A Changjo no le gustó el hecho de que nadie pudiera encontrar a su Beta. Habían buscado la mitad de la noche, pero no había señales de Junyoung en ningún lugar.
Gong Chan, Young Bin, y Do Young todavía estaban buscando, pero hasta ahora no había noticias deellos.
—Tengo que discutir algo con ustedes que es muy delicado y prefiero que se quede en esta sala. —Changjo vio a Jin young moverse en su silla incómodo. Él odiaba hacer esto al tipo, pero después de lo que le acababa de pasara Junyoung, se sentía obligado a por lo menos advertir a los otros shifters en su casa.
—Ustedes no han conocido a Jin young, él es el hermano menor de Junyoung.
—Changjo extendió sus manos hacia el hombre de aspecto nervioso.
—No, mierda. —TaeWoon se sentó adelante—. Pensé que Ji Hoon mató a nuestras familias cuando nos sacaron de nuestras casas.
—Yo estaba escondido. —Jin young dijo en voz baja.
—¿Estás seguro de que es su hermano? —Preguntó Min Gyu.
—Basta, yo no le invité aquí para interrogarlo. —Changjo sabía que estos hombres sospecharían. Era su naturaleza después de su vida bajo el pulgar de Ji Hoon—. Él tiene un don del que quiero que sean conscientes.
—¿Qué clase de don? —Los “caimanes” lentamente preguntaron—.¿Qué pasa exactamente con Junyoung?
—Sí, nunca dijiste por qué lo estábamos buscando. Si él se ha convertido en renegado, creo que tenemos derecho a saber. —SeJoon miró alrededor de la habitación al resto de los soldados, su postura incómoda—. Yo no voy a buscarlo solo para que puedas matarle, Changjo. Él es nuestro hermano.
Changjo sabía que todos los hombres sentían afinidad hacia los demás, y así no era como quería que el debate se desarrollase. Él necesitaba tranquilizarles. —No quiero otra palabra de ninguno de ustedes hasta que haya dicho lo que hay que decir y escuchar la versión de Jin young sobre esto, —ordenó.
La sala quedó en silencio, y Changjo continuó. —Jin young es el verdadero hermano de Junyoung. Él tiene un don para sanar. Jin young puede curar las heridas superficiales y las heridas que van mucho más allá, del tipo que corro en tu alma.
Jadeos sonaban a través de la habitación, pero Changjo siguió adelante.—Yo sólo digo esto porque si Jin young entra en contacto con ustedes físicamente, la curación comienza. Tú comienzas a revivir tu pasado a fin de repararlo.
—Eso es lo que hay de malo en Junyoung ahora mismo, —añadió Jin young—.Él me abrazó cuando vino a rescatarme, y ahora está volviendo a vivir su pasado. Lo siento, no tenía idea de lo doloroso que sería, a pesar de que no tengo ni idea de lo que sucedió aquí. Yo sólo quería hacerles a todos conscientes de ello.
Changjo lo sentía por el lobo. Debe ser una solitaria existencia que la gente tenga miedo a tu tacto. —Espera, ¿por qué el Beta de la otra manada no pasó por esto? Tú has dicho que tú y él... ya sabes.
—Hay que querer sanar con el fin de que suceda. Remus es puro odio, así es como es capaz de tocarme y no verse afectado.
Jin young se sonrojó, y Changjo estaba seguro de que era por haber jodido con el tipo en primer lugar. Todo el mundo toma una mala decisión de vez en cuando. Jin young no era diferente.
—¿Puedo hacerte una pregunta? —Los “caimanes” levantaron la mano, y Changjo asintió con la cabeza—. ¿Eres un Omega? —el shifter preguntó a Jin young.
El Alfa dejó a Jin young que respondiera. Si no quería que ellos lo supieran, Changjo lo apoyaría en ello.
—Sí.
