Narra Sasuke
– ¿por que no quieres? – le pregunté, si no quería volver conmigo no le iba a obligar ni tampoco a suplicar, solo quería una explicación.
– Yo... Sasuke, yo solo te causo daño, si te acercas a mi saldrás lastimado. – dijo con honestidad.
– Naruto, yo lo sé – lo miré a los ojos para que me creyera – yo se todo sobre tu pasado, tu madre me lo dijo.
Su expresión se notaba sorprendida, quizás no quería que yo lo supiera, pero ¿por que?
– Sasuke, ahora que no sabes todo, es mejor que te alejes, no quiero involucrarte en esto. – me soltó la mano.
– No – le tome la mano nuevamente, pero con más fuerza – Naruto ¿tu quieres volver conmigo?
– Claro que si quiero pero... – lo interrumpi.
– ¿me amas? – le pregunté.
– Sasuke, yo te amo más que a mi propia vida. – respondió con honestidad sin entender el por qué de esas preguntas.
– Entonces, por favor piensa en ti por una vez en tu vida. – le solté la menor y lo miré frente a frente para luego tomarlo por los hombros. – Naruto, ¿quieres volver conmigo?
– Sasuke, ya te respondí que si pero... – nuevamente lo interrumpi.
– Deja de pensar en los demás, yo quiero volver contigo y no quiero que te preocupes por lo demás. – sin decir nada más, se acerca y le roba un casto beso en los labios.
– Sasuke, yo quiero volver contigo y eso haré. – le tomo de la cintura y lo beso en los labios ignorando a toda la gente que pasaba y los miraba con asco.
– Naruto, vamos a casa – dije sintiéndome incómodo con tantas miradas.
– Está bien – me tomo de la mano y me jalo hasta la salida.
Lo vi tomar su celular y hacer una llamada. Me recargue en la pared más cercana esperando a que Naruto terminara de hablar por teléfono. Luego de unos largos minutos, termino su llamada y me miro sonriente.
– Llegará en unos minutos – me avisó y lo miré confundido – el taxi – me dijo al notar mi expresión de confusión.
– Bien – suspire.
Esperamos unos minutos ahí hasta que llegó el taxi. Entramos y nos acomodamos ambos en los asientos de atrás.
– Sasuke – me llamo y yo volteé – ¿vamos a tu casa o a la mía?
Pensé unos momentos, seguramente estaría Itachi en mi casa y nos haría miles de preguntas.
– A tu casa – respondí volteando nuevamente la mirada hacia la ventana.
– bien.
Escuché a Naruto decirle la dirección de su casa al conductor, suspire y seguí mirando por la ventana.
Luego de un rato llegamos, miré la casa de Naruto por la ventana, no parecía ser ni muy grande, pero tampoco muy pequeña, está casa no la conocía para nada.
– Ya llegamos – me avisó Naruto y baje del taxi mientras él pagaba.
Parecía estar en medio de un bosque lejano, seguramente esta era la casa de vacaciones de Naruto, debe ser nueva.
– Vamos. – me tomo de la mano y me encamino hacia dentro, tomo las llaves y abrió la puerta para luego dejarme entrar primero.
– Es bonita – dije al verla desde adentro.
– La compre hace unos meses – dijo sin darle importancia – iba a ser una sorpresa por tu cumpleaños pero... Bueno eso no importa.
Me senté en un sillón cercano y llamé a Naruto
– Naruto, ven – le llame y se acercó a mí.
– ¿que? – me pregunto antes de que lo besara.
– Mientras estemos aquí, olvida todo lo demás – le dije.
Él sonrió y me abrazo.
– gracias, Sasuke, muchas gracias – me beso castamente en los labios.
Se levantó y camino hacia una puerta blanca.
– ¿A donde vas? – le pregunté.
– Al baño – me respondió, abrió esa puerta, entro y la cerro.
– hn
Me levanté del sillón y comencé a caminar por la casa con curiosidad. Recorrí toda la casa hasta llegar a la cocina, miré que encima de la mesa había una botella sin nombre. Con curiosidad la abrí y me serví en un vaso un poco de aquel líquido que había en él. Tome un poco, nunca había probado nada parecido, no sabía mal así que me tome todo lo que había en el vaso y luego me serví más en el vaso.
Narra Naruto
Salí del baño, fui al lugar en donde Sasuke había estado sentado anteriormente, pero no lo encontré, fui por todas las habitaciones sin encontrarlo, me comencé a preocupar. Camine hacia la cocina, suspire de alivio al verlo ahí sentado y camine hacia él.
– Sasuke – lo llame.
El se volteó a verme y se puso de pie tambaleándose un poco hasta llegar a mi y abrazarme con fuerza.
– Naruto! Te amo! Te amo! Te amo! – me sorprendí hasta que sentí el olor, había tomado sake.
– Sasuke, te llevaré a la habitación y dormirás un poco – le dije cargándolo en mis brazos.
– No quiero!
