Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Dernière Danse por Killary

[Reviews - 18]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Quiero más

¿Qué estás esperando?...

Diré adiós a mi corazón esta noche

(Animal – Neon Trees)

 

 

 

Paso nueve: Fingir

 

 

 

Abro los ojos lentamente sintiéndome rodeado de una calidez inusual.  Mi respiración se corta cuando me doy cuenta de lo que pasa.

 

Estoy en la cama de Donato.

 

Estoy rodeado por el brazo de Donato.

 

Tuve sexo con Donato.

 

Mierda.

 

 

Pero deseaba esto. Lo deseaba tanto… Y después de llorar en el baño y desfogarme sintiéndome miserable, decidí hacer algo. Lamentarme no iba a ser una opción. Sentirme por más tiempo patético tampoco. No iba a ser una jodida víctima de mi estupidez. Iba a asumir las consecuencias de mis actos… De los de anoche… Y de los que estaban por venir…

 

Me llené de valor.

 

Y lo hice.

 

Salí del baño dispuesto a conseguir que aquella errónea ilusión de haber sido tomado por Donato, se haga realidad… Quizá me equivoqué anoche…

 

Pero hoy estaría muy seguro.

 

Y consciente.

 

No puedo evitar la gran sonrisa que se forma en mi rostro… Mi deseo más grande… Mi fantasía más grande… Por fin es realidad.

 

 

Con cuidado me pongo de lado para poder observarlo… Ouch… Joder, me duele todo… Siento como si me hubiera pasado un camión por encima… ¿Cómo voy a levantarme de la cama ahora?... Bueno, bueno, ya me preocuparé de eso cuando llegue el momento. Ahora a lo que iba…  Doni está boca abajo con la cabeza ladeada hacia mi lado y un brazo sobre mi cintura.  Tiene una expresión graciosa en su rostro enmarcado por sus ahora alborotados rizos marrones… Si, se ha dejado crecer un poco el cabello y la verdad le queda muy bien. Esa barbita escasa que me causa cosquillas… El aire escapa despacio con un suave ronroneo por su boca entreabierta y… ¿saliva?... ¿Donato babea dormido?...

 

Eso no es nada sexy.

 

Bueno, obviemos esa parte… Nadie es perfecto, ¿verdad?

 

Mejor me sigo deleitando con esa anatomía protagonista de mis sueños más húmedos y salvajes… Que ya no serán más sueños… Que fueron realidades… Y si, también fueron algo salvajes…

 

Al tenerlo de esa forma puedo observar el tatuaje que cubre su espalda. Un par de hermosas alas tribales que unen sus omoplatos. Pero también puedo ver uno que hasta hoy había permanecido oculto a mis ojos. Detrás de la oreja, de líneas muy finitas, encuentro unas zapatillas de ballet enredadas en lo que parece una letra… ¿J?... Sí, parece una J… Es pequeño y delicado…

 

¿Qué significará?

 

Ya habrá tiempo de preguntarle… O mejor no… Donato no es muy dado a hablar de su pasado. Es más de presente, del ahora… Entonces… ¿Le preguntaré que será de nosotros de ahora en adelante?... ¿Nos convertiremos en novios?...

 

Novios…

 

Ja.

 

Iluso de mí.

 

Lo más que puedo esperar es que nos convirtamos en amigos con derecho… Eso si es que quiero mantenerme a su lado. ¿Cuántas veces lo he escuchado hablar de los chicos que según él se ponen “pesados” e insisten en una relación seria?

 

Muchas.

 

Demasiadas.

 

No voy a convertirme en uno de esos chicos de los que huye como si le fueran a contagiar la peste. Uno de esos a los que borra de su móvil, de su agenda, de su vida… Yo estaba decidido a permanecer a su lado. Y tenía claro que para eso debía demostrarle que en estos meses que estuvimos separados había cambiado. Que tomaba las cosas más a la ligera. Que ahora era un chico que sólo quería experimentar. Que esas ideas románticas no existían más para mi. Que era imposible que me enamorara de él…

 

Resumidamente, tenía que aparentar.

 

Bueno, no pensaré en eso ahora. Sólo quiero disfrutar el momento. Disfrutar de su calor.

 

Me acomodo nuevamente boca arriba y poso suavemente mis manos sobre el brazo que me rodea. No puedo dejar de sonreír como bobo… Estoy aquí, en la cama, con Donato…

 

No puedo ser más feliz…

 

 

 

+++++++++++++++

 

 

 

Quiero girar pero mi brazo está sujeto… ¿Sujeto?... Abro los ojos con miedo… No puedo moverme… Estoy boca abajo con el brazo sobre un dormido  Etienne que lo tiene fuertemente agarrado, como si fuera a escapar…

 

¿Etienne?