—Mierda, —unos pocos lobos maldijeron—. ¿Sabes los problemas que vendrán a nuestra puerta si cualquier otra manada se entera de que está él aquí? Son raros y valiosos. Cualquier manada mataría por uno.—SeJoon expresó su temor.
—Eso es por lo que este conocimiento no sale de esta habitación,—Changjo ordenó—. Le he dado un refugio seguro aquí, y él será tratado con normalidad. ¿He sido claro?
—Sí, Alfa, —dijeron los lobos, pero Changjo podía ver el miedo en sus ojos. Temían a Jin young y lo que el lobo pudiera hacerles con su tacto.
—Gracias. Ahora tenemos que encontrar a Junyoung. Voy a dejar que Young Bin, Gong Chan, y Do Young sepan acerca de Jin young cuando vuelvan.
Min Gyu se puso de pie, la rabia y el pánico tirando de su rostro tenso.
—Mantente alejado de Gong Chan. No necesita volver a vivir ninguna jodida cosa. Ya ha pasado suficiente.
Jin young dio un paso atrás hacia Changjo, y el Alfa le enseñó los colmillos al soldado. —Yo dije que les diría. Da un paso amenazante hacia Jin young otra vez y seremos tú y yo, ¿está claro?
Min Gyu asintió con la cabeza y abrió la puerta, haciendo crujir la pared cuando él salió despotricando de la oficina.
—No es exactamente como yo planeé esto, ¿verdad? —Jin young miró hacia Changjo con tristeza en sus ojos.
—Van a estar bien. Sólo deja que absorban lo que hablamos.
Changjo rezaba porque su casa no estuviera a punto de trazar una línea por el centro y tomar partido. No había necesidad de eso, y él no se presentaría para ello.
Dong Jun caminó alrededor de la cocina de Ji Yeop, abriendo cajones y armarios, echando un vistazno en la nevera. Tenía que haber un RedBull por aquí, en algún sitio. Él se conformaría con una barra de energía en estos momentos.
—¿Qué estás buscando? —Preguntó Ji Yeop, cuando él mismo se alzó en el mostrador.
—Caramelos de leche. —Dong Jun sabía que si decía a Ji Yeop lo que realmente quería, el tipo no le permitiría salir de casa para ir abuscarlo.
¿Por qué Junyoung tuvo que decírselo? No es como si fuera una droga. Era una bebida energética por todos los diablos.
—Lo siento, no tengo ningún caramelo aquí.
Dong Jun hizo lo que pudo por ignorar esa voz profunda y seductora. Él estaba en una misión, y encontraría algo para llamar su atención de nuevo.
—Ven aquí, Dong Jun. —Ji Yeop lo llamó moviendo un dedo en él.
—Uh-uh, tú quieres tentarme con tu caramelo. No va a suceder. —No era tan estúpido como para ser rechazado dos veces. Dong Jun tomó una bebida de fruta de la nevera y pasó el dedo por la tabla nutricional en la parte posterior. Tenía un alto contenido de azúcar, pero no suficiente para él. La colocó en el estante y siguió removiendo las cosas a un lado. —¡Ay!—Se golpeó en la cabeza cuando sintió las manos de Ji Yeop en sus caderas—. Te dije que no.
Las manos inmediatamente desaparecieron. ¿Por qué eso hizo chirriar sus botones? Dong Jun quería las manos hacia atrás y quería discutir con Ji Yeop por rechazarlo la primera vez.
—¿De verdad que quieres decir que no? —Preguntó Ji Yeop con una vozronca.
¡Oh hombre! él era hombre muerto. Tanto como quería a Ji Yeop, Dong Jun no quería hacer el tonto, dos veces. —Sí, yo sólo no puedo ser rechazado tantas veces antes de que mi ego comience a sentirse ofendido.
—No voy a rechazarte. —Ji Yeop tiró de su camisa—. —Necesito otro sabor.
—¿De qué? —Él tragó saliva.
—Tus labios.
