Hyuk despertó. Sintió que su teléfono vibraba. Con mucho cuidado lo alcanzó, tratando de no despertar Hae.
—¿Hmmmm?
—Hyuk, ¿donde estás, hombre? ¡Hemos estado esperando durante media hora!—la voz de Junsu gritó a través del teléfono
—Shhhh, ¡no grites! Hae está durmiendo
En el silencio que siguió Hyuk se dio cuenta de lo que acababa de decir.
—¿Y por qué Donghae duerme a tu lado a las 9 pm de la noche?—Hyuk pudo escuchar la sonrisa en la cara de Junsu.
—¿Y te llamas a tí mismo un estudiante de medicina? ¿Es necesario que te lo diga?—Hyuk se burló. Oyó algunos movimientos y luego la voz de Minho
—Hyuk, ¿qué pasa?
—Nada
—Mentiroso. Sueltalo
Hyuk suspiro.
—¿Pueden ambos venir a casa de Hae? No toquen el timbre voy a dejar la puerta abierta
Hyuk se sepó lentamente y con cuidado del lado del salvavidas. De puntillas fue a la pequeña sala de estar, abrió la puerta y esperó. Un par de minutos despues llegaron sus dos mejores amigos. Se dejó caer en el sofá
—¿Que pasó?—Junsu susurró
—Los padres de Hae vinieron durante un par de horas. Ellos son horribles. Ellos piensan que está enfermo sólo porque él prefiere a los hombres. E-ellos...—Hyuk tenia la garganta cerrada
Minho compartió una mirada con Junsu y ambos abrazaron al surfista.
—Shhhh, puedes llorar, está bien, Hyuk—Minho susurró
Una lágrima corrió por el rostro de Hyuk
—debiste haberlos oído. Lo han estado arrastrando de hospital en hospital para curarlo desde que tenía 14
Junsu cerró los ojos y Minho simplemente se quedó sin aliento.
—¿Cura?
—Estaban aquí hoy para conseguir llevarlo a terapia de choque, que incluso esperaban que golpearlo con mi coche habiera funcionado
Más lágrimas llegaron. Junsu sintió tanta ira.
—tontos ignorantes. ¡Podrían dañar a ese niño hasta límite!
—Lo hicieron. Hae se rompió después. Hablé con uno de sus amigos y hicieron ni siquiera terminó la escuela secundaria. Aplastaron sus sueños
—Hyuk, ¿estás bien?—Minho preguntó
—Estoy muy asustado—Hyuk confesó
—¿De que?—Junsu frunció el ceño
—Perderlo. No puedo...simplemente no puedo perderlo
—¡No! ¡noooooo! ¡¡¡déjame en paz, no más, por favor!!! Voy a ser bueno, ¡voy a ser un buen chico!
Oyeron Hae gritar. Hyuk voló a la habitación para encontrar al socorrista dando vueltas en la cama. Instintivamente lo abrazó y trató de calmarllo.
—Despiértalo, voy a correr hacia el coche y darle un sedante—Junsu ordenó
—Hae despierta, bebé, es sólo un mal sueño—Hyuk dijo en voz baja
Hae abrió los ojos débilmente.
—Voy a ser bueno, lo prometo
—Tú eres genial, bebé—Hyuk acuno a niño
Minho tuvo que morderse el labio para no echarse a llorar
—Hyukkie
—Estoy aqui bebé
—Tenemos que dejar de vernos, tengo que ser bueno. No puedo ser atraído por ti. Es incorrecto. Es...—Hae empezó a llorar de nuevo
Hyuk sintió que su corazón se rompia.
—Hae, no—Hae se le quedó mirando con los ojos vacíos. Su mano acarició la mandíbula que tanto amaba
—No es más de todos modos, podrías tener cualquiera. Estaré bien
Minho señaló a Junsu que esperara un poco al entrar.
—Pero no puedes dejar que ellos ganan. No hay nada de malo en ti Hae. ¡Está bien para nosotros solo dormir juntos!—Hyuk casi gritó en desesperación
Los ojos de Hae nublaron aún más.
—No, anhelar de un hombre que está mal. Es enfermizo. Incluso te he contaminado. Tal vez la terapia de choque sea...—Los sonidos de la piel contra la piel conmocionaro a la habitación. Hyuk había pegado al salvavidas con fuerza en la cara.
—¡Cállate! ¡Maldición! ¿No lo entiendes? ¡Eres gay, naciste de esta manera, no existe una cura y no debería haber una cura! ¡estás perfectamente bien! Y no hay manera que me dejes, ¿me escuchas? ¡De ninguna manera te voy a dejar ir! ¡estás atrapado conmigo por el resto de tu maldita vida! Vas a terminar la secundaria paunque tengas clases por la noche y luego vas a ir a la universidad y estudiar la biología. Yo te ayudaré con todo y como pago vas a estar conmigo. Vendrás conmigo y y me aseguraré de que nadie más pueda hacerte daño o incluso tocarte, ¡maldita sea!
Hae se le quedó mirando en estado de shock.
—¡No me puedes dejar!—Hyuk repitio
Un rubor apareció en el rostro de Hae.
—¿Soy tan bueno en la cama?
Minho se atragantó con el aire, Junsu le dio unas palmaditas en la espalda.
—E-ese no es el punto—Hyuk dijo en voz baja
—Si no se trata de eso, entonces ¿por qué haces esto por mí?
—Yo he encariñado de ti—Hyuk dijo entre dientes
Minho tuvo que contener a Junsu sujetandolo por laespalda. Obligó a Junsu ir fuera del apartamento.
—Por eso—Hae repitió—¿Le pides a todas que te gustan que vivan contigo—
—Rara vez ocurre y no, no lo hago
—Entonces ¿por qué yo?—
Hyuk se ahogó en esos ojos que reflejaban confusión, dolor y algo más.
—¿Por qué tienes que ser tan condenadamente persistente? Aish, ¡bien!—Hyuk se inclinó y besó al niño con suavidad—¿Te das cuenta ahora?
Hae frunció el ceño.
—¿Porque te gusta besarme?
—Bebé, me está matando aquí—Hyuk suspiro, apoyó la frente contra la de Hae de un minuto. Aspiró, se aseguró de que tenían contacto con los ojos, tomó la mano de Hae y lo colocó en su corazón—Es porque tienes un hogar aquí—susurró
Los ojos de Hae se abrieron.
—Te amo—Hyuk dijo—Estoy completamente enamorado de ti y ¡no es que me guste o elegí! Solo sucedio, ¿ok? Así que si mencionas dejarme una vez más, voy a matarte
—De acuerdo. Yo también, por cierto
—¿también qué?
Yo también te amo
El corazón de Hyuk dio un vuelco.
—Sí, lo sé, no tengo ni idea de por qué, porque eres rudo y grosero, incluso cruel y...—Hae fue atrapado por una feroz beso de Hyuk. Al cabo de tres segundos, el beso fue endulzado. Se transmitieron todos sus sentimientos el uno al otro. Hae hizo un puchero—¿Qué pasa ahora?
—Así que ahora dices que me amas, pero ¿que nunca podemos hacerlo otra vez?
—Oh Dios mío—Hyuk respiraba con dificultad. Hae rió
—Eres um pequeñi provocador. Ven aquí, te voy a mostrar
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