-¿Cuantas veces debo decirte que no te metas?
-Ya te dije que no me estoy metiendo en nada, solo te digo que a esta hora es imposible que encuentres alguna tienda abierta.
-¡Cállate!
-No grites.
-¡¡Cállate!!
-No grites por favor. - dijo con un rostro indiferente a pesar de que por dentro moría de miedo de solo pensar que su hermano mayor podría golpearlo.
-¡¡CÁLLATE!! Soy tu hermano y me debes respeto!!
-Sabes que, has lo que quieras. - dijo indiferente para luego encaminarse rumbo a su habitación en el segundo piso.
Una vez en su habitación el hermoso doncel se tumbo en su cama y dejo salir sus lagrimas de impotencia.
Desde que tiene memoria su "hermano mayor" no hace mas que golpearlo y ordenarle cosas, a pesar de las suplicas y ordenes de su madre porque deje de golpear a su hermano menor el mayor parece no escucharla.
Las cosas se calmaron un poco cuando Sasuke cumplió 11, después de todo al ya haber crecido el podría hablar en cualquier momento y pedir que lo alejen de esa familia de locos.
Su padre murió cuando tenia tres años, apenas lo recuerda pero sabe que lo quería por los buenos recuerdos que tenia de él. Sin embargo, no se podía decir lo mismo del resto de su familia. Su madre trabajaba constantemente, cosa que la estresaba y solía enojarse por todo, ademas de tener sus ataques de histeria de vez en cuando y llorar frente a él quien solo la oía en silencio decir que tendría que haberlos dado en adopción, después de todo no es fácil criar a un niño sola a los 16 después de que el padre no lo quisiera y la abandonara, a eso sumarle la muerte de su segunda pareja a los 21 dejándola sola con un hijo de 6 años y un doncel de 3.
2 años después nuevamente apareció otro hombre, el peor de todos, con quien tuvo su tercer hijo, un barón. Su tercera pareja se suicido luego de que pelearan por el alcoholismo del hombre.
Desde entonces, ¿quien volvería a creer en el amor? Dio su mejor esfuerzo para criar a sus hijos y que no les faltara nada, pero la vida demostró odiarla cuando su hijo mayor comenzó con los problemas de actitud e ira. De a momentos se volvía violento con sus hermanos menores, mientras ella trabajaba el les ordenaba que hicieran toda la limpieza, las compras y todo lo que se le ocurriera, si no lo obedecían bastaba darles unos golpes y ellos obedecían en lagrimas.
Pero eso no fue todo, empeoro aun mas cuando comenzó con sus discursos de "soy su hermano mayor y me deben respeto", "Soy su hermano mayor y deben seguir mis ordenes", y empeoro aun mas cuando su segundo hijo, Sasuke, creció gradualmente y contraataco, "¡El respeto se gana, no se impone, el poco respeto que llegue a tenerte algún día lo destruiste por completo hace tiempo, no te respeto, eres la peor escoria que existe!". Después de esas pocas palabras el pequeño Sasuke ya estaba mas que preparado para recibir la paliza que efectivamente su "hermano" le daba, así como a su hermano menor.
Lloraba, maldecía, ahogaba sus gritos, lloraba en la soledad de su habitación con la cara enterrada en la almohada para no causarle mas problemas a su madre de los que ya tenia. Tantas veces considero suicidarse, pero no, seria causar demasiados problemas a su alrededor y darle el gusto a ese desgraciado, algo que NO estaba dispuesto a hacer.
Oculto su dolor, "el siempre alegre y sonriente Sasuke, quien siempre ve el lado positivo de las cosas, es muy maduro y responsable, es un amor de doncel", esos y mil comentarios mas se oían, todos sobre su mascara, su disfraz...
Entonces lo conoció, ese rubio de ojos azules y sonrisa verdadera, que lo saco de la soledad y la oscuridad donde estaba a punto de desaparecer por lo hundido que estaba. Ese barón vio a través de él, vio su dolor, su soledad, vio su falsa sonrisa, su fingida felicidad, así como sus lagrimas.
Al ser doncel era bastante débil, no tenia fuerza alguna para defenderse mas allá de sus palabras cargadas de veneno y verdad. Aun así no se dejaba vencer, siempre que discutía lo mismo con esa cosa que llamaban "su hermano" ponía su mejor cara indiferente y hablaba con calma, esperando que el desequilibrado mental que tenia por hermano según él lo imitara.