Dong Jun cerró la nevera y se detuvo, mirando a su pareja de hermosos ojos azules de cristal. Joder, él estaba caliente. Ji Yeop pasó la mano por el gran bulto en la parte delantera de sus pantalones, sin dejar lugar a dudas de lo excitado que estaba. Como si yo no podría olerlo.
Dong Jun se humedeció los labios, sus ojos como dardos entre la mano de Ji Yeop y sus ojos. —¿Qué tienes ahí? —Movió la cabeza hacia la entrepierna de Ji Yeop.
Ji Yeop se rió. ¿Por qué no vienes a ver?
Dong Jun dio marcha atrás por un segundo y reevaluó la situación.—¿Qué pasa con el cambio del corazón? ¿Las situaciones peligrosas te excitan?
Ji Yeop sonrió y dio un paso en su dirección. —Tal vez, o tal vez yo pensaba estar con los dos y lo encontré...intrigante.
—No quiero intriga. Quiero que tú digas que eres nuestra pareja y que deseas estar con nosotros... para siempre.
—¿Qué tal si te muestro? —Ji Yeop desabrochó los pantalones y liberó su polla. Dong Jun casi se tragó la lengua. La cabeza estalló furiosa estaba llorando de deseo. Y Dong Jun quería.
—¿Qué pasa con Junyoung?
—Junyoung está descansando. Cuando se despierte, le ayudaremos, como podamos. No voy a dejar que sufra solo. Pero hasta entonces...—Ji Yeop agarró a Dong Jun alrededor de la cintura y lo acercó, besándole sonoramente. Dong Jun metió la lengua en la boca de Ji Yeop, deleitándose en la sensación de Ji Yeop tratando de aspirar en su garganta.
Oh celestiales perritos calientes, el hombre sabía divino. Él necesitaba un psiquiatra cuando dijo: —No puedo. —Dong Jun tomó una respiración profunda, calmando sus hormonas en ebullición—. Junyoung está la habitación de al lado sufriendo. Yo necesito ir con él.
—Yo puedo respetar eso. —Ji Yeop retrocedió y se reajustó a sí mismo. Él agitó la mano, con la cara cansada.
Dong Jun sabía que Ji Yeop estaba luchando contra su lujuria. Eso no le importaba ahora. El dolor de Junyoung, sí. No es que él no fuera a saltar a la oportunidad de estar con Ji Yeop. Simplemente no le parecía correcto.
Ambos se arrastraron por el pasillo para comprobar a Junyoung cuando vieron al lobo aún acostado en la cama. —Yo voy a llamar a Changjo y le dejaré saber que lo encontramos. —Dong Jun agarró su teléfono móvil de su bolsillo y maldijo.
—¿Qué pasa?
—Yo tengo uno de esos teléfonos de prepago, y ya no tengo minutos.
—Aquí. —Ji Yeop deslizó su teléfono de su funda y se lo entregó a Dong Jun— Usa el mío. —Dong Jun se desplazó a través de su guía telefónica hasta el final.
Junyoung le había dado su número a todos en la casa en caso de emergencia.
—Changjo.
—Hola, soy Dong Jun. La pareja de Junyoung.
Hubo una risa profunda en el otro extremo que sonaba más como un trueno. —Sé quién eres. ¿Hay algún problema?
—Ji Yeop y yo encontramos a Junyoung. Estamos en la casa de Ji Yeop ahora. Changjo soltó un gruñido. —Voy en camino.
Dong Jun devolvió el teléfono y lo miró. El tipo acababa de colgarle a él. Bueno. ¿Y cómo sabía dónde vivía Ji Yeop? El hombre era espeluznante con mayúsculas E.S.P.E.L.U.Z.N.A.N.T.E.
—¿Qué dijo? —Preguntó Ji Yeop cuando Dong Jun le volvió a dar su teléfono.
—Él está en camino. —Caminó por el dormitorio y se sentó en la cama, pasando sus manos por la piel de Junyoung—. "Algo todavía parece desagradable.
