Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Azul profundo. por Ashtad

[Reviews - 87]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

/*v*/  I'm back!!!

HOLA CORAZONES MIOS!!

 

¿Como estan? ¿Como les va?¿Me extrañaron? Por que yo si que lo hice!!

Ya quería regresar con ustedes, y como se aproximan vacaciones (cortas) decidí que era momento de volver, hay varios anuncios, pero los dejaremos para el final, por ahora... MUCHAS GRACIAS POR SEGUIR CONMIGO, POR LEER Y POR SER TAN BELLOS TODOS Y CADA UNO DE USTEDES. <3<3<3

El sonido fuerte del tren sobre las frías vías fue lo que resonaba sin mucha gracia entre las praderas verdes de la carretera. Pequeñas poblaciones de mamíferos se reunían para convivir y disfrutar de los regalos que la tierra les brindaba amena, a pesar del estridente bullicio de la máquina metálica  las criaturas sabían por costumbre que el sonido no era constante y que más temprano que tarde el silencio volvería a gobernar; los autos eran escasos y eso brinda tranquilidad a la naturaleza que surgía prospera por la libertad.

Un flamante deportivo paso entre las montañas que eran divididas por el concreto industrial de la carretera, pero fue tan rápido que las ondas sonoras a penas y alcanzaron a alzar vuelo por entre el aire, en el vehículo los dos pasajeros mantenían un silencio reconfortante que solo era interrumpido por la voz de una conductora en la radio. Esta vez era Clark quien se mantenía atento al camino con la vista al frente y las manos en el volante, eso permitía que Bruce disfrutara del paisaje que se mostraba majestuoso ante él.

 

Las montañas escondían un extenso río claro, las nubes eran tan blancas que parecían imágenes sobre puestas en el cielo, el viento era una brisa cálida y húmeda cargada de aromas frescos.

 

-¿Y de que tanto hablaron mientras me fui?- el filántropo no volte el rostro, pasaron unos segundos donde busco la mejor expresión para responder.

 

-Nada- la facie de su rostro era cálida. Durante la cena de la primera noche que pasaron en casa de Martha Kent había tomado la decisión de decirle la verdad, aun así considero que lo mejor era hacerlo de a poco, no adelantar las cosas, tenía que cuidar bien los siguientes pasos que daría.

 

Por la sonrisa satisfecha del reportero comprendió que estaba feliz con el resultado de la visita a la granja que lo vio crecer.

 

-¿A dónde vamos ahora Clark?- fue su turno de preguntar.

 

-Hace algunos días vine a ver a mi madre, cuando estaba por el pueblo me encontré con un viejo conocido de mi padre. Al parecer invirtio bien su dinero y fue capaz de comprar varias propiedades- la velocidad comenzó a disminuir sin ser un paso lento- un buen sujeto- una rítmica tonada inicio en la radio- le platique que estaba pensando tomar mi periodo de vacaciones y muy amablemente me ofreció una de sus pequeñas casas vacacionales para que la usara el tiempo que necesitara.

 

Las cosas parecían siempre marcharle bien al superhombre de Metrópolis, por una fracción de tiempo Bruce sintió envidia de su vida tranquila. Lo contemplo de perfil formando una sonrisa.

Cuando por fin llegaron a la pequeña casa ambos quedaron impresionados. Era sin duda un lugar hogareño lo suficientemente cómodo para dos personas. Dejaron las maletas en la entrada y casi al instante de haber puesto un pie en la morada dieron inicio a una maratón de besos. Durante los dos días que permanecieron con la señora Kent se habían visto obligados a mantener la distancia, a pesar de las insinuaciones de Clark de ir al “granero” para verlo por dentro Bruce se mantuvo firme y como buen invitado no accedió.

Esa tarde no salieron a ninguna parte, permanecieron enredándose por toda la casa. No hubieron muchos lugares que se salvaran de la pasión peligrosa de ambos; sin embargo el lugar preferido de Clark parecía ser la cocina, en una de esas ocasiones había roto la mesada junto a la estufa. La culpa recaía en Bruce quien lo había provocado y eso parecía hacerle gracia.

 

Cuando la noche cayó el humano ya estaba en su límite de resistencia, estar con el hombre de acero era casi comparable a pelear toda la noche en las calles de su ciudad.

