Todos los personajes de esta historia pertenecen a Marvel
Capítulo 1.
Aquel año en la Avengers Academy sería el último para mí, pronto empezaría a trabajar con mi padre, cuidando su compañía hasta poder ocupar su lugar.
Odiaba ese ambiente raro que se hacía entre los pasillos. Todos sonreían melancólicos, pedían firmas en su anuario o grababan videos con títulos como “Nuestro último baile” “Extrañare a todos” y sobretodo se podía ver como varias personas intentaban conquistar a su amor imposible; una misión arriesgada que se admiraba desde lejos.
Ese dia habíamos presenciado el rechazo sufrido por Frandal al intentar declarársele a Sif, he de admitir…hasta a mí me dolió.
Ahora me daba el triple de miedo hablarle a Loki y a pesar de tener todo un plan para hacerle la gran pregunta temblaba cada vez que nuestras miradas se cruzaban.
Estuve aplazando mi confesión hasta llegar a dos días antes del baile de graduación. En aquella ocasión recuerdo haberme vestido elegante, tenía conmigo un ramo con flores rojas y mis fieles amigos me animaban mientras caminaba directo a la biblioteca. Encontré a Loki justo en una mesa a lado de una ventada por donde el sol entraba suavemente. Aquella imagen provoco que terminara completamente enamorado pues parecía estar iluminado por el mismísimo creador.
¿O solo fue Surtur haciéndome sufrir?
—Hola, Thor—sonrió mostrando sus perfectos dientes—. Luces muy apuesto hoy.
Mis mejillas empezaron a arder—Hola…—todas las noches practicando que decirle y hoy se me olvidaba todo—Tú te ves maravilloso con todo ese sol cayendo en tu sedoso y maravilloso cabello…—ahora si lo había arruinado. Loki me miraba con una expresión ¿enojada?
—Odinson…—se levantó, apenas media unos centímetros menos que yo. Temblé—. Ambos hemos desperdiciado mucho tiempo, pudimos ser la mejor pareja de todo Avengers Academy—. Pude escuchar como mi corazón se rompía.
— ¿Eh?
Loki ríe y me besa.
—Quiero estar contigo—murmura sobre mis labios—Ya no te tardes tanto en pedirlo, cariño, aun podemos ser la mejor pareja durante las dos semanas que quedan.
Yo me derrito y firmó mi sentencia—.Se mío, por favor.
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Thor nuevamente escondió su pequeña libreta temblando ante el sonido de una persona acercándose. La puerta se abrió y ahí estaba él, sonriendo tímido como si no hubiera tratado de matarlo.
—Quiero enseñarte algo—tomó su mano—Vamos, Thor, levántate.
El rubio suspiro, no es como si tuviera opción. Loki lo saco del cuarto y lo que encontró fue muy…raro.
Por todas las paredes se encontraban colgadas pinturas de su rostro, fieles copias hechas con pintura de óleo, solo al final del pasillo había una diferente en donde estaban ellos dos. Desvió su mirada dándose cuenta de las pequeñas manchas en la ropa de diseñador perteneciente a Loki.
—Vaya… ¿Son recién hechos? —sonríe Thor perturbado.
—Sí, me inspire. Me encanta tu rostro, además hoy vamos a recibir invitados—se abraza al amplio torso contrario—. Tony y Steve vienen ¿No te encanta la idea?
Thor asiente, tratando de no sentirse muy emocionado. Esta podía ser su oportunidad para escapar ¡Ya no más psicópatas durante el resto de su vida! Por sus ojos pasaron múltiples escenas donde volvía a su vida normal e incluso durante un breve instante pudo oler la comida casera de su madre y el cálido ambiente de su casa.
—Bien, bien, vamos a arreglarte, amor mío—Loki tomo su mano mientras lo conducía al cuarto de baño—Hoy, como siempre nuestros conjuntos van a combinar…usaremos azul marino con blanco ¿Acaso no son colores sofisticados?
—Claro
Ambos llegan al baño, se despojan de sus ropas y como dicta la tradición Loki comienza a bañarlo como si fuera su más preciado objeto, dedica especial atención al rubio cabello y finaliza dando un beso en su frente. Thor no iba mentir, las primera veces que ambos tomaron una ducha esta actitud le había fascinado pero ahora, después de todo lo ocurrido solo le provocaba más miedo e incomodidad.
Al terminar Loki tomaría una larga ducha mientras su pareja se ponía la ropa previamente seleccionada.
Cuando ambos estuvieron listos, el azabache siempre tomaría una foto para su Instagram, en donde lucieran como la típica pareja de ensueño. Thor deseaba poder eliminar cada nueva publicación pero el ya no tenía acceso a internet, su esposo se lo había prohibido y solo contaban con una computadora y el celular de Loki, fuera de eso no había ningún medio de comunicación.
— ¿Cómo me veo, querido? —pregunto el de ojos verdes.
—Espectacular, hermoso, bello…—contestaba como si fuera un robot.
—Te falto uno…
—Y asombroso—suspiraba desviando la miraba—, me robas el aliento.
—Gracias—Loki movía sus pestañas en un acto puro de coquetería—. Ahora…si quieres salir bien de esta, debes de comportarte bien ¿Me escuchas? Nada de tratar de escapar ni de alertar a nuestros amigos—le dio un beso que como hace ya mucho tiempo no fue correspondido—. Vas a tratarme como lo hacías al principio…como si aún me amaras…—suspira dejando ver su mueca triste.
Thor sintió una punzada en el corazón al ver el rostro de su esposo tan lleno de dolor ¿Acaso se podía ser tan masoquista? Ni el entendía en este momento como es que seguía ahí si ansiaba tanto la libertad—Hey…no digas eso…yo…
El timbre sonó, Loki beso su mejilla y ordenó a los pocos sirvientes que aún quedaban, abrir las puertas.
— ¿Cómo está la pareja perfecta?—grito Tony mientras entraba.
—De maravilla, Stark…de maravilla—contesto Thor con una sonrisa falsa.