----Dag-----
Me llevé a Aizen a casa de Eric, realmente mi *casa* que igual que este pendejo era pura fachada, estaba en Escocia, pero pues daba igual, Aizen me apretó la mano, estaba nervioso, sonreí para mí mismo, la única persona virgen en mi lista era Leiv…Leiv...mi niño aquí es donde comienzo a superarte.
-Estas nervioso?-asintió-con el pulgar le acaricie el dorso de la mano luego lo jale para conducirlo a mi habitación, él ya había estado ahí anteriormente, el sonrojo fue bastante evidente.
-Voy….ire al baño ok? Puedo ducharme?...estaba en el bar y...
- tómate tu tiempo-aparte el cabello de su frente y lo bese, luego deje que se fuera a alistar, por mi parte me saqué zapatos y me afloje la camisa, rei para mi mismo, los tres chicos eran tan distintos….me refiero a que creo que han sido las únicas veces desde que estoy muerto que involucró sentimientos y al parecer no había un patrón al cual seguir...cuando fui humano recuerdo vagamente el haber estado casado con una bella mujer de mi pueblo….una mujer que fue tachada de inútil por no darme descendencia...la quise mucho y le di todo de mi….hasta que un dia no regresé, era un monstruo y tenía que reunirme con los míos...aun así...aunque fue una persona amada para mi en mi vida mortal, creo que no se compara a lo que sentí por Leiv...simplemente no la ame.
Y ahora Leiv era un pan de dios, inocente, dulce, tierno y encantador, Chris la pequeña perra falsa con corazón de oro y boca de demonio, y este mocoso que ha decir verdad es el más grande de los 3, atrevido de alguna manera aunque tímido a la vez, carácter pesado y algo gruñón, pero también muy tierno a su manera Aizen es un chico...como decirlo…..torpe, si, torpe es la palabra, Expresivo, sin filtros, fácil de leer, despistado, Aizen….creo que enserio podria enamorarme de él, por ahora la estaba pasando bien, era divertido poder estudiarlo, y bueno, me sentía más en paz, referente a Chris, no pensaba mucho en él, bueno, me refiero a manera problemática porque creo que ese mocoso ahora con su criatura nos tenía pendientes a todos, más bien me refiero a que no estaba lamentando el no poder ser yo quien estuviera con él; en fín, el pequeño ratoncito demoró aproximadamente 40 minutos en el baño y salió hecho un manojo de nervios, se había puesto una bata de baño blanca que encontró dentro, jah! Tan espontáneo, pero en serio los cuartos de la casa de Eric aunque casi siempre están vacíos, parecen cuartos de hotel, espléndidamente decorados y equipados.
-Estoy listo
-Acércate entonces-lo recorrí con la mirada, espléndido de veras, el cabello y la piel húmedos lo hacían lucir maravilloso, el semblante lleno de nerviosismo y miedo me encantaban, quería ver que tal reaccionaria a lo siguiente, y quería alimentarme de él nuevamente, me acerque a él aun encima de la cama y lo jale hacia mí del brazo-vamos no seas tímido Aizen.
-Puedes apagar la luz Dag?-sonreí, se me hizo tierno, digo yo podía ver perfectamente en la oscuridad y si le daba seguridad por mi bien
-No quieres ver que te vas a comer?-se sonrojo, me reí, luego rapido apague la luz y volví a su lado.
-No hagas eso
-El que?
-Tan rápido
-Soy un vampiro….así me muevo, lo siento-se sentó en la cama, me puse detrás de él y le acaricie los hombros, le baje la bata un poco y besé la piel expuesta, tan blanca, tan lisa, tan virgen, no tenía ninguna de esas cicatrices que corrían por toda la piel de Chris, no tenía ninguna señal de abuso como la de Leiv….y no digo que las cicatrices sean feas, al contrario a esos dos les realza la belleza, pero la espalda de Aizen también era bastante atractiva así, limpia, se giró despacio por fin, buscando mi rostro con las manos, me acarició las mejillas hasta dar con mis labios y me besó tímidamente, lo dejé, no eran besos sucios, él estaba nervioso, pero no se estaba entregando a mi por lujurioso, más bien por marcarme como de su propiedad, demostrarles a mis putas que él también se podía ir a la cama conmigo, él quería seguridad en sí mismo, adorable.