Suspire e ignorandor03; sus protestas, lo llevé a la habitación y lo acosté en la cama.
– Ne~ Naruto.
Me senté en la cama y lo mire, estaría ahí hasta que se durmiera.
– Juguemos un rato – dijo gateando como un gato hacia mí.
– No, tienes que dormir.
– Vamos, Naru – se acercó más a mi y me beso en los labios.
No me negué al beso, solo correspondi sin importarme nada, solo sería un beso, nada más que eso. Sentí que sus manos bajaban hasta mi miembro y metía sus manos en mi pantalón para acariciar me... Fue ahí cuando reaccione y me aleje rompiendo el beso y poniéndome de pie.
– ¿Que pasa? – me pregunto con voz dolida.
– duerme – le dije.
– pero no quiero, yo quiero hacerlo contigo. – dijo mirándome mientras se acostaba y se quitaba la camiseta.
– No, Sasuke, estás ebrio. – dije saliendo de la habitación y caminando hacia la cocina.
Sentía calor demasiada y mi miembro comenzaba a despertar.
– Maldición.
Tenía sed y sin pensarlo tome el vaso que estaba en la mesa y tome todo el líquido que había en él...
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.
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Me despertaba por culpa de los rayos del sol, me di la media vuelta para así mirar a Sasuke quien estaba a mi lado, desnudo al igual que yo... Espera, ¡¿desnudo?! Me senté con rapidez en la cama mirando a Sasuke quien comenzaba a despertar.
– ¿Naruto? – se miro a sí mismo – ¿que paso? – pregunto.
En ese momento comenzaron a llegar algunos recuerdos de la noche anterior.
– Ah! Más... Más rápido. – gemía sin control el azabache mientras abrazaba con fuerza al rubio arañando le la espalda.
– Sasuke... Eres tan... Estrecho...Mm – decía el rubio mientras lo besaba con pasión y embestía con fuerza.
Solo gemidos y ruidos impúdicos se escuchaban en esa habitación...
– Sasuke, yo...
– No importa – me interrumpió con un ligero sonrojo en sus mejillas.
Me levanté y camine hacia el baño seguido por Sasuke, a quien se le notaba que le dolían las caderas.
– ¿Te duele? – le pregunté.
– Un poco – dijo entrando al baño siendo seguido por mi.
Lo cargue sin importarme sus protestas y lo llevé a la ducha.
– Me bañarme contigo – avise sonriendo.
– está bien.
Ambos entramos a la ducha y comenzamos a bañarnos. Lo tome desprevenido y le bese en los labios.
– Mm
Correspondió el beso y sin querer nuestros miembros se rozaron haciendo que un suspiro escapara de mi boca y un pequeño gemido de parte de Sasuke, lo acorrale contra la pared poniendo mi rodilla en la entrepierna de Sasuke
– ngh
Al escuchar ese sonido me sonroje levemente y lo di vuelta poniendo sus manos en la pared.
– Lo siento, Sasuke – le dije.
– ¿Que pretendes...? Ah! – grito al sentir como lo penetraba de una estocada.
– Agh! Sasuke...Eres muy... Estrecho.
– Mueve te – más que una petición fue una orden.
– Si
Comencé a embestirlo lentamente para luego aumentar la velocidad y fuerza de estas.
– Ah... Más! Más rápido! – gemía mientras sus piernas tambaleaban.
– Naruto! Ah... Ya casi...
– yo... También
Continué embistiendo con más rapidez hasta llegar en el interior de Sasuke. Comencé a masturbarlo con mi mano para hacerlo llegar.
– Naruto! – grito mi nombre antes de correrse en mi mano.
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3 semanas después
Narra Sasuke
Me desperté temprano y corrí hacia el baño con náuseas, sentía que iba a vomitar. Llegué y vomité.
– ¿Estas bien? – escuché la voz de Naruto.
– S-si – respondí y volví a vomitar.
– No, no lo estás, te llevaré al hospital. – dijo saliendo del baño en dirección a la habitación.
Me limpie la boca y me lave los dientes para luego salir del baño y caminar en dirección a la habitación para vestirme. Luego de unos minutos ya estaba listo para salir.
– Vamos.
Me tomo de la mano y salimos de la casa, entramos a su auto y comenzó a a conducir en dirección al hospital.
– Estoy bien, enserio.
– No me importa.
A veces odiaba que se preocupara tanto. Llegamos y bajamos, luego entramos. Naruto se fue a pedir una hora.
– Te atenderán en unos minutos – dijo Naruto quien ya volvía.
Suspiré y esperé hasta que dijeron mi nombre ya tenía que entrar.
– Vamos. – dijo tomando me de la mano y entrando.
Me hicieron unos cuantos exámenes que no considere necesarios. Luego de unos minutos esperando volvieron con el resultado.
– Y ¿que tiene? – pregunto Naruto preocupado.
Suspire, enserio no era necesario preocuparse, de seguro solo era un resfriado normal.
– Está embarazado.
– ¡¿que?!