—Tal vez sólo necesita descansar un poco. —Ji Yeop apartó el pelo de la cara de Dong Jun, sus dedos acariciando la oreja de Dong Jun cuando él metió el pelo detrás de ella—. Te ves como un ángel caído.
Dong Jun sintió el color en su cara. No estaba acostumbrado a los elogios y no sabía cómo responder. —Gracias, te ves como una estrella de porno duro.
Ji Yeop cayó hacia atrás la cabeza riendose, los hoyuelos que le hacían parecer robusto y comestible. —Dudo que nadie quiera ver mi culo en la gran pantalla, pero gracias, creo.
—Yo lo haría. —Sonrió Dong Jun—. Todavía no lo he visto, sin embargo.
—Lo harás. —Ji Yeop se inclinó y besó con ternura a Dong Jun antes de erguirse de nuevo—. Primero tenemos que cuidar de nuestra pareja...
Esa palabra no fue tan difícil, ¿ahora lo era? Dong Jun estaba disfrutando de este juguetón Ji Yeop. Le gustaba. Junyoung gimió en su sueño, y Dong Jun se inclinó y lo besó en la nariz, posando su cara en el pelaje de Junyoung.
Dong Jun dio un salto cuando alguien golpeó con fuerza la puerta principal.
—Creo que esa es su llamada silenciosa. —Ji Yeop se rió—. Lo traeré. Quédate con Junyoung.
Dong Jun pasó las manos sobre la cabeza de Junyoung. —No te preocupes, bebé, vamos a ponerte una gran venda y mejorarás. —Lo besó en la nariz otra vez cuando Changjo entró en el dormitorio.
—Aléjate de él, Dong Jun. —Changjo dio dos pasos y se puso al lado de Dong Jun, tirando de él desde la cama.
—Quita tus jodidas manos de él. —Ji Yeop gruñó y sacó a Dong Jun de las garras del Alfa—. Nunca le toques así otra vez.
Dong Jun estaba impresionado con la demostración de protección de Ji Yeop. Tanto como el tipo trató de negar, sentía el vínculo o él no actuaría tan machote.
Changjo gruñó y agarró al lobo por su nuca. —Este no es Junyoung.
Junyoung tropezó en el patio trasero. Estaba sucio, sediento, y su cuerpo le dolía completamente. Todo lo que le había sucedido había cobrado su precio.
Cada minuto que había pasado bajo el dominio de Ji Hoon le había acosado. Era como si alguien oprimiera el botón de reproducción y fuera rápido hacia adelante. Algunas cosas vinieron a él, esas que no había pensado desde que le pasaron. Fue doloroso, humillante y amenazaron su cordura.
¿Qué diablos le pasaba?
—Ahí está. —Jin young corrió hacia Junyoung y lo acercó a sus brazos, acariciando su piel, mientras hablaba suavemente con él—. No deberías haber corrido. Yo necesito sostenerte mientras pasas por esto para tu curación final.
Junyoung se estremeció ante el contacto. Su piel se sentía como si estuviera en llamas y su cabeza estaba a punto de explotar de la mortal migraña. Todo comenzó a disminuir y el recuerdo del día que Changjo desafió a Ji Hoon pasó por la mente de Junyoung.
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«—Yo te estoy desafiando. Tu gente no debería estar sufriendo de esta manera, mientras que tú te sientas en tu culo y te beneficias de su duro trabajo. —Changjo estaba de pie en el patio de la casa de Ji Hoon, sin nadie que le respaldara. Junyoung pensó que era o bien el hombre más valiente que jamás había visto o el más tonto. ¿Acaso el hombre no veía a todos los que estaban detrás del Alfa?
—Mátalo, —ordenó Ji Hoon a Junyoung y sus hombres.
Algo dentro de Junyoung se rompió. Esto tenía que terminar, y si atacaran al hombre que desafió a su Alfa y lo mataba, ¿quién les protegería contra el malo de verdad? Junyoung estaba dispuesto a tomar sus posibilidades con un desconocido, en lugar de continuar bajo las órdenes de Ji Hoon.