Jale su cuerpo hacia más atrás acostandolo en la cama sin dejar de besarnos, me puse sobre él obviamente.
-Si te quito la ropa esta vez no me golpearas?-me reí, se sonrojó de nuevo
-No seas idiota Dag
-Solo intentó que te relajes-baje mi mano hasta su cadera, luego la acerque a su entrepierna, ya estaba semi erecto, por reflejo se agarro el mismo apartando un poco mi mano, sonreí, le abrí la bata dejándolo descubierto por completo, bueno, casi, aún con su mano y parte de la tela, seguía cubriéndose el pene, me desvió la mirada su expresión era muy tierna-Aizen?
-Mmmg?
-Necesito quitarla
-Claro-apartó su mano tímidamente, le temblaba me agache y le bese el cuello, me acerque a su oído.
-Corazón, esto no está funcionando-le di un beso, me reí en mi mente
-Porqué?
-Aun estoy por completo vestido y estas demasiado tenso, me acerque al buró, encendí la lámpara de escritorio, me miró a los ojos.
-Lo siento….Dag...si estoy nervioso
-Lo sé, lo sé bien, ven -me recargue contra la cabecera y lo subi a mi pecho, el comenzo a besarme de nuevo, me desabroche yo mismo la camisa y agarre su mano para guiarla a mi torso.
-Tocame, cerró los ojos y asintió, aun me besaba, bajo su mano por mi abdomen, acariciándome despacio hasta la cadera, subió de nuevo, el tacto era agradable, lo sujete despacio de la nuca y profundice el beso, metí mi lengua en su boca, recorriendola, frotandola con la suya hasta robarle el aliento, nos separamos unos segundos-Mejor?-lo sentía levemente más relajado
-Si-agarró el cuello de mi camisa para quitarmela, lo dejé, le temblaban las manos
-Yo no te voy pegar por desnudarme-se río un poco y se sonrojo aun más, el día que lo cambié cuando se emborracho me gritó pervertido y me golpeó, me dio un besó y me termino de sacar la camisa, por mi parte, por fin le saqué la bata completamente, ah que lindo era, delgado pero blandito, nada trabajado de los músculos, le bese el cuello, su pene ya estaba erecto, tenía un buen tamaño, unos 15 cm diría yo, de nuevo nos cambien, el abajo otra vez.
-Que lindo eres-Sonrió-no tengas vergüenza ok?-Asintió y suspiro, me desabroche los pantalones, no pudo evitar mirarme fijamente hasta que saque mi miembro y entonces apartar la mirada apenado, no pude reprimir mi sonrisa, le di un beso en los labios-no te asustes...vamos a ir despacio sí?-yo no llevaba prisa, y sinceramente estaba disfrutando cada sección de Aizen, aunque sí era extraño estar después de tanto tiempo con alguien virgen.
-Jamás había estado así con alguien….eres el primer hombre que me ve asi-le bese la frente-crees que soy bonito?...tu has estado con muchos antes.
-Creo que eres precioso-sonreí y lo besé-olvídate de mi historial si?...solo somos tu y yo ahora mismo-de nuevo lo bese, despacio, su cuello, su pecho, sus bonitos pezones rosados, quería morderlo, quería alimentarme de él de nuevo pero la paciencia hace al hombre.
Continuamos besandonos largo rato hasta que lo sentí más relajado, más confiado, ahora él también me acariciaba, y sus besos tenian más soltura, frotaba su pelvis contra mi y cuando nuestros miembros friccionaban gemía intentando reprimirse, me parecía muy sexy, acerque mis dedos a su boca, le bese la mejilla.