 

-Mañana quiero enseñarte los alrededores- ambos permanecían acurrucados en un amediana de la habitación de invitados; a la derecha, por la gran ventana las estrellas iluminaban las sábanas y los cabellos azabaches- hay un pueblo pequeño a unos cuantos kilómetros, según recuerdo por estas fechas hay una increíble feria, podría llevarte.

 

-¿Ganarás todos los premios para mi Clark?

 

La pregunta le provoca gracia, sin embargo casi al instante su imaginación interpretó aquello de diferentes maneras. ¡Claro que ganaría todos los premios para Bruce, si él se lo pidiera le bajaría la estrella que más le gustara sin importar que esta fuera el mismísimo sol!. ¿Desde cuando pienso así? la cuestión se respondió al sentir la pelvis de Bruce moverse peligrosamente contra la suya, el roce fue sutil y sensual. Aquel cuerpo lo alteraba en diferentes niveles que no creía posibles.

Lo estrecho hundiendo la nariz en la espalda, aquella espalda que por razones desconocidas para él estaba marcada. Clark lo había notado casi al instante, ya en ocasiones anteriores se había cuestionado la naturaleza de aquellas cicatrices que marcaban una perfecta piel sin piedad, pero dejó de darle vueltas al asunto convencido de que todo se contestaría con el tiempo. Ya suponía el motivo.

 

-Todo lo que me pidiera Mi príncipe de Gótica- utilizó el apodo que usualmente ocupaba la prensa para nombrarlo en los medios. Al parecer no era mucho del agrado de Bruce, tal vez por eso le gustaba llamarlo de esa forma.




Clark no se arrepentia de la forma en que habían ocupado sus tres primero días, pero deseaba poder tener más tiempo.

Antes de darse cuenta las horas volaron llegando al inminente momento de regresar, el mundo no parecía diferente, a decir verdad, todo perdía prioridad cuando el magnate se encontraba en su rango de visión; disfrutaba de la vida, no existía duda de eso.

 

Mientras tanto, la mente de Wayne se removía intranquila por aparentar, le costaba responder a la sonrisa de toda la gente de aquel austero y amable pueblo, las miradas no parecían fijarse sobre él, algo que agradecia enormemente, en cualquier ciudad jamás hubiera pasado desapercibido, la gente como él rara vez lo hacía.

Los juegos mecánicos, las golosinas, las personas que rodeaban los espectáculos parecían querer lastimarlo. En algún momento de su vida, al inicio de su cruzada había deseado algo parecido, un momento de tranquilidad, un lugar donde no fuera necesario ninguna capa. Sentia libertad al estar tan apartado de su ciudad, ¿Eso era como traicionar la memoria de sus padres?, al principio creía que si, ahora ya no se convencía tan rápido de lo mismo y todo se lo debía a un hombre que  no era de este planeta literalmente.




***




Bruce mantenía la nuca pegada a la puerta de madera de aquel departamento en Metropolis. Hacia cuarenta minutos que se había dispuesto a retirar sin demasiado éxito ya que su impetuoso novio aun se despedía con un húmedo beso.

No era tan tarde pero el sol ya había descendido, las luces de las calles eran la prueba de eso.

 

-Deja que te lleve a casa Bruce- le susurro sin permitirle contestar al instante ya que siguió devorando sus labios.

 

-Tengo que hacer algunas cosas antes de irme Clark- logró por fin separarse más de treinta centímetros- ya te lo habia platicado.

 

-Bien- suspiro aceptando sin estar convencido de alejarse- mañana iré a verte temprano.

 

Era la segunda noche después de las vacaciones del reportero y este ultimo parecia mas necesitado del magnate empresario, creyó que el estar juntos ayudaría a la ansiedad de tenerlo, lo cierto era que se encontraba igual.

 

-Deacuerdo- le respondió sin volver a acercarse, temía que si volvían a unirse no lograría irse en otros cuarenta minutos más.

 

Cuando Clark se encontró solo en la privacidad de su hogar suspiro entre contento y melancólico. Recordó la fantástica semana reviviendo los detalles más simples para grabarlos en su mente. Las expresiones de Bruce, los paisajes, los aromas, todo tenía que ser guardado con precisión.

El golpeteo casi instantáneo en la puerta lo hizo volver a la realidad, sonrió imaginando que tal vez su Bruce había cambiado de idea y se dejaria mimar una noche mas, al abrir la puerta se sorprendió.

