tus bebes.— bromeo el mayor, solo para molestar a su primo.

 

—¡Gaara, ¿¡Que dices?!— estallo con una vena palpitante en su frente, y un furioso sonrojo en las mejillas. —¡Faltan muchos años para eso!

 

—Quien sabe, puede que te embaraces más pronto de lo que crees.—todavia sonriendo

 

—¡Uy, con un demonio! ¡No seré una madre joven-tebayo!— contradijo a Gaara que todavía seguía burlandose de el.

 

—Solo bromeaba...

 

—Aja, ya lo note — dijo con ironía y un poco de sarcasmo. A veces se sorprendia como era posible que su primo fuera el mas serio de la familia. Puede que no tenga sangre uzumaki corriendo por sus venas, pero Gaara lo sorprendia en ocasiones con sus comentarios.

 

Gaara se sentía feliz cada vez que sacaba su lado mas divertido. Pocas veces lo hacia, y siempre era con Naruto. Verlo enojado le alegraba de alguna manera. Pero, a pesar de todo, el tampoco quería ser tío tan temprano. Esperaba que Naruto siguiera siendo así de inocente por lo menos por un tiempo, hasta que entre a la universidad, culmine sus estudios, y encuentre un trabajo estable. Lo menos que podía hacer por su primo, era espantar a cada hombre lujuriento que quisiera tocar de modo indebido a Naruto. Después de todo, eso era lo que hacían los hermanos mayores; eran primos, y por lo mismo iba a protegerlo.

 

Pero por ahora, lo ayudaría con la cena. Que era lo más importante en estos momentos.

 

—¿Compraste carne?

 

—Creo que si, no estoy seguro.—dudo el rubio, acercandose a la bolsa de papel que esta tirada en el suelo.

 

Y así, ambos chicos entraron a la cocina y se pusieron manos a la obra.

 

Ooo

 

Pasaron algunas horas, y Naruto ya estaba vestido para la ocasion. Antes no se tomaría la molestia de arreglarse un poco, pero ya que Sasuke iba a venir, mejor prevenir. Quería verse normalmente presentable porque sentía que debía hacerlo. Seguro sasuke se vestiria con su mejor ropa, y claro, no deseaba desentonar. Uno nunca sabe la manera en que pueden suceder las cosas. Así que a lo mucho se puso unos jeans azules, una camiseta anaranjada, y unos converse azules. Se había intentado peinar el pelo, pero estaba todo revuelto y difícil de mantener. Así que se puso un gorro de lana. Ahora si estaba preparado para la cena. Se sentía un poco nervioso. Nunca antes sus amigos habían venido a su casa. Incluso cuando vivía en su antigua ciudad. Muchos parecían ignorarlo por dos razones: su falta de atractivo y por ser doncel. Ahora, actualmente, tenia mas amigos que antes, incluyendo al Teme. Que en si, era algo mas que eso. Y estaba contento con eso.

 

Se vio por ultima vez en el espejo. Su reflejo le mostraba la imagen de un chico. Pero no la de un doncel. Puede que si se quitara los frenos, y los lentes, se vería de otro modo. Pero estaba seguro que nunca vería aquello, ya que sin sus gafas no podía ver nada, absolutamente todo lo veía borroso sin ellos. Una vez lo intento, y por eso tuvo un accidente cuando era tan solo un niño. No quería volver a revivir la experiencia. Sobretodo, porque su padre le estuvo regañando por su imprudencia.

 

Tocaron a la puerta.

 

—¿Naruto? Tu padre ya llegó. —se escucho la voz de su primo, fuera de la habitación.

 

—¡Si ya voy! ¡Un momento-tebayo!— se apresuro a contestar, olvidando por ahora lo que estaba pensando. Dejaría de pensar en eso y mejor salia cuanto antes ya que Sasuke no tardaria en llegar.

 

Gaara estaba en el pasillo, con los nudillos cerca de la puerta.

 

—Bien, pero no te tardes.

 

Oyo claramente un "si". Así que volvió a la sala, en donde estaba su tío Minato con unas hojas blancas en sus manos. Sin despegar sus ojos de estas, el rubio pregunto:

 

—¿Ya viene?

 

—Si, me dijo que bajara en un momento.

 

En silencio, Minato asintió, para después concentrarse en su lectura de unos analisis medicos que había llevado a casa.

 

Gaara prefirio ir a la cocina a servirse un vaso de agua. Tenia sed. Pero en el momento en que ya abria la puerta de la cocina ambos hombres escucharon el timbre de la puerta. Viendo que su tío se levantaba para abrir, el se adelanto a sus acciones.

 

—No se levante. Yo ire a ver quien es.— insto a su tío a que siguiera con sus cosas. Este asintió, y retomo su trabajo.

 

Gaara camino hasta la puerta y la abrió con tranquilidad. Afuera había un chico moreno que no reconocía.

 

—¿Si?

 

Sasuke no se espero que fuera otra persona quien le abriera. Cambio su gesto ceñudo a uno de interrogación.

 

— Buenas noches. ¿Esta Naruto ?

 

—¿Quien lo busca? — respondió con tono serio.

 

—Sasuke, soy... amigo del Dobe.

