Ten estaba empecinado en entablar conversación con el grupo de Jaehyun constantemente, intentando enlazar ambos grupos en todos los almuerzos.
Doyoung se había negado rotundamente, pidiéndole ayuda a Taeil con la mirada, buscando otro "no". Pero a Taeil no le importaba lo suficiente y simplemente sonreia tratando de darle ánimos.
Seguramente cree que es mi oportunidad para arreglar las cosas con Jaehyun.
Sin embargo, había terminado cediendo definitivamente cuando miró a Ten observar a Johnny desde lejos, con tanto anhelo en sus ojos, y supo que no había superado el fin de la relación.
-Esta bien, te acompañaremos-había intentado sonar lo más amable posible. No era momento de ser egoísta, era momento de ser un buen amigo. Suspiró.
El primer almuerzo con ellos fue un día que no le gustaría recordar, la tensión entre ellos era notoria: muchas cosas sin decir en aquella mesa.
-¡Johnny, tanto tiempo!-saludó Ten mientras se sentaba en la mesa donde comían entre risas su ex-novio, Jaehyun y Taeyong. El nombrado estaba pálido, tanto que no pudo decir una palabra y se limitó a asentir para quedar petrificado luego.
-Oh, ¿sos amigo de Johnny?-preguntó Taeyon entre sorprendido y curioso.
-Claro, ¿no es así Johnny?-preguntó moviendo su cabeza de un lado a otro, sin querer la respuesta que sabía que no iba a tener. El rostro del Johnny era un poema-. Doyoung, Taeil, siéntense- hizo señas mientras él se auto-invitaba a la mesa con la sonrisa más grande que podía tener.
-Creo que olvidé algo en la me-
-Aquí-cortó Ten a un Doyoung cobarde y con pocas ganas de ser sociable, dándole palmaditas al sitio de su lado.
Voy a matarte Ten.
En el momento en el que tomó asiento, Taeil los siguió sentándose delante de Doyoung, al lado de Jaehyun, quien había estado mirando al pelirojo pidiéndole explicaciones mentalmente. Cuando Doyoung levantó la mirada, lo vio y se percató de la incomodidad de Jaehyun, levantó sus hombros y le dirigió su mejor mirada de "Yo tampoco entiendo".
-Mi nombre es Taeyong, ¿son de primer año también?-quiso ser amigable.
-Somos de segundo. Ten, Doyoung y Taeil, ¿en qué especialidades están?-había preguntado Ten entusiasmado, mirando a Johnny que comía en silencio.
-Los tres-dijo señalándose a él y a sus amigos-estamos estudiando piano.
-Lo supuse de Johnny, no me imaginé que estaría aprendiendo piano con ustedes también, ¡genial!
-¿También estás estudiando piano?-preguntó Jaehyun, cansado de ignorar la mirada fija de Doyoung.
-Ten-Johnny habló antes de que Ten respondiera, parándose de golpe de la mesa-, acompañame.
Ten sonrió satisfecho y lo siguió.
Doyoung y Taeil intercambiaron miradas, Taeyong y Jaehyun también.
-Eso fue incómodo...-dijo en voz baja, pero aún audible, Doyoung.
-Lo se, es la primera vez que veo a Johnny así, ¿no Jaehyun? Discúlpenlo, él es realmente amable.
-No nos molesta, entendemos la situación.
-¿Vos eras...?-preguntó Taeyong.
-Taeil.
-Taeil, ¿a qué situación te referís? ¿No es tu amigo Ten un antiguo amigo de Johnny?-Taeyong estaba más confundido que antes.
-Creo que eso es algo que tu amigo debería decirte-contestó de la forma más amable que pudo Taeil.
-Quizás Johnny se olvidó que tuvo un amigo tan bueno como Ten, ¿no te parece posible algo así Jaehyun?-Doyoung inquirió sonriendo de lado a Jaehyun.
-Claro que sí sería posible-lo desafió mirándolo fijo-. Es algo normal olvidar malos recuerdos.
Pese al comentario tan rudo de Jaehyun, Doyoung no sintió que estuviera molestándolo. Pudo ver el deseo de ser entendido en sus ojos, gritándole cosas que no entendía. Ellos dos sabían lo buenos amigos que habían sido, ese comentario no era sarcasmo implícito para hacer mención a los antiguos Doyoung y Jaehyun. Supo que no quería herirlo a él con su comentario; entonces, ¿por qué le hería escucharlo decir tales cosas?