—No. —Junyoung se puso de pie, alto y orgulloso, algo que debería haber hecho hace décadas. Pero cuando te han sacado de tu casa a la tierna edad, para un shifter, de treinta, crees en lo que dice el hombre que maneja las garras y tiene los matones que lo apoyan.
—Tráeme a Gong Chan, ahora.
Junyoung sintió una lágrima de risa de su pecho. Sonaba diabólica y maníaca. —Ha estado escondido. No lo utilizarás para convencerme ahora. Esta pelea es toda tuya. —Junyoung y sus hombres dieron un paso atrás y tomaron posición detrás del extraño.
—¿Qué te dice eso, Ji Hoon, cuando tus hombres están detrás de un extraño en lugar de permanecer con su Alfa? ¿Vas a estar de acuerdo con el desafío, o tengo que acabar sin tu aceptación? No importa de cualquier manera. Tus días de terror han terminado.
Junyoung mentalmente empezó a aplaudir, y estaba aterrorizado al mismo tiempo porque él no tenía idea de quién era ese hombre o cómo iba atratara la manada. Junyoung y sus hombres estaban dispuestos a correr el riesgo de deshacerse de ellos y de la manada del diablo.
Changjo cambió. Él era el más grande lobo gris que Junyoung había visto nunca. En cuestión de segundos los soldados estaban protegiendo a Changjo, luchando contra los seguidores de Ji Hoon para que no interfirieran en el desafío.
—¡No! —Gritó Junyoung cuando Gong Chan embistió por detrás de la casa y saltó sobre una espalda de los seguidores—. No deberías estar aquí. Ji Hoon podía utilizarle contra ellos.
Changjo rasgó la piel del cuerpo de Ji Hoon, cuando cayeron y forcejearon, se clavaron las garras y se mordieron. Junyoung mantuvo un ojo en el Alfa cuando luchaba para quedar con vida, luchó por lo que sentía era lo correcto, y sobre todo, luchaba por matar a este sádico hijo deputa.
Changjo inmovilizó a Ji Hoon y gruñó en voz alta, el Alfa rodando y exponiendo su vientre. Junyoung quería gritar que Ji Hoon no era de fiar,pero en ese momento, unos caninos rompieron en su flanco. En ese momento él había desplazado al lobo y lo mató, Ji Hoon y Changjo se habían ido ya.
—¿Adónde fueron? —Preguntó Junyoung aRae Hyun.
—No sé. —Los lobos volvieron a cambiar, los restantes seguidores huyeron después de presenciar la caída de Ji Hoon.
—Se dirigieron a la parte trasera de la casa, —gritó Sejoon.
Los soldados salieron, todos corriendo para ver lo que estaba pasando, pero para el momento en que llegaron a la parte de atrás, Changjo estaba llegando desde el interior de la casa. Su cuerpo rígido y con una colección de músculos que les hizo a todos ellos dar un paso atrás.
—Soy un hombre justo y equitativo. No haré que ustedes hagan todo aquello con lo que se sientan incómodos. Esta es su casa, su vida y su voluntad de permanecer aquí. Aquellos que deseen separarse pueden hacerlo, aunque me gustaría que todos se quedaran. Tengo una deuda con ustedes por luchar por mí»
Junyoung volvió al presente. Estaba acostado en el regazo de Jin young en forma humana, su cuerpo temblando.
—Te tengo, hermano mío. Yo no permitiré que camines por esto sólo.
Libérate de la culpa, libérate del dolor, acepta lo que ha pasado, y regocíjate de que has sobrevivido a ello. —Jin young masajeó sus sienes, repitiendo la misma cosa una y otra vez. Podía sentir su cuerpo drenando toda la tensión, los músculos relajándose poco a poco.
Su corazón siempre dañado parecía latir a un ritmo diferente ahora.