Tantas veces quiso devolverle todo, todo el dolor, el sufrimiento, la soledad, las lagrimas y los gritos. La sensación de estar por volverse loco lo abrumaba y sentía deseos de tomar una cuchilla y enterrarla en todo el cuerpo de esa cosa que compartía la mitad de su sangre.
Su hermano menor no era mejor que digamos, un niño sumamente caprichoso, no se conformaba con nada, no quería escuchar a nadie, si no obtenía lo que quería hacia berrinches interminables.
Pero todo eso acabo ese día... donde su mente se quebró.
La última discusión desencadeno todo, por un insignificante comentario volvió a gritar y saco su ira contra el inocente doncel.
Sasuke estaba acostumbrado, cada vez que se enojaba parecía un desquiciado mental, a veces lloraba, o gritaba, o los golpeaba, a veces todas a la vez.
Ya era una costumbre para el también tomar la cuchilla y perseguir a su hermano por la casa con intención de apuñalarlo mil veces siempre que lo hacia enojar y su madre no estaba, entonces su hermano entraba en el baño y cerraba la puerta, el en su furia solo golpeaba la puerta, acuchillaba la puerta imaginando que era su "hermano" con poca fuerza para no dejar marcas visibles mientras su hermano se reía y esperaba a que se calmara como de costumbre.
Pero esta vez fue diferente, su paciencia llego al limite. Esta vez ese engendro se había metido con su rubio amigo quien le había confesado sus sentimientos de amor hacia el azabache. Su "hermano" se atrevió a hablar pestes de su ahora novio, ese fue el detonante.
Espero a que el mayor bajara la guardia, cuando el azabache mayor subió a su cuarto con cuidado lo siguió, le informo a su "hermano" que uno de sus amigos dijo que lo esperaba en la plaza a varias cuadras de la casa, cosa que extraño a Itachi por la hora, pero aun así fue. Sasuke fue a la cocina, tomo en sus manos la cuchilla de carne y la escondió en su espalda.
Luego de que el mayor saliera, Sasuke lo siguió de cerca sin que lo viera, estaba completamente oscuro, la noche era apenas iluminada por un farol publico parpadeante, mientras Itachi fijaba su vista en el celular Sasuke se acerco silencioso y luego de cerciorarse de que no había nadie mas enterró la cuchilla en el costado de su tórax.
Itachi grito fuertemente, grito que se perdió en la música. En una casa frente a la plaza donde se encontraban, la música resonaba fuertemente celebrando el cumpleaños de su amigo Kiba, quien cumplía 15 años, dos mas que Sasuke quien acababa de cumplir 13 hacia dos semanas.
La música sonaba tan fuerte que aturdía a Sasuke e Itachi quienes estaban a mas de 50 metros de distancia, cubiertos por los arboles y la oscuridad.
Itachi reacciono y se aparto a pesar del enorme dolor, callo al suelo sangrando sin parar y antes de que pudiera verlo Sasuke se lanzo encima de él para volver a apuñalarlo.
Primero su brazo derecho, luego el izquierdo, puñaladas profundas que de pura suerte no cortaron las arterias, lo mismo con las piernas, las apuñalo repetidas veces mientras oía extasiado los gritos de su hermano y observaba como la sangre brotaba de su boca.
Luego de sentirse satisfecho con las piernas lo tomo del cabello y corto la coleta baja que usaba para amarrar su cabello esa cosa llamada Itachi.
Lo siguiente fue hacer cortes en sus mejillas, Itachi gritaba y se desangraba, no le quedaba mucha vida.
Sasuke al percatarse de ello se detuvo y hablo mientras podía.
-¿Sabes, "hermano"? Daría lo que fuera por poder cortar cada parte de tu cuerpo, rebanar tus dedos, destrozar tus huesos, cortarte eso que te hace hombre y mucho mas, pero no queda tiempo, pronto morirás y nada me hace mas feliz que matarte yo mismo. Amaría que te fueras de vuelta al infierno, supongo que de allí vienen los desgraciados desequilibrados como tú. ¿Y sabes? Parece que me contagiaste, aunque mucho peor. Estoy loco, lo se, en mi cabeza hay cosas que ni tu ni nadie entendería. Cosas que no quiero que nadie vea ni entienda. En cuanto termine aquí contigo desapareceré todo, quemare la ropa, limpiare el cuchillo hasta dejarlo como nuevo y me haré el dormido. ¿Ves estos guantes? ¿Crees que encontraran mis huellas? No soy idiota, no como tu. Nadie sospechara de mi si lloro un poco, ¿Quien sospecharía de un débil doncel? Jaja, espero que disfrutes el infierno. TE ODIO.