-Oh, ¿ustedes también se conocen?-Taeyong estaba algo mareado y preocupado por Jaehyun y sus palabras poco amables.
-Ellos son compañeros de cuarto-mencionó como si nada Taeil antes de darle un sorbo a su gaseosa.
-¿Por qué no nos dijiste, Jaehyun? Bueno, espero que podamos llevarnos todos bien-les sonrió Taeyong.
-Yo espero lo mismo, ¿no Jaehyun?-preguntó Taeil sonriendo.
Quiero irme a mi casa. Pensó Doyoung.
[...]
Ten había seguido a Johnny todo el trayecto con una sonrisa en su rostro que se deshizo cuando éste volteó a verlo con un rostro serio. Pocas veces había visto esa expresión.
-¿Qué te pasa?-soltó molesto cuando paró de caminar, en el patio más cercano a la cafetería. Ten no supo qué responder-. Después de dejarme, ¿pensas que podemos actuar como si fuésemos los mejores amigos que se encuentran felizmente?-continuó.
-Yo no te dejé-trató amable.
-Chittaphon. Por favor, no quiero tener esta conversación otra vez. No acá. No ahora...
-Yo si- Ten había perdido completamente su sonrisa.
-No siempre van a ser las cosas como vos queres, ¿no? A veces la gente piensa distinto que vos. A veces necesitamos nuestro espacio. Creí que vos más que nadie podrías entender eso.
-¿Cómo sabías que estaba estudiando acá?
-¿Pensas que vine a estudiar acá por vos?-río Johnny sin felicidad-. Estoy acá por mis sueños, no tenes nada en qué preocuparte.
-Me hubiese gustado tener que preocuparme por algo así- menciono descaradamente mientras comenzaba a alejarse-. No voy a dejarte ir otra vez Johnny... Piensa en ello.
Volteó tan rápido que no pudo ver su expresión, pero estaba seguro de cómo lucía su rostro en ese momento.
[...]
Una semana había pasado desde que Doyoung había vuelto a ver a Jaehyun, desde que compartían habitación, desde que lo ignoraba.
Con el paso de los días se había acostumbrado a su falta de interés o a que le respondiera de mala gana, soportando que fuera amable con los demás. Ya que desde que Ten había comenzado su llamada "Misión Johnny vuelve a mis brazos (plan de un mes)", no sólo tenía que verlo en su dormitorio sino también en el almuerzo. Y parecía estar dispuesto a ser amable con todos. Excepto con él, claro está.
Ya se había cansado de pensar el por qué de la situación cuando notó que Jaehyun se mantendría firme como una piedra y no le daría siquiera una explicación decente. Pero recobró las esperanzas luego de una noche.
Esa noche estaba particularmente cansado: aquella situación no era la única que le producía estrés, aún estaban sus compañeros y la audición para entrar a la orquesta de la Universidad quemándole el cerebro a la par de Jaehyun.
Su profesor estaba exigiéndole demasiado porque lo cría un fuerte candidato para el puesto, ayudándole y estando pendiente de él.
Se dio cuenta de ello cuando recibió el primer escrito anónimo entre las páginas de su libro de clases.
"¿De verdad pensas que alguien como vos puede lograrlo?"
No era explícito, pero Doyoung sabía que se trata de la orquesta y la audición, pero no sabía que sería tan problemático. Pese a ello, sentía un peso muy grande en sus hombros. No podía entender cómo alguien de su clase se sintiera así con respecto a él.
Cuando llegó a su habitación se ducho dejando de lado todo lo sucedido. Le gustó pensar que el estrés de sus compañeros era algo superable y que después de todo no había sido mucho aquel mensaje, ¿no?
Sin embargo no pudo dormir ni bien se acostó y fingió que la espalda de Jaehyun era algo interesante que ver con la poca luz que entraba por la ventana de la habitación.
Su mentira seguía volviendolo loco, y después de todo lo que había sucedido ese último tiempo en su vida, ello seguía siendo su último pensamiento antes de dormir todas las noches desde que lo volvió a ver.
-¿Sos vos... Jaehyun?
Le había preguntado creyéndolo dormido. Sin esperar respuesta, se dio vuelta sobre si e intento conciliar el sueño de una vez por todas.
Si. Creyó oír entre sueños.
Todavía seguía pensando en esa noche, ¿lo había soñado o Jaehyun le había dado la respuesta que tanto quería?