 

¿Estoy abrazando al muñeco?

 

Un escalofrío me recorre entero… De un movimiento brusco libero mi brazo… Eti se remueve colocándose de lado… Dejando más que visibles las marcas que le he dejado sobre la piel… Espero un momento a ver si abre los ojos… Pero no… Sigue durmiendo… 

 

Me siento apoyando la espalda en la cabecera de la cama… Froto mi rostro con las manos un par de veces tratando de relajarme…

 

Lo había hecho con el muñeco… Por fin… Me enterré en ese culito de ensueño una y otra y otra vez… Lo besé, lo mordí, lo marqué… Lo hice gritar mi nombre mientras se venía en mis manos… Después de tanta actividad era lógico que nos quedemos dormidos… Pero despertar y encontrarme abrazándolo… No… Jamás… Yo no abrazaba… No mimaba… No daba cariñitos post sexo… No prometía… No susurraba palabras de amor…

 

Me encantas…  Me vuelves loco… Muñeco… Mi muñeco…

 

Mierda.

 

¿Por qué tenía que ser diferente con Etienne?... Lo traté con cuidado, le hice el amor despacio, le pregunté si se sentía bien muchas veces… Espera, espera…

 

¿Le hice el amor?

 

Joder, esto está mal… Sexo… Sexo solamente… Sexo como muchos… No tiene por qué ser diferente… No es diferente… Sólo fue el calor del momento… La excitación…

 

¿Y por qué lo estoy abrazando?

 

Es normal… Tiene también una explicación lógica… ¿Por qué tenía que asustarme?... Estaba dormido, posiblemente pensé que era una de mis almohadas… Sí, es eso… Fue algo inconsciente… Debe ser… Sólo tuvimos sexo… Un fantástico sexo… Sólo cumplí una fantasía…

 

¿Y ahora?

 

Seguro el muñeco se levanta listo para preparar nuestra boda… Joder… Era Etienne… El niño que me habló de almas gemelas, de amor verdadero, de para siempre… Y me lo había follado…

 

Y me había encantado hacerlo.

 

No… Él iba a entender… Me conocía… Sabía la clase de persona que era yo… Sabía que no creía en el amor y todas las mierdas que venían con el… Además sólo fue un polvo… Iba a comprenderlo… Debía comprenderlo…

 

¿Y si no lo hacía?

 

Joder… No quiero herir al muñeco…

 

Pues hubiera pensado en eso antes de ponerlo en cuatro y montarlo, ¿verdad?...

 

 Tenerlo desnudo y suplicando con esos ojazos brillantes… ¿Cómo pensar con claridad cuando un niño hermosamente desnudo con una  lengua lasciva te lame los dedos?...  

 

Doblemente mierda.

 

Pero bueno… Como decía Leo… Hay que ser consecuentes con tus actos… Así que… Ya me lo follé, ahora queda esperar que entienda que sólo fue sexo… Que lo entienda… Y que podamos ser los de siempre. La verdad es que no quiero alejarme  nuevamente… Siempre me ha gustado conversar y reír con él… Siempre nos hemos llevado tan bien… Con muy pocas personas me siento lo suficiente a gusto como para mostrarme realmente tal cual. No quiero perder esa parte. Después de pasar meses sin saber de Eti, me di cuenta que lo extrañaba horrores. Me había acostumbrado a nuestras pláticas diarias, a nuestras prácticas de baile, a las risas… A su risa… Una punzada en el pecho… ¿Arrepentimiento?... No, no… Los dos quisimos esto…

 

¿Y Solange?

 

Okey… Vamos paso a paso… No voy a pensar en la bruja en estos momentos… Primero, lo primero… Debo llevar al muñeco a casa de su amigo…  ¿Pietro?… Creo… Por cierto… El otro… Ese rubiecito… estaba para comérselo…

  

Joder Donato, enfócate…

 

— ¿Doni? — Una vocecita somnolienta me alerta que Eti ya despertó.

 

—Duermes como una piedra, muñeco… — Eso es, tómalo con calma… Actúa natural…

 

—Estaba cansado… Doni… — Me mira con duda… Ay no joder, que no empiece con las romanticadas… — ¿Puedes ayudarme a ducharme y llevarme a lo de Piero?... Es que… Me duele hasta pestañar… — Se ríe avergonzado.  Me siento algo sorprendido… Pensé que iría a hablar de lo que hicimos… — ¿Por favor?...

 

—Claro, claro… — Me levanto y le tiendo un brazo. Me mira sonriendo y enarcando una ceja.

