Por favor, que alguien le dijera que el día de ayer solo había sido un mal sueño, y que cuando llegara al salón Kagami lo estaría esperando con una sonrisa, y disculpándose por faltar. Por favor, que alguien apagara esa maldita alarma, no quería levantarse, porque aun cuando deseaba que fuera un sueño, el mensaje, aun abierto en su teléfono, le confirmaba que todo lo ocurrido el día anterior, fue cierto.
"Lo siento, no puedo decir más que, perdón por no seguir siendo tu luz
Kagami"
Kuroko volvió a poner la cara en la almohada, dejando que las lágrimas volvieran a salir, no pudo ni siquiera decirle como se sentía, perdió su oportunidad y ahora Kagami se había ido de vuelta a Estados Unidos sin ninguna razón.
-No!- Kuroko se levantó de golpe de su cama y corrió a la escuela, puede que su condición fuera mala, pero ahora mismo, la adrenalina podía ayudar mucho -Midorima dijo que lo vio en el hospital, y después se fue, que está pasando en verdad?-
Pero no pudo seguir con la carrera mucho tiempo, chocando contra alguien que parecía ir a la misma velocidad que él, si hubiera sido un día normal, Kuroko seguramente hubiera pasado desapercibido, pero en el estado de exaltación que se encontraba era más que obvia su presencia, y aún más para la persona contra la que había chocado.
-Kuroko?-
-Ogiwara-kun- musito sorprendido al verlo enfrente suyo.
-Lo siento, no vi por donde iba, estas bien?- pregunto, no pasando por alto la cara que tenía el otro.
-…no lo sé- admitió en voz baja.
El castaño paso una mano por su cabello, esta emocionado, había quedado de salir con un amigo ese día, aunque la salida seria en la tarde y no tan temprano, pero como las clases se habían cancelado estaba esperando tomar al otro por sorpresa. Bueno, Kuroko se veía mal, y eran amigos, así que no tenía nada de malo entretenerse un rato e intentar averiguar que tenía tan mal al otro.
-Vamos, caminemos- ofreció levantando al de pelo azul.
Kuroko lo miro pero termino por aceptar la oferta, después de todo no creía que pudiera concentrarse en la escuela sin su compañero, además, si compartía un poco de sus temores con Ogiwara, seguramente este le escucharía.
-Entonces, que sucede?- pregunto el castaño después de acabar su helado, sonriendo a su amigo con restos de la comida alrededor de su boca.
Mientras que Kuroko seguía pensativo, no es que no confiara en el otro, en realidad hablaban por mensaje de manera regular, y en algún momento le llego a admitir sus sentimientos por su luz, pero tenía miedo de que su amigo le dijera algo como ríndete, o que dejara a Kagami tomar sus decisiones en paz, si era así, no, y si todos decían lo mismo, si todos le decían que tenía que dejar a Kagami en paz, que perdió su oportunidad, que nunca volvería a verlo.
-Kuroko?!-
El menor se sobresaltó por el llamado de su amigo, y fue ahí cuando noto las lágrimas cayendo de sus ojos sin ningún control, le dolía, pensar que Taiga se había ido y sin saber sus sentimientos le dolía, así que con desesperación se abrazó a su amigo y dejo que sus sentimientos, normalmente controlados, se desbordaran.
-Que sucedió?-
-Kagami-kun, el, se fue, y no sé por qué-
Ogiwara miro al peli azul asombrado, no podía creer que ese chico, al cual solo había podido ver un par de veces, se fuera así como así, no cuando sabia como veía a su amigo, no cuando imaginaba que ambos terminarían juntos, pero aun así mantuvo sus brazo alrededor de Tetsuya, dejándolo llorar y que se calmara lo suficiente para que pudieran hablar. Estuvieron así unos minutos, hasta que Kuroko se tranquilizó lo suficiente para contarle sobre los últimos días que había visto a Kagami, comentando también lo que dijo Midorima y sus últimos mensajes, incluido el que llego en la madrugada.
-Y no has pensado en buscar más que esto?, digo, sé que se fue como si nada, pero dudo que la escuela lo dejara ir así, no?- intentaba animar el castaño a su amigo -seguro tu director o algún maestro sabe algo-
Kuroko suspiro, sabía que tenía que buscar más pruebas antes de terminar exaltándose y creando un drama donde no había, pero escucharlo de alguien más de cierta manera lo hacía más relajante, y ayudaba en no pensar que era el único en sospechar de la situación actual.
-La verdad, tengo miedo, que pasa si en verdad Kagami-kun se fue sin razón y no quiso decir nada para que no tuviera a todo el equipo tras el- en cuanto termino de hablar Ogiwara se levantó de golpe y miro con dureza a su amigo.
-Qué cosas estas diciendo, ese no eres tu Kuroko, tu irías y buscarías una respuesta, no te quedarías sentado- Tetsuya levanto la mirada, sabía que su amigo tenía razón, más que eso, era cierto que se estaba comportando de una manera bastante rara para ser él.
-Tienes razón, tengo que despedirme, iré a buscar respuestas- y apenas termino de hablar, corrió fuera del parque.
-Hombre, espero que todo esto acabe bien, y que tú también tengas valor para enfrentarlo- comento a su teléfono, el cual tenía un mensaje, el único recibido por esa persona.
"Cuida a Kuroko, se cómo lo veías, por eso, no se lo puedo decir a nadie más que a ti, no podre ser su luz de nuevo, y no puedo soportar decepcionarlo, lo siento
Kagami Taiga"
La vida sí que era una maldita.