 

-Lois?... Qué estás haciendo aquí?

 

Su amiga lucía terrible, las ojeras de sus ojos jamás habían sido tan obscuras, sus pómulos carecían de su rubor natural y la piel parecía seca.

Sin esperar invitación la mujer entró cerrando la puerta tras de sí, con paso firme se dirigió a la mesita de la sala para buscar entre las cartas y paquetes que se encontraban ahí.

 

-Hey mirate nada mas- comento sin mirarlo al rostro ya que se hallaba concentrada en su búsqueda- las vacaciones te han sentado de maravilla granjero.

 

-Si… fueron… estuvieron bien- respondió mecánicamente mientras la observaba- Qué buscas Lois? Seria mas rapido si solo me lo pidieras.

 

-Para empezar, porque le pediste a Angy que te enviaran a ti los videos del ataque de Metallo?- detuvo su registro para verlo de frente.

 

Clark se limitó a responderle con una sonrisa inocente buscando excusarse con ella, pareció funcionar cuando la dama no interrogó nada más.

 

-Lo encontré Clark- se extraño cuando escucho su nombre. Esto era serio.

 

-¿Qué encontraste?

 

-La razón por la que estaba ahi, ahora debo encontrarlo a él, será más difícil teniendo en cuenta que me aterra.

 

-De quien hablas Lois?- se obligó a preguntar con una mueca que bien podía ser una sonrisa sin serlo, aunque la posible respuesta ya resonaba en su mente.

 

-De Batman- se concentró en una caja que contenía varios discos compactos, analizo las direcciones- ya se por que fue a Metrópolis, porque quería a Metallo. Hay muchos cabos sueltos, solo tengo que unirlos.

 

Clark camino desde la estancia donde se encontraba su amiga y fue hacia la cocina para preparar café “con extra de azúcar” recordó cómo lo tomaba la dama. Desde aquel lugar siguió con la conversación.

 

-¿Como que cabos?

 

-Esto queda entre nosotros Smallville- el aroma del grano fresco del café empezó a llenar las fosas nasales de la humana, era agradable- cuando inicie la investigación comencé con lo más básico ¿Quién sería capaz de construir a una máquina tan avanzada como Metallo? se necesita de recursos y motivos, aquí solo hay una persona con semejante fortuna y que odia abiertamente a Superman.

 

-Luthor- completo la frase al tiempo que le extendía la tasa.

 

-Yo pense lo mismo, pero entonces ¿por qué Batman apareció? eso era algo que me acomplejo por varios días- la sonrisa se marcó en los finos labios de la reportera- he estado en Gótica durante la última semana, al principio era un callejón sin salida, hasta que recordé algo…

 

Por alguna razón Clark no quería seguir escuchando las teorías y deducciones de su compañera, aun así no expresó nada permitiendo la explayarse en lo que Kent consideraba más un intento por explicarse a sí misma lo que sucedia que la verdad en si misma.

 

-No se conocen- continuo Lane- bien es sabido que el murciélago es demasiado territorial, no permite que nadie pise su terreno, pero respeta el de otros. Con Metallo fue diferente- dio un sorbo- lo buscaba a él específicamente.

 

“Algo asi ya había supuesto” respondió el kriptoniano en su mente sin apartar la mirada, ahora ambos estaban sentados en los sillones marrones de la sala.

 

-Cuando estuve en Gótica pude hablar con Metallo- Clark ya antes se había cuestionado todo eso, tenía casi las mismas pesquisas que ella, salvó porque él jamás había podido interrogar al esbirro. Había imaginado que una vez fuera transportado a Alcatraz la policía le permitirá interrogarlo, al parecer la mujer estaba un paso por delante.

 

-¿Y qué descubriste?

 

-¿Alguna vez habías escuchado de un mineral llamado Kryptonita?

 

-¿Krip...?, No, jamás- sus manos empezaron a sudar mientras las piezas del rompecabeza iniciaban a tomar forma nítida.

 

-Yo tampoco, pero al parecer Luthor sí, y por lo visto sabía lo que hace- dio otro sorbo que a Clark le pareció demasiado largo, ahora si que estaba ansioso por seguir descubriendo lo que su amiga ya poseía- ayer me escabullí en LexCorp, no preguntes como- en verdad no quería recordar la manera con la que se valió para entrar- y descubri algo más… los kryptonianos son vulnerables a la kriptonita, adiós poderes, tan mortal como tú o yo.