-Estas bien?
-S….si
-Lamelos -asintió, de nuevo sus mejillas adquirieron el bonito color rojo, baje de nuevo y lamí sus también erectos pezones, los mordía suavemente, gimió.
Cuando sentí mis dedos lo suficiente lubricados baje despacio mi mano, debí de haber comprado un lubricante, no iba a ser suficiente, rodee su ano con uno de mis dedos al mismo tiempo que le daba un beso en los labios, se contrajo, luego rio apenado, le sonreí.
-Tranquilo, relájate-lo bese de nuevo, se aferró a mi espalda y suspiró, lo besé, introduje el primer dedo, gimio era obvio le dolio la intromisión, lo calle con un besó-has jugado con este lugar?- moví mi dedo un. Poco en su interior, de nuevo gimió, el presemen comenzaba a gotear, me clavo las uñas en la espalda-mmm?
-Sí-me besó….pero que lo haga alguien más es raro, saque al intruso de su interior y lo empecé a masturbar, asi seria mas facil.-mmhg!!! Dag...aun no…
-está bien-lo besé
-espera aaaah!-se corrió luego de un par de caricias, con su propio semen comencé a lubricarlo, era mucho más fácil y se mantiene húmedo más tiempo que la saliva, nuevamente metí mis dedo acompañándolo de un segundo-Ves, asi es mas facil-lo besé.
-Dag...también quiero hacerte sentir bien-bajo sus temblorosas manos hasta mi pantalón y lo bajo más, comenzó a masturbarme
-Hazlo como a ti te gusta-Asintió entre gemidos.
-No te reprimas, solo yo puedo escucharte-bese su cuello, lo recorrí con la lengua, suspiro, gemia mas y movía el solito la cadera buscando que mis dedos llegaran más adentro, meti el tercero y los movi haciendo gancho, toque su próstata, gritó, estaba listo, de nuevo bese su cuello.
-Ahi Dag!!! Ahi se sentía bien
-lo sé-bese su hombro y de nuevo su cuello, quería tanto tanto comer de él, podía sentir su pulso, la sangre corriendo por sus venas, eso me excitaba bastante-saqué mis dedos de su interior y jale su cuerpo acercandolo aun mas al mio, abri sus piernas-eres encantador-levante una de sus piernas y la bese, la acomode alrededor de mi cadera, posicione mi pene contra su ano y volví a mi posición, mi cara contra su cuello-estás bien?
-Hazlo-cerró su puño contra mi cabello, meti la punta, de nuevo gritó, ah maravilloso sus gemidos eran lindos, suaves, entre por completo.
-Dag!....duele-un par de lágrimas rodaron por sus ojos, las recogí con el pulgar.
-Shhh tranquilo pronto pasará-me quedé quieto un par de segundos hasta que sentí como el mismo movía la cadera y se agarraba mas a mi espalda.
-Muévete Dag
-Mmmgh...sí-comencé a moverme despacio Aizen arañó mi espalda, cerró los ojos con fuerza, no me detuve, continué, respiraba profundo y jadeaba.
-Estas bien?
-Si, si, estoy bien-nos besamos de nuevo, pronto sus gemidos de dolor cesaron comenzaba a gemir mas fuerte, ahora de placer, levante un poco su cadera y aumente la velocidad de mis embestidas, era demasiado estrecho, se sentía muy bien-Dag!!!! Oh dios!!!! Ahi!!!!-jalaba un poco mi cabello, no tardó mucho en correrse con un sonoro gemido, lo bese, yo continué moviéndome-ya no!!!! Dag ya no puedo!!! Ahhhhh...Dag!!!!-de nuevo algunas lágrimas le resbalaron por las mejillas, no me detuve, el oírlo implorar me excitaba bastante y aunque se había corrido por segunda vez su próstata seguía siendo estimulada, quizás era demasiado para él, un par de minutos más y yo también me corrí, estaba demasiado apretado, y las contracciones eran increíbles, su respiración estaba agitada, salí de él, iba a separarme para acomodarnos, dejarlo descansar, peor me lo impidió, jalo mi cabeza hacia su cuello
-Porque no lo has hecho-dijo entre jadeos
-Mmh?