—Dong Jun, Ji Yeop. —La voz de Junyoung se quebró. Tragó unas cuantas veces. El dolor de gritar lo había cansado.
—Shh, están a salvo. ¿Cómo te sientes?
—Cansado.
—Después del sueño, cogeré a uno de los hombres y lo llevaré a tu habitación.
Junyoung cerró los ojos, y por primera vez en mucho tiempo, los sueños se ausentaron.
—Ew, ew, ew, yo besé tu nariz... dos veces. —Dong Jun pasó las manos sobre la lengua como si fuera a borrar el sabor.
—¿Quién eres tú? —Changjo preguntó una vez más. Ji Yeop pudo decir que el Alfa, estaba actuando con moderación. No fue mucha tampoco, considerando que el hombre estaba siendo esposado por Changjo y que medía como mucho 1,67 y tal vez 54 kilos y medio, calado hasta los huesos y con un gran peso sobre sus hombros.
—Creo que puedo dejar que te vayas. —Ji Yeop sacó al chico del alcance de Changjo.
—No me gusta ser engañado, —gruñó Changjo.
—Ni a mí tampoco, —agregó Dong Jun con un indignado olfateo.
—Da al chico un respiro. Míralo. Está cagado de miedo. —Ji Yeop se agachó y tomó la mandíbula del chico, inclinando la cabeza hacia atrás para encontrarse con sus ojos—. ¿Quién eres tú?
—Yuta, señor.
—No hay necesidad de llamarme señor. Soy Ji Yeop, y ese es mi pareja Dong Jun y el Alfa Changjo. —Ji Yeop dejó al chico irse cuando cayó al suelo a los pies de Changjo.
—Lo siento por engañarle y mirarle a los ojos.
Ji Yeop silbó cuando vio las cicatrices en la espalda de Yuta. ¿Qué coño estaba pasando? —Levántate, Yuta, no te rebajes ante nadie.—Ji Yeop agarró a Yuta bajo el brazo y tiró de él a sus pies.
—Señor, lo siento, —Yuta le rogó a Changjo.
—No necesitas pedir disculpas, y Ji Yeop tiene razón, nunca te inclines ante nadie.
—¿Qué diablos está pasando en?... Santa mierda. —Ten entró en la habitación—. ¿Por qué están mirando a un hombre desnudo?— Ten agarró la manta y la envolvió alrededor de los hombros de Yuta—. Vamos. Te conseguiré algo que puedas ponerte.
Ji Yeop vio a Ten salir caminando con el hombre de baja estatura.—¿Eso sólo sucedió?
Dong Jun envolvió sus brazos alrededor de la cintura de Ji Yeop, descansando su cabeza en sus hombros. —¿Dónde está Junyoung?
Ji Yeop atrajo a Dong Jun en sus brazos. —Lo vamos a encontrar. —Por alguna razón, tener a Dong Jun y a Junyoung como pareja no era una mala idea para él. Aunque Junyoung lo volvió loco con sus órdenes, sintió una conexión con los chicos que nunca sintió con nadie más.
—Tenemos que dejar que la manada sepa que no lo hemos encontrado todavía. —Ellos salieron de la habitación con Changjo.
Ji Yeop vio a Ten sentado en el sofá con Yuta bien envuelto en la manta sobre su regazo y hablando en voz baja con él. Nunca había visto a Ten actuar de esta manera antes. El tipo nunca tomaba nada en serio,pero ahora ¿estaba actuando como una mamá osa con su cachorro? Ji Yeop se quejó.
Suficiente con las analogías de animales.
Los tres montaron en la parte trasera de la camioneta monstruo de Changjo a su casa, Ji Yeop rezando para que Junyoung resultara ileso y que lo encontraran pronto.
—¿Podemos parar en una tienda? Necesito recoger algo,—Dong Jun preguntó.
—Por supuesto, —dijo Changjo. La mente de Ji Yeop estaba a mil kilómetros de distancia, preguntándose dónde estaba Junyoung.
continuara.....