 

—Estás desnudo…

 

—No pretenderás que me meta a la ducha con ropa, ¿o sí? — Nos reímos. Es tan relajado estar así… Y extraño también… — Creo que fui muy brusco… Lo siento muñequito… — Dije algo avergonzado al ver como caminaba con dificultad usándome de soporte.

 

—No te preocupes, seguro mañana estoy como nuevo. — Me respondió sonriendo.

 

 

No dijo nada de lo ocurrido. Ni una palabra más de lo que ocurrió en el bar. Y tampoco comentó algo de lo que habíamos hecho horas antes. Actuaba como si nada hubiera pasado… O como si no le importara mucho.  Hasta me coqueteó mientras nos duchábamos juntos… Y terminamos masturbándonos… No soy de piedra, joder… Claro que moría por volver a follarlo… Pero estaba tan adolorido que hasta un cabrón como yo entendía que debía controlarse.

 

Le presté un chándal para que usara. Su ropa de anoche no era una opción… Tenía ganas de quemarla… ¿Quemarla?... ¿Y por qué quiero quemarla?... Que tonterías pienso… Lo llevé a casa de su amigo Pietro. Se despidió de mi con un beso en los labios que me supo a poco. Lo vi entrar en la casa. Seguía caminando despacio y gracioso.  Se veía tierno con mi ropa. Tan lindo…

 

Okey… Esto se está poniendo extraño… Mejor regreso a mi depa. Tomaría el autobús, había traído a Eti en taxi, pero tampoco es que me iba a regresar igual… El dinero no era algo que me sobrara.

 

Mientras esperaba en la parada no podía dejar de pensar. Los recuerdos de Etienne gimiendo bajo mi cuerpo llenaban mi mente. La suavidad y calidez de su piel. El sabor de su sexo…

 

¿Y ahora qué?... ¿Qué pasaría?... ¿Se comportaría como si nada?... ¿Nos veríamos  luego y conversaríamos como antes?...

 

¿Por qué mierda estoy pensando tantas estupideces?

 

 

 

+++++++++++++++

 

 

 

—Maldito hijo de puta, lo mataremos…

 

—No veo por qué… No me obligó…

 

— ¿Estás bromeando?... — Mi pequeño amigo me miraba con el ceño fruncido y los brazos cruzados.

 

—Es la verdad. Estaba tan borracho que lo confundí… Posiblemente él estaba igual… Es culpa de ambos y ya está…

 

—Estás loco… Espera que los chicos se enteren, Mateo va a querer cortarle la polla con su lima de uñas…

 

—Piero, nadie más debe saberlo…

 

—Pero Eti…

 

—No, no… Promételo…

 

—Pero…

 

—Promételo Piero…

 

—Vale… Lo prometo… Pero conste que es en contra de mi voluntad. — Dijo refunfuñando. Con un suspiro se sentó a mi lado. Yo estaba tendido boca abajo sobre su cama. — Y entonces… ¿Tu Donato lo sabe también?

 

—Algo así… — Me puse de lado. — Además… Le pedí… Es decir… Yo… Lo hicimos… — Dije avergonzado.

 

— ¡¿Lo hicieron?!

 

—Shhh… Joder Piero, ¿quieres que se entere el barrio entero?...

 

—Lo siento, lo siento… — Se echó a mi lado y abrazó una de sus almohadas. — Cuéntamelo todo y exagera…

 

Empecé a narrarle como se dieron las cosas. Claro que en las partes del sexo, no me explayé tanto porque me moría de vergüenza. Además, me interrumpía a cada momento con preguntas como  “¿te la mamó?”, “¿la tiene grande?”… Y luego tratando de saber más que interesado en las poses, que si me puso de perrito, que si me hizo montarlo… Joder… Por un momento me arrepentí de contarle todo. Creo que mejor se lo hubiera dicho a Stefan… Seguro el rubio no me preguntaba nada.

 

— ¿Y ahora ya son novios?

 

—No, ya les había dicho que Donato no es de novios…

 

—Entonces ¿amigos mágicos?

 

—Creo que mejor es amigos con derecho… — Lo miré serio. — Piero necesito que me ayudes con mi tía… Sabes que no puede ver a Doni ni en pintura y…

 

—Quieres que te cubra… — Asentí. Me sonrió. — Claro que te ayudaré, para eso están los amigos. Pero Eti… — Enarcó una ceja endureciendo la mirada. — Siempre no has dicho que estás enamorado de tu Donato… ¿Podrás conformarte con ser sólo uno más? — Uno más… Eso si duele…

 

—No me queda de otra… Si quiero permanecer a su lado, sólo hay un camino…

 

— ¿Cuál?

 

—Fingir.

 

 

 

Notas finales:

Besos <3


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).