Kuroko miraba a través de la ventana del tren, seguramente la entrenadora y el resto estarían preocupados, pero intentarían mantener su espacio durante un tiempo, sabían lo importante que era Kagami para él, pero de todas maneras, tenía que hablar con el resto de la generación, ya había mandado un mensaje a Akashi para que todos pudieran reunirse lo más pronto posible, y siendo el, en menos de una hora había logrado juntar a todos para hablar, y ahora se dirigía a la prefectura de Nagano, idea de su antiguo capitán para que nadie descubriera su reunión-
-Como si fuera algo ultra secreto- pensó el chico, sonriendo por primera vez en el día.
No faltaba demasiado para llegar, pero de todas maneras aviso a su familia que se quedaría en el lugar unos días, y también aviso a su equipo, para después silenciar su teléfono, no quería llamadas innecesarias.
Como acordaron, se verían en la posada que Akashi reservo, después de todo, tanto el cómo Murasakibara serían los últimos en llegar, y eso que Kuroko salió una hora tarde, así que cuando el tren se detuvo miro su reloj, 3:49, si mal no se equivocaba, Murasakibara, que llegaría en un auto que Akashi pidió para él, llegaría pasadas las 7, tenía tiempo para caminar un poco y de ahí buscar la posada, dudaba que alguno de los otros ya hubieran llegado.
Bueno, la verdad era una sorpresa ver a todos los chicos ahí presentes, aunque Kuroko sabía de la importancia de Kagami para el resto, no imagino que sería al punto de lograr una reunión de todos los milagros. Akashi solo los miraba como si estuviera de cierta manera apenado por la noticia, y aun cuando no entendía la razón por la ausencia del as de Seirin, si entendía que el padre de Midorima tenía las respuestas junto con el director de la escuela.
-Midorima, seguro que no te dirá nada tu padre?-
-Ya te lo dije Akashi, sigue insistiendo con lo de información confidencial y el respeto doctor-paciente- se quejó el de lentes mientras miraba a Kuroko enfrente suyo.
-Está bien, no quiero que vayas en contra de tu padre Midorima-kun, pero sigo sin entenderé porque no hay información, porque no dicen nada-
La generación miro a su amigo con comprensión y lastima conjunta, entendían que el otro estaba desesperado y además confundido por el comportamiento del tigre, el cual siempre había sido un ejemplo de buen comportamiento y solidaridad.
-Muro chin tampoco sabe nada, cuando le comente en realidad se puso muy blanco e intento llamar a Kagachin pero no le contesto-
Kuroko solo empezó a desesperarse más, entendía que Kagami se había ido, pero sin avisar?, además de que se negaba a contestar a cualquiera que intentara comunicarse con él?, ese no era el Kagami Taiga que él conocía.
-Akashi-kun, puedes conseguirme un permiso para faltar a la escuela por varios días?-
-Que estás pensando Kuroko?-
-Voy a ir a Estados Unidos y le pediré respuestas a Kagami-kun, además, aún tengo que decirle mis sentimientos-
-Oi Tetsu, estas escuchando lo que dices?, es una locura-
-Estoy de acuerdo con Aominecchi, además, pensé que no manejabas bien el inglés- le recordó Kise, mirando como el otro se deprimía -por eso, yo voy a acompañarte-
-Es cierto Kuroko deberías. Que!- el grito de Midorima descoloco a todos, mientras que el de lentes les miraba como si estuvieran locos.
-Pero Midorimacchi, es un buen plan, además, yo se hablar inglés- volvió a presumir el rubio.
-Tch, lo dice alguien que cuando ve un gusano huye de el-
-…nadie me puede vencer más que yo, oh, y también las abejas-
-Son más peligrosas que las lombrices-
-Pues discúlpame señor fanático de Mai-
Los demás solo miraban la pelea como algo ya normal, en su lugar, Akashi estaba analizando lo dicho por Kuroko, indeciso por si debía o no ayudarlo en eso, aunque seguramente se iría así no le ayudara.
-Supongo, que no es mala idea si vas-
Eso basta para que todos prestaran atención a los dos más bajos del grupo.
-Akashi que estás diciendo?-
-Piénsenlo, la mejor manera de averiguar que paso es preguntando directamente, además, ni Momoi pudo obtener información, que haremos nosotros?-
Eso fue más que suficiente, la razón por la que la chica no estaba presente era por el sentimiento de culpa por no averiguar nada respecto a la situación de Kagami, y era como decía Akashi, si ninguno había podido averiguar algo, entonces solo podrían entender las cosas de manera directa.
-Pero si Kuroko va, que hará con el idioma?-
-Por eso Kise lo acompañara-
-Espera, que?, Tetsu y Kise solos?, tú quieres que se metan en problemas- y Aomine tenía razón, ambos eran un imán para los problemas.
-Bien, en ese caso Aomine puede ir de guardaespaldas-
Aomine quería protestar, pero el sonido de un teléfono logro callarlo, claro, eso no evito que mirara mal al excapitán de Teiko por la propuesta tan descabellada que había hecho.
-Muro chin también va, dice que se asegurara que no se pierdan- leyó Murasakibara -y también voy yo, quiero comprar dulces haya-
Todos empezaron a hablar cada vez más fuerte y de maneras más alocadas, quejándose o sugiriendo cosas para esa travesía, pero también recordándoles que podría ser mala idea y que muchas cosas podrían salir más de seguir con esa idea tan absurda, y aun así pensando en cuanto dinero podrían necesitar y además Akashi ya veía de conseguir tanto los permisos de falta como boletos de avión.
Kuroko solo miraba todo en silencio, pero agradecido de que sus amigos le ayudaran en esto, cuando se encontrara de nuevo con Kagami le hablaría de la ayuda que le daban los demás, y le agradecería de nuevo por ayudarlo a volver a tener una relación con ellos. Cuando viera de nuevo a Kagami, se acordaría de golpearlo por irse, y también de sonreírle y admitir sus sentimientos por él.