-Se que deseabas hacerlo-me acarició el cabello y la espalda, me abrazo más bien con solo una de sus manos-te quiero Dag…si quieres beber de mi sangre hazlo-sonreí, qué niño más extraño, no tenía miedo de mi naturaleza, sonreí en ese aspecto era como Lev supongo, bese su cuello, luego lo mordi, se quejo un poco pero se relajo, no bebí demasiado, no quería marearlo, cerré la herida con una cota de mi sangre luego subi y le di un beso en la boca, hizo una mueca, por el sabor supongo, me rei
-Lo siento
-estoy bien-bostezo-me quite de encima poniéndome a un lado, el sobre mi pecho, me tomo la mano
-Estas bien?....te duele?
-Si me duele….pero estoy bien….me gustó….-se sonrojo y me miró a los ojos como un pequeño animal moribundo-a ti te gusto Dag?-le bese la mejilla
-Me gustó
-Enserio?-sonrío
-Mucho-le acaricie el cabello, no mentía, sus expresiones eran honestas, escandaloso pero tierno, no daban ganas de reventarle la garganta como esas putas escandalosas que creen que mientras más gritan más complacen, era sexo con sentimiento no sólo de instinto, me sentía con mucha paz a decir verdad, además el saber que el mocoso había tenido una buena primera experiencia era bueno, no quería que lo lastimaran, tenía una personalidad especial, necesitaba a alguien que no apagara eso….estaba bien tal y como era-cuando regrese de mi pequeño recorrido a mis pensamientos caí en cuenta de que Aizen ya estaba dormido, pacífico, la boca entreabierta y abrazado a mi brazo-Te quiero mocoso-sonreí y cerré los ojos su calor corporal se sentía bastante bien y estaba muy relajado, no tenía que arrojar billetes, no me daba asco quedarme a su lado como con las putas, cuanto tiempo tenia que no disfrutaba tanto la compañía en la cama de alguien?....era esplendido.
----- Alain-----
En cuanto deje a mi padre me dispuse a ir y buscar a ese mocoso...Christopher, el amante de mi Eric, el que no tenía miedo del vampiro….no tenía miedo de las criaturas sobrenaturales que éramos, no pensaba hacerle daño, no era tan estúpido...al saborear la muerte supe que no la deseaba...no aún, además ahora mismo se sentía mucho mejor mi cuerpo la sangre de Eric había aliviado bastante la mía, ya no quemaba tanto y la hinchazón de mis torturadas venas disminuyó.
Me pare frente a la ventana de la habitación del mocoso, una pequeña luz iluminaba la habitación, una lámpara de noche, el niño cargaba al bebé...que tanto le encontraban de atractivo mi padre y ese demonio?, yo no encontraba nada destacable en él ni la vez que lo conocí ni ahora, delgado, rubio como mucha de la población de estos países….lo odiaba, *el odio y el amor a veces tienen el mismo fín* pensé en las palabras de Eric….la misma finalidad….sabía a qué se refería-la sangre nuevamente mancho mi rostro en forma de lágrimas….oh padre si no puedo dejar de odiarte es porque mi finalidad es volver a verte no es así?....el amor y el odio tienen la finalidad de tener un vínculo con la otra persona...maldito seas, maldito seas tú y este par de críos idiotas, si nos hubiéramos conocido en otras circunstancias….si no hubieras sido el asesino...no, no había otra forma; abrí los ojos de sorpresa, la luz se había encendido y ahora ese par de ojos azules claros y ojerosos me miraban.
-Qué haces tú aquí?-me miró sin miedo, con el bebé en brazos-la ventana estaba cerrada, pero el sabia que podia oirlo perfectamente.