 

Gaara se tomo un tiempo para ver detenidamente al tipo. ¿Amigos? Naruto no le había dicho que tenia un amigo llamado Sasuke, y eso que siempre le contaba todo, bueno casi todo. Ademas, dicen que las primeras impresiones cuentan, y este sujeto le daba muy mala espina. Empezando porque dijo "Dobe" a Naruto.

 

— Vere si esta. —contesto en tono despectivo.

 

Y Sasuke pudo notar esto, pero se contuvo de decir lo que pensaba al respecto. Quizás Naruto tenia razón, y si ese era primo del usuratonkachi, no se llevaría nada bien con este.

 

—El me invito a comer — mintió, con una sonrisa hipócrita. Esperando que el pelirrojo dejara de verlo con esos ojos azules más claros y fríos que los suyos propios.

 

—Bueno, espera aquí.—cerro la puerta y dejando solo al individuo, quien dejo de fingir la sonrisa, y en cambio hizo otra de profundo desprecio.

 

—¿Quien era?— Minato pregunto, en cuanto su sobrino entro en la sala.

 

—Un amigo de Naruto. Iré a llamarlo para que lo atienda.— aviso, antes de empezar a caminar hacia la habitación de Naruto. Mientras lo hacia, no podía dejar de pensar en la mirada del pelinegro. Ese Sasuke... no sabia que era. Pero le había dejado con un mal sabor de boca. Aunque sabia que habían momentos en los que no confiaba en las personas, eso se debía a que sentía una mala vibra en ellos. Como si interiormente ocultaran algo. Y aquel sujeto le hizo sentir aquello. Esperaba que solo fuera alguna paranoia suya, alguna exageración, no quería sospechar de un amigo de Naruto. Ademas, su primo siempre estaba rodeado de buenas personas aunque fueran pocas. Pero por si acaso, le echaria un ojo a ese chico.

 

No tuvo que subir los ultimos escalones que llevaban a la segunda planta de la casa, ya que Naruto ya bajaba y cuando lo vio no pudo evitar arquear una ceja. Ciertamente Naruto se veía "algo" distinto.

 

—Hey, Gaara. ¿Me tarde mucho?— pregunto el rubio, pensando que había demorado en bajar y por eso el pelirrojo ya estaba por ir a buscarlo de nuevo.

 

Negando con la cabeza, el respondió:

 

—No. Lo que pasa es que hay alguien que te esta buscando...

 

No termino de decir nada más cuando de pronto Naruto paso como un remolino a un lado suyo, corriendo mas rápido que un leopardo, o eso le dio la impresion. Confundido, la curiosidad de hizo mas latente por saber quien era ese tal Sasuke.

 

Naruto llego con pasos veloces hasta la puerta de entrada en tiempo record. Se llevó una mano al pecho para tratar de tranquilizar su corazon antes de abrir la puerta. Cuando por fin lo logró, llevó su mano a la manija y la abrió de un jalón. Descubrió a la persona que estaba esperando dándole la espalda, mirando al parecer las casas del vecindario. Aclarandose la garganta, habló.

 

—¡Hey, Teme!

 

Tan pronto como escucho que le llamaban, volteo su cuerpo para poder ver a Naruto. Se quedo de piedra y sin palabras en cuanto lo vio.

 

Trato de decir algo. Pero no dejaba de mirar lo "diferente" que se veía Naruto. Un aura extraña lo rodeaba, puede que fuera la ropa ceñida o lo adorable que se veía con ese gorro, que sintió de pronto un golpeteo ansioso en el pecho.

 

Sencillamente Naruto se veía... distinto.

 

—Ejem...—se aclaro la garganta para no demostrar que se sentía afectado. Naruto se veía, algo diferente. Pero seguía teniendo esa cara de tonto que ni en mil años se le quitaria. —¿Llegue temprano?

 

—No, llegas justo, ya íbamos a cenar. Y bueno...—pauso un instante, mientras buscaba las palabras— Eh... te ves bien.

 

No pudo evitar sonrojarse un poco por su abierto comentario. Es decir, Sasuke siempre se veía bien, con cualquier ropa que se pusiera. Incluso si llevara un disfraz de payaso, Sasuke seguiría viendose genial. Era algo que le envidiaba, y al mismo tiempo le hacia sentir una enormes ganas de besar al bastardo. Aunque luego se arrepintio de haber dicho "eso", no quería hacer inflar más el ENORME ego de ese Uchiha.

 

—¿Y bien?— carraspeo el moreno ignorando el halago por el momento, ya que se sentía raro tener que escuchar eso del único doncel que se atrevia a insultarlo.

 

—¡Ah! ¡Cierto, entra! ¡Te presentare a mi padre!— Naruto cambio de tema de igual modo. Nervioso, dejo entrar al Uchiha a su casa. Quien no tardo en obedecer. Naruto,antes de cerrar la puerta, vio los alrededores del lugar en la que residia, el cual estaba sumido en la tranquilidad y oscuridad de la noche.

 

Esperaba que todo saliera bien. Y que Sasuke no dijera nada de su "relación". O su padre se moriria de un infarto.

 

El hombre era un "poco" sobreprotector.

 

Al igual que Gaara.

 

CONTINUARA..

Notas finales:

Nos vemos en el siguiente capítulo. 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).