Dicho esto retomo las puñaladas, esta vez en el tórax, de los ojos de Itachi caían lagrimas por el intenso dolor, ya no gritaba, sus cuerdas vocales estaban destrozadas de tanto hacerlo. Pronto su vista se nublo y dejo de sentir el dolor, tomo aire una vez mas y sus ojos se cerraron.
Sasuke continuo apuñalándolo a pesar de saber que ya estaba muerto. Después de unos minutos sus manos se detuvieron y comenzó a gritar y llorar, lloraba por al fin haber podido liberar todo su sufrimiento y rencor, lloraba porque se sentía libre.
Tal como dijo se levanto, camino por las sombras con la cuchilla en mano y la ropa ensangrentada. Ese día su madre no estaba, se encontraba trabajando por la noche como todos los jueves. Cuando llego a su casa se escabullo por la puerta trasera e hizo lo que planeo.
Una vez en el baño quemo la ropa en la bañera, luego se dio un baño y borro todos los rastros de quemadura de la tina. Lavo la cuchilla con agua y javon liquido en un principio, luego la sumergió en hipoclorito puro y con guantes de goma la lavo detalladamente, luego en alcohol, luego la seco con un secador de pelo, la afiló y listo, quedo como nueva.
Tomo nuevamente su celular y respondió al mensaje de Naruto, tenia una coartada, llevaba media hora charlando con su novio desde su cama. Incluso antes de salir se tomo una fotografía en su habitación como prueba y mientras hacia lo que hizo hablaba con Naruto, se desconecto por dos minutos mientras se encargaba de Itachi y en cuanto el azabache mayor dejo de respirar continuo su charla con Naruto como si nada mientras apuñalaba el cuerpo sin vida.
Cualquiera que le preguntara no podía inculparlo, en primer lugar era solo un "niño", en segundo un doncel, quienes son considerados débiles y delicados, en tercer lugar el hermano de la victima y en cuatro lugar tenia una coartada, destruyo la evidencia, no había testigos, incluso si lo descubrían no importaba, era un niño y con algunas lagrimas y una historia como la suya no necesitaba mentir para que lo ayudaran en lugar de encerrarlo.
Y con ese pensamiento se fue a dormir...
Al día siguiente hallaron el cuerpo, su madre colapso y termino en el hospital, su hermano menor lloraba como idiota, el soltó algunas lagrimas y dijo frente a todos que debían ser fuertes mientras abrazaba a su hermanito, perfecta escusa para no llorar mucho.
El tiempo paso, no encontraron al culpable. El cumplió los 18 y se largo de esa casa, se mudo con Naruto a su propio departamento con los ahorros que ambos tenían de sus trabajos de medio tiempo y cursaron juntos la universidad ya que tenían la misma edad.
A los 22 se casaron.
A los 24 tuvieron su primer hijo.
A los 26 el segundo.
A los 30 su primer hija.
A los 47 su primer hijo se caso y les dio su primer nieto.
A los 48 se caso su segundo hijo.
A los 50 su hija les dio su segundo nieto, un doncel y dos meses después se caso.
A los 56 su primer hijo les dio su tercer nieto.
A los 58 Naruto murió en un accidente de automóvil por culpa de un borracho que se le cruso de frente con el semáforo en rojo.
A los 66 Sasuke decidió que era suficiente y sin Naruto no había razón para vivir.
Ese día, en el mismo día en que asesino al engendro que tenia por hermano decidió que era hora de terminar con su vida. El mismo día, a la misma hora, en el mismo lugar, tomo la misma cuchilla y termino con su vida, mientras la sangre fluía y observaba con la vista borrosa aquellas fotografías, la de sus hermanos y su madre, la suya con Naruto, Naruto y sus hijos, Naruto, sus hijos y sus nietos, fotografías de momentos importantes de su vida que jamas quisiera olvidar.
-No me culpen de mi locura... Espero que no nos encontremos en el infierno Itachi...
Y sin mas dejo de respirar.
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