 

-¿Todo eso que tiene que ver con Batman?

 

-No lo sé, eso es lo que me falta- su mirada se perdió en el techo del apartamento- tengo dos teorías, una más loca que la otra- consultó su reloj de mano, una hora había volado.

-Por qué no me las dices, tal vez en voz alta toman sentido- Kent ya no sonreía.

 

-Deacuerdo- se enderezó y volvió a fijar sus claros ojos en los contrarios el líquido ahora llegaba un poco más abajo de la mitad- sabemos que se necesita de los medios- “tecnología y dinero” pensaron al instante sin necesidad de ponerlo en palabras- aqui en Metrópolis sería sin duda LexCorp, pero… Wayne Inc. no se queda atrás.

 

-¡¿Que?!- casi fue un grito que logró controlar ahogandolo en su garganta.

 

-Solo piensalo, y que tal si Wayne o alguien en la empresa envió a Metallo y después Batman fue a recuperar la inversión.

 

-Tienes razón, son ideas muy locas, no les veo pies ni cabeza- estuvo a punto de cortar la charla, pero la segunda teoría de Lois lo detuvo indeciso de marcharse, no tuvo que preguntar para escucharla.

 

-O tal vez… Batman la quería para usarla él- sus ojos se endurecieron- Metallo no lo dijo pero insinuó que Batman estaba muy interesado por la Kriptonita, de hecho...- lo último fue como un susurro casi como si fuera un secreto que a ella misma le incomodaba decir- él se quedó la kryptonita que tenía Metallo.  

 

El secreto arrastraba consigo un silencio sin definición, no era incomodo ni tampoco lo usaban para analizar nada, simplemente se había instalado sin saber la razón precisa del hecho. Lois fue quien remontó el barullo con una risa apagada, lo más seguro por el cansancio al cual no cedía.

 

-Lo sé lo sé, es una locura ya que no tengo nada para sustentar lo que pienso- ya la noche había ganado terreno, ahora las sombras tenían un completo dominio de la vida en esos momentos, Lane dejó la taza que había permanecido en su regazo todo ese tiempo sobre la pulcra superficie de la mesa de centro- supongo que es el cansancio, no he parado en dias- volvio a reir ahora con un poco más de ánimos- de cualquier forma, mañana volveré a ir a LexCorp, las pistas más sólidas provienen de ahí, Metallo admitió una relación con Luthor.

 

-Yo puedo ayudarte con la investigación en Gótica- se ofreció con el semblante serio- mañana tengo una reunión con un amigo alla, asi que me puedo dar unas vueltas para ver qué te consigo.

 

-Hecho- respondió sin titubear- hablaré con Perry para que te alojes en un hotel por algunos días, si te soy sincera no me gusta que otros se metan con mis investigaciones…

 

-Pero?

 

-Pero el tema de Batman me esta volviendo loca, no encuentro nada con esas pistas, lo mejor será concentrar mi atención a Luthor ahora que las huellas siguen frescas- ambos se pusieron de pie, la reportera guardó en su bolsa algunos sobres y camino hacia la salida con los pasos de Clark muy de cerca- confío en que harás un buen trabajo Smallville, te veo en unos días, tengo que prepararme para mañana.


Con algunas palmadas en el hombro a forma de despedida la mujer cruzó el umbral que la conducía a los elevadores, ninguno tenía ganas de fingir así que sin mencionar nada más cada uno tomó caminos diferentes. Ella hacia su departamento y él hacía Gótica.

Notas finales:

Pues ahi esta! ¿Que les esta pareciendo? ¿Aun andan conmigo o ya me estoy tardando para darle candela al asunto? xD

 

***

 

Ahora si, los anuncios corticos   :D

Mi agenda sigue igual de apretada, aun asi hare el esfuerzo por retomar un ritmo constante para actualizar más seguido (aunque  no prometo nada me he lastimado la mano así que se me dificulta la vida en general xD) JAJAJA ¿Han notado lo mucho que me explayo? rayos, mal hábito.

 

En fin... MUCHISIMAS GRACIAS POR LA PACIENCIA Y EL APOYO!!

MUCHOS BESOS Y ABRAZOS... <3<3<3<3<3


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).