Cuando sintió al jovencito acercarse a su erección, Hyuk supo que no duraria mucho. Sus manos formaron puños tratando de suprimir los gemidos. Hae vio el miembro removerse un poco y sacó la lengua una vez más. Esta vez fue de la base a la punta, haciendolo rápido para escuchar los sonidos que escapaban de los labios del surfista.
—¿E-estoy lastimandote?—Hae preguntó, mirando arriba
Hyuk abrió los ojos mirandolo un par de segundos.
—¿Cómo diablos puedes lucir tan inocente con mi polla cerca de tu rostro?—gruñó
Los ojos de Hae se abrieron como ventanas y un oscuro rubor le salpicó las mejillas.
—No, no estás lastimandome—Hyuk dijo pasando un pulgar por los labios de Hae
Automaticamente Hae abrió la boca y metió el pulgar en su boca sin dejar de mirarlo.
Hyuk jadeó. Su otra mano comenzó a acariciar el cabello de Hae. Hae mordió suavemente el pulgar. Hyuk gruñó.
—Tengo algo mejor que puedes probar—respiró, guiando al muchacho a su miembro
Hae jadeo y suapiró, presionó la lengua en la longitud. Sobre todo, descubriendo ese sensible punto. Amando como la tensióm y la impaciencia se construian en el surfista.
—Hae—Hyuk le tiró del cabello, haciendo al chico mirarlo
—¿Hmmm?
—Por favor
Se miraron.
Una dulce sonrisa apareció en el rostro de Hae, el corazón de Hyuk se aceleró. No tuvo tiempo para procesar nada cuando el menor engulló por completo la erección, succionando fuerte.
—¡Whoa!—Hyuk gritó por el placer que lo llenó
Hae no pudo esperar para comenzar a mover la cabeza arriba y abajo, usando la lengua para lamer fuerte.
Hyuk estaba sin defensas. La mano se apretó en su cuello. Sus caderas se movieron inconcientemente embistiendo la boca de Hae. No hubo protestas, aracadas, Hae solo lo tomó, con entusiasmo y encantado de tener el contro. Hae se estaba volviendo loco.
—H-hae—Hyuk gimoteo
—¿Hmmm?—la vibración hizo al surfista eaxplotar
—¡Joder!—Hyuk exhaló
Hae ahuecó las bolas de Hyuk mientras movía rápido la cabeza, llevandolo hasta la garganta. Succionó suave y luego fuerte.
Hyuk tembló completamente. Las sensaciones en su cuerpo llenandolo. Si Hae seguía así no iba a poder detenerse. Sintió los dientes de Hae raspar su sensible pene, lo hizo. Se le curvaron lps dedos de los pies, sus manis se aferraron a la cabeza de Hae, su cuerpo se arqueó y un sonrojó le pintó por completo el cuerpo. Se corrió violentamente que su visión se nubló y gritó el nombre de Hae.
Hae fue sorprendido cuando lo sintió crecer y llenarle la boca. Pestañeó y automaticamente tragó, causando en Hyuk un gemido en el surfista.
Despues de un minuto, el cuerpo de Hyuk dejó el limbo. Sus manos calleron al costado mientras recordaba como respirar.
Hae se sentó de nuevo mordiendose el labio, sin saber que hacer. Miró a Hyuk que lentamente volvía a la tierra. El surfista volteo a verlo y sus ojis se encontraron. Hyuk abrió la boca.
—¿Cómo?
Hae frunció el ceño, no entendía.
—¿Q-quien te enseñó a hacer esto?
Hae parpadeo y sacudió la cabeza.
—¿Siquierapuedo saber?—Hyuk sonaba derrotado y miró hacia abajo
—N-no, no lo entiendo—Hae tartamudeó—E-esta fue la primera vez que probé eso
Hyuk estaba a punto de gritar cuando notó la sinceridad en los ojos del otro
—De ninguna manera...—maldijo en el temor. Agarró Hae por la parte de atrás de la cabeza y se lanzó hacia adelante. Justo antes de que sus labios susurraran:
—Fue increíble—hundió su lengua en la boca abierta de Hae, encontrando rápidamente la de Hae y la hizo girar a su alrededor. Amaba la forma mareada que lo hacía sentir como él y abrió un ojo, vio que tenía el mismo efecto en el salvavidas.
Fue hacia atrás y vio Hae moviéndose incómodo. El niño estaba al límite. Una sonrisa maliciosa formada en la boca de Hyuk.
—He cambiado de opinion—susurró
Asombro apareció en el rostro de Hae.
-¿Qué?
—Vamos a ir a tu lugar. Es más lejos y me gusta que te retuersas necesitado para mí-—Hyuk sonrió
—P-pero...
—No te preocupes, no te arrepentirás. Es decir, si eres un buen chico y no tratas de tocartr a tí mismo mientras estoy conduciendo
La desesperación caía en la cara de Hae.
Hyuk chistó, besó los adorables labios y comenzó a conducir.
Estaban a mitad de camino cuando Hae abrió la boca y para ver a Hyuk con expresión de locura, una oración y el sonido del zziper de Hae.
—¿Qué si no soy un buen chico?
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